John:

Me encantaba que mis planes salieran bien, ya sea el hecho de tener a Eve cómo conocida sino como mi novia, es fantástico. Recuerdo que cuando la vi por primera vez en el supermercado, me sentí débil, esa mirada que tenía, sus labios que eran finos pero que parecían tan jugosos y deliciosos (y no me faltó razón, eran mejores que en mis sueños), debía conocerla, lo sentía. Iba cada día al supermercado a verla simplemente a ella, no la veía casi nunca pero en cuando pensé en rendirme, allí estaba. Tan increíble cómo la primera vez, sólo que esa vez iba con un chico y hablaban muy animadamente, sería su novio? Ja, sería normal en una chica tan hermosa pero al observarlos un poco, pude notar que no, era un presentimiento (y otra vez, razón no me faltó) así que decidí hablarle, aunque no sabía cómo así que de mientras mi hermana hablaba.

+John, si tanto te gusta para haber venido cada puto día desde hace 3 semanas, te juro por dios que si no le hablas ahora te mato –me dijo cortante, siempre era así de maja aunque muchas veces no se encontraba en casa o simplemente no estábamos juntos, pero me llevaba bien con ella.

+Spencer, por favor, relájate, lo aré de una manera original –dije indignado.

+Tienes el papelito?

+Que siii –alargué la palabra sí.

+Oye, mírales un momento, sabe de tu existencia.

Miré de reojo y vi que se estaba tomando una especie de selfie pero algo más apuntando a mí, en serio hacía esto? Muy interesante. Sonreí ganador y decidí que era el momento, vi que estaban discutiendo un momento cuando me acerqué a ella y pasó todo lo que ya sabe. Eso sí, lo que no sabe que luego cuando se fue, digamos que mi hermana la siguió y supo de su dirección, y cómo una mansión al lado de su casa estaba vacía, decidí mudarme a su lado y así tener la excusa que era pura casualidad (esta parte ni de coña le diré a Eve, que sufra adivinándolo). Al principio todo fue bien con ella pero cuando dejé de hablarla durante ese tiempo que para mí fue eterno, la verdad es que necesitaba ese tiempo. Mi abuela había muerto, mis padres estaban discutiendo mucho porque se tenían que ir de la mansión un largo tiempo y yo no sabía si estaba enamorado realmente o era un simple acosador. Cuando aclaré todo, simplemente me disculpé aunque de la peor forma, cuando vi las heridas que poseía en su rostro y cuerpo me sentí tan culpable, tan enfermo, tan… Enfadado. Sentí que debía matar a quien tenía los huevos de hacerle eso a una chica, a MÍ chica. Cuando pude, me fui a donde le arrestaron e hice que pagara por sus actos, le pegué muy fuerte casi dejándole inconsciente, los policías me dejaron hacerlo por dinero así que agradecí aquello. No me preocupé en lo más mínimo de él, simplemente lo quería muerto o sufriendo, cualquiera me valdría. Desde aquel día vigilé más que nunca a mi chica, ya sea en clase o en su casa, sí, era más acosador que nunca pero no me importaba, no iba a dejar que nadie la volvieran a herir (aunque he de decir que ella le pegó muy fuerte y buenas marcas le dejó, se las sabía arreglar perfectamente). Así que poco a poco se iba enamorando de mí y yo de ella, lentamente la hacía mía sin ella saber que yo era suyo desde hacía más tiempo que ella. Me sentía tan genial con ella que era simplemente increíble, era la mejor.

~Hola chicos y chicas, espero estéis bien y os guste este capítulo explicado por John, y mañana terminaré de subir los capítulos que faltan!! Recordar darle a la estrella y seguirme, bye.~