Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo veinticinco: no más mentiras

Jeongin se quedó paralizado en el umbral de la puerta mientras Minho lo miraba intensamente. En un instante, Minho se acercó y lo besó con una urgencia que lo dejó sin aliento. Sin embargo, Jeongin, sintiendo que la situación se tornaba complicada, apartó suavemente a Minho.

-Espera, por favor -dijo Jeongin, su voz temblando un poco.

Minho asintió, sus ojos aún brillando con deseo, y se dejó caer en el sofá con un suspiro resignado. Jeongin lo observó, sintiendo una mezcla de frustración y deseo.

-¿No debias ir a ver a tus padres hoy? -preguntó Jeongin, intentando desviar la conversación.

-Sí, pero quise pasar por aquí primero para saludarte -respondió Minho, encogiéndose de hombros.

Jeongin asintió, sintiéndose un poco más tranquilo. Sin embargo, había algo en su mente que necesitaba salir.

-Hay algo de lo que quiero hablar contigo... -dijo finalmente.

Minho lo miró con curiosidad.

-¿Yo primero? -sugirió, arqueando una ceja.

Jeongin dudó, pero asintió.

-¿Sabes por qué la camioneta de Hyunjin está estacionada afuera del edificio? -preguntó Minho de repente.

Un escalofrío recorrió la espalda de Jeongin. La mención de Hyunjin hizo que su corazón se acelerara.

-No... -respondió, tratando de mantener la calma.

Minho continuó, ignorando la respuesta de Jeongin.

-Porque hay dos pares de zapatos afuera y también hay dos platos en la mesa -dijo, señalando hacia la ventana.

Jeongin se giró para mirar y vio los zapatos. Mordió su labio inferior, sintiendo cómo la ansiedad se apoderaba de él. Cuando volvió a mirar a Minho, este lo observaba fijamente.

-¿Dónde esta el? -preguntó Minho, su tono ahora más serio.

Jeongin intentó hablar, pero las palabras se atascaban en su garganta.

-De eso quería hablar... -comenzó a decir, pero Minho lo interrumpió.

-¿Dónde está? -repitió, su voz más firme.

-Minho... -insistió Jeongin, pero el otro no le dio tregua.

-Eres un mentiroso de mierda. ¡Incluso lo trajiste a tu casa! -gritó Minho, su frustración evidente.

Las lágrimas comenzaron a deslizarse por las mejillas de Jeongin mientras sonreía débilmente.

-No eres quien para juzgarme -dijo con voz quebrada-. Tú comenzaste todo esto...

-Asi que de eso se trata, yo lo hago y tu..

-¡No!, se trata del maldito respeto entre parejas que por tu culpa se fue a la mierda.

-¿Mi culpa? Yo nunca...

-¿Nunca que? Deja de mentirme Minho yo los vi, EL MALDITO DIA MAS IMPORTANTE DE MI VIDA TU FOLLANDO EN MI SILLON CON ALGUIEN MAS -gritó -Y tienes el descaro de decir que toda la culpa es mía... No me jodas

En ese momento, Hyunjin apareció recostado en el marco de la puerta, con una expresión indiferente que solo sirvió para intensificar la tensión entre ellos.

-¿Sigo invitado a la boda? -preguntó Hyunjin con una sonrisa sarcástica.

Minho se volvió hacia él con asco evidente en su rostro.

-Me das asco -respondió con desprecio-. Jeongin me prometió que sería con cualquiera menos contigo.

Jeongin sintió que el aire se volvía pesado.

-¿Qué más da con quién sea? -replicó Jeongin, intentando mantener la calma mientras las emociones lo abrumaban.

Minho frunció el ceño, su voz llena de rabia contenida.

-Has caído muy bajo al follar con un coronel -dijo con desprecio -Teniente yang, quiere ascender de esa forma...

Jeongin sintió que sus palabras eran como cuchillos. La discusión escalaba y el dolor se hacía más palpable.

-No es solo sexo -protestó Jeongin-. Es complicado y tú lo sabes. No es solo una cuestión de infidelidad; hay sentimientos involucrados, y yo...

-¿Tú?

Minho lo miró como si estuviera viendo a un extraño.

-¿Sentimientos? ¿Por un tipo como él? -dijo Minho, su voz llena de incredulidad-. No puedo creer que hayas llegado a esto.

Jeongin sintió cómo el calor subía a su rostro.

-No tienes derecho a juzgarme -respondió con firmeza-. Tú también has hecho cosas de las que deberías sentirte avergonzado, pero en vez de eso lo sigues negando, ¿Sabes cómo me sentí esa noche? Me sentí como un imbécil incluso después de esa noche me sentí como si nunca hubiera sido suficiente para ti que tuviste que buscar a alguien más, sentía que no merecía haber ascendido por qué así jamás hubiera visto al hombre que supuestamente amaba con un cadete que ni siquiera sabe defenderse a si mismo.

-¿Quieres ponerte en mi lugar? Lo prometiste.

-Y tu prometiste serme fiel amarme por la eternidad y aquí estamos.

La tensión en el aire era palpable mientras ambos se miraban desafiantes. El silencio se extendió entre ellos como un abismo que parecía imposible de cruzar.

El silencio que siguió fue abrumador. Jeongin sintió que el peso de sus palabras se cernía sobre él, como una sombra que no podía sacudirse. Minho lo observaba, su expresión ahora mezcla de confusión y tristeza.

-¿Quieres cancelar el compromiso? -preguntó Minho, su voz apenas un susurro.

Jeongin sintió un nudo en el estómago. No era tan simple, pero tampoco sabía cómo explicarlo.

-No es una elección fácil, Minho -respondió, tratando de mantener la calma-. No se trata solo de él o de ti. Se trata de mí, de lo que necesito en este momento... Así que si.

Minho apretó los dientes, su frustración palpable.

-¿Y qué necesitas? ¿Un coronel que te trate como un juguete? -dijo, su tono cargado de desprecio.

-Hyunjin no...

-Jeongin, lo conozco antes que tú, se cómo actua y no le importaba meterse en relaciones ajenas, ¿Qué creías?¿Que él te escogería y serían la pareja perfecta? Si lo hizo contigo puede hacerlo con alguien más

Jeongin sintió que las palabras le atravesaban como dagas.

-No es así -protestó-. Hyunjin me ha mostrado cosas que nunca pensé que necesitaría y me hace sentir diferente

Minho se levantó del sofá, caminando de un lado a otro con las manos en los bolsillos.

-¿Y yo? ¿Qué soy para ti? -preguntó, su voz temblando-. ¿Solo una etapa más en tu vida?

Jeongin no pudo evitar sentir que su corazón se rompía un poco más con cada palabra que pronunciaba Minho.

-¿Y yo para ti?... -dijo Jeongin, sintiendo las lágrimas amenazar con caer de nuevo-. ¿Soy tu maldito desquite para cuando Han no quiera?

Minho se detuvo y lo miró directamente a los ojos.

-¿Por que cancelas el matrimonio?-preguntó, su voz llena de molestia, -¿Por el o por ti?

Jeongin sabía que no tenía todas las respuestas. La verdad era que estaba perdido y asustado.

-No, es por ti Minho.-respondió sinceramente-. No quiero estar en una relación con alguien a quien no amo y en vez de pagarte con la misma moneda debí decirte la verdad pero ahora me importa una mierda tu molestía, por qué a final de cuentas estoy seguro que luego de acá te irás a follar con Jisung...

Justo en ese momento, Hyunjin carraspeo la garganta, rompiendo la tensión palpable entre ellos.

-¿Todo bien? -preguntó con una sonrisa despreocupada, sin darse cuenta del clima emocional que había en el aire.

Minho lo miró con desdén, y Jeongin sintió cómo la incomodidad aumentaba.

-No, no está bien -respondió Minho, su voz llena de sarcasmo-. Maldito polla suelta.

Hyunjin frunció el ceño, captando la tensión.

-Y aún así le di más placer que tú...

-Hyunjin -Regañó jeongin y este hizo silencio.

-¡Jódense los dos! -se quejó mientras la puerta se cerraba tras él-. Ah, y... Jeongin, ese día sí te vi, pero la verdad no me importó mucho.

Las palabras de Minho golpearon a Jeongin como un puñetazo en el estómago. Sintió cómo su pecho se comprimía y sus piernas se debilitaban. Lentamente se dejó caer en el sofá, incapaz de procesar lo que acababa de suceder. A su lado, Hyunjin lo observaba con preocupación.

-Vístete, te llevaré a un lugar -dijo Hyunjin con firmeza.

Jeongin levantó la mirada, sintiéndose perdido.

-¿En serio? Mi compromiso se fue a la mierda y no solo no me consuelas tú... -protestó.

-Te ordené que te vistas. Vamos, te llevaré a un lugar -repitió Hyunjin, sin dejar espacio para más discusiones.

-Dios... -murmuró Jeongin entre refunfuños y lágrimas. Finalmente, se levantó y se cambió, sintiéndose un poco más ligero al salir de la habitación.

Ambos subieron a la camioneta y, tras un rato conduciendo en silencio, llegaron a una playa desierta. El sol comenzaba a ponerse, tiñendo el cielo de tonos anaranjados y rosados. Al bajar, caminaron por la orilla, el sonido de las olas rompiendo suavemente contra la arena.

-¿Por cuánto tiempo vamos a caminar? -preguntó Jeongin, sintiendo un ligero alivio en su pecho.

Hyunjin se encogió de hombros.

-El tiempo que sea necesario, deja de quejarte

Después de un rato de caminar, se encontraron ante una carpa decorada con luces suaves y cojines esparcidos por el suelo. Había una mesa pequeña con frutas frescas y una botella de vino.

-¿Qué es esto? -preguntó Jeongin, asombrado.

-Sé que no es el momento adecuado, pero no podía resistir un día más sin mostrarte esto -respondió Hyunjin, invitándolo a sentarse.

Jeongin se acomodó en uno de los cojines mientras Hyunjin se sentaba a su lado. Pasaron un rato entre risas y suaves besos, disfrutando de la compañía del otro. Jeongin sonrió y mordió su labio, sintiendo una mezcla de felicidad y confusión.

-Sé que no soy el hombre perfecto -comenzó Hyunjin, su voz cargada de sinceridad-. Pero aunque sé que no es el momento, quiero que sepas que estaría dispuesto a darlo todo por ti. Te amo, Yang Jeongin. Aunque me niegue a aceptarlo y aunque intente huir, me he enamorado de ti desde la primera noche que te vi perdido en el alcohol... o desde aquella vez cuando éramos niños.

Jeongin sintió un escalofrío recorrer su cuerpo al escuchar esas palabras.

-Solo quiero una oportunidad -continuó Hyunjin-. Sal conmigo. No necesitamos ser una relación formal, solo estar dispuestos el uno para el otro. Sin terceros, solo tú y yo.

Jeongin lo miró a los ojos, sintiendo la intensidad de su mirada.

-Está bien, acepto -respondió finalmente-. Pero dame un poco de tiempo. Solo necesito liberarme un poco.

Hyunjin asintió, una sonrisa suave dibujándose en sus labios.

-Tómate todo el tiempo que necesites, te voy a esperar.

🎱

Fin.








































Nah mentira ahora esque falta besos 🫵🏻🤣

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro