[Aquí debería haber un GIF o video. Actualiza la aplicación ahora para visualizarlo.]

Breve nota:

Agradezco, a alguien muy especial, habernos encontrado en este espacio dónde compartimos lo que más nos gusta... historias, sean del tipo que sean, ella, con su maravillosa forma de escribir me ha enseñado a no ignorar la figura de Kanon de Géminis, sí, de Géminis se lo ganó por derecho propio. Tal vez haya antes otros caballeros en mi lista de preferencias... pero, al césar lo que es del césar. No haré prólogos de ningún songfic, aun así creo oportuno hacerlo en este caso por dos motivos.

El primero, Kanon fue uno de los dos dorados que luchó en el inframundo estando aún vivo- el otro fue nuestro adorado y sabio maestro Dohko-, el segundo, para mí, mucho más emotivo, es que murió sólo ya que sus compañeros estaban en Giudecca, y sabemos haciendo qué.

Tampoco creo que los songfics deban, obligatoriamente, hablar de amor o de pareja, pero reflexionemos un segundo, si lo que Kanon hizo, no fue un acto de amor... entonces ¿Qué lo es?.

Para él... este tema.

◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎◎•◎◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎•◎◎•◎

A mi querida Snorlitax

a su infinito amor por Kanon de Géminis.

Puedo rememorar perfectamente el momento en que ese espectro rubio perdió la batalla, no sabe leer en mis ojos la determinación que me empuja, no me importa morir, deshacerme de mi armadura es difícil pero la están llamando ...

Veo su terror mientras lo elevo conmigo, ¿Por qué tienes tanto miedo? Tu dios gobierna el inframundo y seguro te confortará cuando llegues ante él... no correré con tanta suerte. Lo sé. Pero ahí sigue su miedo al saber que los doce están en Giudecca.

Nos elevamos a gran velocidad hasta que hacemos estallar nuestras técnicas, segundos después siento arder los cosmos de mis compañeros al unísono, la exclamación de Athena resuena en mi interior... han partido segundos antes de que yo lo haga, -esperadme- caemos de cabeza a una velocidad endiablada, el Juez está destrozado, su cuerpo inerte, no ha soportado el impacto sin  armadura que se ha desintegrado antes de caer, lo mantengo abrazado por detrás, ¿este es mi fin? Y este es mi último abrazo... tal vez debiera estarle agradecido, no voy a morir tan solo. Lo muevo ligeramente, no respira... después de todo sí que estoy solo.

Mi enemigo se ha ido... pero pronto llegarán más... me verán cómo el orgulloso soldado de Athena que soy, y ella la niña que le ha plantado cara a su dios. Mis compañeros... han muerto todos... lágrimas recorren mis mejillas. No puedo evitar preguntarme si esto ha servido de algo. Pienso en él, la vida fue tan injusta con nosotros, todos nosotros, pero Saga... es mi hermano y ya no volveré a verlo.

Consigo ponerme en pie a duras penas, oigo un rumor que me espeluzna... son ellos, cada vez más cerca, percibo el cosmos de Seiya y los demás... siguen en pie y están del otro lado del muro... han cruzado!!!. Al fin puedo sonreír y tal vez, con suerte, descansar en paz. Aunque el dolor que siento en el alma nada lo mitiga. Pierdo mis sentidos lentamente.

Cuando alzo la cabeza la encuentro a lo lejos... es una joven, la más hermosa que nunca he visto, doy un paso atrás, debo haber muerto, pero no siento miedo alguno, la veo acercarse hacia mí, me sonríe y se hace el silencio.

El viento me trae una canción de cuna, sonrío cuando reconozco la voz... -Athena- la escucho cantar aunque no puedo verla, no está aquí y eso me tranquiliza. Toda nuestra infancia pasa frente a mis ojos y ahora esa Luz parece llevarme hacia donde la joven permanece quieta esperando por mí. La sigo y entro a un lugar desconocido.

Hay paz... puedo sentir paz, un lago hermoso, mis heridas han dejado de sangrar pero aún siento el dolor. Un dolor diferente.

Oigo voces a lo lejos, pero no entiendo lo que dicen, hasta que una sobresale entre las demás, gritando mi nombre, que suena ronco... rasposo. -¡¡Kanon!!.

Giro despacio para ver la figura imponente de mi hermano acercándose, me tiende los brazos abiertos,  aún está lejos, al fondo escucho claramente la voz de Shion gritar: -¡¡Chicos, es nuestro Kanon!!

Corro hacia él... ahora ya no me duele nada, sólo la distancia que me separa de sus brazos.

Espero os guste. Un fuerte abrazo!!!