Ya estamos cerca del final guapas y guapos (?

Ya después de dos años por fín solo falta un capítulo para terminar esta historia.

Desde ahora avisó que no habra secuela y que el capitulo final es el epílogo :v

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-¿Sorprendido de verme Vio-koi? -Pregunto con una sonrisa traviesa el peli morado, hincandose delante del rubio atado para que este no forzará su cuello. Soltó una carcajada al ver la mirada sorprendida y aterrada del rubio, era mejor que la mirada que habia estado esperando todo ese tiempo- ¿Qué sucede Vio-koi?, ¿no te alegras de conocer al amor de tu vida?

-¿Cómo es posible? -Su asombro era demaciado que apenas podía hablar, sus palabras salian por medios de susurros apenas audibles.

-Todo es posible en esta vida amor -Contestó Shadow con una amplia sonrisa gatuna, llevaba varios años esperando este momento, al grado de que casi le parecia un sueño lo que sucedia.

-No es posible... no tiene lógica -Susurró con voz histérica el rubio, bajando su vista al suelo con sus ojos abiertos, su cabello sucio casi cubriendolos por completo. Por su mente pasaban todos los momentos en que el acosador atacaba y Shadow estaba con ellos, ayudandolos a atraparlo- ¿Cómo lograbas los asesinatos si estabas con nosotros?

-Eso fue fácil, le pedia al idiota de Gufuu que se hiciera cargó -Contestó con simpleza y cierta pereza el purplette, alzando levemente sus hombros- Le decía a quien matar y a que horas, diciendole que era parte de sus "clases" -Una sonrisa surco en sus labios, animandolo a acercarse a su pequeño prisionero para acariciar su mejilla con cariño- Eso me facilitaba mucho el trabajó, y la idiotez de tu hermano aun más, no lograba darse cuenta que la brutalidad entre los asesinatos era diferente

-Sheik no es idiota, y te atrapara -Gruñio Vio, alzando su vista por completó para ver al purplette a los ojos- Te pudriras en una celda el resto de tu vida

Sangre y hielo de nuevo se unían, pero esta vez emanaban un sentimiento diferente a las uniones anteriores, diversión y odio.

-No sigas creyendo en eso o te haras daño amor -Habló con sabiduria el purplette, o eso parecía, pues estaba más que convencido que el cenizo jamás lograría ponerle un dedo encima, y mucho menos confirmar ante la ley que él era el causante de tan hermosas muertes.

Un silencio se poso sobre ambos jóvenes, uno porque queria admirar el rostro de su compañero y otro porque resistia el impulsó de mandarlo al diablo.

-¿Por qué? -Habló por fin el rubio, rompiendo el silencio incómodo de la habitación, y es que ahora mismo surcaban por su mente miles de preguntas- ¡¿Por qué decidiste ayudarnos en la investigación si eras el acosador?!

-Aahh -Emitió con diversión aquella vocal antes de tomar asiento en el suelo para ver al rubio desde a bajó- ¿No es lógico?, estaba aburrido, y queria burlarme del idiota en su cara

El rubio se quedo callado, no podia creer la facilidad y diversión con la cual el purplette hablaba, dandose cuenta que todo esto era un juego para él.

Un juego que ya habia ganado.

-Estas más loco de lo que pensé -Dijo Vio por medio de un susurró con su vista hielo clavada en el peli morado

-¿Loco? -Repitió Shadow aquélla palabra mientras ladeaba su cabeza sutilmente hacia el lado derecho- ¿Creéis qué estoy loco Violet? -Su sonría fue disminuyendo poco a poco, hasta apenas notar la curvación en el final de sus labios, se levantó del suelo de forma lenta, causando un escalofrio en el cuerpo del rubio al sentir el cambió del ambiente- ¡Si estoy loco es por tu culpa!

En menos de un parpadeo, el peli morado rodeó con sus manos el cuello del rubio para empezar a estrangularlo, teniendo sus dos dedos pulgares debajo del mentón para evitar más fácil la penetración del aire. Vio cerró sus ojos con fuerza al sentir la presión sobre su cuello, era cómo si Shadow quisiera romperlo para asegurarse de qué ya no pudiera respirar. Su cuerpo se tenso, clara señal de que su cuerpo queria luchar para conseguir aire.

Una nueva sonrisa apareció en el rostro de Shadow al sentir como el cuerpo de su amor perdia fuerzas entre sus manos, una risa escapó de sus labios al mismo tiempo que soltó el cuello del rubio, brindándole a este de nuevo la oportunidad de respirar. Un ataque de tos se presentó en el rubio, el aire de nuevo entrando a sus pulmones maltratados, más fue interrumpido por los labios ajenos sobre los suyos, provocando que sus ojos se abrieran a toda su capacidad y una sombra rosa profundo aparecía en sus mejillas, la falta de airr hizo presencia de nuevo ante el beso descuidado y lujurioso, lo cual solo causo que su cuerpo se llenara de pánico al pensar en lo que podría seguir.

El peli morado rompió el beso después de casi un minuto alejándose lentamente de su rehén, a unos escasos milímetros de sus labios, maldiciendo a sus adentros la necesidad de respirar por interrumpir tal hermoso momento, mientras el rubio agradecía internamente que ya habia acabado, o eso pensaba, su pecho bajaba y subía de forma rápida, el aire que tanto necesitaba de nuevo entraba a su cuerpo, dándo sin saber una vista tentadora a su acosador.

-Tus labios son más suaves y dulces de lo que recuerdo... -Susurro Shadow con voz gruesa antes de volver a reclamar sus labios como suyos en un beso más profundo y posesivo, sujetando el rostro de su pequeño rubio con ambas manos para que este no pudiera romper el beso, mientras este solo deseaba en sus adentros que fuera una pesadilla y que no pasara más que un par de besos.

Que equivocado estaba.

El mayor empezó a descender lentamente en un camino de besos por el mentón y cuello de su víctima, lo lamio lentamente como si fuera una paleta de caramelo antes de empezar a morder y succionar la piel sensible de su cuello, dejando varias marcas en todo el cuello y parte de la unión de los hombros, causando un estremecimiento en el rubio que mordía con fuerza su labio inferior. Con lentitud Shadow fue descendiendo su mano hasta la entre pierna del rubio sin desatender su cuello, acariciando de forma lenta sobre los pantalones su miembro, ocasionando un gemido ahogado por parte del rubio ante esa sensacion, ese leve gemido había marcado su perdición.

El mayor sonrio al escuchar esa hermosa música, el cuerpo del rubio estaba cediendo a sus toques, asi que empezo a bajar sus pantalones de forma lenta, buscando más piel para tocar, más no conto con que llamarian a su celular.

Un gruñido escapó de su garganta antes de separarse de su pequeña presa, el cuál empezó a agradecer internamente que se hubiera detenido. Shadow tomó una franela para cubrir la boca del rubio, amordazandolo con fuerza para evitar que pudiera hablar.

Vio Pov

-Dame un segundo amor -Habló el peli morado con una voz tan dulce como la miel y una sonrisa llena de inocencia mientras me veia a los ojos- Será solo un minuto Vio-koi, y luego podremos continuar

Me quedé callado mientras lo observaba, rezando que fuera una llamada de emergencia familiar para que se fuera de aqui y me diera la oportunidad de planear una huida. Tomó asiento en una silla a mi lado, sacando su celular para aceptar la llamada y ponerlo contra su oido.

-¿Qué rayos quieres Dark? -Su tono de voz habia cambiado radicalmente, me habia sorprendido el notorio odio que emanaba su voz al hablar.

Dark...

Ese nombre ya lo habia mencionado antes, mientras investigabamos en mi casa me había mencionado que tenía dos hermanos mayores, y uno de ellos se llamaba Dark porque sus padres nunca le habian buscado un nombre, asi que le nombraron del mismo color de su cabello.

¿Sería el mismo Dark con él que hablaba ahora?

Pero cuándo me hablaba de sus hermanos se apreciaba un tono alegré y cariñoso, como si fuera lo más valioso que tenía.

Cierto, antes estaba actuando para no levantar más sospechas contra él, y ahora ya no tiene esa necesidad de estar fingiendo.

Debo de admitirlo, Shadow es un buen actor.

-No, no me importa si estas en la ciudad, no iremos a cenar -Me observó por el rabillo del ojo, creo que sospecha que estoy planeando espiar su llamada para tener información en su contra, asi que se levantó de su asiento y camino hacia la puerta- ¡Me importa un cacahuate si llevamos dos años sin vernos, tengo asuntos más importantes!

El sonido de la puerta cerrarse fue lo último que escuché después de sus gritos, realmente odiaba a su hermano Dark, más basta de pensar en eso Vio, esa llamada te habia dado tiempo de soledad y debías de aprovecharlo.

Observe a mi alrededor mientras intentaba desatar mis manos aplicando fuerza para zafarlas de las sogas, más era imposible, era soga de cañamo, diseñada especialmente para retener los botes en las orillas.

Hasta que observé mi única esperanza para salir de ahi.

Encima de una mesa se encontraba descansando un cuchillo de cocina, su hoja plateada brillando de forma leve con el brillo del bombillo, ¿cómo no me habia dado cuenta antes de su presencia?. Observé la puerta unos segundos antes de intentar moverme junto con la silla, meciendome de un lado a otro de forma rápida y brusca, teniendo cuidado de no hacer saltar la silla para no provocar ruido.

No sabia que tanto se habia alejado Shadow de la puerta, asi que debia de tener cuidado con el ruido que producía si no queria causar que regresará antes de tiempo y me atrapara intentando escapar.

Sentía como si llevará años intentando llegar a la mesa, a cada momento volteaba a ver la puerta para asegurarme de que aun no entraba Shadow, hasta que por fin mi pierna choco contra la mesa, y aqui era donde comenzaba lo difícil, alcanzar el cuchillo.

Estire mi mano, al igual que mis dedos, apenas logrando tocar el mango del cuchillo. Alce mi vista a la puerta solo unos segundos al escuchar un golpe contra la pared, dandome a entender dos posibles situaciones, estaba hablando por teléfono y Dafk dijo algo que lo hizo enojar y golpeó la pared, o terminó la llamada y esta enojado.

Estire mis dedos para intentar tomar el mango y jalarlo hacia mi, las sogas raspaban mi piel, más yo habia dejado de sentirlas. Logré acercar el mango lo suficiente para hacer girar el cuchillo poco a poco, teniendo cuidado de no cortarme con la hoja, para sujetar el mango entre mis dedos y acercarlo a las sogas para empezar a serruchar las sogas.

Trataba de hacerlo rápido, en ese momento habia olvidado que debia de tener cuidado con la hoja del cuchillo, sólo quería librarme de las sogas y huir, sentí como la tensión de la soga desapareció, y una sensación extraña de felicidad inundó mi cuerpo.

Libertad

Pensé al mover mi brazo, no podía moverlo tan libremente a causa del tiempo que habia estado retenido en la misma posición, pero el tan solo ver mi muñeca me llenaba de alegria.

-"Concentrate Vio, aún no eres libre" -Me regañe a mi mismo antes de sujetar mejor el mango y empezar a cortar las sogas de mi otro brazo, para continuar con las sogas de mi cintura y después las de mis piernas.

Dejé el cuchillo sobre la mesa e intenté levantarme, mis piernas temblaban un poco y más cuando intenté caminar hacia la ventana, era cómo si aprendiera a caminar de nuevo, sin mencionar qué dolía demasiado.

Mordi mi labio inferior para no quejarme, avanzando lo más rápido posible a la ventana y abrirla.

Oscuridad

Era lo único que había del otro lado, a lo lejos en el horizonte se apreciaban las luces de la ciudad, indicandome por donde ir.

Subí al marcó de la ventana para salir, apoyando mis pies en el tejado para salir por completó e ir bajando por el tejado de forma lenta para no caer.

-¡Vio! -Ese gritó me congeló la sangre, no queria voltear, pero mi cuerpo me obligó a hacerlo, viendo a Shadow a la puerta, observandome fijamente con esos orbes sangre.

Estaba enojado.

No lo pensé ni un segundo, en un impulso olvidé que estaba en la segunda planta y corrí a orilla del techo para saltar, para mi suerte había algunos arbustos sin podar, los cuales suavizaron mi caída, más no evitaron el dolor en mi cuerpo.

Cerré mis ojos con fuerza, en un intentó que el dolor de mi espalda disminuyera, ¿por qué habia saltado?

-¡Vio-koi! -Ya recordé.

Me levanté lo más rápido posible de los arbustos, y no dudé ni un segundo en comenzar a correr.

En ese momento olvidé en donde estaba la ciudad, olvidé el dolor que aquejaba mi cuerpo, incluso olvidé mi nombre, en mi mente solo repetía una y otra vez corre y no mires atrás.

Corría lo máximo que me permitían mis piernas, era de noche y casi no podía ver más allá de cinco metros, por lo cual debia de ir con cuidado de no chocar contra algún árbol.

¿Cómo pude haber bajado la guardia cuando fueron a secuestrarnos?

Si no hubiera dejado que mis emociones me controlarán en ese momento, nada de esto estuviera pasando.

-¡Vio-kun!, ¡¿Dónde estás?!, ¡¿Por qué corres?!

Escuche su voz llamándome, demasiado cerca de mi, motivándome a seguir corriendo aun más rápido, ignorando el dolor en mis piernas. Varios de mis compañeros de clase, maestros y gente cercana a mí fueron asesinados por las manos de ese psicópata.

Tenía miedo, demasiado.

Sentía que mi corazón explotaria en cualquier momento.

-¡Vio-koi~, deberías dejar de correr, no es educado huir de tu novio y futuro esposo~!

Tengo que correr, esconderme e incluso rogarle a las tres diosas de que no me encuentre.

Admito que había sido una tontería el quedarme sólo en casa sabiendo que había un psicópata obsesionado conmigo, y peor aun no llamar a Sheik cuando llegó Verde asustado a casa, pero al menos había logrado mi objetivo principal, descubrir quién era en realidad mi acosador.

Ahora debía escapar de él.

-¡Vio-koi regresa, prometo no hacerte daño, seré gentil!

Deja de llamarme, deja de perseguirme y deja que me vaya a casa en paz.

A estas alturas Sheik y los demás oficiales han de haber puesto oficiales en las entradas y salidas para evitar que posibles sospechosos salieran de la ciudad durante la investigación, si encontraba a un oficial tan siquiera estaría a salvo.

Quisiera pensar que esta es una pesadilla, que pronto despertare, iré a la escuela como todos los días, soportaria las bromas de Azul acerca de mi nombre, nadie estaría muerto y que nunca llegaron esas malditas notas.

-¡Violet Akira, ven aquí ahora mismo! -Conozco ese tono, está enojado.

Seguí corriendo hasta visualizar un viejo almacén, Sheik me había contado una vez sobre la existencia de este, al parecer antes era un laboratorio en donde realizaban experimentos ilegales, ahora solo son las ruinas de lo fue, sin pensarlo me adentre a este buscando un lugar en donde esconderme, me maldecí internamente al ver que todo el lugar estaba a oscuras, no podía ver nada y me golpeaba cada segundo con las cosas que se encontraban esparcidas en el suelo, pero me ayudaba a encontrar tambien los muebles. Me escondí rápidamente detrás de un escritorio, o eso pensaba a causa de la forma de este, no dudando en contener la respiración para evitar hacer el mas mínimo ruido que pudiera delatar mi ubicación actual.

Podía escuchar y sentir de forma clara como latía mi corazón.

No paso ni siquiera un segundo desde que me escondi cuando la puerta principal se abrió por completo, dejando entrar la luz escasa de la luna.

Podía ver con claridad su sombra alargada en el suelo, solo cubrí mi boca con mis manos al mismo tiempo que le rezaba a las diosas que no me encontrara.

Cerró la puerta y rio de una manera burlona y victoriosa. Él sabía que me encontraba ahí y estaba más ciego que un perro a causa de la oscuridad. Escuche sus pasos cada vez más cerca de donde me encontraba, casi podía jurar que tenía esa retorcida sonrisa en su rostro.

-Vio-koi~ -Ronroneo mi nombre causando que una corriente fría en todo mi cuerpo. El alivió que habia sentido al escapar desapareció por completó- Sé que estas detrás del escritorio, escucho los latidos de tu hermoso corazón~

Solo cerré mis ojos con fuerza tratando de ignorar que me hablo y que había descubierto mi escondite, rezaba que solo lo estuviera diciendo al azar para ver si salía. Escuche una risilla de su parte al igual que sus pasos acercándose a mí.

Es imposible...

Por más que lo intente no puedo huir de él...

Siempre va un paso adelanté de lo que pienso.

-Te encontré mi Vio-koi -Escuche su voz delante de mi, obligándome a abrir mis ojos de forma lenta y temblorosa, el tacto de su dedo índice sobre mi nariz me hizo confirmar que no era una pesadilla.

Podía ver esa sonrisa victoriosa en su rostro al igual que una leve sombra rosa en sus mejillas, sabía muy bien al igual que yo que ya no tenía forma de escapar de él.

-Te atrape mi Vio-koi -Dijo con esa enorme sonrisa, burlandose de mi suerte- Volvamos a casa, tenemos mucho de que hablar

Estaba condenado.

End Vio Pov

Su mirada carmesí se encontraba fija en la pantalla del móvil, el cual mostraba un mapa en donde le indicaba exactamente la ubicación de su hermano menor actualmente.

Se sentía como un traidor al entregar a su hermano ante la ley, pero siempre estuvo su trabajo antes que la família.

-Ya casi llegamos -Escuchó la voz de la detective que conducía, haciendo que saliera de sus recuerdos para alzar su vista para ver al frente.

-Gracias Yoshimi -Agradeció Sheik, acompañado del sonido de un seguro, y es que había quitado el seguro a su pistola por si las cosas tomaban un fin no pacífico. Hasta que sintió la mirada del azabache sobre su persona, haciendo que lo volteara a ver- Lo siento, pero estuve esperando por esto desde que inició la investigación

-No tires a matar, por favor -Habló por fín el azabache, volviendo su vista hacia delante- Sigue siendo mi hermano menor, y aun hay una probabilidad de que no sea él

-El video mostró otra cosa -Pronunció Sheik viendo atentamente al azabache, el cual bajo su vista al suelo. Se dio una bofetada mental ante su atrevimiento, su compañero estaba pasando un momento duró y él estaba de insensible- Lo siento, pero estuve esperando tanto para atrapar al responsable del dolor de mi hermanito que ahora que se quien es no puedo evitarlo y-

-Esta bien, conosco ese sentimiento -Interrumpió el azabache antes de voltearlo a ver- ¿Te dije por qué había cámaras en toda la casa? -Ante esa pregunta el rubio cenizo negó con la cabeza, y es que le daba curiosidad del porque en la casa de los Fuzen había cámaras escondidas pero no habia ningun registró de éstas- Las coloqué para atrapar a un idiota que contrataron mis padres para cuidar a mi hermanito

-¿Robaba a la familia? -Preguntó alzando una ceja, recibiendo una negación del mayor

-Te dije que en ese tiempo tuve el mismo sentimiento que sientes tu -Comentó antes de ver hacia delante- Y siento que gracias a ese idiota esta sucediendo esto

El rubio cenizo se quedó callado, el tono del azabache era amargó y de culpa.

Le recordaba a él.

De seguro Dark sentía la culpa por revisar los videos de seguridad de su casa y encontrarse que su hermano menor hablaba con un actual difunto planeando como tirarlo por la ventana y lastimarlo para que pareciera un ataque furioso.

-"Perdoname Shadow" -Pensó en sus adentros Dark antes de cerrar sus ojos, al mismo tiempo que el auto se detuvo.

-Llegamos -Dijo la azabache de ojis azules, mejor conocida como Yoshimi, observando la cabaña de madera que estaba delante.

-Bajen con cuidado, los refuerzos vienen en camino -Instruyó Sheik bajando del auto, caminando hacia la puerta para asegurarse de que no estuviera cerrará, más al tocar el pomo alejó su mano- Tiene corriente

-¡No me digas idiota oxigenado! -Se escuchó la voz de Shadow del otro lado, la cual mostraba algo de diversión

-Shadow -Dijo Sheik sacando su pistola para apuntar a la puerta- Sal con las manos en alto, ya te descubrimos

-Lo se, mis contactos me avisaron que venian -Habló de nuevo, antes de romper en risas- Y me preparé para recibirlos, idiotas

-¡No lo volveré a repetir, sal con las manos en alto o si no entraremos y no dudaremos en tirar a matar! -Grito de nuevo el cenizo, a sus espaldas estaban ambos oficiales con sus pistolas en manos

-Shadow, sal, aun hay solución -Dijo Dark, esperando que su hermano reaccionará- Por favor

-No la hay -Se escuchó la voz de Shadow a las espaldas de los oficiales, los cuales voltearon enseguida al escuchar la voz, más un dolor agudo en su pecho y el sonido de disparos inundaron sus oidos- ¡No dejare que lo alejen de mi de nuevo!

Sheik cayó sentado al estar cerca de la puerta, tratando de alzar su arma para dispararle, más el dolor agudo en su brazo le hizo soltarla. De los matorrales había salido el peli morado portando un arma.

-Bien, te debo de felicitar, casi me atrapaste con ayuda del inutil de mi hermano -Dijo Shadow con una sonrisa, acercandose al rubio cenizo mientras seguia apuntando a su pecho. Ya había disparado a su vientre y a su brazo, su cabeza sería un lugar indicado para el tercer disparo.

-¿Dónde esta Vio? -Habló con dificultad Sheik, sintiendo el sabor ferroso de la sangre en su boca.

-Esta bien, no te preocupes, lo cuidare muy bien -Una sonrisa burlona y traviesa cruzó los labios del peli morado, apuntando con su pistola a Sheik para disparar- Nos veremos en la otra vida, gracias por el auto

Un disparó hizo presencia en el bosque, al igual que un silencio profundo hizo presencia.

Sheik abrió sus ojos al no sentir de nuevo una bala atravesandolo, logrando ver al purplette que le habia disparado de pie, tocando su vientre con su mano derecha, la cual estaba llena de sangre.

-Je -Una risa amarga salio de los labios de Shadow, dandose vuelta a pasos cortos para ver hacia donde estaban los otros dos heridos. Su vista sangre encontrándose con el azabache que se apoyaba del auto para estar de pie, su arma apuntandole- Cuidando a todos menos a tu familia, ¿o no Darky?

El azabache tragó grueso, un nudo presente en su garganta ante la escena de su hermano menor herido.

De nuevo no lo pudo salvar.

-Los odio -Murmuró Shadow con voz entre cortada antes de caer al suelo, la sangre brotando de su herida de forma rápida.

Dark soltó su pistola y cayó sentado contra el auto, dejando escapar algunas lágrimas.

Sheik suspiró, sintiéndose por fin libre, ya habia acabado todo.

Las sirenas se empezaron a escuchar, los refuerzos y la ambulancia venían en caminó a auxiliarlos.

Pero...

¿Dónde estaba Vio?

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Y esto ha sido todo por hoy, ahora si procure abarcar todos los puntos quq

Hasta la próxima