Capítulo 19: El libro de los condenados
La tensión entre las tres es palpable, con cada comentario sarcástico de Ruby y la frustración de Natalia intensificando el ambiente. Sin embargo, más allá de las palabras duras, todas sabemos que el caos que enfrentamos requiere una unidad que no puede permitirse romper.
Natalia apretó los puños, la rabia burbujeando en su voz mientras hablaba—"¿Y qué piensas hacer entonces, Ruby? ¿Simplemente mirar desde la sombra mientras todo se desmorona, como siempre?"
Ruby le devolvió la mirada, con una calma peligrosa en su expresión—"Voy a hacer lo que siempre he hecho, Natalia. Asegurarme de que cuando todo se vaya al infierno, yo siga de pie. Si eso significa ayudaros, genial. Si no, también. Lo único que sé es que no voy a dejar que nadie me controle otra vez, y tú tampoco deberías."
—"Ruby, ya basta."— le advierto, intentando calmar la situación antes de que la discusión se vuelva física—. "Necesitamos pensar en lo que viene y cómo enfrentarlo. Si realmente crees que Claire fue controlada, entonces tenemos que descubrir quién lo hizo y por qué. Y para eso, necesitamos estar juntas, no peleándonos entre nosotras."
Ruby y Natalia se miraron por un largo segundo antes de que Ruby soltara un suspiro, visiblemente irritada pero rindiéndose—"De acuerdo, Lyra. Pero si todo esto sale mal, no me vengas a decir que no te lo advertí."
—"No va a salir mal, porque esta vez no vamos a dejar que nada nos sorprenda."— le aseguro, aunque en el fondo siento la incertidumbre de mis propias palabras. Aún así, sé que, si hay alguna esperanza de descubrir la verdad y traer algo de justicia por Claire, pasa por mantener a este grupo disfuncional unido.
—"¿Y cómo estás tan segura?"— Natalia me mira escéptica.
—"Porque estamos juntas, cómo el curso pasado, ¿no?"— miro a ambas.
—"Los porros no te sientan bien."— responde Ruby con el ceño fruncido.
—"¿No deberíamos avisar a los chicos?"— sugiere Natalia.
—"Solo a Lowell."— me pongo papel en la nariz aún sintiendo el dolor del puñetazo de Kevin.
—"Claro, porque es tu novio y no quieres que la persona que te diga la verdad nos acompañe."— Ruby se cruza de brazos.
—"¿Kevin?"— levanto una ceja.
—"Él te dice las verdades a la cara, cómo yo, pero le tienes tanto miedo que lo único que haces es darle falsas explicaciones y mentiras piadosas, por eso te ve cómo lo que eres, una patética."— Me mira con frialdad.
—"¿Ah, te crees muy dura?"— interviene Natalia.
—"Yo he vuelto de entre los muertos y se lo que se siente estar muerta, ¿y tú qué has hecho hasta ahora?"— pregunta Ruby de forma mordaz.— "Exacto, nada."
—"No todos podemos permitirnos el lujo de tener un novio vampiro original que pueda darnos su sangre para revivirnos cada vez que queramos."— Natalia frunce el ceño.
—"Pues lo siento rica, pero yo soy más importante que todas vosotras juntas."— se cruza de brazos.
—"Claro, te buscan brujas de sangre, moriste, a todo eso yo no lo llamaría importante, sino ser gafe."— replica Natalia.
—"Eso me hace importante, querida, lo que ocurre es que tienes una envidia hacia mi sexy y rico cadáver que no te lo crees ni tú."— Suelta una risa arrogante.
—"¿Cómo es que volviste a la vida?"— pregunto tras estar en silencio.— "Quiero decir, cuándo te vimos caer de la segunda planta en aquella biblioteca abandonada, estabas llena de astillas y estacas de madera, deberías estar muerta."
—"No me llegó a la artería principal, lo cuál significa que sí estuve viva, solo que vosotros me disteis por muerta, luchaba entre la vida y la muerte, cuando Kol me dió su sangre, curando mis heridas, él fue quién me quitó las estacas y las astillas antes de darme su sangre."— explica lentamente.— "¿Por qué?"
—"Porque hasta ahora no he encontrado sentido a tu regreso de la tumba, pero ahora ya si."— me cruzo de brazos.
Ruby arquea una ceja, mirándome con desdén—"¿Ah, sí? ¿Y cuál es esa gran revelación que has tenido, Lyra? Porque si piensas que hay algún tipo de conspiración en mi regreso, estás más perdida de lo que pensaba."
Natalia frunce el ceño, pero se mantiene en silencio, observando atentamente. Parece que la mención de Kol y el detalle de las estacas han despertado su curiosidad, aunque no lo admite abiertamente.
—"No es una conspiración, Ruby, es simplemente que todo lo que ha pasado desde que volviste no tiene sentido."— digo, tratando de mantener la calma a pesar de su actitud—. "Primero, Claire desaparece y reaparece sin poderes, luego tú vuelves de entre los muertos y ahora hay gente que podría estar controlando mentes. No son coincidencias, alguien está moviendo las piezas."
Ruby me mira con escepticismo, pero hay un destello de interés en su expresión—"¿Y qué propones hacer con toda esa información? ¿Crees que resolverás el misterio del año y te convertirás en la gran heroína?"
—"No, no es eso."— admito, soltando un suspiro—. "No se trata de ser heroína, se trata de descubrir la verdad. Si nos quedamos en esta pelea estúpida, no vamos a llegar a nada. Ruby, si realmente sabes algo que nos pueda ayudar, este es el momento de decirlo."
Ruby me observa por un momento, como si estuviera sopesando si vale la pena confiar en nosotras. Finalmente, se encoge de hombros—"Mira, lo único que sé es que hay algo grande detrás de todo esto. Algo que ni yo misma termino de entender. Kol sabe más de lo que dice, pero no me ha contado todo. Y, por si fuera poco, hay personas poderosas interesadas en mantenerme vigilada, y probablemente a todas nosotras. Así que sí, hay un juego que no conocemos, y estamos en medio de él."
—"Lo que dices tiene sentido."— interviene Natalia, esta vez con un tono menos agresivo—. "Pero necesitamos más que suposiciones, necesitamos pruebas. Si alguien está controlando a Claire, debemos encontrar la forma de rastrearlo y saber quién está detrás."
—"Y para eso necesitamos a todos,"— digo, mirando a Ruby con seriedad—. "Incluido Oliver, y aunque no confíes en él, Ruby, es parte de este equipo tanto como nosotras.
Ruby se queda en silencio por unos segundos antes de asentir lentamente—"Está bien, Lyra. Le daremos una oportunidad... Pero si él, o cualquiera de vosotros, decide traicionar mi confianza, no habrá segunda oportunidad."
Natalia cruza los brazos, pero asiente también—"De acuerdo. Nos mantenemos unidas, aunque sea de manera incómoda."
Miro a ambas, sintiendo una mezcla de alivio y la sombra persistente de la duda—"Está bien, entonces. Ahora, buscamos a Lowell y veamos qué podemos descubrir juntos. No dejaremos que nada nos sorprenda esta vez."
Juntas nos levantamos de las diferentes camas antes de salir por la puerta, un toque de nostalgia me recorre el cuerpo. Bajamos las escaleras para llegar a la sala común y ver a Lowell bebiendo té, Oliver leyendo y Kevin desaparecido, cómo siempre.
—"Y por si crees que alguien está controlando mentalmente a Kol, vete olvidando esa teoría, es difícil controlar a un vampiro original."— advierte Ruby.
—"Está claro que un vampiro no puede controlar a un vampiro original, ¿pero y alguien que ha nacido con el poder de manipulación?"— sugiere Natalia.
—"Vuestras teorías son ridículas."— Ruby pone los ojos en blanco.
Lowell levanta la mirada de su taza de té al vernos entrar, notando la tensión en el aire entre nosotras tres. Deja la taza sobre la mesa y frunce el ceño levemente—"¿Qué ha pasado ahora? Puedo sentir la hostilidad desde aquí."
Oliver cierra su libro y nos observa, apoyando un codo sobre el brazo del sillón—"Sí, parece que la reunión fue... fructífera."— comenta con un tono neutral, aunque su mirada se fija en Ruby, esperando alguna respuesta.
Ruby se cruza de brazos, todavía irritada—"Digamos que hemos decidido mantenernos juntas, aunque haya ciertas... diferencias de opinión."— lanza una mirada significativa a Natalia, quien simplemente la ignora.
—"Hay algo que no cuadra con Claire y todo lo que está pasando. Ruby cree que alguien pudo haberla controlado mentalmente."— explico, mirando a Lowell y Oliver—. "Y si eso es cierto, alguien con poderes de manipulación podría ser el responsable."
Lowell se inclina ligeramente hacia adelante, interesado—"¿Manipulación mental? Eso no suena bien. Si es cierto, entonces deberíamos tener cuidado. Podría significar que cualquiera de nosotros podría ser un objetivo."
—"Sí, eso es lo que pensamos."— dice Natalia, más seria ahora—. "Y sabemos que tú y Oliver sois los más indicados para ayudarnos a identificar si alguien está haciendo esto. No tenemos tiempo para andar con rodeos."
Oliver asiente lentamente, su expresión se vuelve más sombría—"Control mental... Es algo que siempre hemos considerado peligroso, pero no imposible. Y si alguien tiene la habilidad para hacerlo, eso nos pone en una posición complicada. Sin embargo, tengo que preguntar, ¿cuán seguras estáis de que Claire no actúa por cuenta propia? Porque si nos equivocamos, podríamos estar acusando a alguien inocente."
—"No hay certeza absoluta."— admito—. "Pero, después de lo que ha pasado y con las extrañas desapariciones y comportamientos... No podemos ignorar la posibilidad. Si hay alguna forma de descubrirlo, debemos intentarlo."
Ruby, aún con su postura desafiante, añade—"Si hay algo que se pueda hacer, es mejor que se haga rápido. No voy a quedarme de brazos cruzados esperando a que las cosas empeoren. Y tú, Oliver, si tienes alguna forma de detectar manipulaciones mentales, sería un buen momento para usarla."
Oliver mira a Ruby por un momento, evaluándola, antes de asentir—"Hay algo que puedo intentar, un hechizo de detección que podría revelarnos si ha habido alguna interferencia mental reciente. Pero requerirá concentración y la cooperación de Claire. No será sencillo."
Lowell mira a Oliver con una expresión preocupada—"¿Estás seguro de que puedes hacerlo sin exponerte demasiado? Si alguien realmente está manipulando mentes, podrías notarlo."
Oliver asiente con determinación—"Lo sé, pero es un riesgo que estamos obligados a tomar si queremos respuestas. Además, si no hacemos nada, podríamos estar en peligro igual. Prefiero enfrentarlo de frente."
Miro a todos, sintiendo un peso en el pecho pero también un ligero alivio por ver que, a pesar de nuestras diferencias, estamos dispuestos a trabajar juntos—"Entonces, lo intentamos. Hablaremos con Claire y averiguaremos si hay algo que no está en su sitio. Pero hagámoslo de manera que ella no se sienta atacada... Es la única forma de mantener nuestra oportunidad de ayudarla."
Lowell asiente, levantándose de su asiento—"De acuerdo. Vámonos antes de que cambie el ambiente y nos distraigamos con otra discusión."
Natalia suelta un suspiro y asiente, mientras Ruby se encoge de hombros, sin perder su actitud sarcástica—"Vayamos al teatro a ver qué pasa. Y, Oliver, espero que tu magia esté a la altura de las expectativas, porque no tenemos margen para errores."
—"Créeme, Ruby, yo tampoco tengo margen para fallos."— Oliver responde con firmeza, mientras nos dirigimos hacia la puerta, listos para enfrentar lo que venga a continuación.
Corremos al cementerio de la academia, bueno, más bien al jardín, dónde está enterrada Claire. La luz de la luna ilumina el camino, la noche se siente más fría de lo normal.
—"¿Alguien más siente que estamos desenterrando un cadáver y que además es una mala idea?"— pregunta Ruby sarcásticamente.— "¿No? ¿Sólo yo? ah, bueno pues sigamos.
Lowell toca el suelo, congelandolo todo a su paso, Natalia se eleva en el aire usando una ráfaga de viento para abrir la tierra, mientras que Ruby lanza una pequeña explosión alzando la tierra.
—"¿Y el cuerpo de Claire?"— pregunto confusa.
—"Genial, hemos hecho todo esto para nada."— Ruby se cruza de brazos.
Repentinamente Ruby se eleva unos centímetros del suelo, nos quedamos mirándola cómo si estuviera bromeando, cuándo la pelirroja comienza a jadear, cómo si alguien la estuviese asfixiando.
—"El karma."— murmura Oliver.
Natalia usa una ráfaga de viento, lanzando a Ruby contra un árbol, y lo que sea que haya asfixiado a Ruby no hace acto de presencia.
Escucho pasos ligeros, me doy la vuelta y algo impacta en mi estómago lanzándome contra Lowell cayendo ambos al suelo.
—"¿Se puede saber que hacéis?"— Natalia nos mira confusa.
—"Ah, nada, echarnos una siesta, ¿a ti que te parece que hacemos?"— responde Ruby levantándose dolorida.
—"¿Eso fue... un ataque?"— pregunta Lowell, tratando de levantarse conmigo aún encima. Su expresión es de puro desconcierto, y no es el único; todos estamos confundidos.
—"¿Alguien me va a explicar qué rayos está pasando?"— exige Natalia, agitando las manos con exasperación—. "Primero desenterramos un cadáver que no está, luego Ruby decide flotar por el aire como si alguien la estuviera asfixiando... ¡Esto se está volviendo ridículo!"
Ruby se incorpora lentamente, frotándose la cabeza mientras hace una mueca de dolor—"Lo que sea que me haya atacado, no es broma. Y si fue un intento de control mental, es uno muy poco sutil. ¿Oliver, tú has sentido algo?"
Oliver frunce el ceño y cierra los ojos por un momento, intentando percibir alguna energía en el ambiente—"No, no siento nada... al menos no de manera clara. Pero eso no significa que no haya algo o alguien aquí con nosotros. Puede estar escondido, esperando el momento adecuado para atacar otra vez."
Lowell se pone de pie y me ayuda a levantarme, su rostro lleno de preocupación—"Debemos ser cautelosos. Si alguien o algo está jugando con nosotros, no podemos permitir que nos tome por sorpresa de nuevo. ¿Hay alguna forma de protegernos de un ataque como el que sufrió Ruby?"
Natalia se cruza de brazos y lanza una mirada al cielo, buscando algún tipo de respuesta en las estrellas—"Podría crear una barrera de viento alrededor de nosotros, pero no sé si sería suficiente contra un ataque mental. Al menos podría protegernos de ataques físicos."
—"Hazlo."— digo, tratando de controlar el temblor en mi voz—. "Lo que sea que esté aquí, ya dejó claro que no quiere que encontremos a Claire, y no pienso rendirme tan fácilmente."
Natalia asiente y empieza a concentrarse, moviendo sus manos en círculos mientras el viento comienza a rodearnos, formando una barrera casi invisible que hace que las hojas y la hierba a nuestro alrededor se agiten.
—"¿Y ahora qué, genia?"— pregunta Ruby con sarcasmo, aunque su respiración aún es irregular por el ataque—. "¿Vamos a quedarnos aquí esperando a que el monstruo invisible vuelva a por nosotros?"
—"No, seguimos buscando pistas."— respondo con determinación—. "Si Claire no está aquí, debe haber dejado algo detrás, alguna señal de a dónde fue llevada o por qué desapareció."
Lowell me mira de reojo, notando la desesperación en mi voz—"Lyra, no podemos permitir que esto nos consuma. Debemos ser estratégicos, no solo impulsivos. Si alguien está manipulando nuestras mentes o nuestros movimientos, tenemos que estar un paso por delante."
Ruby suelta una carcajada seca—"Sí, claro. Porque siempre ha sido tan fácil adelantarse a enemigos invisibles, ¿no? Escucha, Lyra, no es que no quiera ayudar, pero no nos sirven las ilusiones de esperanza. Si seguimos adelante, será con los ojos bien abiertos, sin esperar que nos den la mano."
—"Entonces, abrámoslos."— digo con firmeza, mirando a todos—. "Si queremos sobrevivir y descubrir la verdad, no tenemos otra opción. No somos solo un grupo disfuncional, somos lo único que queda para luchar contra esto."
Natalia sigue creando la barrera de aire, pero un fuerte estruendo nos hace tambalear, rompiendo así la barrera de viento.
—"¿Que ha sido eso?"— pregunta Lowell.
Una enorme bola de fuego viene hacia nosotros, lo esquivo tirándome al suelo, Lowell crea un muro de hielo, el cual se rompe instantáneamente, Ruby se lanza al suelo gritando en dramática, mientras que Natalia y Oliver se van corriendo.
—"¿Pero que diantres?"— miro a la bola de fuego.
Cuándo la bola de fuego impacta contra el suelo, puedo ver a Kevin, mis ojos se abren por la sorpresa, el chico deja escapar una enorme explosión quemando todo a su paso, me cubro con los brazos.
—"Lo que os estaba atacando era Claire."— explica con un gruñido.
—"Por supuesto."— dice Ruby irónica.
—"Alguien ha usado el libro de los condenados."— camina hacia nosotros enfadado.
—"¿El libro de qué?"— pregunto confusa.
—"Un libro que corrompe personas, no necesitas saber que es."— explica Ruby.
—"Esa Claire que os ha atacado está bajo el control mental de alguien, ahora está muerta, ya la he matado."— habla orgulloso Kevin.— "Pero no entiendo cómo tenía sus poderes si los perdió."
—"Si, eso es raro."— murmura Lowell pensativo.
—"Yo sigo pensando en que es el libro de los condenados."— miro confusa.
—"Ya te he dicho que no necesitas saber que es eso, ahora cállate."— gruñe Ruby poniéndose bien la falda.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro