Capítulo 22: La calma
Trato de liberarme del hielo que el clon malvado de Lowell usó contra mi, Natalia usa cuchillas de viento cortando el hielo, caigo al suelo exhausta, miro alrededor viendo a Ruby, Kevin y Lowell inconscientes en el suelo.
—"Estarán bien."— murmura Natalia.
—"Esto se parece a algo que haría algún villano con un poder increíble."— le digo, respirando con dificultad mientras me esfuerzo por incorporarme.
—"O cómo cuando Kevin mató a una telepata en el campeonato sobrenatural."— añade Natalia.
—"Si, estuve ahí, no presente, sino en las gradas."— digo tratando de reir sin lograrlo.
—"Voy a intentar despertarlos."— dice ella, avanzando hacia Ruby.
Natalia se agacha junto a Ruby, pero en ese momento, escuchamos un ruido a nuestras espaldas. Nos damos la vuelta, y veo una sombra familiar que se aproxima.
—"¡Kevin!"— grito, intentando arrastrarme hacia él. "Tienes que levantarte, no podemos dejar que ese clon tenga la última palabra."
Kevin parpadea, su mirada confusa mientras intenta recomponerse, como si estuviera regresando de un profundo trance.
—"Insecto..."— murmura, tratando de entender lo que ha pasado. "Ese clon está muerto, ahora apártate."
Kevin se incorpora lentamente, volviendo a su carácter malhumorado, observa que tiene el torso desnudo, pero parece darle igual, se cruza de brazos y me mira con frustración.
—"Al menos estás vivo."— murmura Oliver.
—"No iba a morir."— pone los ojos en blanco.
—"Me acabo de despertar y ya hay gente discutiendo, ¿dónde está el chisme?"— pregunta Ruby levantándose.
—"Por favor, silencio."— gruñe Lowell desde el suelo.
—"Pero que rápido."— digo sorprendida.
—"Tienen alta resistencia al dolor parece."— explica Natalia sin ninguna preocupación.
—"Sólo yo, vosotros sois débiles."— Kevin se va para apoyarse contra un árbol roto.
—"Claro, porque eres el único y detergente."— se queja Ruby sarcásticamente.
—"¿Es Fairy?"— pregunta Oliver.
Natalia y yo nos miramos echándonos a reír, Lowell nos mira sin comprender nada, el rostro de Kevin se vuelve más irritable, mientras Ruby sonríe ante la ingenuidad de Oliver.
—"Fairy, ¿qué es eso?"— pregunta Lowell, frunciendo el ceño mientras se esfuerza por levantarse.
—"Oh, solo es una marca de lavaplatos."— responde Ruby, con una sonrisa traviesa. "Kevin tienes un poco de competencia, ¿no crees?"
—"No me compares con eso."— se queja Kevin, cruzando los brazos con desdén. "Yo soy mejor que un lavaplatos."
—"Sí, pero una imitación puede ser igual de efectiva."— añade Natalia, ayudando a Ruby a levantarse del suelo.
—"A veces, lo único que necesitan es un poco de suavizante."— suelta Ruby, guiñando un ojo.
—"Ruby..."— regaña Lowell sin un ápice de maldad, sino con una sonrisa en el rostro.
—"Alguien tiene que aliviar la tensión."— replica Ruby, encogiéndose de hombros. "Además, es mejor reírse que llorar, ¿no?"
—"Ahí lleva razón."— me encojo de hombros.
—"Aunque no sé si esto se puede considerar un buen momento para reír."— dice Natalia, mirando a su alrededor, donde aún hay restos de la batalla.
—"Siempre hay espacio para un poco de humor, incluso en las peores circunstancias."— responde Ruby, estirándose con un gesto exagerado, como si se estuviera preparando para un espectáculo.
—"El humor es nuestra mejor arma."— agrega Lowell, intentando levantarse por completo, aunque todavía se ve un poco mareado.
—"¿Y qué tal si usamos esa arma para encontrar a ese clon?"— sugiero, tratando de tomar el control de la situación. "No podemos quedarnos aquí bromeando si sigue suelto."
—"Tienes razón."— dice Kevin, recobrando su seriedad. "Esa cosa no se quedará quieta. Necesitamos averiguar a dónde ha ido."
—"Tal vez esté buscando más amigos."— sugiere Natalia, su expresión ahora más grave. "Si pudo replicarnos a nosotros, ¿quién más podría haber creado?"
—"No hay manera de que lo sepamos."— dice Kevin, entrecerrando los ojos. "Lo único que sé es que no me gusta esta situación. Y no quiero que se lleve a nadie más."
—"Entonces, vamos a buscarlo."— digo, firme.
—"Genial, una excursión de retrasados."— comenta Ruby, concentrándose por un momento.
—"Que madura."— dice Natalia poniendo los ojos en blanco.
—"Más que tú seguro."— responde Ruby.
—"Deberíamos olvidarnos de esos dobles malvados, ya los hemos matado, ¿no? lo importante es ese libro de los condenados."— Oliver nos devuelve a la realidad.
—"Mucho interés tienes tú de repente."— Ruby se cruza de brazos.
—"Hemos venido para eso, Kevin es quién mencionó ese libro, y si alguien lo está usando para manipular a muertos y vivos no sólo nosotros estamos en peligro sino la academia entera."— explica Oliver con seriedad.
—"Pero la academia ya estaba en peligro, alumnos han desaparecido, Claire desapareció y volvió sin poderes."— interviene Lowell.
—"¿Entonces vamos a por ese libro o no?"— pregunto.
—"Que obsesión, creo que ese libro no existe y solo nos estamos volviendo locos."— Natalia nos mira frunciendo el ceño.
—"Por desgracia existe."— comenta Kevin frustrado.
—"¿Si, no me digas?"— responde Ruby con su sarcasmo.
—"¡Exacto!"— exclama Kevin, exasperado. "Ese libro no es una leyenda urbana. He visto lo que puede hacer. Es peligroso y tenemos que encontrarlo antes de que caiga en las manos equivocadas."
—"Pero, ¿dónde empezamos a buscar?"— pregunta Lowell, mirando a todos con un semblante de preocupación. "No sabemos siquiera si sigue en la academia o si ya se lo han llevado."
—"Podríamos interrogar a algunos de los que están más cerca de la situación."— sugiere Natalia. "Tal vez haya alguien que sepa más sobre el libro o haya escuchado rumores."
—"Gran idea, Sherlock."— dice Ruby, sonriendo. "¿Y qué tal si preguntamos a los profesores? Ellos suelen tener información sobre lo que ocurre en la academia."
—"Tu solo quieres volver a la academia para hablar con Kol."— pongo los ojos en blanco.
—"Pues claro."— se encoge de hombros.
—"Pero, ¿qué les decimos? 'Hola, somos estudiantes que acabamos de pelear con dopplegängers y ahora queremos saber sobre un libro que controla a los muertos'?"— responde Kevin, frunciendo el ceño. "No creo que se tomen eso muy en serio."
—"Podemos ser sutiles."— dice Natalia, levantando una ceja. "Hacemos preguntas indirectas. Algo así como, '¿habéis notado algo extraño últimamente?'"
—"Perfecto."— asiento. "Y mientras tanto, podemos usar nuestras habilidades para investigar por nuestra cuenta. Tal vez encontremos pistas en la biblioteca o en el sótano de la academia."
—"La biblioteca podría ser un buen lugar para empezar."— sugiere Lowell. "Siempre hay libros antiguos que podrían mencionar ese tipo de cosas."
—"Entonces vamos."— dice Ruby, finalmente poniéndose de pie y sacudiéndose el polvo. "No perdamos más tiempo aquí."
—"Espera un momento."— interrumpe Oliver, mirando a todos con una expresión seria. "No olvidemos que quien controla a los dopplegängers podría intentar buscar el libro también. Necesitamos tener cuidado. No queremos que nos atrape desprevenidos de nuevo."
—"Tienes razón."— asiente Lowell. "Deberíamos ir en grupos. Así tendremos más ojos y oídos para detectar cualquier problema."
—"¡Oh, genial! Ahora estamos organizando grupos."— dice Ruby, con un tono sarcástico. "¿Qué tal si nos hacemos unos brazaletes a juego mientras estamos en eso?"
—"¿Es en serio?"— responde Natalia, rodando los ojos.
—"No haría eso ni aunque me paguen."— defiende la pelirroja frunciendo el ceño.
—"Pero en fin, centraos, inútiles.¿Quién se queda en el campamento y quién va a la biblioteca?" — dice Kevin, agachando la cabeza con una mueca.
—"Yo puedo quedarme aquí y asegurarme de que no pasa nada raro."— ofrece Lowell. "Si algo pasa os aviso por el móvil."
—"Perfecto. Entonces, Kevin, Ruby y yo vamos a la biblioteca.— sugiero.
—"Yo me quedo con Lowell y Oliver, entre tres será mejor notar si hay algo extraño en el bosque."— responde Natalia, con una sonrisa irónica.
—"Bien, es un plan."— dice Ruby, comenzando a caminar. "No hay tiempo que perder."
Mientras nos alejamos, miro hacia atrás y veo a Lowell apoyado contra el árbol, su mirada fija en el horizonte. Espero que esté bien y que la próxima vez que nos veamos, podamos reírnos de todo esto. Pero por ahora, nuestra prioridad es encontrar ese libro y deshacernos de cualquier amenaza que nos aceche.
Caminamos por el bosque para volver a la academia, Kevin camina el primero, Ruby con su seguridad y autoconfianza, miro el torso desnudo de Kevin, el chico irritado parece no estar incómodo, así que no digo nada, miro a Ruby la cuál está jugando con su pelo.
—"¿A dónde creéis que vais?"— Kol aparece en la entrada cruzándose de brazos.
—"Ah, hola."— saluda Ruby.
—"Nada de hola, he oído esos estruendos, explosiones y de más."— frunce el ceño.
—"No es asunto tuyo."— gruñe Kevin.
—"Claro que lo es, os habéis saltado el toque de queda, los seis."— Kol nos mira con sospecha.
—"¿Pero cómo?"— digo sorprendida.
—"Pero que tonta, es un vampiro original, por enésima vez, puede oír cosas aunque estén a kilómetros."— Ruby pone los ojos en blanco.
—"Me sigue sorprendiendo eso es todo."— digo algo avergonzada.
—"Te sugiero que te apartes de nuestro camino."— ordena Kevin.
—"De eso nada, os vais los tres al despacho del director."— Kol nos amenaza.
—"¿Yo también?"— se hace la sorprendida Ruby.
—"Obviamente no, tú te vienes conmigo."— ordena.
Ruby sonríe tranquilamente, nos mira de forma burlona y se va caminando con Kol, Kevin pone los ojos en blanco, camina irritado hacia el despacho de Armand, yo lo sigo sin decir nada.
En el despacho del director, Kevin se sienta de manera desafiante en la silla frente a Armand, mientras yo me quedo de pie, intentando no mostrar mi nerviosismo.
—"¿Tenéis alguna idea de lo que acabáis de hacer?"— pregunta Armand, su voz grave llena de preocupación.
—"Claro que sí, hemos desobedecido al toque de queda absurdo que impusiste."— responde Kevin, cruzando los brazos con desdén. "Pero si te importa, tenemos un plan."
—"¿Un plan? ¿Acaso es el mismo que tenías antes de salir sin permiso?"— Armand lo mira con seriedad. "No olvides que hay reglas aquí por una razón."
—"¿Reglas?"— interrumpe Kevin, su tono sarcástico. "¿Y qué tal si esas reglas están en juego ahora mismo? ¿No deberías estar más preocupado por la seguridad de la academia?"
Yo miro a Kevin, sintiendo la tensión en el aire, mientras Armand lo evalúa.
—"¿Sabes lo que significa eso, verdad? Hay fuerzas que intentan jugar con nosotros, y ahora un libro que puede manipular vidas y muertes está en juego."— dice Armand, sin apartar la vista de Kevin.
—"Exacto. Así que si de verdad quieres ayudarnos, deberías dejarnos actuar."— insisto, sintiendo que las palabras tienen más peso al salir de mi boca.
—"¿Ayudaros a arruinar todo? ¿A salir de la academia en medio de la noche a buscar un libro peligroso?"— dice Armand, su voz firme, pero yo puedo ver un destello de comprensión en su mirada.
—"No estamos buscando problemas, Armand. Solo queremos proteger a nuestros amigos y a la academia."— digo con determinación. "Si Oliver tiene razón, esto puede ser mucho más grande de lo que pensamos."
Armand suspira, mirándonos en silencio por un momento. Luego, su expresión se suaviza.
—"Está bien. Pero si voy a permitir esto, quiero que estéis bajo vigilancia. No me gustaría que se repitiera lo que acaba de pasar."— ordena, su tono firme.
—"¿Vigilancia? Eso suena como una condena."— responde Kevin, pero su tono ya no es tan desafiante. "¿Qué quieres que hagamos? ¿Un informe diario sobre nuestras aventuras?"
—"Casi. Quiero que mantengáis contacto constante. No quiero perderos de vista."— dice Armand, su mirada aguda. "Y si os encontráis con algo... peligroso, quiero que lo informéis."
—"Sí, sí, como un viaje de campo escolar."— murmura Kevin, aunque su sarcasmo ya no suena tan fuerte.
En ese momento, Ruby entra en la habitación con Kol, sonriendo como si todo esto fuera una broma.
—"¿No nos invitáis a la fiesta?"— dice Ruby, cruzándose de brazos con una expresión desafiante.
—"Esto no es una fiesta, Ruby."— dice Armand, pero hay un destello de exasperación en su voz. "Estamos hablando de una situación seria."
—"Siempre son serias, ¿no?"— Ruby responde, alzando una ceja. "Pero está bien, ¿qué hay de nosotros?"
—"Tú y Kol estaréis con ellos. Si vais a salir a buscar ese libro, es mejor que haya un par de ojos adicionales."— dice Armand, mirándonos a todos. "Pero también vosotros debéis seguir las reglas. No quiero que se repita el desmadre de antes."
—"¡Qué emocionante! Una excursión de retrasados."— exclama Ruby con sarcasmo.
—"¿Así que esto se convierte en una excursión de verano?"— pregunta Kol, sonando un poco escéptico. "No me gustaría que acabaráis atrapados otra vez."
—"No te preocupes por nosotros."— le aseguro, sintiéndome un poco más segura con ellos a nuestro lado. "Estamos listos para cualquier cosa."
—"Listos o no, tenemos que hacerlo rápido."— dice Kevin, volviendo a la seriedad. "No sabemos cuánto tiempo tenemos antes de que esa persona vuelva."
—"Entonces, ¿cuál es el siguiente paso?"— pregunta Ruby, su tono ahora más centrado.
—"Primero, debemos dividirnos y buscar información. La biblioteca es un buen lugar para comenzar."— sugiero, mirando a Kevin.
—"De acuerdo, pero manteneos alerta. No puedo permitir que seáis sorprendidos otra vez."— dice Kol, sus ojos observando la habitación como si pudiera ver más allá de las paredes.
Mientras nos preparamos para salir, siento una mezcla de adrenalina y ansiedad. Sabemos que nos enfrentamos a algo mucho más grande que nosotros, pero juntos, tal vez tengamos una oportunidad.
Llegamos a la biblioteca, Kevin se va por su cuenta, Ruby con su tranquilidad leyendo los títulos por encima, Kol se cruza de brazos mirándonos desde la puerta.
—"He encontrado algo."— anuncia Ruby.
—"¿El qué?"— pregunta Kol levantando una ceja.
Un estruendo sacude la biblioteca, un pulpo gigante de un solo ojo con símbolos alrededor de su cuerpo lanza las estanterías cómo si nada.
—"Eso."— señala Ruby.
—"Runas."— murmura Kevin.
—"Está claro que es brujería."— comenta Ruby saltando y esquivando libros.
—"¿Eso es posible?"— pregunto.
—"Todo es posible."— me responde Kol.
Uno de los tentáculos envuelve a Ruby, mientras ella grita cómo una loca, Kol sonríe pareciéndole la situación bastante divertida.
—"Genial, tiene a la dramática."— Kevin pone los ojos en blanco.
Kevin usa sus explosiones para impulsarse hacia el pulpo de un solo ojo, lanzándole un par de explosiones, el pulpo gigante le da con uno de sus tentáculos deshaciéndose de Kevin cómo si fuera un mosquito molesto.
—"Oye, chico gruñón, toma."— Kol le lanza una camisa.
A buenas horas.
Pienso para mi misma, Kevin llevaba demasiado rato sin camisa, era vergonzoso, Kevin se pone la camisa a regañadientes, Kol por su parte usa su velocidad vampírica para dar vueltas sobre el pulpo, una vez está cerca del tentáculo dónde retiene a Ruby,el vampiro suelta un puñetazo.
—"¡Bien!"— grito orgullosa.
Ruby cae de culo al suelo, el pulpo envuelve con uno de sus tentáculos a Kol, para después envolver a Kevin con los tentáculos.
—"Ruby, haz algo."— exijo.
—"Ya voy, una reina nunca deja que se le caiga la corona."— se echa el pelo hacia atrás.
Abre las manos liberando una explosión hacia el pulpo, el cuál solo retrocede, ella camina lanzando más explosiones hasta que el pulpo estalla en mil pedazos liberando a Kevin y Kol, un trozo de tentáculo me cae encima.
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