Su día iba bien, no tenía trabajo y decidió pasarlo con sus "amigos".

-pero que grande estás Pluto...¡Quién es un buen perro! ¡Tu, tu lo eres!

¡Grrrwofff!

-claro, como no eres tú quien lo cuida.

-jajaja, vamos Adrián, Pluto no es tan travieso.

-si, jejeje, dicelo a mis clientes, ayer casi me deja sin un cuerpo para enterrar jejeje.

-ups... perdón ¡Pluto-chan, no te comas los cadáveres de Adrián!

¡Aguuu! (Escondiendo su trompa entre las patas)

Pluto se había encariñado con Grell cuando esté le dió de las galletas de undertaker para evitar que se lo comiera, por lo que empezó a seguirlo. Grell no podía tenerle en su casa ya que vivía en un departamento de la agencia y si estos se enteraban lo aniquilaría, y a él le agradaba ese enorme can de ojos rojos, ya que sus ojos le recordaban a Sebastián y el  pelaje...

Terminó llevando al perro con undertaker, irónicamente el ex Shinigami había abierto una nueva funeraria en Francia y vivía en una entrada cercana a las catacumbas, donde a Pluto le gustaba correr, por lo que el mayor quedo a cargo del enorme can, que compartía su gusto por las galletas de hueso.

-y cómo va todo ¿Aún me buscan?

Ese día habían salido a pasear al campo, cerca de la región de Gevaudan.

-pues...si. William aún tiene a un equipo rastreandote...y el conde enano también te está buscando.

-mmm, que mal

Algo le decía que no tenía que preocuparse de Grell, que él no lo delataría.

-y ¿Cómo va todo con tus enamorados?

Pregunto muy quitado de la pena, pero mirando por el rabillo del ojo la reacción de su compañero.

-pues, estan bien...creo...mmm... Will sigue dando órdenes y encargando misiones aburridas y Sebas-chan...ya sabes, lo de siempre cuidando al mocoso.

No dijo nada más y se dedicó a devorar ese rico pan de queso. Undertaker tampoco abordó en el tema, al menos le alegraba que ya no entrara en depresión cada que hablaban de esos dos.

Pasaron el resto del día jugando con Pluto, lanzando un enorme árbol para que el can lo trajera, al final se acostaron en el pasto a descansar, Adrián le contaba algunas de sus anécdotas como Shinigami.

-espera...¡Un craken! ¿Enserio?

-bueno...eso creo, era un pulpo enorme.

-¿Pero como es que casi te come?

-ah, el alma que seguía era la de un pirata, ese loco sabía que iba detrás de él y se adentro en lo más profundo del océano, pase días correteandole, me cayó una tormenta, el bote donde iba se partió a la mitad y casi me come ese enorme pulpo...jejeje...fue muy divertido.

-por todos los infiernos Adrián, porque no solo te apareciste a su lado y ya.

-jejejeje, pero rojito, donde estaría lo divertido entonces.

De verdad que estaba loco, él no abría tolerado estar a la caza de una persona por tanto tiempo, para empezar ni siquiera sabía navegar.

Tumbados en la hierba Grell escuchaba atento todas las anécdotas de su superior, pese a su fachada actual de verdad fue muy entregado a su trabajo, ahora entendía porque Will le admiraba tanto.

Llegó la tarde y ellos seguian en el pasto, admirando como las nubes se teñian  de tonos violáceos y naranjas.

-...son muy brillantes.

- ¿Eh?...¿Que?

-...

-...¿Adrián?

Se giró a verle mientras levantaba su flequillo, tomando con delicadeza el rostro del menor.

-tus ojos...cuando ríes son muy brillantes...me gustan.

El sonrojo no tardó en aparecer, acompañado de un extraño burbujeo en su estómago.

-n-no- y-yo...tu-tus ojos también...bri-brillan...

¿Porque estaba tartamudeando?

La sonrisa de undertaker lo desarmo, este acariciaba su mejilla con mucha calma y suavidad.

Por un momento ambos tonos verdosos chocaron, detallándose a fondo. Grell comenzaba a temblar mientras undertaker se acercaba poco a poco. Tal vez algo más abría pasado...de no ser por el grito de un tercero... cuarto y quinto.

¡Una bestia, una bestia!
¡Corran!
¡Moustro!

Tres pequeños pastores pasaron corriendo despavoridos, gritando aterrados.

Los dos Shinigami se sentaron de golpe para verlos correr directo al pueblo.

-¿Bestia?

-¿cual?

Pero no tardaron en voltear a verse mientras sus ojos se abrían grandes...¿Donde estaba Pluto?

Al día siguiente la masacre de ovejas en  Gevaudan fue noticia de primera plana.

Y el culpable recibió un baño como castigo, así como una semana de abstinencia de galletas.