Sus ojos se abrierón al mismo tiempo que obligo a su cuerpo a tomar una posición sentada. Su respiración era entre cortada y una fina capa de sudor cubria su cuerpo, haciendo que algunos de sus mechones de cabello, que conformaban parte de su fleco, se pegaran a su frente. Finos senderos de lagrimas se apreciaban en sus mejillas levemente rosadas, podia sentir claramente como su corazón latia con fuerza, casi como si intentara salir de su pecho.

"Sheik"

Ese nombre paso rapidamente por su cabeza haciendo que volviera a la realidad.

Con rapidez se levanto de su cama, sin tomarse la molestia de ponerse un par de zapatos o unas calcetas para no tener que tocar el frio suelo de madera con la planta de sus pies. Bajo corriendo las escaleras hasta llegar a la planta baja, todo estaba en orden, no habia vidrio roto en el suelo, ni manchas de sangre, y sobre el sofa de tres plazas se encontraba el ladrón se su primer beso durmiendo tranquilamente.

Incluso en su sueño era perseguido por su acosador.

Tomo un respiro profundo antes de caminar a la cocina, necesitaba despejar su mente, y lo unico que se le ocurria para hacerlo era tomar un vaso de agua helado, ya que, los baños a las cinco de la mañana no le ayudaban en nada.

Entro a la cocina y vio todo en orden, casi parecia que nadie la habia usado hace semanas. Camino hacia la barra para tomar un vaso, más se detuvo al notar sobre esta un sobre violeta atado con un listón rojizo.

De nuevo sus manos comenzaban a temblar y el miedo llegaba a él.

Sacudio su cabeza de un lado a otro, un intento de alejar la muerte de todos sus compañeros de su cabeza. Respiro hondo y tomo el sobre para abrirlo y leer su contenido, ya nada podria empeorar, o eso creia él.

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Buenos dias mi Vio-koi~

Es una gran mañana, ¿No lo crees?

¿Como amanesio MI pequeño ratón de biblioteca?

Ya has de saber por las noticias que Naboruu, Saria, Tael y Taya fueron secuestradas por tu servidor. Y si no es asi ya te informe.

¿Qué?

No me has dado tu respuesta definitiva y necesito algo de diverción para pasar el tiempo~

Tranquilo amor mio, yo nunca estaria interesado en tocar de esa forma a una de esas zorras maquilladas

Yo soy solo tuyo y tu eres solo mio~

Solo me gusta escuchar sus gritos de agonia mientras las apuñalo una y otra vez, al igual que sus suplicas para que las asesine de una vez.

¡Nunca me imagine que sus gritos fueran tan hermosos!

Pero claro...

Amo mucho más el escuchar tu dulce voz diciendo mi nombre cada vez que repasan la lista de sospechosos

¿Como se escuchara mi nombre cuando lo grites estando los dos solos en una cama?

Por el momento me tendre que confomar con escucharlo cuando repasas la lista de sospechosos y cuando comes y dices "Maldito acosador"

Te lo he dicho mi amor, no soy un acosador, solo quiero asegurarme de que estes a salvo y que nadie nos separe

Porque te amo Vio

Ademas...

Soy inofensivo a comparación de la persona que me enseño casi todo lo que se, si fuera ella hubiera matado a toda la escuela, a tu familia y amigos, te hubiera secuestrado y te estuviera asiendo totalmente mio en este mismo momento sin importarme tu opinión

Aunque creo que eso nos hubiera ahorrado muchos problemas y sangre...

Ahora pasemos a un tema de seriedad

No te mentire, ha sido divertido el asesinar a cada uno de esos idiotas.

Si pudiera lo volveria a hacer, espera un momento, por supuesto que puedo~

El tener un alumno, el dispararle a tu hermano, ser el causante de tus noches en vela.

Ha sido realmente fabuloso, pero todo tiene un fín Vio...

Te he dado muchas oportunidades Vio, y lo sabes mejor que nadie, pero no las has sabido aprovechar

Sabes muy bien cual es la solucion para que todo esto acabe de una vez por todas, y no me refiero a un nuevo intento de suicidio

Por que si lo vuelves a intentar, y lo logras esta vez, creeme que escucharas los gritos de dolor y agonia de todos aquellos idiotas que pensaste que protegerias, perdón, que crees que puedes proteger

Te doy hasta el viernes, a las cinco de la tarde, para escuchar de una vez por todas tu respuesta definitiva mi amor

Aunque entre nosotros te suguiero que sea un si, claro, si ya no quieres ver más sangre

Espero escuchar tu respuesta afirmativa a traves de tus delicados labios rosaditos~

Atte. Tu Unico Amor Verdadero

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Las lagrimas empezarón a formar su camino a traves de sus mejillas carmesi ya gastadas de tanto llorar. Sus piernas perdierón su fuerza, haciendo que cayera de rodillas al suelo.

No sabia que sentir en ese momento.

Estaba realmente en blanco, pero estaba seguro de una cosa, todo acabaria el viernes. En donde seguramente él saldria perdiendo.

No importaba que camino escogiera, él perderia su libertad.

Si aceptaba ser de ese homicida, seguramente estaria encerrado, sintiendo como invaden su cuerpo todos los días.

Si lo rechazaba, seguramente ese homicida los mataria a todos y luego lo secuestraria. Era casi el mismo resultado que aceptar la propuesta.

-Nayru, ayudame -Murmuro con voz quebrado, cubriendo su rostro con sus manos antes de empezar a jalar su cabello- Quien sea, ayuda...

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-¿Crees qué deberia de comprar una cama matrimonial o una real? -Pregunto el actor del dolor y sufrimiendo del rubio de orbes hielo viendo un catalogo de colchones- ¿O comprare los dos?

-¿Por qué vas a comprar dos camas si ya tienes como diez? -Pregunto su alumno afilando su cuchillo, pues tenia un asuntillo que arreglar

-No creo que me duren mucho -Solto una carcajada antes de lanzar su catalogo por los aires- Ya falta poco, este viernes mi Vio-koi sera solo mio

-¿Deberia de preguntar por qué piensas eso? -Volvio a preguntar. Debia de admitir que a veces le daba miedo el estado mental de su maestro, aunque tambien debia de admitir que era un genio cuando se trataba de espiar y asesinar.

-¿Es enserio? -Y el ambiente se torno oscuro al tono serio del que estaba acostado en su cama con catalogos a los lados- ¿No te has dado cuenta de mi plan maestro?

-Solo veo que su Vio no estaria con usted a causa de la sangre que ha derramado -Empezo a hablar con cierto miedo, no queria un cuchillo en su cuello.

-Tengo la victoria asegurada -Hablo con voz calmada viendo a su aprendiz con superioridad- Acepte o no lo haga, aunque mi Vio-koi no se puede negar, ya que si lo hace yo-

-Los mataras a todos, para luego secuestrarlo -Termino el aprendiz viendo a su maestro, que solo asintio con una sonrisa traviesa en su rostro- Tu ganas en todo, lamento no haberme dado cuenta antes, mi maestro

-Has lo que te digo, y la judia pronto estara a tus pies

-Si maestro

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Su vista hielo estaba enfocada en la pantalla de su televisor, estaba en las noticias matutinas de si localidad, en donde la locutora les informaba sobre la desaparición de las cuatro jovencitas, que al parecer estaban en una pijamada y fuerón secuestradas.

Solto un suspiro antes de levantarse de su lugar y caminar a donde estaba la cocina, tenia hambre, y eso que habia comido hace media hora atras, más era mejor que tuviera hambre que anduviera de nuevo en ayunas.

Abrio su refrigerador y hecho un vistazo rapido a su contenido, antes de tomar una rebanada de pastel de chocolate para cerrarlo. Su hermano no estaba en casa, asi que podria comer todas golosinas que quisiera sin recibir alguna clase de regaño por no cuidar su alimentación.

Camino con paso calmado a la sala de estar, más cuando iba a sentarse escucho la puerta ser golpeada de forma violenta.

Tomo un respiro hondo antes de caminar a la puerta principal, más antes de abrirla, tomo un bate de madera para noquear al que tocaba, si resultaba ser alguien totalmente desconocido.

Abrio la puerta, más no tuvo tiempo de reaccionar, ya que, el responsable entro cerrando la puerta detras de él y ponerse los cinco seguros que esta tenia.

El rubio se levanto del piso para sacudir su ropa, viendo al contrario de sudadera verde limón, el cual enseguida se quito la capucha revelando su cabellera rubia.

-Silla, silla -Empezo a murmurar para si mismo mientras buscaba dicho mueble

-¿Estas bien? -Pregunto al ver como su primo tomaba una silla de madera para atrancar la puerta- ¿Quieres un poco de agua?

El rubio de ropaje verde asintio, antes de ver a su primo y abrazarlo con fuerza, Vio solo parpadeo un par de veces, antes de corresponder el abrazo de vuelta, dandole suaves palmaditas en su espalda.

-Ya no lo soporto -Intento hablar el rubio, sin soltar al menor por cinco meses y dos semanas. Su respitación era agitada, tal parecia que lo habian estado persiguiendo.

-Ven, tienes que tomar asiento -Hablo con voz suave antes de caminar hacia donde estaba la sala, sujetando a su primo de la muñeca para guiarlo- Respira

-Solo fui a comprar pan -Empezo a hablar el rubio intentando volver a normalizar su respiración- Pero cuando sali de la tienda, ahi estaba él viendome, detras de un poster de luz -Tomo asiento en el sofa, antes de cubrir su rostro con sus manos para luego apoyar sus codos en sus piernas- Empece a correr, pero el empezo a seguirme, sus manos estaban cubiertas de-

-¡Tranquilo Verde! -Exclamo el rubio antes de sacudirlo un poco para que reaccionara, lo cual parece que habia funcionado, ya que, habia dejado de balbucear- Estas a salvo ahora, llamaremos a mi tío cuando salga del trabajo para que venga por ti, no es buena idea que salgas con ese loco afuera

-¿Cómo logras estar tan tranquilo? -Pregunto observando atentamente a su familiar, era casi como si no le afectara el hecho de que un homicida estaba detras de él.

-Sonara raro, pero ya me acostumbre a esto -Hablo con sencilles antes de sentarse al lado del mayor, su vista fija en el suelo de madera- Lo mismo que hizo conmigo, lo esta haciendo contigo, pero-

-¡Vio! -Grito interumpiendo al menor, apuntando al mismo tiempo la ventana de la sala.

El nombrado levanto su vista, antes de abrir sus ojos al ver aquel encapuchado en la ventana observandolos fijamente con su mano enguantada en la ventana. No podian apreciar quien o como era, estaba totalmente cubierto de prendas negras y largas, no mostraban ningun pedazo de piel, casi como si fuera a nevar en cualquier momento y necesita protegerse de la nieve y el frio.

Ambos rubios se abrazarón al ver que el desconocido alzo su mano derecha lentamente, mostrando la cabeza de una de sus compañeras de clase, sus cabellos verdosos como las hojas de los arboles ahora eran de un tono carmesi oscuro.

Soltarón un grito, antes de levantarse del sofa para correr hacia las escaleras y buscar un escondite, más cuando llegarón al pasillo del segundo piso soltarón un segundo grito de terror. Delante de ellos dos, a cinco metros de distancia, estaba un segundo encapuchado, con un cuchillo en su mano izquierda.

Un tercer grito de terror se hizo presente al ver que caminaba hacia ellos, antes de correr de nuevo hacia una de las habitaciones para entrar y cerrar la puerta detras de ellos. Verde usaba su propio peso para mantener la puerta cerrada, mientras Vio empezaba a empujar la cama, logrando ponerla contra la puerta, más ahi no se detuvierón.

Ambos rubios se vierón a los ojos, antes de empezar a buscar más muebles para atrancar la puerta y la ventana. Querian asegurarse de que ninguno de los dos entrara. Se subierón a la cama, esperando que pronto llegaran los mayores, aunque tendrian que esperar que alguno de los mayores llegaran a la casa, o llamaran, para que se dieran cuenta que estaban en problemas.

Escucharón el golpear de la puerta, y ambos solo la vierón fijamente antes de sostener la cama para evitar que la movieran, realmente necesitaban ayuda.

Lastima que ninguno llevaba su celular en manos.

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Mariamy, ¿Shadow estara en el hospital?

¿Quien es el ayudante?

¿¡Cuando volveras a actualizar!?

Ni yo lo se :D pero ustedes lo sabran pronto(?)

Hasta la próxima