Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Extra. Especial 100k

Cuando mi terapia terminó y mi corazón dejó de doler ante los recuerdos supe que estaba lista para perdonar;

Mamá, te perdono.

Papá, te perdono.

Me di cuenta que era necesario dejar las cosas atrás, por completo, no fue sencillo para mí terminar de superar la nube negra estuvo encima de mi cabeza durante tantos años. Sin embargo, han pasado varios años desde entonces y es momento… Momento de soltar, momento de comenzar finalmente una nueva etapa, ya no tengo dieciocho años, soy una adulta de veintitrés años y todo este tiempo solo me ha servido para crecer, sanar y fortalecerme a mí misma.

Durante estos años nunca me faltaron los cuidados y los consejos de Paula, sobre todo cuando finalmente decidí comenzar la universidad hace dos años; todo es parte de mi nuevo proceso.

Tomé asiento en la agradable mesa de madera y posteriormente Paula tomó asiento a mi lado, disfrutábamos de un agradable café mientras nos disponíamos a relajarnos con una agradable canción.

—Dakie, he estado pensando en algo —confesó Paula.

Aún no entendía su increíble perseverancia por llamarme Dakie.

—¿De que trata? —pregunté curiosa..

—He estado pensando en tu sesión número doce con la psicóloga.

Entonces fue suficiente para que mi memoria se refrescara, la miré con confusión y sin dejarme hablar, prosiguió.

—Creo que es momento, Daka —me observó con seguridad.

—Lo sé, Pau y tienes razón. También he estado pensando en eso últimamente, es solo que… Lo he evitado durante tantos años que es tan difícil —dije sincera.

—Todo estará bien. En dado caso me has dado la respuesta que quería, iremos el fin de semana —informó Paula victoriosa.

—¿¡El fin de semana!? —pregunté exaltándome en mi asiento.

No recibí respuesta alguna de Paula y eso solo me confirmó que no estaba bromeando. Paula seguía sorprendiéndome cada vez más, algunas veces actuaba como una adolescente y eso realmente me causaba gracia.

Cuando el fin de semana llegó supe que el día tan esperado finalmente estaba pisándome los talones, subí mi equipaje al auto de Paula y me estremecí al hacer contacto con el frío asiento del auto. En el camino nos limitamos a escuchar música, pero en mi cabeza un montón de pensamientos estaban presentes.

Sentí mi corazón saltar cuando visualicé el “Bienvenidos a “Sídney” a lo lejos, cada vez nos encontrábamos más cerca.

Y mi respiración, esta se detuvo cuando el auto finalmente estacionó en frente de lo que había sido mi pequeño infierno por tantos años. Paula me observó y finalmente apretó mi mano haciéndome sentir protegida.

—Verás que todo estará bien… Además, es momento de que finalmente busques a ese chico del que tanto me has hablado —sonrió victoriosa.

—Ya me has dado a conocer tus verdaderas razones, mi querida tía —la observé con una sonrisa.

—Sabes que te adoro —me recordó y finalmente me ofreció y cálido abrazo.
Sin más, bajamos del auto y cuando estuvimos frente a la gran puerta, sentí mis piernas temblar. Paula tocó el timbre y segundos más tarde observé el semblante sorprendido de Jessica.

—¡Por Dios! Hola, Daka… Tú… ¡Cielos! —la mujer no sabía que decir.

Sonreí por lo bajo mientras observaba como Paula se disponía a saludar a su hermana con un fuerte abrazo. Segundos después Jessica nos invitó a pasar, tomamos asiento en los sofás del salón y seguidamente Jessica fue hasta la cocina por algunas bebidas.

—Esto es realmente una hermosa sorpresa —dijo colocando las bebidas en una mesita.

—Lo es —me limité a decir.

—¿Dónde está Robert? —preguntó Paula causando que mi mirada se dirigiera de inmediato hacia ella.

—Oh... Él, bueno él está en su oficina —informó confusa.

—Hermana, esto será extraño pero… ¿podrías llamarlo? —interrogó Paula y Jessica asintió levantándose.

Minutos más tarde el hombre que por tanto tiempo la había maltratado estaba frente a ella, sentando observándola de pies a cabeza, totalmente confundido por su presencia.

—Habría jurado que nunca volvería a verte —dijo Robert.

—Yo… He tenido una razón para venir —confesé.

—¿Cuál es? —interrogó extrañado.

—Mamá… Papá —esas palabras dolieron en mi corazón—. Quiero decirles que los perdono y que si hay algo por lo que yo deba pedir perdón, entonces perdón… Los perdono por todos esos años donde no fui feliz, pero sobretodo te perdono a ti Robert, tú que me hiciste sentir el ser humano más despreciable, te perdono desde lo profundo de mi corazón —dije sintiendo como un nudo comenzaba a formarse en mi garganta deteniendo mis palabras.

—También te pido perdón, hija —dijo Jessica —. Perdón por haberte fallado, por no estar para ti y no ser la madre que necesitabas —lágrimas se desplazaron por sus mejillas.

—Yo… Bueno, yo… Sé que es demasiado tarde pero también te pido perdón —dijo Robert con una mirada baja y sentí como un extraño sentimiento me invadía—. Estuve ciego en el odio, pero yo… He aprendido a perdonar y a pedir perdón.

Me costaron asimilar sus palabras y creer que realmente eran sinceras pero finalmente me limité a asentir y sentí como un caluroso abrazo me impactó, era mi madre. No pude más, sólo lloré.

Las horas habían transcurrido entre anécdotas y disculpas, realmente me costaba expresarme y mantener una conversación por lo que me limité y a solo escuchar, la mirada de Paula se clavó en mí y entonces me susurró un:

—Ya es hora, mi querida Dakie.

Asentí entendiendo a que se refería y me levanté del sillón colocando como excusa que iría por un poco de aire fresco, salí del lugar a pasos rápidos y corrí hasta la casa de Elliot; inhale y exhale cuando llegué a mi destino, la tarde estaba cayendo y debían ser alrededor de las seis y treinta de la tarde, el frío comenzaba a colarse entre mis huesos, respiré una vez más y entonces toqué.

Segundos más tarde una señora de edad abrió la puerta sorprendiéndome por completo, y nerviosa pregunté:

—¿Se encuentra Elliot?

A lo que la señora me ve sorprendida y niega con la cabeza, sentí mi corazón contraerse.

—Lo siento, ellos ya no viven aquí.
La decepción me invadió, giré sobre mi propio eje para devolverme a donde yacía hace unos minutos, pero la voz de la señora me detuvo.

—Pero puedo darte su nueva dirección —informó.

—¿De verdad? —pregunté entusiasmada.

Observé a la señora asentir, adentrarse y al volver, traer consigo un papel entre sus manos que no tardó en cederme, lo tomé entre mis temblorosas manos y finalmente sonreí.

—Mil gracias, de verdad —le di un cálido beso en la frente a la señora y finalmente corrí a la dirección de la nota.

Diez minutos más tarde me sentía más cansada que la vez anterior. Sin embargo, al percatarme de que había llegado a mi destino todo eso se esfumo, toqué el timbre sin esperar un segundo más y entonces estaba allí… Sus ojos clavados en mí nuevamente y su expresión de sorpresa haciéndome intimidar.

—Daka… ¿Realmente eres tú? —preguntó sorprendido—. No, no. ¡Claro que eres tú!

Sentí sus brazos recorrer mi cuerpo y su barbilla clavarse en mi cuello. Todo el frío que sentía desapareció en un instante y solo pude agradecerme a mí misma por no haberme rendido, las lágrimas brotaron de mi rostro y seguidamente me encontré con un Elliot secándolas.

—Sabía que volverías a mí —dijo con voz la voz quebrada y las ganas de llorar bastante notorias.

—Elliot.. Yo… Volví para no irme de nuevo —aseguré entre lágrimas.

Elliot me abrazó con fuerzas y seguidamente clavó su mirada en la mía, observó mis labios y sin más, un dulce beso fue el protagonista de esa noche fría.

Te quiero, Elliot —susurré.

—Yo te quiero más, Daka —me respondió.

....

¡Hola! ¿Cómo han estado?
Honestamente no tengo palabras para agradecer lo que han hecho, ¡hemos llegado a los 100k! Mil gracias, de verdad. No sé cómo explicarles mi felicidad y todo lo que siento por este logro, confieso que ha sido un camino largo, los quiero demasiado.

Aprovecho para preguntarles, ¿se esperaban esto? ;) bien cursis los muchachitos.

Quiero informarles también que he editado todos los capítulos finalmente y que ya por lo menos, corregí errores más fatales de esta historia jaja, luego haré una corrección mas detenida de los párrafos pero por lo menos estamos mejor y me siento mas conforme con la historia.

Y finalmente OTRA SORPRESA

CHAN CHAN REDOBLE DE TAMBORES

He pensado hacer una secuela de esta historia solo narrando la historia de Daka y Elliot a partir de este punto, ¿opinan? Quieren, no quieren... díganmelo, yo creo que será emocionante y pues no más Jessica, no más Robert, solo Daka y elliot y quizá a veces Paula jaja... Ademas, si quieren algo más detallado de la conversacion de Daka y sus padres, díganmelo y hacemos un extra ;)

¡Pero hablen! Comenten... No soy adivina:) espero les guste la sorpresa, los quiero.

Nos vemos en algún lugar del mundo, los quiero mucho.

Valeria Ramos.

2019

Todos los derechos reservados.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro