Etiqueta para mi más fiel lectora, gracias por apoyar cada uno de los capítulos de Aborto fallido AngelaBracho

La hora había llegado, debía enfrentar a mis padres y hacerme cargo de mi bebé, ésto no era para nada fácil, sinceramente tenía miedo a la reacción de mis padres, miedo a que no me quisieran ayudar o que me dijeran todo o más de lo que me han dicho los demás, pero era algo que debía enfrentar, después de todo llevaba más de un mes y mi vientre poco a poco se iba a notar, no lo podía ocultar pasara lo que pasara.

Al llegar a mi casa me armé de valor y llamé a mis padres, por suerte aún no se habían ido a trabajar y estaban dispuestos a escucharme. No tardé mucho en sentir como mis mejillas se humedecían poco a poco, sentía mis ojos derramar lágrimas con frecuencia mientras miraba como mis padres se ponían nerviosos y preocupados ¿Me sentía mal? Por supuesto, iba a decepcionar a mis padres en ese mismo momento cuando ellos solo me habían querido dar un futuro con una vida de princesa.

—Hija habla — mencionó mi madre con su rostro casi padeciendo.

—Yo... — no podía hablar muy bien, estaba entrando en pánico.

—¿Qué ocurre Lucía? — cuestionó mi padre con voz gruesa haciendo que me asustara más.

—Yo estoy... — cerré mis ojos con fuerza, suspiré y hablé — yo... Yo estoy embarazada.

Sentía mi corazón latir, mis manos sudaban mientras mi pulso se aceleraba afirmando que en cualquier momento me iba a desmayar, sabía que era muy exagerado lo que me estaba pasando, pero en mi estado cualquier cosa podía pasar. No supe cuanto tiempo había pasado desmayada, pero cuando desperté ya me encontraba en mi habitación con una sábana encima protegiéndome del frío ¿Eso era una buena señal? Tal vez sí, querían cuidarme, eso era o eso era lo que quería creer.

Después de unos minutos mis padres entraron con un jugo de naranja y unas cuantas pastas, lo dejaron en la mesita de noche y se sentaron en el borde de mi cama, yo me incorporé y los miré fijamente, se veían serenos, sin problemas y sin ninguna muestra de enojo en su rostro, por unos minutos me sentí aliviada y agradecida, quien iba a creer que allí comenzaría mi desgracia.

—¿Quién es el padre? — cuestionó mi padre mirándome fijamente.

—R-Richard — dije con titubeos.

—¿Por qué Lucí? — musitó mi madre. Yo agaché mi rostro — lo tenías todo, nunca te faltó dinero o atención ¿Acaso crees que un hijo te traerá algo bueno?

—No importa, sé que será díficil, pero yo lo quiero tener — sonreí — quiero verlo crecer y luchar por mi futuro junto a mi hijo y sé que con su ayuda podré salir adel... — no dije más al ver el rostro de mi padre.

—¡No! — gritó alterando todo en mí — ese hijo no nacerá, aquí tienes las pastas para que lo abortes.

—¡¿Qué?! — no podía creer lo que decía mi padre — no lo haré.

—¿Ah no?

Perdón por la tardanza, estaba en unas vacaciones donde no tenía señal y no pude subir el capítulo.

Los quiero 💜💜💜