Guiso extra de sandía (8 parte 2)

Diciendo eso, Jungkook cubrió el vientre plano de Taehyung con sus grandes manos, y su voz era tranquila y afectuosa.

—De esta manera, podemos tener otro bebé.

Al escuchar a Jungkook mencionar acerca de tener un bebé, la cara de Taehyung se puso roja.

—Tú, ¿todavía quieres que te de un bebé?

—Por supuesto —Jungkook no pudo evitar besar la cara roja unas cuantas veces más, —Tengamos diez más, para que tengas muchos miembros de la familia y ya no tengas que preocuparte por estar solo.

—¿Diez, diez?

Los ojos de Taehyung se abrieron sorprendidos, aunque le gustan mucho los bebés pequeños y quiere muchos bebés pequeños a su lado, pero diez son demasiados, sacudió la cabeza apresuradamente y protestó: —No, no, no, diez son demasiados.

—Entonces cinco —Jungkook miró la cara babeante que besó, y era demasiado raro, —Puedo criar tantos como pueda.

Jungkook sostuvo a Taehyung y conversó por un rato, y luego se durmió después de conversar sobre cosas pequeñas. Originalmente, sacó a su hijo a jugar en un día caluroso y estaba cansado y sudoroso. Acababa de comer una sandía al mediodía y descanso. Jungkook regresó. Lo arrastro y lo tiró durante mucho tiempo. Ahora el sol se está poniendo, Taehyung está lo suficientemente cansado.

Jungkook le pidió que durmiera un rato y luego lo llamó durante la cena, Taehyung tenía tanto sueño que no podía abrir los ojos, y después de una respuesta vaga, se durmió.

Jungkook miró el dulce rostro durmiente de la pequeña cosa, y se sintió muy feliz, así que lo miró por un momento, y luego besó en silencio los labios ligeramente fruncidos, al ver que estaba dormido, lo tapó y se fue en silencio.

Antes de irse, vio que sobre la mesa había media sandía a medio comer, la recogió y la sacó de la habitación.

Sucedió que el ama de llaves iba a entregar bocadillos en la habitación del bebé. Cuando vio que Jungkook salía de la habitación con media sandía, inconscientemente extendió la mano para tomarla y dijo nuevamente: —Sr. Jeon, ¿es el Sr. Taehyung está descansando?

—Bueno, duerme un rato —Jungkook entregó la sandía, miró la sandía a medio comer y no pudo evitar pensar en la escena caliente nuevamente, pensando en el villano en el baño y temblando de vergüenza y tolerancia apariencia, estaba de buen humor y le dijo al ama de llaves: —La sandía es buena.

—¿Ha comido, el señor? —preguntó el mayordomo.

Jungkook dijo la verdad.

—Bueno, se lo comió y de paso consiguió algo aún mejor...—Después de hablar, volvió a mirar la sandía en la mano del mayordomo, —Sandía, compra más.

—Está bien, señor.

Después de que el mayordomo asintió, levantó el teléfono y planeó que le entregaran algo de inmediato.

—Espera...

Jungkook volvió a abrir la boca, como si estuviera pensando en algo, y se lamió la comisura de la boca, como un gato grande que acaba de comer y beber, sus hermosos ojos se entrecerraron ligeramente, con una mirada astuta.

—¿Por qué no compramos todo el granero y tenemos deliciosas sandías los 365 días del año?

El fin definitivo...

N/A: Muchas gracias por llegar hasta aquí en esta bonita novela, gracias por leerla y darle mucho amor. 

Espero que les allá gustado igual que a mí. 

('▽'ʃ♡ƪ)