Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo 5

Elíseos, la academia de héroes construida por PEACE en una isla flotante en medio del océano Atlántico.

Era un lugar donde se reunían a los más talentosos entre los jóvenes héroes de todo el mundo, entonces, ¿Qué hacía yo, un joven normal y sin poderes, aquí?

—El primer paso siempre es el más importante —comenté—. Hay que dar un increíble primer paso.

Tomé aire y recogiendo de nuevo mis maletas me acerqué a la puerta de la escuela, el sol del amanecer salía reluciente por detrás del edificio principal, casi como si la escuela fuera el propio sol de mañana.

—Buenas tardes, ¿Podría dejar de tardarse tanto en dar un simple pasó?

—¿¡Whoa?!

Salté hacia atrás del susto, perdido en mi mundo no me había dado cuenta que alguien estaba frente a mí.

Era una mujer de cabello azabache como la noche, vestida con un traje formal negro, con unas botas negras de tacón y unas largas medias que cubrían por completo sus piernas, aparentaba estar en su segunda mitad de los veinte años aunque en realidad era mayor, lo sabía porque ella era alguien conocida.

—¿D-, Directora Hambutlery?

—La misma —respondió—, ¿Podrías ya dar ese paso?

Di el paso apresuradamente para no molestarla, la directora Hambutlery era una reconocida superheroína que ha enfrentado a villanos de clase catástrofe.

Me quedé quieto después de dar el paso y la directora también se quedó quieta mirándome.

—Bien. —dijo y dio media vuelta.

Rápidamente la seguí.

—¡Directora Hambutlery —Ella no se detuvo—! ¡Directora Hambutlery!

—Solo habla, niño.

Ella siguió caminando, ingresó en las instalaciones y yo la seguí para hablar con ella.

—B-, Bueno, la cosa es que... Directora Hambutlery, ¿Porqué a mí? Habiendo tantos héroes por ahí, porqué me eligió a mi? —pregunté mientras que avanzábamos por un pasillo en el segundo piso, no sabia cuando habíamos subido pero no me importó. Estaba muy ocupado viendo a todos los chicos que disfrutaban de sus superpoderes en el patio.

Un frisbee salió volando, un chico vestido como un luchador lo había lanzado demasiado alto, pero el frisbee fue atrapado por una chica con alas como las de un ángel. Ella lo volvió a lanzar y un chico en un traje ninja lo atrapó y lo lanzó devuelta.

En ese momento el frisbee explotó, un héroe que disparaba rayos laser de los ojos había apuntado al frisbee y lo había destrozado.

—¡Oye!

—Eso no se hace, Laserman.

—Si, arruinaste el juego.

Todos se estaban quejando, hasta que uno de ellos derritió un pedazo de su brazo como si fuera cera o tal vez plastilina. Ese pedazo entonces se volvió un nuevo frisbee y el chico se recuperó sin problemas

—Tranquilas chicas, el hombre cera al rescate. —fanfarroneó.

Entonces, todos celebraron y continuaron jugando. Parecían muy unidos.

—Niño —habló sacándome de mis pensamientos—, ¿Sabes cuál es mi poder?

—L-, Los ojos que pueden ver el alma.

—Muy bien respondido, parece que tengo un fan —Se burló antes de volver a su tono serio—. La cosa es, a lo largo de mi carrera como heroína me he encontrado con innumerables héroes con almas oscuras y villanos con almas brillantes.

—¿Disculpe?

—El mundo no es tan bonito como lo parece, niño. Ya lo verás algún día —La directora aclaró su garganta—. Continuando con mi historia, no importa que tan oscura fuera su alma, todos tenían familia, amigos, gente por la cual se preocupaban, así ayudé a muchos para que fueran mejores personas, para que no se guiaran por el camino oscuro, y aunque no pude ayudar a todos siempre pensé que todos eran hermosos a su manera. O al menos eso fue así, hasta que lo conocí.

—¿A quien conoció?

—A él, él que lleva un sombrero. Cuando lo vi no encontré su alma, solo vacío, eternidad. Una oscuridad sin fin donde cientos de miles agonizaban. Solo recordar eso hace que mis piernas pierdan su fuerza. La desesperación que sentí aun corre vívidamente por mi cuerpo. Desde entonces no he vuelto al servicio heroico.

—¿Porqué?

—Yo... No importa. El punto es que desde entonces uso mi habilidad para encontrar a héroes con almas brillantes. Aunque no tienes poderes puedo verlo en ti, quieres hacer el bien, quieres ayudar a otros. Tienes oscuridad en tu interior como el resto pero no la dejas controlarte. Es por eso que estas aquí, es por eso que todos ustedes están aquí. Tal vez ustedes algún día encuentren la forma de enfrentarlo, aunque en serio lo dudo.

La directora se quedó en completo silencio, quise decir algo, cualquier cosa, aquí es el momento donde un héroe debería motivar a todos, si embargo nada vino a mi mente, realmente fui inútil.

—Yo...

—Llegamos. —interrumpió.

—¿Eh?

Sin saber cuando habíamos llegado a las afueras de una puerta.

