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FINAL DE LA MARATON. CAPITULO 20.- UNA DOLOROSA PERDIDA. FINAL.

Hikari no recordaba bien que había pasado, se sentía algo débil, escuchaba estruendos, lo único que recuerda son las palabras de Tsunade, luego a Sakumo en brazos de Kurenai, luego el rostro preocupado de su esposo, al final el rostro de su padre diciendo que no pararía y luego nada, todo oscuro.
No sabia cuanto tiempo había estado inconsciente pero al recuperar bien la visión vio a unos metros de ella el cuerpo sin vida de Obito, se acerco a el e hizo el mismo jutsu que había hecho con Gaara y en un abrir y cerrar de ojos Obito despertó, se disculpo con Hikari por todo lo que había hecho y Hikari le dijo que tendría una nueva oportunidad en Konoha, luego lo llevo con Tsunade para que lo cuidara y se dirigió rumbo a la batalla, la chica no entendía como es que tenia tan poco chakra, al llegar vio a Kakashi débil, ahí estaba tambien Gai parecía quemado, Rock Lee cuidando a Gai con Ten ten al lado de alguien muerto, Hikari se acerco y al ver el rostro pálido y con sangre de Neji sintió ganas de llorar y gritar, vio a Naruto, Sasuke y a una chica llamada Sakura que siempre fue amiga de ellos tres luchar arduamente contra Madara, pero se veían agotados, aun nadie se daba cuenta que ella estaba ahí, hasta que Madara golpeo fuertemente a los tres nuevos Sannin haciendo enojar a Hikari quien salto frente a todos y activo su Rinnegan junto con su Magenkyo Sharingan y así activando su Susano'o perfecto.
Kakashi vio sorprendido a su esposa, trato de levantarse a detenerla pero estaba demasiado débil, ella solo lo miró de reojo y le sonrió tan dulce como siempre y salto y empezó a luchar contra Madara.
-Papa basta ya por favor, deja de lastimar a las personas que quiero- dijo la chica esquivando los ataques de Madara.
-Te dije que no pararía y no lo haré, el mundo será mío, lo esculpiré a mi imagen y semejanza- dijo el hombre ya consumido por el poder.
-Papa basta este no eres tu- dijo la chica bloqueando un ataque con la espada del Susano'o.
-Papa por favor...tú tienes un nieto- grito la chica con lagrimas resbalando por sus mejillas.
Madara quedó aturdido por las palabras de su hija, ¿un nieto? Oh no y ahora no estaba seguro si estaba vivo o no, pero ya era tarde para retractarse, dio un golpe certero a la armadura del Susano'o y este desapareció lanzando hacia atrás a su hija quien cayó en brazos de su esposo, la chica débilmente miro a su esposo.
-resiste Hikari quédate conmigo- dijo el peli plateado a punto de llorar.
Hikari sonrió y débilmente se arrodilló frente a él bajo la mascara de su esposo y lo besó, luego escucho algo que la alarmó.
-Mami, Papi- grito el pequeño Sakumo corriendo hacia sus padres.
La chica miró a su pequeño acercarse y miro a Kakashi preocupada.
-Protégelo con tu vida- susurro Hikari sorprendiendo a su esposo -Los amo tanto- dijo luego tomo la katana de Sasuke que estaba en el suelo y salto contra Madara.
El hombre estaba apunto de atacarla hasta que la chica lo sorprendió abrazándolo, luego sintió un horrendo dolor punzante dentro de el miro hacia abajo, su hija había combinado el Raikiri con la Katana y los había atravesado a el y a ella por completo justo en el corazón.
Hikari miro a su padre con una triste sonrisa y tosió sangre -te...te quiero papá- dijo Hikari.
Madara sintió un recuerdo venir a su memoria.
Recuerdo.
Estaba Madara sentado junto al estanque que había en el jardín en su casa en la aldea del sonido, disfrutaba de la paz y tranquilidad mirando a los peces nadar, cuando escucho que la puerta de su casa se abrió de golpe dejando ver a su pequeña de tres años con la cara enrojecida y llena de lagrimas.
-Papi papi una niña me pego- dijo la niña llorando y corriendo hacia su padre.
-Así que te pego ¿eh? - dijo el hombre con expresión seria pero le encantaba ver enojada a su pequeña princesa.
-Si papi- dijo la niña abrazando a su padre y sentándose en las piernas de el.
-¿por eso lloras princesa?- dijo el hombre.
-No papi, es que yo le pegue mas fuerte y mami me regaño y no me compro mis dulces- dijo la pequeña Uchiha aferrándose a la ropa de su padre.
Madara rió por lo bajo, esa era su pequeña, tan ruda como él, saco un par de dulces de una bolsa de su ropa y se los dio a la niña.
-No son muchos pequeña pero algo es algo- dijo el hombre sonriéndole a su hija.
La niña feliz los tomo y beso la mejilla de su papá -gracias papi, te quiero-
Fin del recuerdo.
Madara sintió sus mejillas húmedas y supo que estaba llorando, ahora se daba cuenta del daño que le hizo a su pequeña, pero ahora la chica estaba dando su vida por proteger a su familia, claro, esa era su hija, tan valiente como el, pero mucho más inteligente ya que ella si vio la bondad en los corazones de aquellas personas, el Uchiha tosió sangre y miro a su casi muerta hija.
-Te quiero Hikari- dijo el hombre y ella sonrió.
Kakashi no podía creer lo que estaba viendo, su esposa estaba dando la vida por Konoha, por el, por su hijo, abrazo fuertemente a Sakumo mirando a Hikari, la Uchiha miro de reojo a Kakashi y sonrió.
Luego ella y Madara se desvanecieron sin dejar rastro alguno mas que el charco de la sangre que habían perdido.
Todos miraban atónitos el lugar donde había estado la Uchiha segundos antes, Naruto grito ferozmente mientras lloraba, Sasuke estaba hincado con las manos en el suelo tambien llorando pero en silencio, Yamato quien apenas había recuperado la conciencia tambien lloraba desconsoladamente, nadie lo podía creer, menos Kakashi, mas bien el no quería creerlo, no quería creer que su esposa se había ido para siempre, el amor de su vida...había muerto.

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