Zigo y el evento
—Bien, Zigo, necesito que te comportes.
—¡Si, Valerian, me comportaré!
—No, Zigo, esto es serio—la de ojos lavanda le mostró la carta que recibieron la semana anterior—. Se que no sabes leer, pero en la carta dice que tenemos que asistir a un evento formal. En ciudad Artejo.
—¿Habrá combates?
—Si, Zigo habrá combates. De hecho, nosotros tendremos un combate de exhibición.
—¿Y comida?
—Habrá comida gourmet, pero necesito que te comportes como buen Pokémon que eres. ¿De acuerdo?—Zigo asintió—Bien, ahora corre a tu cuarto a prepararte, salimos en una hora.
Valerian se puso un vestido elegante negro con detalles blancos y su habitual collar. Zigo apareció por la puerta de la habitación de la chica con una sudadera oversize gris oscuro y con una corbata roja mal anudada.
—¿Así voy bien? No me digas que no estoy divino—el Zoroark chasqueó los dedos para mostrar lo diva que era.
—Zigo, te dije que tenías que ir formal.
—Es mi mejor sudadera, a demás cogí la corbata de papá.
—Como se entere nos mata.
—No tiene por qué enterarse—dijo encogiéndose de hombros y con una sonrisa traviesa.
Valerian llevó su mano al puente de la nariz.
—Venga, de acuerdo.
—¡Bien!—alzó sus brazos en señal de victoria—¡Estoy deseando comer, y combatir! ¡Pero sobre todo comer y combatir!
—Zigo, te repites más que el ajo.
—Venga, termina de prepararte, quiero irme ya.
Valerian dejó escapar una sonrisa.
—Al principio creí que no querías venir, pero me alegra que tengas tantas ganas.
—Es que quiero saber a qué sabe la comida gourmet—admitió—, pero venga, vamos, me quiero ir ya.
Valerian terminó de guardar unas cosas en su bolso y se lo colgó de un brazo.
—De acuerdo, nos vamos ya.
•••
Valerian bajó del taxi volador seguida de su Zoroark. Habían llegado a ciudad Artejo, más concretamente a una mansión cerca del estadio.
—¿Es usted Valerian Stewart?—preguntó uno de los guardias que había en la puerta de la mansión mirándola a través de sus gafas con cristales tintados.
—Si, soy yo—dijo mostrando una tarjeta identificatoria que había venido por correo junto a la carta que la invitaba a asistir al evento.
Zigo se acercó al guardia y lo miró fijamente.
—¿Y quien es él?—el guardia señaló a Zigo.
—Zigo, mi pokémon.
Zigo se recobró su forma original y después de nuevo la humana.
Valerian pudo ver la cara de sorpresa de el otro guardia, el cual era tan ancho como un armario.
—Todos se sorprenden—dijo Zigo echando su cabello hacia atrás.
—No me sorprendo por eso—dijo el guardia ancho, luego se dirigió a Valerian—¿Es usted la hija de Ronald Stewart?
—¿Cómo sabe quién es mi padre?
—Soy un gran fan, ¿Me podría hacer una foto con usted? Para fardar un poco...—miró a su compañero de gafas— Ya verás cuando le cuente a mi novia que he conocido a la hija de Ronald Stewart.
Entonces Roy sacó la cabeza por la puerta.
—¡Enana!
—¡Poste de luz!
Roy salió y la tomó del brazo.
—Lo siento señores, las fotos en otro momento. Ahora me llevaré a la invitada de honor a la fiesta.
El guardia ancho hizo un ademan de deci algo, pero finalmente no lo hizo y los dejó pasar.
Valerian tenía que caminar muy rápido para seguir el ritmo de las largas zancadas de Roy.
Cuando llegaron la vestíbulo, Valerian admiró la decoración y pensó que parecía un castillo de fantasía, pues hasta habia una armadura y el ambiente era muy elegante.
Zigo se acercó a la armadura y le quitó la espada.
—Bueno, ¿Nos echamos una foto?—Roy sacó su teléfono de uno de sus bolsillos de su traje azul oscuro y naranja—Quiero subir una foto contigo a mis historias de PokéGram—le guiñó un ojo.
—¡Claro!
Los dos posaron y se echaron una foto, la cual Roy subió a sus redes.
No sé dieron cuenta, pero en el fondo, aparecía Zigo con la espada de la armadura de exposición y también con el casco puesto, y con el visor arriba.
—Venga, vamos, nos esperan en el salón—dijo Roy.
Los dos llegaron, seguidos de Zigo, el cual había dado una patada al casco para esconderlo debajo de una mesa.
El salón principal era enorme, tenía una amplia mesa de banquetes, llena de los mas exquisitos manjares, tanto dulce como salado, decorada con candelabros de cristal. Había estatuas de hielo con minuciosos detalles y todos los líderes de gimnasio estaban allí vestidos de forma elegante. A demás había una pista de baile y había un DJ poniendo música.
—¡Valerian, mi niña! ¿Como estás? ¿Te va todo bien?—una mujer de cabello blanco se acercó y la estrechó un fuerte abrazo.
—¡Mel, hola! Estoy bien, ¿Y tus hijos, que tal?
—Morris está por aquí, picoteando, a pesar que está a dieta. Pero bueno, ¡Qué alegría verte! Ya estoy deseando nuestro uno versus uno en el estadio esta noche.
Zigo entró a la sala, pues se había quedado atrás y al verla soltó un grito de exclamación.
—¡Me cago en la leche! ¡Hay mucha comida en la mesa!
Valerian le dio un zape y él se sobó la nuca.
—Ese chico tiene un aura siniestra...—murmuró Alistair encogiéndose en un rincón.
—Ese es Zigo, el Zoroark de Valerian—le dijo Judith.
Valerian se acercó a saludar a los demás.
Zigo mientras cogió uno de los candelabros y se lo colocó en la cabeza y dijo las siguientes palabras muy satisfecho.
—Definitvamente, este es un buen sombrero.
•••
Mientras Valerian socializaba, Zigo tenía su propia idea de una fiesta.
Se acercó a la mesa de postres, donde estaba Morris picoteando.
—Oh, tú debes de ser Zigo—dijo—, juro que no estaba rompiendo la dieta.
—¡Morris, vamos a ver quién puede comer más postres sin estallar!
La mirada del líder de tipo roca cambió de una de culpabilidad a otra de decisión.
—¡Reto aceptado!
—¡Bien!—Zigo hizo como que se soltaba un poco la corbata mal anudada—Empezamos en tres, dos, uno... ¡Adelante!
Los dos se dieron un atracón de postres y Morris acabó sentado en una silla sin poder moverse por el empacho.
•••
Berto se acercó a Valerian, la cual estaba hablando con Lionel, Percy y Cathy.
—¡Hey Valerian!
—Un momento, ¿Berto?—se le iluminó la mirada.
Él sonrió. Le daba algo de corte estar vestido de traje frente a ella.
—Os dejamos—dijo Cathy guiñándole un ojo a Berto—, vámonos Percy, Lionel.
Los dos adultos se fueron a comer algo a la mesa principal.
—Estás deslumbrante—dijo Berto con un leve sonrojo que pasó desapercibido por Valerian.
—Tu también estás muy bien.
—Se ve que este evento lo hacen todos los años... Invitan a loa líderes de gimnasio, campeón y casi campeón para unos combates de exhibición, ¿Estás nerviosa, por el combate de luego?
Valerian negó.
—Estoy más emocionada que nada—dijo con una sonrisa.
—De normal habría venido Sally, pero como ahora el líder soy yo pues me toca pringar... No me gustan mucho estos eventos...
—Tranquilo, puedes quedarte a mi lado y así no estarás tan nervioso.
«En realidad estar a tu lado me hace estar más nervioso y no se por qué» pensó Berto.
•••
Zigo se acercó al DJ y le pidió algo de música al oído. Él le respondió con un pulgar arriba y miradas cómplices.
La música de ambiente cambió a una de vals.
Zigo se acercó a la primera persona que pilló, que resultó se Judith.
—¡Vamos a bailar!
Judith estaba confundida, pero no sé negó.
Resultó que Zigo comenzó a bailar una versión caótica del vals en la que era extrañamente bueno.
—¿Tú sabías que Zigo bailaba?—preguntó Roy.
Naboru negó con la cabeza mientras miraba con su habitual ceño fruncido.
•••
Valerian oyó como la música cambiaba al vals y miró a Berto.
—¿Sabes bailar?
Berto miró a otro lado.
—Bailar, pues si se bailar... Sally me enseñó... ¿Quieres probar?
—¿Quieres bailar conmigo? Puede que te pise los pies.
—No te preocupes, yo te enseño.
Berto tomó a Valerian de la mano y la llevó a la pista de baile.
Le enseñó como colocarse y por la situación sintió como se calentaban sus mejillas.
—El vals se baila en un, dos, tres, un, dos tres. Es lo básico. Mira, tú solo sígueme.
Valerian sonrió y sintió un leve rubor que disimuló mirando a otro lado.
Berto le enseñó como bailar, paso a paso y sobre la marcha. Incluso llegaron a hacer bien un giro y Valerian solo lo pisó dos veces.
•••
Zigo se acercó a Roxy, la cual estaba comiendo un platito de aspecto muy caro.
—¡Hey Roxy!
—Hola Zigo.
—Veo que tienes las uñas pintadas de rojo... Te queda bien...
—Gracias.
—Por cierto, ¿Tienes el esmalte en tu bolso?
—Si, ¿Por?
—¿Me lo dejas?
Roxy miró las garras de Zigo, las cuales ya eran rojas.
—Eh... No.
•••
El estadio estaba a rebosar de gente que había ido a ver los combates de exhibición. Primero habían sido los combates de Percy versus Roxy, Morris contra Alistair y Berto contra Naboru y ahora tocaba el de Valerian conta Mel.