—Ésta será su habitación, puerta 211. Curioso al pensar que su fecha de cumpleaños es el 21 de Enero. Bueno, me retiro. Recuerde no llegar tarde a la bienvenida para los nuevos. —comentó y sin esperar a una respuesta simplemente se marchó.

Bien, supongo que deberé entrar. Respiré profundamente y tomé la manija de la puerta. Cuando estaba por abrirla...

—Y por cierto —La voz de la directora llamó mi atención por lo que volteé a verla, ella se había detenido al mitad del pasillo y se había volteado para verme—, si en algún momento tienes la oportunidad de matar al sombrero negro, hazlo, no lo dudes, no pienses en tenerle compasión. Incluso el pensar en tenerle compasión significaría que siquiera merece compasión.

Y después de decir eso ahora si se fue.

¿Matar?

No me veo capaz de hacer eso, a nadie. Sin importar que tan malvado sea.

No lo pensé mucho más e ingresé a mi habitación, era sencilla, nada muy lujoso, una cama con una mesita de noche, un escritorio y un ropero. Había también una puerta en el fondo, posiblemente de un baño. Un pequeño refrigerador estaba instalado ahí, la escuela te permitía mandar muebles pequeños para que los instalaran en tu cuarto, yo me traje ese. Aunque lamentablemente estaba vacío.

Me acerqué a la puerta, la abrí y efectivamente era un baño limpio y ordenado, volví a cerrar la puerta y observé toda la habitación con una sonrisa.

—Las grandes ligas, lo hemos logrado, Sparkl.

Me acerqué a una de mis maletas la cual estaba un poco abierta y de ella saqué a mi fiel compañero, Sparkl, una tortuga de tierra que me ha acompañado desde que tengo memoria.

Están prohibidos los animales en la academia pero no quería dejarlo solo, por eso lo traje oculto en mis maletas claro dejándole espacio para respirar.

Deje a Sparkl en el suelo y éste comenzó a caminar, tal vez para familiarizarse con el nuevo entorno. Le deposite su plato de comida y su bebedor para que pudiera comer y beber cuando quisiera, además de que abrí un poco la cortina de mi ventana para que todos los días hubiera un lugar con sol por si ella quería.

He visto en televisión y muchas otras partes que los héroes suelen tener mascotas increíbles como lobos, tigres, elefantes incluso está ese héroe que monta en un dragón, ¿Cómo se llamaba? Recuerdo que estaba en mi mazo de cartas coleccionables de Hero's Game, ¡Platinum Paladin, es verdad! 

Sparkl se acercó a su plato así que saqué una lechuga de mi maleta, si, traía mucha comida. Partí la lechuga y eché un par de hojas en el plato, Sparkl comenzó a comer y yo acaricié su cabeza mientras lo hacia.

Bueno, tal vez Sparkl no sea un compañero con el cual salir de aventuras, pero él en cierta forma extraña es mi familia, ha estado conmigo desde que tengo memoria y estoy seguro que estará después de mí.

Después de eso guardé mi ropa en el ropero y la comida en el pequeño refrigerador y llené el bebedor de Sparkl con agua.

Me quería tirar a la cama a hacer nada sin embargo mi teléfono comenzó a sonar, era una alarma.

—Hfff~ —bufé para soltar mi frustración por no poder recostarme.

Me coloqué de inmediato el uniforme escolar, una camisa blanca con una corbata, pantalón formal y un chaleco de manga larga encima.

Tras revisar que todo estuviera correcto salí apresurado de mi habitación asegurándome de que Sparkl siguiera dentro y de cerrar con llave.

Si mal no recuerdo me habían dicho que la ceremonia de bienvenida iba a ser en el auditorio... Ahora, ¿Dónde está el auditorio?

Revise de arriba a abajo el mapa que me entregaron, sin embargo no era capaz de encontrar el auditorio.

—Disculpa, ¿Estás perdido?

—Si, perdona pero ¿Podrías ayuda... —escuché una voz detrás de mí y rápidamente volteé mientras respondía—...rme?

Sin embargo ahí no había nadie, eso me sorprendió un poco.

—Acá arriba tonto. —volvió a hablar la voz junto a una risa sutil.

Volteando hacía arriba me la encontré, era la chica alada que antes estaba jugando con un frisbee, su largo y sedoso cabello rubio caía como una cascada por su espalda e iba vistiendo con su uniforme, aunque volar con una falda es mala idea ella se había acomodado de tal forma que no le causara problemas.

De cualquier forma no es como si fuera a ver... No mucho.

Lentamente comenzó a descender a mi lado y revisó el mapa.

—El auditorio está aquí, ¿Ves? Es éste, el número 7. —mencionó mientras colocaba su dedo índice sobre una zona del mapa.

—Ohhhh, ya veo, yo me estaba dirigiendo hacia el número 8.

—No, no, no, el 8 es el área de detención, mejor no acercarse ahí, me han dicho que no es bonito. —respondió con una cara que solo los que han visto al abismo pueden tener.

—Intentaré no ir ahí. Por cierto me llamo Leonel, pero puedes llamarme Leo.

—Anjelica, mi madre me lo puso cuando vio mis... ¿Debo continuar?

—¡Pff! —Casi me reía por accidente, sin embargo logré controlarme.

—Puedes reírte, yo lo haría.

Después de recibir su permiso comencé a verter todo el contenido de mis pulmones en una larga carcajada, sin embargo cuando ella volvió a hablar la sonrisa se borró de mi rostro.

—Muy bien ahora tú.

—¿Q-, Qué?

—Cuentame algo vergonzoso que te hayan hecho tus padres, solo así seria justo.

—Bueno... Este....

Comencé a balbucear, era trampa, cuando una mujer bonita te pide algo se hace quinientos veces más difícil de negar. 

Pronto deje de intentar negarme y centré mis esfuerzos en intentar recordar el menos malo de esos momentos, mientras lo hacia, mi mente me llevó de inmediato a cierto recuerdo que no quise comentar, sin embargo mi mente me traicionó y no quiso recordar ninguno otro, por lo que después de reunir mi resolución comencé a hablar.

—Hace años, en su fiesta de cumpleaños, le dije a mi padre que le daría una sorpresa. Me vestí como él.

—Awww, eso es tan lindo. —musitó tiernamente, posiblemente con una imagen de un niño vestido con capa en mente.

—No es lindo cuando tu padre se confunde y piensa que su sorpresa es que tienes superpoderes para volar como los de él. 

—Oww....

—Se veía tan emocionado que no pude decirle que mi sorpresa era solo estar vestido como él y fingí que tenia poderes, no se, tal vez esperaba que un milagro sucediera. 

—¿Y paso? —preguntó, tal vez por morbo, tal vez por curiosidad.

—Me agarró y arrojó al cielo. Subí, subí y subí hasta estar sobre las nubes, se sentía increíble y pensé que tal vez, solo tal vez, seria capaz de lograrlo. Reuní toda mi fuerza de voluntad, pero el suelo se acercaba más y más.... Hasta que —pausé, recordando vívidamente el sentimiento de caer—... Me atrapó. Logro detenerme.

Volví a pausar, aunque quería hablar mi voz simplemente no salía.

—¿Y después? ¿Qué pasó después? —volvió a preguntar sacándome de mi trance.

—Me oriné en los pantalones y se rieron de mi, ¡Cielos, los niños si que son crueles —me quejé haciendo un pequeño puchero—! Pero bueno, después de eso me cambié y recibí un gigantesco pedazo de delicioso pastel, el más delicioso que he probado en mi vida, aunque bueno, tal vez todo sabe mejor después de estar tan cerca de la muerte.

Ese comentario mío aligero el estado de ánimo. Anjelica comenzó a reírse, no continué la historia y ella hizo un comentario para cambiar el tema.

—Vaya cosas dices, pero no creo que ese pastel sea mejor que el que sirven en la cafetería.

—¿Ah, conque no?

—Ajá, el supremo de chocolate de la cocinera de la cafetería es de primera categoría, incluso hay héroes profesionales que visitan la escuela los martes para tener una rebanada, así que te aconsejo estar listo porque cuando ese pastel es servido los amigos dejan de ser amigos y se convierten en competencia, solo uno de cada cinco puede probar esa explosión de sabor.

—¿Qué mañana no es martes?

—Así es, parece que mañana tendrás tu primera batalla.. —comentó soltando un pequeño golpe en mi hombro.

—Parece que si. —sonreí, no sabía lo ciertas que eran esas palabras.

Fue en el momento más tranquilo cuando...

—¿Qué hacen aquí?

Un hombre alto, más de dos metros con un traje militar y un ojo biónico nos habló.

—¿¡P-, Profesor Warmy?! (Warmy =One Man Army)

Anjelica se mostró asustada, sus plumas se agitaron y su boca se abrió.

—Anjelica, ¿Quieres volver a detención?

—¡N-, No, Profesor-, quiero decir, señor, no, señor! —gritó ella.

—¿No me habías dicho que nunca habías pisado detención? —dije.

—Larga historia. —Me respondió con la sonrisa de un mentiroso descubierto.

Cuando el inmenso soldado volteó a verme sentí conmoción, como si todo mi cuerpo fuera aplastado por una enorme presión.

—¿Eres de primero?

Realicé un saludo militar por puro instinto.

—¡Si Señor Warmy, Señor!

Él me vio de pies a cabeza.

—Muy bien, ¡Vaya a el auditorio ahora mismo!

Me di media vuelta y entonces comencé a alejarme lo más rápido que pude.

—¡Espera, yo te sigo!

Anjelica intentó salir volando conmigo, sin embargo escuché como una mano se posaba sobre su cabeza y la agarraba con fuerza.

—Anjell, no te vi en la prueba de camuflaje.

—¿¡G-, Gracias?!

—¡No fue un alago! Ahora recibirás el doble de detención.

—¡Nooooooooo! ¡Ayuda! ¡Ayuda!

Y así me alejé lo más rápido de ahí.

_____________________________________________________________

Éste y el próximo capítulo serán de la escuela de héroes, espero que les guste ver la otra cara de la moneda ;D

¿Qué les parece?

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro