Tras enseñarle la Academia Nocturna a Oliver ambos caminamos juntos, el muchacho sigue mirando a su alrededor con bastante curiosidad. Mientras caminamos varios estudiantes se mueven por la academia sin prisa o hablando con sus amigos, pero noto una sensación familiar, noto indiferencia, me doy la vuelta pero no veo nada ni nadie.

—"¿Ruby?"— pregunto para mí misma.

—"¿Qué?"— Oliver levanta una ceja.

—"Nada, me ha parecido notar algo."— sigo mirando el pasillo—. "Habrán sido estudiantes caminando."

—"O tú imaginación."— Oliver responde descartando mi idea.

El chico se pone en marcha, yo voy a su lado pensando en lo que ha sucedido, se lo tengo que comunicar a los demás en la hora de la cafetería.

—"No hay nada que contar a los demás."— me saca de mis pensamientos cómo si estuviera leyendo mi mente—. "No has notado nada, es tu mente."

—"¿Cómo sabes lo que estaba pensando?"— frunzo el ceño.

—"Tu cara lo dice todo."— pone los ojos en blanco.

—"Justo a quién estaba buscando."— una voz ronca nos sobresalta—. "Oliver, Lyra, a mi despacho ahora mismo."

Sin decir nada sigo al director Armand junto a Oliver, el chico parece tranquilo, pero yo no lo estoy, ¿y si nos hemos metido en un lío? ¿querrá regañarnos? ¿he hecho algo que merezca un castigo?

—"Quería comentaros algo a vosotros dos, ya que sois por así decirlo, nuevos."— carraspea el director—. "Si, ya sé que Lyra lleva un año en la academia, pero ella entró antes que tú, Oliver, así que mi tarea para vosotros dos es que instruyais a los nuevos estudiantes que seguirán viniendo."

—"¿Volverá a haber esa competencia que hubo el año pasado?"— pregunto preocupada.

—"Sí, pero este año tus amigos y tú no participáis, tenéis otra especie de competencia."— explica el director.

—"¿Yo también?"— Oliver pregunta claramente no queriendo participar.

—"Por supuesto, vais a participar en los juegos de la amistad."— comenta el director—. "Vais a competir contra la Academia St. Vladimir."

—"¿Qué? ¿los juegos de la amistad no es para unir a las personas?"— pregunto confusa.

—"Estos juegos llevan años sin ser así, desde que esa academia se cree superior sólo por estar llena de vampiros, y desde que Ruby asesinó a una alumna en la competición del año pasado quieren revancha."— suspira frotándose el puente de la nariz—. "Así que ahora quieren venganza, vosotros dos tenéis que encontrar al equipo perfecto para esto."

—"Ya lo tenemos."— sonrío mirando a Oliver.

—"¿Ah sí?"— el chico me mira con clara indiferencia.

—"Pues eso es todo lo que quería de vosotros."— sonríe despidiéndonos.

Salimos del despacho del director Armand, noto esa sensación de indiferencia y molestia, miro a todos lados sin ver nada, Oliver me mira con escepticismo.

—"¿Que ha sido eso?"— levanta una ceja —. "¿Desde cuándo tenemos un equipo?"

—"Conozco a las personas adecuadas para los juegos de la amistad."— sonrío pensando en ellos.

—"¿Y quiénes son esas personas adecuadas?"—pregunta Oliver, manteniendo su expresión de escepticismo.

—"Mis amigos."—respondo sin dudar—."Lowell, Natalia, Claire y Kevin. Ellos han estado conmigo desde el principio. Todos tenemos habilidades diferentes que nos complementan."

Oliver suelta una risa breve y sarcástica.

—"¿Y crees que eso será suficiente para enfrentarnos a la Academia St. Vladimir? ¿Tú misma dijiste que ellos se creen superiores. No nos van a tomar a la ligera."

—"No importa lo que piensen."—digo, con más firmeza de la que realmente siento—."Nosotros sabemos lo que podemos hacer. Además, no estamos buscando una pelea, se supone que son los juegos de la amistad."

Oliver me mira por un momento, evaluándome, luego suelta un suspiro.

—"Bien."—dice finalmente—."Supongo que no hay otra opción. Pero te advierto, no me gusta perder."

—"A mí tampoco."—respondo, encontrando un poco de confianza en sus palabras—."De hecho, creo que nadie en nuestro equipo se toma muy bien las derrotas."

Oliver se queda en silencio, asintiendo ligeramente. Mientras caminamos de regreso por los pasillos, noto que sus ojos todavía examinan cada rincón de la academia. La sensación de indiferencia y molestia sigue ahí, persistente como una sombra.

—"¿Tú también lo sientes, verdad?"—pregunto de repente, rompiendo el silencio. La sensación de ser observada, esa indiferencia casi tangible. Algo no está bien.

Oliver se detiene y me mira de reojo.

—"No estoy seguro de lo que siento."—admite, lo cual es raro viniendo de él—."Pero sé que hay algo extraño aquí. Es como si hubiera algo... o alguien... que no pertenece."

—"Exacto."—susurro, sintiendo un escalofrío recorrer mi espalda. La última vez que sentí algo así, Ruby estaba cerca. Pero Ruby ya no está, o al menos, eso quiero creer.

Nos quedamos en silencio por un momento, perdidos en nuestros pensamientos. La idea de que algo más grande y peligroso se esté gestando en las sombras empieza a asentar en mi mente. Los juegos de la amistad podrían ser más de lo que aparentan, y con Oliver a mi lado, tendré que estar preparada para cualquier cosa.

—"Vamos a la cafetería."—digo finalmente—."Los demás deben estar esperando."

Oliver asiente y caminamos juntos, aunque en mi mente, la sensación de inquietud no se disipa. Sea lo que sea lo que haya aquí, sé que no estamos solos.

Entramos a la cafetería y vemos a algunos estudiantes yéndose, otros comiendo, pero los que más destacan son mis amigos, Natalia está riéndose, Claire más roja que un tomate y Lowell sonriendo.

—"¿Que sabéis sobre los juegos de la amistad?"— pregunto al acercarme.

—"¿Mhm?"— Lowell me mira sorprendido.

—"El director nos ha pedido buscar un equipo para los juegos de la amistad."— explica Oliver con poco entusiasmo.

—"Los juegos de la amistad son cómo una competición, de todo menos amistosa, antes servía para unir academias cómo la nuestra, pero desde hace años que eso ya no es así."— Claire respira para hablar nuevamente—. "Ahora es una competición dónde la primera prueba es sobre todo lo que hemos aprendido académicamente, la segunda es una carrera de motocross, patinaje y tiro con arco, la última ronda siempre es aleatoria."

—"Suena más a un campo de entrenamiento militar que a un evento amistoso,"—murmura Oliver, cruzando los brazos con una expresión pensativa—."¿Por qué lo llaman juegos de la amistad si es todo lo contrario?"

—"Porque originalmente lo era,"—responde Lowell, encogiéndose de hombros—."Hasta que la Academia St. Vladimir decidió convertirlo en una especie de competición de poder y habilidad."

—"La verdad es que nunca entendí el cambio,"—añade Natalia, jugueteando con su taza de café—."¿Por qué de repente se volvió tan... agresivo?"

—"Desde que Ruby..."—comienza Claire, pero se interrumpe al ver que Oliver frunce el ceño al escuchar ese nombre—."Bueno, desde que ciertos incidentes comenzaron a ocurrir, las academias se volvieron más competitivas."

—"Así que, en resumen,"—intervengo para cambiar de tema rápidamente—."Necesitamos prepararnos para una competencia intensa, y necesitamos a los mejores para enfrentarnos a St. Vladimir. Confío en ustedes."

—"Entonces, ¿qué sigue?"—pregunta Lowell, inclinándose hacia adelante—."¿Empezamos a entrenar ahora o qué?"

—"Primero debemos conocer a nuestros rivales,"—sugiere Claire—."Saber quiénes son, sus puntos fuertes y débiles. No podemos subestimarlos."

—"Buena idea,"—asiento—."Oliver y yo podemos encargarnos de reunir información sobre St. Vladimir. Podemos preguntar a algunos contactos y ver si podemos descubrir algo."

—"Yo puedo encargarme de preparar el equipo,"—dice Lowell, alzando una mano—."Nos aseguraremos de que todos estemos en la mejor forma posible para las pruebas físicas."

—"Natalia y yo podemos encargarnos de la parte académica,"—agrega Claire, mirando a su amiga—."Revisaremos todo lo que pueda venir en esa prueba, asegurándonos de que no haya sorpresas."

—"Me parece un buen plan,"—responde Oliver finalmente, relajando un poco su postura. Mira alrededor de la mesa, evaluándonos a todos—."Pero necesitamos tener claro que esto no se trata solo de ganar. Hay algo más en juego aquí."

—"¿Algo más?"—pregunta Natalia, frunciendo el ceño—."¿A qué te refieres?"

—"Hay una sensación,"—digo, buscando las palabras adecuadas—."Algo que está más allá de los juegos. Algo... oscuro. Oliver y yo lo hemos sentido. Puede que Ruby ya no esté aquí, pero esa sensación de indiferencia y molestia persiste."

Mis amigos intercambian miradas, la atmósfera se vuelve más seria.

—"¿Crees que Ruby tiene algo que ver con esto?"—pregunta Claire en voz baja.

—"No lo sé,"—respondo sinceramente—."Pero no podemos descartar nada. Hay que estar atentos a cualquier cosa fuera de lo normal."

—"De acuerdo,"—dice Lowell, golpeando la mesa con su puño suavemente—."Nos mantendremos vigilantes y preparados. No dejaremos que nos tomen por sorpresa."

—"Eso es todo lo que podemos hacer por ahora,"—añade Oliver, mirando a cada uno de nosotros—."Mantener los ojos abiertos y seguir adelante con el plan. No importa lo que venga, lo enfrentaremos juntos."

Un silencio lleno de determinación se apodera de la mesa. Aunque la preocupación sigue en el aire, saber que estamos todos en esto juntos trae algo de consuelo. Sea lo que sea lo que esté sucediendo, estamos listos para enfrentarlo. Los juegos de la amistad no solo serán una competencia, serán una prueba de nuestra unidad y fortaleza.

—"Entonces, ¿qué tal si comemos algo antes de empezar a trabajar?"—propone Natalia, tratando de aliviar la tensión.

Todos asentimos y comenzamos a hablar de otras cosas, pero en el fondo de nuestras mentes, sabemos que este año los juegos de la amistad no serán como los demás.

—"Siento arruinar el momento, chicos."— habla tímidamente Claire—. "Pero para los juegos de la amistad quedan meses, estamos pensando en caliente, no en frío."

—"Cierto, pero a veces hay que estar preparados para todo."— sonríe Lowell.

—"Además, no van a juntarlo con la competición anual entre academias, eso es en Abril y estamos en Septiembre."— explica Natalia.

—"¿Y cómo vamos a meter a Kevin en los juegos de la amistad?"— pregunto con confusión.

—"Fácil, solo hay que darle el empujón en la dirección adecuada."— Lowell me guiña el ojo.

—"O sea, vas a mentirle y decirle que hay que ganar a toda costa."— pongo los ojos en blanco.

—"¿Que puedo decir? Kevin es competitivo por naturaleza."— se encoge de hombros.

—"Si, Kevin es explosivo, así que ganaremos teniéndolo en el equipo."— se ríe incómoda Claire.

—"Y no es por sonar maleducado ni nada, pero no sabemos el poder de Oliver o si va a sernos útil en los juegos."— Lowell mira fijamente a Oliver.

—"Mi poder es control mental."— responde Oliver sin sonar demasiado emocionado.

—"Vaya, es útil."— asiente Natalia.

—"Ojalá estuviese aquí Ruby."— murmuro.

—"Te lo juro, su complejo de superioridad e indiferencia hacían que todo parezca tan fácil, odio que se haya muerto."— Natalia frunce el ceño—. "Pero claro cómo era Leo tenía que hacerlo todo antes que los demás, incluso morir."

—"Oliver y yo vamos a buscar a Kevin, tenemos que contarle lo de los juegos de la amistad."— miro a Oliver sonriendo.

—"¿Quién yo?"— Oliver me mira escéptico.

—"Eso, ¿por qué el?"— Lowell me mira con celos.

—"Que divertido."— sonríe Natalia.

—"Porque aún no le he enseñado los alrededores y tengo que enseñarle la academia."— comento.

—"Eso puedo hacerlo todo, ya le has enseñado suficiente, Lyra."— Lowell frunce el ceño.

—"Vaya nunca lo había visto así."— Claire lo mira sorprendida.

—"Algo me dice que ya no vais a ser la pareja del año."— Natalia sonríe.

—"Cuando te calmes hablamos, Oliver, vámonos."— ordeno yéndome.

—"Si, claro."— murmura Oliver.

Nunca he visto a Lowell furioso, siempre está calmado, siendo quién calma las aguas, él no es así, miro a Oliver que parece extrañamente tranquilo, pero no importa, no puedo sacarme el extraño comportamiento de Lowell.