Capítulo 2: nuevos
Capítulo 2: nuevos cambios.
«Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra» Génesis 1:27-31
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Adán yacía sentado en una silla bellamente decorada en oro y plata, su mira esta puesta en la cabeza cercenada del rey del infierno, siendo la obra del llameante campeón de Dios, San Miguel. Los ancianos, cada uno en sus propias sillas bañada en oro, no pudieron evitar sentir un escalofrió deslizarse por sus espalda. El aire oscuro y las paredes se llenaron de ojos vivientes, cada uno mirándolos de manera fría y serena. Pero los ojos mas penetrantes eran de Dios mismo, cuya cara estaba cubierta de un mano de luz que no permitía ver su rostro, pero sabían que él los estaba mirando.
Posteriormente, todos los ojos se fijaron en el serafín causante de la guerra, y de una gran perdida de ángeles muertos en batalla.
Haniel, serafín de la alegría y la diplomacia.
Con un simple chasquido, el serafín explota en poder divino, asustando y/o horrorizando a los ancianos presentes.
—Mhm... —tarareo con desinterés, mientras que el alma de la serafín se desprende de los restos para arrastrarse hacia él, y terminar flotando en la palma de su mano—. Estoy decepcionado por su imprudencia y desobediencia. —Dijo con pesadez, sus palabras resonaron en toda la sala como un estruendo poderoso—. ¿Intentaron tomar control a mis espaldas? Me parece que si. porque deje en claro que ningún ángel, o demonio, interactuar en el mundo mortal, ¿verdad? —Preguntó, los ojos flotantes miraron a cada uno de los ancianos, causando que temblaran del miedo al sentir como múltiples lanzas divinas los apuntaban—. Espero que no, si no quieren acompañar a Lucifer, o a los traidores. —Amenazó sarcásticamente, destruyendo el alma del serafín de la felicidad.
Entonces chasquea los dedos, mostrando un holograma de la tierra, con múltiples panales que demuestran la destrucción del planeta, y de manchas oscuras esparciéndose en la tierra, como si fuera una masa viva—. El mal se ha esparcido en la Tierra, los cuerpos de los demonios, y nefilims están a la vista, sin mencionar el conocimiento de magia divina y demoniaca están en muchos humanos. —Informa, mostrando paneles de humanos usando su el conocimiento de magia que los Vigilantes les otorgaron para hacerse pasar por magos poderosos, o elegidos por los "Dioses"—. Si esto se extiende demasiado, el mal del infierno consumirá todo el planeta, por lo que tengo que limpiar la Tierra. Que implica la muerte de muchos humanos.
Fue el momento en que los ojos de todos los presentes se posaron en el Padre de la Humanidad, quien se mantenía sereno y en silencio ante la idea de su padre.
—Las almas de los mas puros vendrán al Cielo; y los oscuras, caerán al Averno —contesto sin titubear, sin cambiar su expresión y sin verse alterado.
—Entonces la decisión fue tomada. Un diluvio mundial desaparecerá la mayoría de los pecadores, trayendo un nuevo destino a los humanos —comento el todopoderoso, deshaciéndose de los hologramas—. Ahora, debido a su insolencia, nombro a Seraphiel como cogobernante del Cielo. —Declaro de manera inesperada.
Los ancianos, sorprendidos por la declaración de padre, intentaron quejarse o cuestionar su decisión, los dos guardias que lo acompañaban tomaron sus espadas llameantes, dejando entender su mensaje, obligándolos a mantenerse callado y aceptar con disgusto. Sera, un poco sorprendida por la declaración de su creador, y de la responsabilidad gigante que le puso a sus espaldas, tuvo que aceptar, no podía negarle nada.
Hasta que Dios dijo lo siguiente:
—Lucero del Alba y Lilith, la primera humana, serán los nuevos reyes del infierno.
Los ojos de los demás se abrieron en par y par al escuchar es decreto, ¿Lucifer como rey? ¿Aquel que liberó el mal, y que ocasionó la creación del mismo infierno, será el nuevo rey de demonio El primer desobediente, y la primera ramera, la vergüenza de los serafines y la prototipo fallido, ¿siendo ascendidos a reyes?
—Antes que empiecen, creo que necesitan pensar en lo que hicieron, porque, que yo sepa, ustedes me desobedecieron —señalo el Todopoderoso con molestia, pero se aclaró la garganta para hacer otra aclaración—. Debido al poder que los humanos pueden dar a los demonios con tan solo ofreciendo sus almas, he decidido que se llevará una purga anual en el infierno para evitar el despertar de otros demonios primigenios. —Los ojos miraron fijamente al primer hombre—. Adán, quedarás a cargo, tendrás tu propio ejército para ello.
El castaño asiente, no iba a negar que muchos de sus hijos que cayeron al pecado sin arrepentirse no merecen existir. Ya vio lo que ellos hacían, y se repugna que se hacían pasar por su descendencia. Desde robos y asesinatos, hasta violaciones hasta canibalismo. Además, si ellos permanecen en el infierno, las probabilidades que un demonio obtenga sus almas y estalle otra guerra son altas.
—Los demonios nativos están fuera, castigue a ellos con mortalidad humana, por lo que pueden morir de viejos —explico Yahvé desinteresadamente—. Los otros anillos están fuera, he puesto a los pecadores en el Círculo del Orgullo para que la purga fuera mas sencilla, y evitar que los demonios de todos los anillos obtengan un alma humana . —Diría antes de chasquear los dedos otra vez—. Acabo de eliminar los cuerpos de los demonios y ángeles traidores, hagan un funeral a los ángeles caídos en batalla. —Dicho esto, los ancianos y ángeles presentes se levantaron de su puesto, No obstante, Adán fue el único que se quedo quieto en su puesto.
Una vez que la sala estuvo vacía, Dios hizo desaparecer los ojos flotantes y optar su forma favorita para poder hablar con su hijo como se debe. La manta de luz que lo cubría desapareció, mientras que su cuerpo y rostro tomaba una forma humana. Era idéntico a Adán, pero de cabello blanco y desprendía un aura de tranquilidad y autoridad, mientras que el primer hombre desprendía un aura de dominio y serenidad.
El parentesco es porque Adán es el reflejo mortal de Dios, un avatar, un hijo.
—Adán, hijo mío. -llamo de manera tierna, colocando una mano en el hombro del mencionado—. Has demostrado cuanto has madurado desde el Edén, enfrentaste a las bestias primordiales, criaste a tus hijos, y fundaste el primer pueblo humano. —Sonríe el todopoderoso, como si sonreía a la obra de un hijo—. Sé que fuiste tu el que derrotó todos los príncipes infernales, Uriel me lo informó. Le quitaste un peso encima a la Hueste Celestial, por ello te asciendo en la jerarquía angelical. —Termino de decir, chasqueando los dedos.
Una luz envuelve el cuerpo del castaño, tan intensa que ilumina la oscuras partes de la sala. debajo de las alas de Adán crecen dos nuevos apéndices, que se fueron alargando hasta tomar el mismo tamaños de sus alas, demostrando unas nuevas. Su aureola, dorada y solo con una pieza triangular en el centro, se transforma, desapareciendo la pieza para que la aureola tome forma de una corona de cuatro puntas con el dibujo de un ojo en el centro.
Adán dejó de ser un simple ángel para ser una Virtud, un ángel de cuatro alas de la 2da jerarquía angelical, lo que aumenta el poder que el primer hombre que de por si ya tenía.
¿Tal vez con algo de entrenamiento podría darle pelea a un serafín?
—Gabriel te entrenara para sacar el mayor potencial de tu poder. Si logras superarla, puede que Miguel te entrene —comento el todopoderoso, con un guiño al final.
—¡Mhm! —Adán asiente, pero luego arquea una ceja—. ¿Cuál será mi nuevo deber en el Cielo ahora que soy una Virtud, padre?
—Oh, eso ya lo sabes —contesto Yahvé con una sonrisa—. Tu eres el "Gran Padre", lo que significa que tú debes gobernar, guiar y cuidar las almas humanas que vinieron y vendrán. Espero y no me decepciones, hijo —dijo con esto último con un el dedo índice en alto y con el ceño levemente fruncido.
—No lo hare, padre.
Dios asiente—. Como ahora ya eres el rey de la humanidad, tienes un puesto entre los más alto, igualando en importancia a los serafines.—Agrego, dando media una vuelta—. Ahora, si me disculpas, debo hacer un diluvio mundial, pero debo elegir a alguien que salve tu linaje y los animales menos peligrosos. —dijo un poco de fastidio, algo que fue desapercibido—. Tal vez separe la tierra para crear los Continentes.
Miguel se marchó con la entidad, mientras que Gabriel, la otra guerrera, se acercó al primer hombre, quitándose su casco.
Era una mujer alta, de 2,18 metros, con músculos debajo de la armadura por su arduo entrenamiento de la milicia, portando una espada brillante que radiaba luz blanca y bendita. Cabello rubio corto, piel crema suave y ojos azules como el zafiro. Su armadura, plateada y brillante, tiene adornos dorados con cruces blancas y una tela con forma de falda en la cintura. Poseyendo seis alas como rango de serafín, y una aureola con forma de una corona.
Esta es Gabriel, el nombre que Adán le dio en el Edén, "Fortaleza de Dios" es lo que significa, experta en la defensa y ataques rápidos, además de ser la ángel más veloz de todo el Cielo y siendo una de las más fuertes.
—Tu entrenamiento comenzara mañana en la mañana en un planeta ubicado al sur del sistema solar. Te enviare la ubicación en tu aureola más tarde. —dijo, antes de entregar un pergamino dorado a las manos del hombre—. Con este pergamino, puedes elegir cualquier grupo que participó en la Guerra Celestial que serán parte de tu pequeño ejército. Que Dios de bendiga, primer hombre.
—Igualmente, Fortaleza de Dios —contesto el castaño de manera respetuosa.
Con eso, ambos se darían media vuelta para marcharse, pero en un repentino movimiento, ambos chocaron las manos como viejos amigos.
—No me decepciones, viejo —comenta la fémina de manera burlesca, teniendo una sonrisa retadora.
—Mhm —contesto el hombre, frunciendo el ceño.
—¡Ja! Tu eres que tiene más experiencia que todos nosotros, espero que esa "experiencia" te sirva a sobrevivir a mis entrenamientos, porque me aseguraré que ese viejo cuerpo tuyo sea roto.
—Ponme a prueba.
Finalmente, ambos seres se separan y se marchan de la sala de reunión.
Una poderosa onda de choque se expande en el cielo, quitando las nubes con su fuerza. El cuerpo del castaño aterriza abruptamente contra el suelo del planeta, creando un enorme cráter con profundidad. Esta figura es el mismo primer hombre, teniendo pequeños cortes goteantes alrededor de su cuerpo. Con esfuerzo, este se levanta para mirar al cielo, donde se encuentra Gabriel con una sonrisa burlesca; ambos no tenían ninguna armadura, solo un vestido estilo griego como traje de entrenamiento.
—¡¿Qué sucede, viejo?! ¡¿Qué no dijiste que te ponga a prueba?! —cuestiono la serafín a manera de burla.
No obstante, gime en voz baja, sobándose el moretón que se había formado en su abdomen por los golpes del hombre, al igual que las heridas que tenia en todo su cuerpo, dejando su vestido hecho girones.
En un simple movimiento esquiva un rayo sagrado dispara desde los dedos de Adán y se lanza contra él a la velocidad de la luz, el hombre, ya listo, creo un portal frente a él, ocasionando que la ángel lo atraviese, y aparezca en la atmosfera. Sin que dijera una palabra tras ver a su alrededor, es impactada con el rayo que el mismo hombre disparo hace poco.
—¡MALDITO, TRAMPOSO! —grita mientras sentía la quemadura del rayo en su cuerpo, ahora teniendo los vendajes que protegía la parte superior de su torso.
Posteriormente ella cae en picada, aumentado la velocidad con sus seis alas como impulso. Pronto, en menos un segundo, planto un golpe en el rostro del hombre, causando que el cráter se profundizara mas.
—¿Qué te parece eso? ¿Uh? —arqueo una ceja al ver que lo que golpeo no era el hombre, sino una copia de roca que estaba esparcido en todo el cráter.
Rápidamente levanta su antebrazo a su costado para bloquear un poderoso golpe que la arrastra hacia el lado contrario, trata de enviar un puñetazo para contraatacar, pero un portar se abre encima de ella, y el mismo rayo que le impacto con anterioridad, vuelve a impactar sobre su cabeza.
—¡¿Que no te cansas de usar los portales?! —exclamo enfurecida.
El hombre, sin liberar una palabra, golpea a la mujer en el abdomen con la fuerza suficiente para que sea arrastrada un par de metros hacia atrás.
—Tu usas tus espadas de energía sagrada —contradijo el castaño, señalando los cortes en su cuerpo—. Y tu resistencia como serafín es mayor al mío. —Argumento, aguantando el dolor de, no solos los moretones visualmente obvias, sino de los múltiples cortes en que se filtraba su sangre hechas por las mencionadas.
—Ahg, no soy la culpable que no trajeras tus armas —escupió la serafín, levantándose con dolor—. Tuviste esa fuerza todo el tiempo, si hubiera sabido eso, mejor hubiera entrenado tu espíritu para que tuvieras un mejor control en la energía angelical. —dijo, sobándose el abdomen nuevamente.
—Necesito este entrenamiento para explorar mi poder como Virtud-—se expreso el hombre con serenidad.
—Pues, felicidades, viejo, eres capaz de hacerle daño a un serafín —gruño la fémina con fastidio—. Aunque no se porque me sorprendo, venciste a todas las vestías primordiales, y no solo al trio maravilla —comenta sarcásticamente.
Adán opta por no decir algo y mirar el cielo, llevaban entrenando desde hace tres horas en un planeta rocoso y sin vida, lejos del sistema solar en que se encuentra lejos de la Tierra, como dijo Gabriel en el Cielo. Hasta ahora se sorprende que su fuerza como humano primigenio se mantuvo como ángel, que no solo estaba en lo sobre humano, era alguien capaz de levantar una montaña sobre sus hombros con mucho esfuerzo, y era una ventaja tenerlo tomando en cuenta el peligro de la Tierra primigenia con sus bestias y criaturas asesinas. Pero ahora que es una Virtud, su fuerza aumento mas de lo que pensó.
Mirando sus manos, con su nudillos adoloridos, sonrió bajo al saber que podía darle pelea a un serafín. No confía plenamente en Lucifer por obvia razones, así que tener una fuerza como para lastimar a un ángel de su jerarquía en el momento que decida pasarse de listo otra vez, le daba un poco de calma.
—Toma —dijo Gabriel, lanzándole un objeto pequeño al hombre, quien lo atrapa para observarlo, tratándose de una piedra verde.
Reconociéndolo como una piedra de sanación, lo aplasta con la presión de su mano, liberando la luz verdosa. La energía contenida de la piedra envuelve su mano antes de arrastrarse en su brazo, hasta conducirse por el resto del cuerpo, cicatrizando los cortes causado por la energía angelical de la serafín.
—Iré a darlo todo, viejo —avisa la rubia, estirando sus articulaciones tras usar una piedra de sanación en ella misma—. Nada de armas de energía, nada de portales, solo puñetazos. —Diría, mirando al hombre en una pose de pelea, teniendo una sonrisa arrogante en sus labios.
Adán se limita en ponerse en pose preparativo, como lo hace cuando cazaba bestias en la Tierra.
—¿Eh? —cuestiono la fémina confusa por la pose nada profesional—. ¿Qué es esa pose? Ahg, olvidé que tengo que entrenar tus técnicas de combate. Me informaron que no estás tan acostumbrado pelear con personas que si saben pelear, ¿Verdad?
El castaño solo gruñe en respuesta.
—Tomare eso como un si —comento la fémina con una sonrisa burlesca.
Entonces la rubia se impulsa hacia el hombre a una velocidad que casi distorsiona el espacio de la realidad, tomando por sorpresa al castaño. Con un simple golpe, el cuerpo de Adán es enviado hacia los múltiples montañas rocosas detrás de él, rompiendo cada uno con su cuerpo.
Sin embargo, pudo estabilizarse en el aire con la ayuda de sus alas. Pero rápidamente hecha su cabeza a un lado para esquivar una patada que roza su mejilla.
Gabriel gira sobre si para tratar de conectar un golpe, pero Adán pudo esquivar para darle un potente rodillazo en la costilla para aturdirla momentáneamente antes de acertarle un golpe martillo para que fuera enviada contra el suelo, destruyendo una gran porción de tierra con su impacto.
El castaño cae en su dirección dando un rodillazo, que solo impacta contra el suelo. En tan solo un instante recibe tres golpes a una velocidad anormal en la cara, pero antes de recibir un cuarto golpe, logra esquivarla para tratar de contrata atacar, pero su intento es esquivado por la serafín, dando un barrido para que él cayera al suelo.
Tomando esta ventaja, la rubia salta sobre el hombre, dando una doble patada en el abdomen del susodicho dejándolo aturdido. Sonriendo, la serafín guerrera pisotea el rostro del hombre un par de veces, hasta que este logra tomarla por el tobillo y acto seguido, azotarla contra el suelo al lado suyo. En un simple movimiento, la fémina se libera del agarre al patear el rostro del castaño para poder levantarse con la ayuda de sus alas.
Adán, un poco mareado por los golpes, se esforzó en levantarse del suelo, pero es tacleado.
...
Iba a ser un entrenamiento complicado...
1 año más tarde...
El cuerpo de la hija infernal de Adán ya no era lo que solía ser, paso de ser una humana a ser una especie de zorra humanoide con pelaje crema avena, melena y cola parecida a la miel que se mueve como líquido en el aire. Poseyendo un par de alas insectoide, y una altura que casi llegaba a la de él, el cual es de 2,30 metros, casi llegando a su pectorales.
¿Cómo el mundo iba a saber que el Pecado de la Gula es hija de Adán?
—¡Papá! —exclamo la fémina, volando a través de la multitud de sabuesos para abrazar fuertemente al recién llegado.
Adán, un poco adolorido por su entrenamiento reciente, devuelve el abrazo a su hija, sin importarle su apariencia actual. Fue difícil tener que aceptar las nuevas aparecías de sus dos hijos, pero aún no cambia como los conocía, y estaba satisfecho con eso.
Una vez separados, el castaño invoca una caja larga envuelto envuelto con temática de cumpleaños improvisado.
No era bueno envolviendo regalos.
A pesar de su aparecía desordenada, la fémina tomó la caja con suma felicidad, abriéndola tan rápido, como el primer regalo que su padre le dio por su cumpleaños. Que esos regalos aún los conserva. Al abrir la caja, se percata que se trataba de una vara dorada con múltiples detalles y palabras inentendibles que emana un poder secreto.
Dicho poder se manifestó en una aura que envuelve su brazo hasta llegar en su cuerpo, dándole una sensación de calidez.
Como si supiese los poderes de esta vara, la fémina atrajo un plato de dos trozos de carne hasta ella.
Agitando la vara, tocó la carne y pronuncio—. Multiplicaos.
Sonando más como una orden casi divino, las carnes que yacen en el plato se empieza a aumentar rápidamente, hasta ser una montaña sabrosa de carne horneada.
—Feliz cumpleaños, hija —pronuncio Adán con una pequeña sonrisa paternal.
Sin embargo tuvo que gruñir en voz baja cuando su hija lo envuelve con todos sus brazos, aplastándolo con una fuerza sobre humana en un poderoso abrazo.
—¡¡Gracias, gracias, gracias, GRACIAS!! —agradeció la fémina constantemente, besando las mejillas de su padre tan rápido que apenas el hombre pudo notarlo, probablemente por lo cansado que estaba—. ¡¡Eres el mejor papá del mundo!!
—Y tu mi reina abeja —contesto el hombre, acariciando la cabeza de su hija antes de besarle la frente con cariño, ganando una enorme sonrisa de la mencionada. Luego se separa del abrazo para abrir un portal hacia otro anillo del infierno—. Disfruta de tu regalo, y úsalo con responsabilidad.
—¡Lo haré! —se despide la pecado de la gula.
Adán asiente de pasar al siguiente anillo, recordando como era el anillo de su hija como gobernante primeriza.
El anillo era considerado el mas pobre de los círculos, debido a que los sabuesos infernales son vistos como mascotas para la jerarquía demoniaca, tanto, que incluso hubo varios intentos de capturarla.
Como se enojó cuando recibió una llamada de su hija... Llorando.
Su furia creció casi hasta el límite cuando bajo para cazar a cada demonio que tuvo las agallas de lastimar a su tan apreciada hija. Los cazó, torturó y los liberó, porque, lamentablemente, por órdenes de Dios, no podía matar a ningún demonio nativo hasta que estos rompa la ley. Así que se aseguró que su hija entrenará constantemente para que pudiera defenderse por si misma.
También se la llevaba al Cielo para vigilar mejor su entrenamiento.
¿Que? Belce y Asmodeus estaban en el infierno por culpa de su madre, ella condenó sus almas injustamente al infierno, ni siquiera era sus destinos terminar ahí, por ello dios permite que ingresen al Cielo, pero siguiente REGLAS que no deben romper en su estadía.
Gracias a ese entrenamiento, su hija es la tercera más fuerte, superando a esa ex bestia primordial por ese puesto. Y, con algunos consejos de Sera, ayudo tanto a Asmodeus y a Belce a gobernar mucho mejor su respectivo anillo para evitar que sean caóticos como los demás.
Tras cruzar el portal, Adán inspecciona la oficina de su hijo infernal. La oficina estaba decorado por instrumentos de circo, circo que de seguro le gustaba cuando lo llevaba al Cielo. Pero había múltiples herramientas y juguetes sexuales que no entendía su función, y con toda honestidad prefería no conocerlos. Ya sabía que su hijo heredo la parte pervertida de su madre, lo notaba mientras crecía en la Tierra, por suerte, nunca llegó a violar, o manipular para su fantasía sexuales. Además de ser el único de sus hijos en tener intereses carnales extraños.
La puerta detrás de él se abre lentamente, pudo sentir la mirada de sorpresa de su hijo desde la silla en se sentó. Este se movía nerviosamente por la oficina, tocando un botón que hizo desaparecer los artefactos sexuales a través de las paredes, un sistema poco común para Adán.
—H-hola, papá —saludó Asmodeus, sintiéndose incomodo y avergonzado.
Al igual que su hermana, Asmodeus dejó su apariencia humana, adoptando un cuerpo enorme y aparentemente robusto. Piel morada con un traje elegante colorido con un sobrero de copa, y su cabello fue reemplazado por un fuego azul intenso con dos cabezas flotantes a cada lado de la cabeza principal.
—Haz estado descuidando tus entrenamientos —comenta el hombre, claramente molesto por el poco interés que tiene su hijo por entrenar.
Ya lo sabia por parte de Belce, que su hijo dejó de entrenar por sus "fiestas alocadas" entre su gente, tanto que ha bajado de poder, tanto político como literal, siendo considerado tan débil, casi siendo igualado por un Goetia.
—Si... Ahm... Estuve ocupado con otras cosas —trató de justificarse el príncipe de la lujuria, sonriendo nerviosamente.
Las cabecitas se limitaron a mirarlo de forma acusadora, recordándole la orgía que acaba de tener hace unos pocas horas.
Sabiendo que era mentira, Adán contradijo lo dicho por su hijo—. Tu hermana siempre está ocupada, pero ella no descuida su entrenamiento, Asmodeus.
El príncipe solo pudo suspirar con resignación en silencio. Ser el más débil de los Pecados Capitales le ha traído problemas, desde el robo constante de la mercancía de sus empresas por parte del Pecado de la Codicia, hasta la falta de respeto político de los demás gobernantes, siendo subestimado en muchas ocasiones.
Todo eso Adán ya lo sabía.
Frotándose la sien por la descripción, comentó a su hijo—. Te entrenará mas fuerte que antes.
—¿Que? T-tu no.
—Tu no, ¿que? —preguntó el castaño, dirigiéndole una mirada dura y fría a su hijo, emanando un brillo a través de su cuerpo.
Asmodeus solo pudo callarse, no porque tenía miedo, sino que fue una respuesta directa de su cuerpo, recordando las veces que le levantó la voz en la Tierra y este lo callaba.
Era la memoria muscular.
Apagando la luz que emanaba, Adán hablo—. Esto lo hago por tu seguridad, hijo, no quiero que te lastimen aquí. —Explico lo más lógico que pudo.
—Si, ya lo sé. Es por que estoy en el infierno y no debo confiar en nadie que no sea mi hermana mientras estoy aquí —contesto el pecado de la lujuria de mala gana.
El primer hombre solo pudo suspirar en su mente, recordando que en cierta forma Asmodeus se parece a él antes madurar.
—No, lo hago porque me preocupo por tu bienestar —interviene el castaño, levantándose de la silla para estar frente a su hijo para colocar una mano en su hombro—. Eres mi hijo, no lo olvides, todo lo que hago es siempre para tu bien, para que puedas seguir adelante. Con o sin mi. —se expresa el castaño con toda honestidad, pero sin quitar esa seriedad que lo caracteriza—. Belce solo se preocupa por ti, porque ella no quiere que su hermano sea lastimado como a ella. Sabes bien que Lilith poco o nada le importa le importa lo que te pase. Pero yo siempre estaré para ti, porque eres de mi sangre, sin importar quien te dio a luz; yo te crié, yo te cuide, yo te vi crecer.
Asintiendo por las palabras de su padre, el pecado de la lujuria comprendió las palabras profundas de su padre—. Lo sé, gracias.
El castaño asintió, ofreciendo la misma caja que le ofreció a su hija, pero control envoltorio y, obviamente, mal envuelto.
Sonriendo tanto por la forma incorrecta del envoltorio, como por el regalo de cumpleaños. Con ambas manos tomó el regalo y la abrió moderadamente, a diferencia de su hermana, Asmodeus era un poco más refinado por su puesto como príncipe demonio/Pecado Capital.
Abriendo caja, sus ojos se abrieron en par en par.
En la caja, estaba una lanza, no cualquiera lanza, era la primera lanza que él mismo había fabricado cuando estaba en la Tierra. Estaba bañada en oro, pero sentía que era la misma arma. Brillaba con poder angelical, con algunos runas en la hoja, pero con un mensaje escrito en el lenguaje humano de su vida pasada.
"Nunca olvides a tu familia".
—Feliz cumple, ¿eh?
Adán no pudo completar su oración por su hijo, quien lo abrazó fuertemente como su hermana, causando que gruñe en su interior por las heridas; sin embargo, no le impidió contestar el abrazo con un par de palmadas en la espalda de hijo infernal.
Un padre ama a sus hijos, independiente de sus gusto... ¿verdad?
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Mis hijos, Asmodeus y Belce, son gobernantes de sus respectivos anillos. Realmente me desagrada que estos dos niños que he criado durante siglos terminen en el infierno por culpa de su madre.
Por lo que me han dicho, Lilith ni siquiera los ve como sus hijos, ni siquiera se digna de hablarles como su madre, los trata como sus compañeros de trabajo, nada mas.
¿Para esto quiso las almas de ellos? ¿Para eso les negó las puertas doradas?
A veces siento que lo hace solo para lastimarme emocionalmente.
Pero no le daré esa satisfacción.
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Fin del capítulo.
En fin, ahí tienen otro capítulo. Esta vez intenté mostrar ese lado paterno de Adán con sus hijos, incluso cuando están en el infierno.
Si, Adán ahora es una Virtud, un ángel de la segunda jerarquía del Cielo, y ahora es lo que tuvo que ser: el Rey de la humanidad. ahora tiene una importancia en el Cielo cuidando a los Ganadores, y si los altos mandos quieren hacer algo en la Tierra, si o si, tendrán que pedirle un permiso, o sino, será desaprobado.
Veré si en el próximo capitulo muestre a Eva y la razón por la cual se separaron, y de una vez digo que NO FUE POR INFIDELIDAD, fue por otra cosa.
¡¡DENME UNA ESTRELLA!!
Tomen agua, y nos vemos.
A si me imagino al Adán canon la primera vez que vio a los ángeles, XD
Te odio Zelda de Ocarina del Tiempo, alejaste a Link de su familia y de la fama que se merecía.
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