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Louis y sus hijas pasaron varios días en el palacio por la recuperación de Adrienne, y en este tiempo Louis aprovechó y habló con su hija sobre lo que había pasado y su postura en relación a su parte sirena
-agradezco mucho tu ayuda Helena, sin ti no estaríamos aquí en este momento, realmente valoro mucho que hayas venido, no sabes lo feliz que me hizo verte
-tenía que hacerlo pa, después de todo, tenía que enmendar mi error de algún modo. Además, realmente estaba preocupada por ustedes, no hubiese podido si les pasaba algo
Louis sonrió ante aquello
-¿que piensas ahora cariño? me refiero a esto de ser sirena
-no lo sé pa, las cosas pasaron muy rápido y yo...
-si aun te sigue molestando, tan pronto como lleguemos casa te los puedo volver a quitar, no hay problema. No tienes que sentirte presionada
-no, no es eso, es solo que, no me había dado cuenta de lo increíble que es tener este don, ahora que lo experimenté me sentí tan viva pa, tan feliz, tan completa; es algo increíble pa, no sé cómo explicartelo
-te entiendo, es una sensación hermosa, es como si volvieras a nacer, como si la vida fuera perfecta, el tiempo se detiene y no te importa nada más
Helena asintió y sonrió
-quiero quedarme con ellos pa, no quiero que me los quites
-¿estás segura hija? no quiero que te sientas presionada a nada
-lo estoy papi, quiero quedarme con esta parte de mi, aprenderé a vivir con ella y la amaré muchísimo, me enamoré de esto y de todo lo que puedo hacer y no me queda de otra más que darte las gracias, gracias por haberme heredado algo tan precioso y perfecto como esto padre, no me alcanzara la vida para agradecerte esto y amarme tanto como lo haces, no sé como puedes continuar con ese amor a pesar de que yo no me he portado bien, quiero disculparme por eso
Louis sonrió muy feliz y no se contuvo en abrazar a su pequeña, escuchar unas palabras así de Helena era algo realmente increíble, todos sabían como era ella y al escucharla de ese modo, logró una felicidad aún más grande en Louis
Adrienne por otra parte ya no soportaba estar alejada de su esposa, queria regresar a su lado, además de que ya se sentía mucho mejor, así que salió de su habitación en busca de su padre hasta que lo encontró hablando con Helena
-padre, puedo hablar contigo
-si claro, Helena hija ve con tu tía, recuerda que quedó en enseñarte el reino
Helena salió de la habitación dejandolos solos
-dime, que te inquieta hija, ¿te sientes mal? ¿necesitas algo?
-estoy bien, no te preocupes, es solo que, quiero regresar pa. Extraño a papá, a Grace, extraño mi casa...extraño todo pa, quiero volver
-oh hija, créeme cuando te digo que yo también lo extraño todo y si estamos aun aquí es velando por tu recuperación pero te entiendo perfectamente, tu padre me hace una falta inmensa y sé que debe estar muy preocupado
-entonces vamonos pa, no quiero que me mal intérpretes, no es que no me guste estar aquí, es maravilloso, pero yo tengo a mi esposa en la tierra y no soporto ni un segundo más separado de ella.
-te entiendo mi cielo, me pasa exactamente lo mismo...hablaremos con los sanadores sobre tu estado, tampoco nos iremos exponiendote ¿ok? vamos a verlos y asegurarnos de que está todo bien contigo
y así lo hicieron, las sirenas sanadoras hablaron sobre como estaba Adrienne y aunque todos concordaron en que aún estaba un poco débil para nadar distancias tan largas, estuvieron de acuerdo en que no había un problema grave que le impidiera llegar a la tierra
-lo único que le pido princesa, es que tan pronto como llegue, descanse, créame cuando le digo que lo necesita
-se lo prometo, muchas gracias por todo
Adrienne sonrió y abrazó al líder de los sanadores en forma de agradecimiento. Así que una vez terminaron esa pequeña reunión comenzaron a preparar todo para regresar a su casa.
Lottie y sus padres despidieron a sus familiares y le desearon un viaje tranquilo. Se despidieron con un beso en la mejilla y una promesa de que volverían a verse pronto pero antes, Louis se acercó a su madre, tenía que decirle algo importante antes de irse
-mamá, yo tengo que decirte algo importante, no quiero irme sin decirte
-hijo querido, no tienes que decirme nada, yo ya lo sé.
Louis sonrió ante eso y su madre acarició su mejilla
-vayan con cuidado y no. tengas miedo de hablarlo con Harry
-gracias ma, te veré luego
-los amo mi niño
Louis y sus hijas salieron del palacio y Adrienne le habló a su padre llamando su atención
-¿crees que estuve mal pa?
-¿mal? ¿Por qué lo dices?
-en querer regresar aún sintiéndome mal
-no lo creo cielo, tu eres muy fuerte y aunque aun no estés recuperada al 100% está bien que quisieras regresar, no tiene nada de malo
-papi tiene razón Adri, no es egoísta de tu parte, no está mal extrañar tu casa y tu esposa, después de todo, nadie puede obligarte a quedarte en ningún lugar, eso sí sería egoísta
-tu hermana tiene razón, no te tortures pensando en eso, esta todo bien, nademos hasta casa, ya quiero ver a su padre
Las hijas de Louis sonrieron ante eso y se concentraron en nadar, querían ver a sus seres amados y abrazarlos tanto como fuera posible, habían estado mucho tiempo fuera de casa y extrañaban todo eso, las ansias por llegar eran tantas que olvidaron todo y nadaron como si su vida dependiera de ello, sin mirar atrás y con la alegría de que estarían junto a sus seres amados.
Eso sí, Louis no perdió un minuto más y le contó a sus hijas lo que le pasaba. Estás se sorprendieron pero se alegraron con la noticia. Louis agradeció eso infinitamente, solo esperaba que Harry reaccionara igual.
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