Capítulo 3: Define obitsune
Mientras observo a Xia buscar entre los libros y a Rayne mirarla de reojo, mi mente vuelve a Lowell. Extraño su presencia, su calma en medio del caos, y desearía que estuviera aquí, ayudándome a aclarar todos estos sentimientos confusos y este ambiente tan cargado de tensión.
—"¿Estás bien?"—pregunta Xia sin apartar la mirada de los libros, aunque noto la preocupación en su voz.
Asiento, intentando enfocarme. —"Sí, solo... pensando en todo lo que nos espera."
Rayne resopla suavemente, su tono lleno de escepticismo. —"Si te soy sincero, todo esto suena como una broma macabra. Demonios, máscaras, leyendas... parece un mal sueño."
—"Desearía que lo fuera."— murmuro, sintiendo el peso de la situación de nuevo. —"Pero si algo he aprendido, es que ignorar lo que no entendemos solo empeora las cosas."
Xia se vuelve hacia mí, un libro en sus manos. —"Aquí hay algo sobre el obitsune. Parece ser una figura de leyendas oscuras, un ser ligado a la muerte y el renacimiento. Según el texto, el obitsune es una especie de espíritu vengador que, en algunas historias, toma la forma de un zorro para confundir y asustar a sus enemigos."
Rayne frunce el ceño, su tono aún más incrédulo. —"¿Un espíritu vengador? ¿Y eso qué tiene que ver con nosotros?"
—"No lo sé, pero si Kol cree que estos demonios buscan a uno, entonces quizás haya algo más profundo detrás de esto."— admito, mirando el libro con curiosidad. —"Tal vez, si entendemos mejor a qué se enfrentan, podemos averiguar por qué han aparecido aquí... y cómo enfrentarlos."
Xia asiente, su expresión decidida. —"Entonces, tenemos que aprender todo lo que podamos sobre el obitsune y esos demonios. Si nos preparamos, tal vez podamos hacer algo para protegernos."
Rayne suspira, aunque puedo ver una pequeña chispa de determinación en sus ojos. —"Bueno, al menos ya es un plan. Aunque no puedo prometer que todo esto tenga sentido para mí."
Sonrío ligeramente, agradecida de tener a personas dispuestas a ayudar, pese a las dificultades y los roces.
—"Lo importante es que nos mantengamos juntos. Esto será difícil, pero con cada paso, nos acercamos un poco más a la verdad."
—"Yo creo que deberíamos contar con más ayuda."— sugiere Xia.
—"¿Cómo quién? la pelirroja esa de antes no parece de fiar."— comenta Rayne con cierto rencor.
—"¿Ruby? claro que es de fiar, solo es desconfiada."— sonrío.
—"Prefiero que venga mi compañero de habitación."— Rayne me mira levantando una ceja.
—"¿Itsvan? pues que venga Kiara también."— Xia responde entusiasmada.
Rayne rueda los ojos, aunque una pequeña sonrisa se asoma en sus labios. —"Vaya equipo que formaríamos: un espíritu vengador, un montón de adolescentes con poderes, y... demonios de por medio. Podríamos hacer una película de esto."
Xia se ríe y le da un leve golpe en el brazo. —"Basta, Rayne. Estamos en esto juntos, y eso significa que cualquier ayuda es bienvenida."
Me cruzo de brazos, tratando de imaginar cómo sería trabajar con todos ellos, incluso con Ruby, quien siempre ha sido una figura enigmática y un tanto distante. Pero si algo me ha enseñado la Academia Nocturna, es que las apariencias engañan, y quizá Ruby sea más aliada de lo que parece.
—"Bien, entonces será un equipo... peculiar,"— digo con una sonrisa—, "pero efectivo."
Rayne suspira, aunque su mirada parece más relajada. —"Supongo que lo peculiar nunca ha sido un problema para vosotros."
Xia asiente y cierra el libro que sostenía. —"Entonces, ¿qué tal si empezamos a formar un plan? Necesitaremos toda la información sobre el obitsune y los demonios que podamos conseguir. Con un poco de suerte, podremos entender sus puntos débiles."
Rayne mira hacia la ventana, su tono algo sombrío. —"Espero que no estemos metiéndonos en algo que no podamos manejar."
—"Nosotros también somos poderosos, Rayne."— le aseguro, con la firmeza que siento en mi interior. —"Y juntos, somos aún más fuertes."
Las palabras cuelgan en el aire, llenando la habitación de una esperanza tenue. Es frágil, pero está ahí, y eso es suficiente para el momento.
—"Si, claro, pero tenemos entrenamiento de poderes."— gruñe Rayne.
—"Lo había olvidado."— Xia nos mira sorprendida.
—"Genial."— Rayne se cruza de brazos.
—"Id, yo buscaré algo sobre demonios."— sugiero.
—"¿Es que nunca vas a clase?"— Rayne me mira escéptico.
—"Claro que sí, pero no cuándo la academia está en peligro."— me encojo de hombros.
—"Que chica tan rara, no sé cómo apruebas."— murmura Rayne yéndose.
Xia simplemente se ríe mientras lo sigue, se despiden con la mano y se van de la biblioteca quedando todo en silencio.
Una vez que Xia y Rayne se van, me quedo en la biblioteca, rodeada de libros y de silencio. Abro uno de los volúmenes antiguos que hablan sobre entidades oscuras y espíritus vengadores, y mis pensamientos vuelven a Lowell. No importa cuánto intente concentrarme, su ausencia sigue pesando en mi corazón.
—"¿Extrañas a alguien?"—escucho una voz suave detrás de mí. Es Ruby, apoyada contra el marco de la puerta, con los brazos cruzados y una mirada calculadora en sus ojos.
—"¿Desde cuándo te importa lo que siento?"—le respondo, no con hostilidad, sino con un tono curioso.
Ella da un paso hacia adelante y me observa con detenimiento. —"No es que me importe, pero conozco esa expresión. Es la misma que veo en el espejo cuando pienso en Kol."
—"Ah."— Bajo la mirada, reconociendo que tal vez ambas compartimos más de lo que aparentamos. —"Sí, extraño a Lowell. Siento que todo esto sería más fácil si él estuviera aquí."
Ruby suelta una risa breve, aunque sin humor. —"Los chicos pueden ser una distracción... o una motivación." Se acerca a la mesa y toma uno de los libros. —"Escuché a Xia y a Rayne hablar sobre los demonios y sobre ese tal obitsune. ¿Crees que eso es realmente lo que está ocurriendo aquí?"
—"Kol parece convencido de que sí. Y si él lo dice, confío en que algo hay detrás de todo esto."
Ruby asiente y ojea el libro. —"De acuerdo. Supongamos que hay un espíritu vengador buscando algo... o a alguien. ¿Qué tiene eso que ver con la academia? ¿Por qué aquí y ahora?"
—"No lo sé, pero está claro que no es casualidad. Todo parece girar alrededor de este lugar, como si estuviera... conectado a algo más grande."
Ruby me mira con una chispa de interés. —"¿Y cómo piensas detenerlo?"
—"No tengo la respuesta todavía. Por eso estamos aquí, intentando encontrar algo útil."
Ella levanta una ceja y sonríe apenas. —"Nunca dejas de sorprenderme, Lyra. Hay una parte de ti que es más valiente de lo que aparentas."
—"Tú también, Ruby. Aunque nunca lo admitas."
Ambas sonreímos, aunque sea por un breve momento.
—"Yo solo admito que soy la chica más poderosa de esta academia y que sin mi habríais muerto todos."— se echa el pelo hacia atrás.
—"Claro que sí."— pongo los ojos en blanco.
—"Pero sabes, esto me deja pensando, el profesor Thorne fue poseído por un Banshee que quería destruir la academia por venganza, las brujas de sangre querían mi poder y matarme, Oliver nos engañó a todos para ser el villano de cuento, todos tuvieron sus motivos, pero estos demonios no sabemos nada de ellos, así que si tienen una razón para estar aquí te sugiero que estés atenta, porque rara vez van a por ti, pero eso puede cambiar, podrías ser la víctima perfecta, la débil e indefensa."— explica Ruby rodeándome cómo si fuese una presa.
—"Seguramente su motivo sea matar al obitsune, ¿no?"— la miro confusa.
—"No lo sé, no los conozco."— se encoge de hombros.
Ruby me observa un momento en silencio, sus ojos oscuros y misteriosos. Hay algo en su mirada que me incomoda, como si supiera más de lo que está dispuesta a admitir. Suelta un suspiro y vuelve a mirarme, aunque esta vez con un poco menos de esa dureza que usualmente la caracteriza.
—"Mira, Lyra, solo te digo esto porque no quiero tener que lidiar con tu cadáver."— dice con franqueza, cruzando los brazos—. "No te tomes a estos demonios a la ligera. Tienen motivos, y si no son claros, entonces es peor. Los verdaderos monstruos rara vez se muestran antes de dar el golpe."
—"Ya lo sé,"— respondo, intentando mantenerme firme, aunque sus palabras me hacen sentir un escalofrío. —"No soy tan ingenua como crees."
Ella se ríe suavemente, como si le resultara entretenido. —"Espero que no lo seas, en serio. La academia ya ha perdido a muchos… y dudo que estos demonios vengan a hacer una visita amistosa."
—"Tú que eres tan poderosa, ¿por qué no simplemente los enfrentas y ya?"— comento, tratando de desafiarla, pero también con un dejo de curiosidad genuina.
Ruby se queda en silencio por un momento, y noto un destello en sus ojos, como si una verdad incómoda estuviera a punto de salir. —"Porque a veces, la verdadera fuerza no está en ir directo a la pelea. Saber cuándo pelear y cuándo esperar es lo que define a un verdadero sobreviviente. Además, el que estos demonios busquen al obitsune y no a mí… me da ventaja."
—"¿Ventaja para qué?"
—"Para observar. Y entender."— Su tono se vuelve más serio, y su mirada, más calculadora—. "Las piezas se están moviendo, Lyra. Y hay algo en todo esto que no encaja. Si estos demonios están aquí, tal vez hay algo más escondido. Tal vez hay otro enemigo en las sombras."
La observo, sintiendo una mezcla de desconfianza y respeto. Tal vez Ruby es más parecida a mí de lo que quiero admitir, aunque su actitud distante y arrogante haga que sea difícil acercarse a ella.
—"Entonces... ¿me estás diciendo que debo esperar, observar?"— pregunto, tratando de entender su punto.
Ella asiente, aunque con una sonrisa que apenas es visible. —"Exacto. Y mientras observas, mantente preparada. Porque cuando estos demonios finalmente muestren sus cartas, tendrás que estar lista para actuar. Ya sea como la protagonista de esta historia… o como la heroína caída."
Asiento lentamente, procesando sus palabras. Ruby me mira una última vez antes de girarse hacia la puerta. Antes de salir, se detiene y me lanza una última advertencia.
—"Lyra… recuerda, en esta academia, todos ocultan algo. Incluso aquellos que parecen tus amigos. No te fíes completamente de nadie, ni siquiera de los que crees conocer."
Y con eso, desaparece por el pasillo, dejándome sola en la biblioteca, rodeada de secretos y pensamientos inquietantes.
Recibo una llamada, al mirar la pantalla observo un nombre que hacía tiempo no me llamaba, sonrío antes de responder.
—"Te echaba de menos."— susurro.
—"Si, lo que tú digas, escucha, sobre lo que me pediste, antes de que vayas a la lucha fingiendo que eres Kevin yendo sin pensar a una batalla, define obitsune."— habla la persona al otro lado.
—"¿Que información?"— pregunto confusa.
—"No me seas ridícula, me pediste información sobre demonios con máscara, así que antes de darte esa información necesito que definas obitsune."— vuelve a sugerir.
—"¿Natalia a qué estás jugando?"— mi confusión aumenta.
—"Lyra, esto no es un juego,"— responde Natalia con tono firme desde el otro lado de la línea. —"Si quieres saber qué estamos enfrentando, necesitas entender lo que buscas. El obitsune no es solo una leyenda, no es un simple espíritu vengador. Es... algo mucho más complicado. La historia que tenemos es una versión distorsionada, y me temo que esa distorsión está puesta allí por una razón."
Me muerdo el labio, sintiendo un nudo en el estómago. —"Entonces, ¿qué es realmente el obitsune?"
Natalia hace una pausa, y puedo escuchar su respiración al otro lado de la línea. —"Según las leyendas originales, el obitsune no solo es un espíritu de venganza. Es también un guardián... o un catalizador. Donde aparece, hay caos y destrucción, pero también renacimiento. Es una fuerza dual, imposible de controlar por completo. A veces se manifiesta como un zorro, pero otras veces... se adapta a las circunstancias. Se oculta, observa y, cuando es necesario, destruye para limpiar el camino."
—"¿Estás diciendo que está aquí para equilibrar algo?"— pregunto, intentando conectar las piezas.
—"Exactamente."— suspira Natalia—. "Pero, Lyra, este equilibrio no siempre significa que sea a nuestro favor. Si los demonios están buscando al obitsune, puede que estén tratando de despertar ese caos, de traer una especie de cataclismo a la academia. O, en el peor de los casos... de controlar su poder."
Las palabras de Natalia resuenan en mi mente, y siento el peso de lo que nos espera. —"Entonces, ¿qué debemos hacer?"
—"No tengo todas las respuestas. Pero mi consejo es que te mantengas alerta y no subestimes a esos demonios. El obitsune se convierte en lo que necesita ser para enfrentar sus circunstancias, y no quiero imaginar lo que eso significa para nosotros si lo despiertan o si intentan manipularlo."
—"Gracias, Natalia,"— susurro, asimilando sus palabras. —"Sabes, he pensado en lo que significa esta batalla y cómo va más allá de simplemente sobrevivir. Es como si todos aquí fuéramos piezas de un juego más grande."
Natalia ríe suavemente, aunque su tono sigue siendo serio. —"Siempre lo hemos sido, Lyra. Pero hay algo que debes recordar: aunque seas la protagonista, no eres la única con un rol importante. Cada uno de nosotros tiene un propósito. Algunos luchan por amor, otros por poder, y algunos... solo por sobrevivir."
—"Lo entiendo,"— respondo, recordando a todos los que han caído y los que aún están aquí, luchando por encontrar sentido en medio del caos. —"No me lo tomaré a la ligera. Prometo estar preparada."
Natalia guarda silencio un momento antes de responder. —"Cuídate, Lyra. No sabes cuántos secretos se esconden aún en la academia, y algunos de esos secretos... pueden cambiarlo todo."
La llamada termina, y me quedo en la biblioteca, sintiendo la gravedad de todo lo que nos espera. Una sensación de inquietud se instala en mí, y aunque las sombras me rodeen, me prometo a mí misma que seguiré buscando respuestas, sin importar el costo.
Me voy al campo de entrenamiento ya que tengo más información que antes, me siento sobre las gradas, para ver una gran llamarada de fuego.
—"¡Vamos Xia!"— anima Rayne.
Miro a la izquierda para ver a Itsvan rojo cómo un tomate, Kiara aguantando la risa y Rayne animando a Xia, la cuál está practicando con sus poderes delante de su clase.
Xia lanza una gran bola de fuego hacia una diana, para luego soplar y destar una llamarada que termina en una gran explosión de fuego.
Rayne aplaude emocionado, Kiara echa a reír, mientras Itsvan evita miradas, no puedo evitar sonreír, puede que sean nuevos en la academia pero esos cuatro serán grandes amigos y estar unidos en esta nueva aventura les hará bien, me recuerdan a mi, cuándo llegué estaba perdida hasta que Lowell, Natalia y Claire me ofrecieron sus conocimientos y amistad, aunque con Ruby y Kevin fue diferente, pero fuimos amigos en su momento o al menos aliados.
—"¿Qué está pasando?"— murmura una profesora.
Esa pregunta me saca de mis pensamientos, miro alrededor notando una niebla de color negro, frunzo el ceño, pero antes de que pueda hacer nada, veo una luz tenue como una luciérnaga acercándose.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro