Como las luces no me daban indicaciones de hacia dónde debía ir, solo seguí a Duncan, confiando que él me llevara donde estaba Travis. Solo esperaba no llegar tarde. Tenía un mal presentimiento y cuando lo vi, supe que tenía razón. Al verlo rodeado de aquellos chicos, no pude evitar enojarme.

-¡Oigan, dejen de molestarlo!- dije mientras me acercaba a ellos.- Travis, ¿estás bien?

........

- Sí, solo quiero que me saques de aquí antes de que esto parezca año nuevo con fuegos artificiales.- dijo Travis, quién se pasaba la mano por una de sus mejillas, al parecer le habían dado un golpe. Suspiré y me acerqué a los abusones con mala cara.

- EEEH, escoria, quizás deberíais ser vosotros los encerrados en esas celdas. Travis es un alumno de pleno derecho de esta academia y os recuerdo que en las normas pone que los alumnos tienen potestad para defenderse de otros alumnos... Por esta vez, dejaré de lado el hecho de que sois unos hijos de perra... Solo os daré un pequeño correctivo.

Me infiltré en la mente de todos ellos y los hice ver lo que más miedo les daba, algunos salieron corriendo, otros simplemente se echaron al suelo gritando.

........

Ya conocía la expresión de Duncan cuando poseía a alguien, y, por las reacciones de esos chicos, estaba funcionando, por ello, solo fui con Travis y lo sujeté por las muñecas.

-Trav... estoy aquí, ya está bien... -miré su mejilla golpeada y tragué saliva.- ¿Estás bien? ¿Te golpearon en algún otro lugar?

........

- Naaah... Además, apenas lo sentí, pegan como mariquitas.- dijo con bastante calma, aunque yo sabía lo que había debajo de esa calma, yo también me he sentido así.- Solo quiero irme... A ser posible, a mi habitación, quiero estar un rato allí, para acostumbrarme y eso.

- Os acompaño, por si acaso.- dije con calma también.- Conmigo cerca, nadie se atreverá a meterse.

........

-Gracias, Dudú...- como aún debía acostumbrarse a caminar por la academia, puse la mano de Travis sobre mi hombro para guiarlo mientras que, del otro lado de mí, tomaba la mano de Duncan.

Cualquiera que me viera, pensaría que mi trabajo era hacerle de lazarillo a los ciegos de la academia. Aunque, no me molestaba, lo había hecho de todas formas, y ellos eran las personas más importantes de mi vida justo en ese momento. Solo que, al tenerlos a ambos tan cerca, se sentía un poco tenso el ambiente.

-Uhm... Dudú... ¿cuál es la habitación de Travis?- pregunté para dar algún tema que conversar.

........

- Habitación 412, sería al final de mi pasillo a la derecha. Segunda puerta de la izquierda. Es un poco difícil explicarlo, pero ahora te darás cuenta de que no es tan complicado.- dije antes de comenzar a caminar haciendo de guía para Belly y Travis... Era algo irónico que un ciego hiciera de guía, pero bueno... No es que sea un ciego normal.

Travis parecía mucho más apacible y calmo, jamás pensé que sería capaz de aguantar que le dieran un golpe sin devolverlo.

........

-Trav, asegúrate de aprenderte bien el camino. Luego te mostraré cómo es tu habitación.- dije mientras seguía la mano de Duncan.- Y... bueno, quisiera saber... ¿por qué se estaban metiendo esos tipos contigo? ¿Qué querían...?

........

- Oh, eso es sencillo de explicar. Querían saber porqué siempre había estado causando problemas, porque destrocé las salas de ordenadores... Porqué no he pagado por ello y porqué sigo siendo sargento del ejército del pueblo después de ser diagnosticado con locura. Gilipolleces de niños malcriados.

........

-Espera... ¡¿Qué?! ¡¿Sargento del ejército?!- sabía que Travis había tenido relaciones con lo militar, pero no esperaba que retomara sus acciones al ser liberado, ni que tuviera un cargo como ese.- Entonces... también te tendrán en cuenta para sus misiones a partir de que termines tu período de entrenamiento... ¿no es así?- aunque la pregunta era para Travis, también había mirado a Duncan esperando que él me lo confirmara.

........

- Es lo más probable, aunque eso tendrá que pasar por la junta dado que cuando hice la instrucción estábamos en guerra civil y cuando me metieron aquí, estábamos en pleno período de transición. Había varios bandos y esas mierdas.- dijo Travis, a lo que suspiré.

- Sargento Travis Maddox del ejército de tierra, división de avanzadilla. Nunca se te dio de baja en el ejército, así que sigues siendo un soldado en activo... y aunque ahora te dieras de baja licenciado con honores, la academia siempre te tratará como un activo capaz de dirigir un pelotón o cumplir una misión de índole militar. Eso, siempre y cuando superes el período de prueba.- dije sin más.

- Gracias por los tecnicismos, señor.- dijo Travis haciéndome parar mis pasos, ahora no era momento de tratarme.

........

-Chicos... - sonreí algo incómoda, pero intentando que no explotara una bomba atómica entre mis dos acompañantes.- No tienen que ponerse a hablar así. No hay nadie más del ejército para que les exija ese lenguaje.- tras decir eso, impulsé mi mano hacia adelante para que Duncan retomara el paso y nosotros también.- Solo hablen con naturalidad. Ahora no hay tal sargento o comandante. Ustedes son solo Duncan y Travis, dos estudiantes de una academia.- terminé por sonreír al decir esto, esperando que ellos también se calmaran.

........

Ambos nos quedamos pensando, suspiramos intentando calmarnos. No queríamos poner peor la situación y mucho menos cuando Belly estaba con nosotros, ya bastante hacíamos con no matarnos entre nosotros.

- Tienes razón, pequeñaja... Perdona.- se me adelantó Travis, quien sonreía en este momento con total naturalidad.

- Ya estamos aquí... Esta es tu habitación.- dije señalando una puerta, prácticamente se me olvidaba que yo podía señalar y saber que señalaban... Pero él no.

........

-Entonces... -volteé a Travis con una sonrisa.- Te mostraré cómo es tu habitación por dentro, Trav. Así te será mejor ubicarte.- me detuve frente a la puerta que había señalado Duncan y puse la mano de Travis en el pomo de esta para que supiera dónde estaba.- Dudú, ¿vas a entrar con nosotros?- pregunté sonriendo antes de que Travis abriera.

........

- Será mejor que me quede esperando aquí, solo estorbaría ahí dentro, es mejor que se aprenda las cosas con calma.- dije intentando evitar más tiranteses entre Travis y yo.

- En realidad  no me molesta que entres.- dijo para mi sorpresa el rubio, quien con toda la paciencia del mundo entró seguido de Belly a la habitación.

Dada la comprensión de este, yo también entré... Aunque reconozco que no quería hacerlo. Estar cerca de Belly cuando estaba tratando con Travis me estaba volviendo loco, no lo entendía, si tanto me amaba a mí, ¿por qué era tan buena con él?