Capítulo 12: La prueba mortal
Nos dan cinco minutos de descanso para recuperarnos de la prueba del laberinto, Ruby se sienta en el suelo todavía algo adolorida por haberse estampado contra una pared por tonta.
—"Al final no hemos necesitado tus botellas de agua."— comenta Ruby desde el suelo.
—"Pues yo si tengo sed."— habla Kevin abriendo la mochila de Natalia.
—"Oye con cuidado que eres muy bruto."— se queja Natalia.
—"Yo también tengo sed."— me acerco a la mochila de Natalia.
—"Lo hacéis apropósito para hacerme quedar mal."— se queja Ruby.
—"Eso parece."— Natalia se cruza de brazos.
—"¡Chicos!"— Lyra corre hacía nosotros alarmada.
—"¿Y ahora que quiere esa?"— gruñe Natalia.
—"Ya sé dónde está Claire."— jadea cansada.
—"¿No en serio?"— Ruby responde con su sarcasmo—. "Cielo llegas tarde, está con Kol, lo sabemos.
—"Pero no porque ella quiera, sino porque fue a robarle la daga ceremonial a Kol."— explica las chicas de las premoniciones.
—"¿Fue ella sola?"— pregunto con incredulidad.
—"Si, bueno, Lowell no te sorprendas tanto."— responde Kevin—. "Está claro que pensar no es lo suyo."
—"Es admirable que haya ido ella sola."— comento admirando a Claire.
—"Pero si le han pillado."— me mira Natalia sin comprenderme.
—"Fue sola, usando su invisibilidad para tratar de recuperar la daga ceremonial, y ahora está bajo la vigilancia de Kol."— interviene Lyra.
—"Por eso digo que es admirable."— sonrío mirando a la muchacha.
—"Más bien fue estúpido."— responde Ruby después de haber estado en silencio.
—"Se necesita un plan, no puede ir por si sola."— gruñe Kevin dándole la razón a Ruby.
—"Gracias, gruñón."— sonríe con orgullo.
—"No me hables."— responde Kevin a la defensiva.
—"Vosotros dos estáis siempre igual."— responde Natalia irritada.
—"¿Tienes idea de cuál será la segunda prueba?"— ignoro a los tres idiotas y me centro en Lyra.
—"La verdad es que no."— responde apenada.
—"Genial."— responde Kevin cruzándose de brazos.
—"Pero me alegro de que estéis bien y no hayáis muerto."— sonríe Lyra.
—"Por ahora."— responde Ruby poniendo los ojos en blanco.
—"Si, tu casi te mueres."— responde Natalia recordándole cuándo la pelirroja se comió la pared—. "Tuvimos que ayudarte nosotros."
—"Cállate."— murmura.
—"¿Dónde están los otros equipos ahora?"— pregunto, tratando de cambiar de tema.
—"Recuperándose también, al igual que vosotros. Se ve que todos están bastante agotados."— responde Lyra, mirando a su alrededor.
—"Espero que la siguiente prueba no sea tan brutal como el laberinto."— suspiro.
—"Más les vale. No quiero morir tan joven."— bromea Ruby, aunque su tono sigue siendo sarcástico.
—"¿Qué creéis que será?"— pregunta Natalia, mirando a cada uno de nosotros.
—"No lo sé, pero estoy seguro de que será algo retorcido."— respondo, recordando lo difícil que fue la primera prueba.
—"Hey, chicos, os he traído algo."— aparece Claire, sonriendo débilmente mientras se acerca a nosotros.
—"¡Claire!"— exclama Ruby, sorprendida de verla—. "¿Estás bien?"
—"Sí, estoy bien. Gracias."— responde Claire, sentándose junto a nosotros—. "He traído algo de comida para que recuperéis fuerzas."
—"Eres un ángel."— Lyra toma un trozo de la comida que Claire ha traído—. "Necesitaba esto."
—"Gracias, Claire."— digo, tomando algo para comer también—. "¿Cómo conseguiste escapar de Kol?"
—"No fue fácil."— responde ella—. "Pero con un poco de suerte y ayuda de una distracción, logré salir."
—"Me alegra verte a salvo."— sonríe Natalia.
—"Gracias."— dice Claire, con preocupación en los ojos.
—"Si tan sólo supiéramos cuál es la siguiente prueba."— gruñe Kevin.
—"Lyra prueba a tener una premonición."— exige Ruby.
—"Lo he intentado pero no lo he conseguido, lo siento."— se encoge de hombros.
Miro a Claire la cuál parece bastante tensa, cómo si ocultase algo, pero decido no decir nada, el ambiente ya está demasiado cargado cómo para echar más leña al fuego.
—"¿Claire todo bien?"— pregunta Ruby notando la mirada preocupada de Claire—. "Parece que sabes algo."
Fulmino con la mirada a la pelirroja, debería haber visto venir que haría algo así, no puede quedarse callada.
Claire se tensa aún más, evitando el contacto visual por un momento antes de suspirar profundamente.
—"En realidad... sí, hay algo que debo contaros."— finalmente dice, su voz temblorosa.
—"¿Qué pasa, Claire?"— pregunto, sintiendo un nudo formarse en mi estómago.
—"Mientras estaba con Kol, escuché algo sobre la segunda prueba. Es peor de lo que imaginamos."— Claire se frota las sienes, claramente estresada.
—"¿Qué es?"— insiste Kevin, ahora completamente serio.
—"Es un juego de bebidas."— Claire dice finalmente—. "Dos personas tendrán que elegir entre dos copas, una de las cuales contiene veneno."
Un silencio sepulcral cae sobre el grupo mientras procesamos esta nueva información.
—"¿Están de broma?"— murmura Ruby, incrédula.
—"No, no lo están."— responde Claire con firmeza—. "Es real. Y tenéis que estar preparados."
—"Eso es una locura."— dice Natalia, mirando alrededor del grupo—. "¿Cómo se supone que sobreviviremos a eso?"
—"Necesitamos un plan."— dice Kevin, su tono decidido—. "No podemos simplemente esperar a que nos maten."
—"Kevin tiene razón."— interviene Lyra—. "Debéis pensar cómo enfrentar esta prueba."
—"Podemos usar el ingenio."— sugiero—. "Observar cualquier pista o señal que nos ayude a identificar cuál es la copa segura."
—"Y si no hay pistas, simplemente debemos tener suerte."— dice Ruby con un suspiro—. "No hay otra opción."
—"Es un riesgo que tenéis que asumir."— añade Claire, su voz más firme ahora.
—"No tenemos más opción."— responde Kevin, asintiendo.
—"Claro que tenemos opción, dejamos que los demás concursantes beban y quién muera es porque bebió el veneno."— sonríe Ruby de forma cruel.
—"¡Ruby!"— regaña Claire asustada.
—"¿Qué? es o ellos o nosotros, y principalmente tampoco son importantes, ¿acaso son vuestros amigos?"— Ruby nos mira con el ceño fruncido.
—"No, claro que no."— responde Natalia.
—"Pues ya está, si mueren, han muerto, ¿quién los echará de menos?"— concluye Ruby.
—"Tienen familia."— respondo mirando con incredulidad a la pelirroja.
—"¿Y qué? han venido a hacer la competición saben lo que les espera, así que no me mires cómo si estuviera loca."— me mira de forma acusadora.
—"Tiene razón y lo sabéis."— Kevin admite mirando a Ruby.
—"Supongo que si."— suspiro.
—"Me tengo que ir, Kol debe estar buscándome, os deseo suerte."— Claire se va casi corriendo.
—"Yo también, os observaré desde las gradas, tened cuidado."— Lyra también se despide.
—"Y sólo quedaron cuatro."— comenta Natalia cruzándose de brazos.
El comentarista se aclara la garganta y su voz retumba por los altavoces, resonando en cada rincón del recinto.
—"Damas y caballeros, bienvenidos a la segunda prueba de nuestra emocionante competencia. Después de la intensa primera prueba en el laberinto, es hora de poner a prueba no solo la valentía, sino también la astucia y la suerte de nuestros concursantes."
Las luces del recinto se enfocan en un escenario central, donde se encuentran dos mesas con copas cubiertas por velos negros.
—"La segunda prueba se llama 'El Juego de las Bebidas'. Es una prueba sencilla en apariencia, pero letal en su ejecución. Dos concursantes de cada equipo se enfrentarán a esta prueba. En cada ronda, habrá dos copas frente a ellos: una contiene una bebida inofensiva y la otra contiene veneno."
El comentarista hace una pausa dramática, permitiendo que las palabras penetren en la mente de los espectadores y los concursantes.
—"Las reglas son simples: los concursantes deben elegir una copa y beberla. No hay segundas oportunidades, no hay cambios de decisión. Deben confiar en su instinto y su suerte. El equipo que elija correctamente ambas veces, o al menos sobreviva, avanzará a la siguiente etapa. Los que no lo logren... bueno, sus destinos quedarán sellados aquí y ahora."
El comentarista sonríe, disfrutando claramente del drama de la situación.
—"Además, para aumentar la tensión, cada equipo tendrá un minuto para discutir y decidir quiénes serán los que participen en esta prueba. ¡Así que piensen rápido y elijan sabiamente!"
Los concursantes se miran unos a otros, nerviosos pero determinados.
—"Que comience el Juego de las Bebidas."— concluye el comentarista, y el cronómetro comienza a contar hacia atrás desde sesenta segundos.
—"¿Estáis listos chicos?"— miro a mis compañeros.
—"Van a morir."— sonríe Kevin de forma sádica.
—"Tampoco te pases."— pongo los ojos en blanco.
—"Que empiecen los juegos del hambre."— camina Ruby decidida.
—"Ya empezamos."— Natalia se frota el puente de la nariz.
Me acerco a una mesa que tiene mi nombre, delante de mí hay un chico telequinético, miro a Natalia la cuál tiene a un cambia formas delante, Ruby tiene a una de las chicas telepatas, mientras que Kevin tiene delante a una de las vampiresas.
—"Esto va a ser divertido."— murmuro sin un ápice de humor.
El comentarista retoma la palabra, añadiendo tensión al ambiente.
—"Concursantes, las reglas son claras. Frente a cada uno de vosotros hay una copa que contiene una bebida inofensiva y otra que contiene veneno. No hay segundas oportunidades, así que elegid con sabiduría. Vuestro tiempo empieza... ¡ya!"
El cronómetro comienza a contar los sesenta segundos, cada tic resonando como un martillo en nuestros corazones.
—"Vale, chicos, tened cuidado."— susurra Natalia, sin apartar la vista de su oponente.
Kevin mira fijamente a la vampiresa frente a él, su expresión dura y decidida.
—"Observad cualquier detalle, cualquier pista."— dice en un tono bajo pero firme.
—"Buena suerte."— murmuro, aunque sé que eso es lo único en lo que podemos confiar ahora.
Cada uno de nosotros se acerca lentamente a las mesas, nuestros oponentes haciendo lo mismo. Las copas brillan bajo la luz, el líquido en su interior indistinguible a simple vista.
Ruby es la primera en hacer un movimiento. Mira a la telepata frente a ella, buscando algún indicio en su rostro.
—"No tengo todo el día."— dice con un tono sarcástico, aunque su voz tiembla ligeramente.
La telepata no reacciona, su mirada fría y calculadora.
Kevin sigue su ejemplo, levantando una copa con decisión. La vampiresa le sostiene la mirada, desafiante.
—"Nos vemos al otro lado."— dice él, llevándose la copa a los labios.
El resto de nosotros hacemos lo mismo, nuestros corazones latiendo con fuerza. Sin pensarlo más, bebemos. Escucho gritos, miro a Kevin el cuál está forzando a la vampiresa a que beba del vaso que él había tomado.
Un silencio pesado cae sobre el lugar, cada segundo pareciendo una eternidad mientras esperamos el efecto de la bebida. Un par de concursantes comienzan a mostrar signos de incomodidad. La chica telepata de Ruby se desploma, la copa cae de su mano y se estrella contra el suelo. Un grito ahogado se escucha desde la mesa de Kevin, donde la vampiresa también cae al suelo, inmóvil, el chico explosivo mira con una sonrisa a la vampiresa muerta.
—"Parece que tenemos nuestros primeros eliminados."— anuncia el comentarista con un tono sombrío pero excitado.
Miro a mis compañeros y veo que están bien. Suspiro de alivio. Ruby sonríe, aunque sus ojos reflejan el miedo que aún siente. Kevin también parece aliviado, aunque su expresión sigue siendo dura.
—"Felicidades a los que han sobrevivido a la segunda ronda. Ahora, tomad unos momentos para recuperaros antes de la siguiente."— dice el comentarista.
Nos reunimos de nuevo, nuestras respiraciones pesadas y nuestros cuerpos temblando ligeramente por la adrenalina.
—"Lo hemos conseguido."— dice Natalia, su voz temblorosa pero aliviada.
—"Por ahora."— responde Kevin, siempre gruñón.
—"Esto no ha terminado."— añade Ruby, mirando a los otros equipos que también han sobrevivido.
—"Pero hemos superado la segunda ronda."— digo, tratando de mantener el ánimo alto—. "Sigamos así."
—"Ahora viene la peor prueba, el combate cuerpo a cuerpo."— responde Ruby.
—"Bah, eso está chupado para mí."— gruñe Kevin.
—"¿Has obligado a una vampiresa a que bebiera de tu vaso?"— pregunta Natalia.
—"Si, estaba demasiado sonriente y eso no me dio confianza."— Kevin se encoge de hombros.
—"La telepata era muy sosa."— responde Ruby irritada.
—"Bueno, hemos sobrevivido, deberíamos tratar de hacerlo en la última ronda."— trato de animar el ambiente.
—"Lowell tiene razón chicos."— sonríe Natalia mirándonos.
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