OST: Only You by Cheat Codes feat. Little Mix/Next to Me by Imagine Dragons

🎧ACRÍLICO🖌
3/3

Yoongi bajó la tapa del maletero e hizo otra mueca. La nubes grises sobre el cielo de Incheon se asemejaban a su estado de ánimo. La primera vista por la custodia de Jun había concluido dos horas atrás.

—Yoon…

Un suave toque en su hombro derecho lo hizo girar para encontrarse con su mundo. Jimin esbozó una tímida sonrisa.

—Solo es un mes y tú vienes los fines de semana a verme. No será…

—Olvídalo…

Lo interrumpió el más pálido y sin importarle estar en un sitio público se entregó al calor de los labios de su chico. Jimin olvidó que existía un cielo sobre su cabeza, que los autos se movían de un lado a otro fuera del aeropuerto o que sus pies apenas tocaban el suelo mientras Yoongi insistía en sostenerlo como si no pudiera concebir un milímetro de distancia entre sus cuerpos.

—No creo que pueda con los fines de semana. En cuanto termine la vista por el proceso de custodia pediré vacaciones. No dejaré que algún japonés adicto a la informática me robe a mi novio.

—Yoonie…—Jimin se sonrojó dramáticamente, aún así no dejó de colgarse al cuello de su amado—Sabes que no tolero otro tacto que no sea el tuyo y… que yo te amo…. Para mí es casi un dolor físico tener que irme pero…

—Pero es parte del maquiavélico plan que mi sexy novio el hacker y Nam orquestaron para salvar nuestro futuro.

—¡Yoon!¡No menciones que hice eso para ayudar a buscar pruebas! Cualquiera podría…

—¿Pero no has negado que eres sexy, mi amor? Solo por eso me conformaré hasta el próximo fin de semana.

Jimin negó antes de empujar a su novio. Yoongi no tenía remedio.

—¿Qué haré contigo si sigues diciendo esas cosas en público? Sabes que me avergüenza.

Musitó el de ojos azules. Las hebras rubias de Yoongi comenzaban a desaparecer sobre el marco castaño que compartía realmente con Jun. Jimin se entretuvo en ese hecho.

—Amarme más de lo que ya lo haces. Sostenerme con tu alma y esa fuerza que late en ti aun cuando parezcas ignorar la virtud detrás de tu belleza. Eres mi mundo, cariño y muero de ganas de gritarlo a los cuatro vientos.

—¿Para conseguir una multa por disturbio público?

Bromeó el doncel y Yoongi sonrió con malicia.

—Cuando me libre de todo el papeleo judicial, vas a comprobar que tu novio solía ser un chico malo.

Jimin enrojeció hasta la raíz de sus cabellos. Una imagen fuera de lugar llegó a su mente y por lo visto Yoongi supo intuir por dónde iban sus pensamientos antes de musitar sobre su oído derecho.

—Ese tatuaje que tanto te gusta besarme es solo el aperitivo. Te haré el amor bajo las estrellas cuando vaya este fin de semana a Japón.

Dulce tentación, cruel verdugo de ojos gatunos y sonrisa cínica. La cabeza le daba vueltas cuando el carraspeo de otra persona se hizo audible.

—Odio que no puedan sacarse las manos de encima cuando están juntos. Agradezco que Jun está en el jardín de niños o de lo contrario…

Un golpe en la cabeza, interrumpió la diatriba de hermano mayor que Jungkook trataba de hilvanar. Taehyung apareció detrás con una expresión de burla en el rostro.

—Minnie perderá el vuelo gracias a ustedes, adictos a la testosterona.

—Tete, tú solo…

—¡Silencio esposo entrometido! Minnie ven hacer el checking antes de tengamos que buscar otro vuelo.

Jungkook esbozó un puchero. Jimin fue arrancado literalmente de los brazos de Yoongi mientras Taehyung lo jalaba del codo en dirección a la terminal.

—Tu primo…

Comenzó Kook y el más pálido le rodeó los hombros con un brazo.

—Sí, es un loco bajo tu tutela.

Concluyó Yoongi y el pelinegro no pudo evitar sonreír de aquella manera que lo hacía muy similar a un tierno conejito de felpa.

—Estamos jodidos por esos dos. Pero creo que vale la pena. Por amor, todo vale la pena.

Afirmó el más joven de los dos y Yoongi deseó que el tiempo avanzara aún más rápido para volver a ver a su chico.

🎧ACRÍLICO🖌

Las notas de Mariage d' Amour se deslizaban en el piano de la casa de los Kim. Namjoon abrazaba a Jin mientras ambos contemplaban la escena infinitamente tierna de Jun observando a su padre tocar.

Cualquiera que se atreviera a examinar el rostro del intérprete o del infante, negaría que acababan de abandonar el juzgado bajo una llovizna pertinaz. Como si la ciudad de Seúl supiera de los días de angustia maquillada con complacencia que habían transcurrido desde el regreso de Min Ji a sus vidas.

La inflexión de las falanges de Yoongi sobre el mosaico blanco y negro del piano se adelanta hasta volverse una carrera contra el pedal.

El tempo cambia y la dulce balada con el arreglo de Satie se transforma en el calidoscopio de sentimientos que han anegado al heredero de los Min en los últimos meses.

Sus amigos contemplan el nacimiento de un nuevo hombre detrás de los pasos de otro. Se percibe el golpeteo de la lluvia, la sentencia del juez y las lágrimas de alivio en el rostro de testigos y el jurado.

Ha sido duro y aún cuando Jun ha permanecido en una cómoda distancia, su inocencia ha sido asaltada por ataques inexplicables, capaces de dejar huellas si en medio de aquella carrera no estuviera la presencia que todos esperaban recuperar.

El ritmo vuelve a variar. Jun observa con ojos brillantes cómo su padre acaricia las teclas. No necesita preguntarlo, sabe que sus pensamientos van hacia él. Su otro papá.

Ese que le espera en videollamadas cada mañana antes de cepillarse los dientes junto a su appa. El que le recuerda con dulzura que debe comer vegetales y dejar de escapar de los demás porque puede hacerse daño.

El que le dice que lo ama y que lo espera con todo su corazón. Tiene los ojos azules como un cielo despejado y huele a lavanda… Jun sabe eso, sus recién cumplidos cuatro años se lo atestiguan.

Hace quince días y con un permiso firmado por unos señores de lentes que conoce el tío Namjoon, pudo ir a ver a su papá Minnie en Japón. Disfrutaron su cumpleaños en el parque temático de Pokemon del circuito de Akihabara. Degustaron oniguiris y celebraron una pijamada antes de quedarse dormidos alrededor de papá Minnie.

Jun duda que su appa se haya dado cuenta,  pero recuerda haber visto al hombre que ahora ejecuta sobre le piano acariciar el vientre de su otro padre antes de besarlo en la mejilla.

Él había sonreído, aún sin comprender, esa noche que había dormido entre sus padres, cambiaba todo. La sensación de pertenecer algún sitio, de ser amado y amar, hinchó su corazón como una vela que se despliega para llegar al mar.

Las notas se derraman hasta que el atardecer en la mirada de Yoongi se confunde con una franja de oro fundido. La interpretación ha terminado, tal como el calvario de la incertidumbre, solo quedan manchas de humedad que legar al tiempo.

Los Kim aplauden cuando padre e hijo improvisan una pomposa reverencia. Se marchan bajo el abrazo de la amistad y el toque de la familia.

Se marchan con la esperanza de abandonar el país la próxima mañana para aferrarse a esa otra parte de su mundo que los espera.

Al menos ese es el plan hasta que alcanzan la puerta de su hogar. Hay luz del otro lado y se escuchan ruidos que no puede hacer una persona.

Yoongi mira a su hijo, este se encoje de hombros con todo el decoro de alguien de cuatro años. Luego la puerta se abre por completo y un joven castaño lucha por sostener un gato a tres colores y un inquieto cachorro de poodle contra su pecho.

—Juro que he tratado de mantenerlos a raya pero Holly y Bubble… en fin, no pude aguantar y tomé el vuelo de hoy. Espero no haber arruinado su noche de chicos.

Jimin respiró lo mejor que pudo. El cachorro llamado Holly se escapó de su brazo para llenar de lametones a Jun. Yoongi dejó al niño en el suelo y le indicó que tuviera cuidado. Luego se acercó a Jimin que seguía sosteniendo al mimoso gato Bubble.

El doncel abrió los ojos como platos cuando el mayor le pellizcó amaba mejillas.

—¡Auch!¡Ya basta, no estás soñando en verdad yo…!

Solo así un efusivo Yoongi se percató que no estaba alucinando y el chico que ahora se debatía entre sus brazos no era producto de su imaginación.

—Regresaste… regresaste a nosotros… que gusto, mi amor…

Jimin intentó decirle que lo estaba abrazando tan fuerte que casi no podía respirar. Eso y que Jun los miraba ceñudo desde el suelo junto a Holly.

—Appa… le haces daño a mi papá…

La voz infantil los obligó a soltarse. Jimin seguía sonrojado cuando Yoongi se dirigió a su hijo para despeinarle aquellos cabellos rebeldes del mismo color castaño que el suyo.

—Todo tuyo, pequeño celoso.

—Humm…

Protestó Jun y luego corrió para abrazarse a las rodillas de Jimin. El pelinegro se agachó hasta que pudo alzarlo en brazos.

—Te extrañé mucho, bebé.

—¿No te vas a ir de nuevo, verdad? Appa dijo que aceptaste ser mi otro papi y que cuando vengan mis aboshis iremos a su casa para pasar la Navidad.

Jimin miró a Yoongi. El más pálido se fingió inocente alegando que él se ocuparía de los miembros de cuatro patas de su familia. Jun acarició una de las mejillas de Jimin en busca de su respuesta.

—No, bebé. Esta vez papá se quedará.

—¿Por el meñique?—insistió Jun. Jimin juntó su dedo al del niño.

—Por el meñique, te amo y ya no me iré lejos nunca más.

Una sonrisa luminosa llenó el rostro del infante antes de rozar su nariz con la de Jimin.

—Te creo, papá ¿Podemos comer chocolate?

—¿No crees que es muy tarde para eso?

—Pero tú regresaste y…

—Min Jun Young… no creas que no estoy al corriente de todas tus travesuras.

—¡Papi!

Cómo te resistes a un puchero del bebé más hermoso del mundo. Jimin le imitó el gesto pero acabó cediendo.

—Solo un poco y después a dormir…

—¡Viva!

La alegría infantil selló aquel interludio mientras Yoongi reía desde la cocina. Su hijo era un pequeño manipulador en ciernes y la culpa era de ellos por mimarlo tanto.

Cuando consiguieron que las mascotas dejaran de removerse, que Jun tomara un baño de tina y se dejara convencer para permanecer en su cama toda la noche, ambos estaban agotados al punto de funcionar automáticamente.

—A veces quisiera tener la edad de Jun. Siento que no puedo moverme después del día de hoy.

Yoongi habló con los ojos cerrados. Podía percibir cómo los dedos de su ahora prometido se paseaban sobre su cuero cabelludo impartiendo un agradable masaje.

—¿En serio estás tan cansado? Quería felicitarte adecuadamente pero si prefieres dormir…

Yoongi abrió los ojos. Jimin ahogó la carcajada al ver la mueca que estaba pintada en el rostro de su apuesto pretendiente.

—Park Jimin, no tientes al diablo si no sabes a qué atenerte.

—¿Y quién dijo que no lo sé? Recuerda quién le pidió matrimonio a quién…

El CEO enrojeció, logrando que la risa de Jimin fuera más aguda. Música para sus oídos. Yoongi se puso totalmente boca arriba sobre el regazo ajeno. Los mechones castaños de su cabello le hicieron cosquillas a Jimin sobre las rodillas desnudas.

—Lo tengo tan presente como respirar. Jun no estaba mintiendo. Jungkook me sugirió una casa cerca de la que tienen ellos para veranear en la ciudad.

—Una mudanza… necesitaremos un patio para Holly, mucho más que para Bubble…

Yoongi asintió antes de volver a removerse sobre el regazo de su chico. Una mano pálida y grande levantó la fina franela que componía el pijama del de ojos azules para dejar el vientre a la vista. Los labios de su eterno amante se pasearon por la sensible piel hasta dejar un camino húmedo.

—Mmmh… supongo que ya no estás cansado…

Musitó Jimin antes que las atenciones de Yoongi derivaran más arriba de su vientre.

—Nunca podría cansarme de semejante delicia. Nunca pienso saciarme de ti.

—Yo tampoco.

Respondió el doncel antes de hundir los dedos en la mata castaña de Yoongi hasta que sus labios se encontraron. Hicieron el amor sin prisas. Descubriéndose nuevamente, como si el tiempo fuera infinito, como si el infinito no consintiera la existencia del propio tiempo.

No había mucho en qué pensar más allá de acariciar la ilusión del futuro desde el presente. No había mejor declaración que dejarse arrastrar por la caótica sinfonía del choque de dos planetas.

"Mi corazón empapelado por la rutina, mi corazón tan sintético como el acrílico... hoy está seguro que te pertenece."

🎧ACRÍLICO🖌

Notas:

Mariage d' Amour: Romance de Amor, composición para piano.

Satie: Erik Satie; pianista, compositor e instrumentista francés.

•
•
•
•
•

Solo otro capítulo y el epílogo. Lloré en este mini maratón, ando algo sensible, quizás haga extras de esta historia más adelante, lo cierto es que me está encantando.

Gracias a los que la apoyan incondicionalmente. Son días de ser OT7. #Futureisgonnabeaokay. Borahae 💜

Allie_desu/Heaven🖤