Capítulo 17.- Sospechas
Sí, les gané a todos de una porque soy así, fueron unas 5 partidas así y les gané. 3 de ellas corriendo y pasando de todos para llegar a la meta, y 2 de ellas tirando a gente para que nadie llegara a Fredy. Vamos, reventé a todo el puto mundo de una. Y pues nada, entrenamos un poco más y al terminar e ir a los vestuarios, me dio la idea que alguien me estaba viendo, que cojones (los mios bajo los pantalones) ya cállate cerebro de los chistes, bueno no. Al terminar de vestirme y tal, encontré que Thomas que estaba llorando, todos los chicos ya habían salido y sólo quedaba él (queda aclarar que mi vestuario tenía que pasar cerca de los chicos para poder salir, así que le escuché llorar).
+Ey –dije tranquila, entre la puerta y él alzando la vista, definitivamente estaba llorando.
Al verme, se limpió rápidamente las lágrimas y sonrió falsamente.
+Ey, qué pasa chica? Nos has reventado, eh? –dijo, se le notaba en la voz la tristeza que tenía.
Y sin aguantarlo, me abalancé a él, abrazándolo y acariciando su cabeza. Al principio pareció quedar en shock, pero pronto me correspondió el abrazo y siguió llorando en mi hombro.
+Shhhh tranquilo, ya pasó, ya pasó –dije susurrando en su oído, acariciando su espalda y cabeza.
Lloró y balbuceó cosas que no llegué a entender durante los 10 minutos que estuvo, cuando noté que se relajó me alejé con cuidado y tomé su cara entre mis manos.
+Cuéntame, qué ha pasado?
Él se levantó y me cogió de la cadera, sentándome en las bancas del vestuario y el quedando de rodillas delante de mí, iba a rechistar pero vi que le costaba decir algo, así que le acaricié la cabeza poniéndola en mis muslos y dejé que hablara.
+Estoy enamorado de una chica, la conozco desde la primaria, lo he intentado todo con ella. He sido gentil, la he escuchado, le he dado los mejores regalos que podía haber pedido, incluso le he dicho te quiero –se calló unos segundos para tomar aire a lo que iba a decir, le dolía muchísimo pero quería decirlo- me dijo que también me quería…
+Dónde está el problema ahí, Thomas? –dije con la voz suave, tranquila para no asustarlo.
+Me dijo mejor amigo.
Sentí su dolor en sus palabras, le dolía y al terminar de decirlo, de nuevo empezó a llorar desconsoladamente. Cuando vi que estaba dejando todo, hice que se apartara un poco para yo agacharme y abrazarle otra vez, haciendo que volviera a llorar más fuerte. Vi la puerta que John estaba parado, sin saber qué hacer, si entrar y interrumpir o irse, así que le hice con los ojos un gesto para que se fuera, y él asintió. Pasaron los minutos y dejó de llorar, aun manteniéndolo en mis brazos.
+Nadie me había visto llorar antes –dijo, cortando el silencio que para nada era incómodo.
+Se nota ante tu sorpresa de cuando entré –solté una pequeña risa, que entendió que no era para faltar el respeto, y que él también rió.
+Estoy enamorado locamente de la hermana de John, y me duele tan solo verla y no saber qué hacer para que esté en mis brazos.
+Amigo, te daré 2 ideas. Primera, le dices todo lo que sientes dejándote a gusto, que si te rechaza puedes irte con la cabeza bien alta y olvidarte de ella, o rendirte cómo el hombre con tan pocos huevos de no poderle decir a la que le gusta y encanta que te fascina.
Él se rió ante lo que dije, se apartó de mí para mirarme y habló.
+Y qué plan tienes para la primera opción?
Oh amigo, tengo muchos planes en mente. Sonreí ante la gran oportunidad que tenía, me puse de pie y fui dando vueltas en mi sitio mientras hablaba (y haciendo como si hubiera una pizarra imaginaria).
+Primero, puedes escribirle una carta con todo lo que quieras decirle, eso sí, no te olvides lo esencial, tu firma. Segundo, te haces un guión entero sobre lo que sientes, te lo preparas y te acercas a ella en persona, empiezas fuerte. Le dices lo que quieres transmiti, osea, ‘estoy enamorado de ti’ (dije imitando su voz haciendo que él se ría) y claro, luego de dejar toda esa carga, te será más fácil decirle el porqué, desde cuándo y cómo fue. Última idea, y la que no te recomiendo en absoluto ya que quedas cómo un cagado de mierda, por mensaje.
Él se quedó pensando en las posibilidades, hasta que sonrió débilmente y habló.
+Decido ir en persona.
+No te oigo!
+LE VOY A DECIR QUE ESTOY ENAMORADO DE ELLA! –gritó levantándose motivado.
+QUIEN ES EL VALIENTE CON DOS PARES DE COJONES?!
+YO SEÑORA!!
+QUÉ SOMOS?
+LEONES, LEONES!!
Nos dimos con el pecho con fuerza súper motivados, salimos de los vestuarios y vimos que todo el equipo más John y mi padre estaban fingiendo que pasaban por ahí.
+CHICOS, PIENSO DECLARARME AHORA!! –dijo en alto Thomas orgulloso de su decisión- TE QUIERO PRECIOSA CHICA, GRACIAS!! –me dijo a mí, dándome un beso en la mejilla y se fue decidido en lo que iba a hacer.
+Joder, sí que sabes motivar –dijo uno del equipo que no conocía aún, pero haciendo que todos rieran incluido yo.
+Ja, fácil, va a por todas –dije orgullosa de lo que había hecho, caminando para salir de allí junto mi padre y John.
Nos despedimos de todos y salimos súper felices, estaba muy nerviosa por lo que acababa de conseguir hasta que me dio por mirar a mi derecha encontrándome con una persona que conozco.
+Madre?
~Espero os guste este nuevo capítulo, cada vez habrán más cosas que pasen y espero os gusten, recordar darle a la estrella y seguirme para saber cuando subo otra parte y, sin más qué decir, bye.~
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