—No te dejaré ganar—le había dicho Mel.
—Ni yo a tí—dijo decidida Valerian.
Los líderes, Lionel y Valerian estaban en la sala de espera mientras se anunciaba el combate de Mel y Valerian.
Lionel se acercó a Valerian y le chocó el puño.
—Vamos, le ganaste una vez puedes de nuevo, aunque Mel ha mejorado mucho—dijo.
Valerian sonrió.
Zigo había estado intentando abrir un caramelo raro que le había dado Cathy sin el permiso de Valerian y cuando ella lo miró lo escondió.
—Vamos, Zigo, a combatir.
Zigo recuperó su forma de Zoroark y se acercó a su entrenadora.
Los dos entraron al campo de combate al tiempo que Mel lo hacía por el lado contrario, acompañada de su frosmoth. Se estrecharon las manos y cada una se fue a un lado del campo.
—¡Adelante frosmoth, confío en tí!
Valerian no dijo nada y pero indicó a Zigo que fuera a combatir.
Para su sorpresa, el Zoroark adquirió su aspecto humano y caminó tranquilamente hacia el centro del campo.
Mel, frosmoth y Valerian estaban tan sorprendidas como el público, el cual murmuraba.
—¡Hola público! Supongo que han venido a ver el combate de exhibición—dijo Zigo alzando la voz para ser captado por los micrófonos y mirando a uno de los drones Rotom.
—Zigo... ¿Qué estás haciendo?
—Pues a mí, como Pokémon de Valerian también me encanta combatir, pero puedo darles algo mucho mejor—dijo ignorando a Valerian.
—¡Zigo!
—¡Frosmoth usa viento hielo!—mandó Mel a su Pokémon.
El Pokémon obedeció, pero Zigo golpeó el suelo con su pie y del suelo salió la ilusión de un enorme dragón de roca que pareció tragarse el movimiento del frosmoth.
Hubo un sonido de asombro del público, mientras Zigo rápidamente se colocaba en una posición ventajosa y atacaba al frosmoth con pulso noche aprovechando la distracción.
Frosmoth contraatacó con zumbido, pero Zigo creó nueve ilusiones de su mismo pare distraer a frosmoth.
El Pokémon tipo hielo usó zumbido de nuevo, y al Zigo al que atacó se desvaneció.
—¡Atácalos a todos, así desaparecerán?
Poco a poco todos desaparecieron, hasta que solo quedaban dos. El verdadero Zigo chasqueó los dedos y el otro desapareció. Entonces Zigo pareció agrandarse tanto que parecía dinamax y adquirió su forma original.
Levantó su pata e intentó pisar a frosmoth, pero ella lo evitaba.
Mientras, Zigo se reía confiado.
Valerian estaba estática, viendo cómo Zigo llevaba el espectáculo por su cuenta.
—¡Solo es una ilusión, frosmoth, usa viento hielo!
El Pokémon bicho accedió y Zigo hizo como que toda la ilusión enorme se congelaba y después desaparecía ente humos.
El verdadero Zigo estaba tras Valerian, en forma humana.
—¡Aquí estoy!
—¡Zigo ya basta!
—¡Mira al público! Están encantados conmigo—le dijo a su entrenadora.
Valerian se fijó en que el público animaba a Zigo con ovaciones.
Zigo siguió por un rato con las ilusiones, haciendo reír al público y causando sensación entre los espectadores.
Frosmoth estaba muy confundida, había pasado por un laberinto de espejos que parecía muy real, un bosque y un volcán que Zigo había creado. A demás de géiseres de fuego con los que Zigo había conseguido asustarla.
—¡Y ahora, atentos!
Zigo pareció desaparecer convirtiéndose en arena y fundiéndose con el suelo.
—¡Frosmoth, cuidado, mantén la guardia alta!
Valerian estaba espectante, no había hecho nada en el combate y aún así iban ganando.
—¡Aquí estoy!—dijo Zigo apareciendo tras de frosmoth, convirtiéndose en su forma original y atacándola con sus garras.
Frosmoth cayó al suelo y hubo una ola de gritos de admiración.
Zigo se acerca a Valerian y ella acaricia su cabeza de Zoroark.
—Bien hecho, Zigo, has dado un buen espectáculo.
Dijo ella sonriendo ante la gran aceptación del público.
Zigo volvió a transformarse en humano y miró a un dron Rotom que retransmitía en la pantalla.
—¡Y no se olviden de su estrella del día!—dijo, para luego tomar de la mano a Valerian y salir corriendo con ella hacia el interior de la sala de espera.
•••
—¡Ha si-sido increíble Zigo!—dijo Alistair algo tímido, el cual se sentaba al lado de él en la mesa del banquete de la noche.
—¡Si, eres un maestro de las ilusiones!—le dijo Judith—Estábamos super impresionados, lo has hecho bien.
—¡Todo es gracias a Valerian! Ella me entrenó.
—Tambien tienes algo de talento innato, no todo es gracias a mi—dijo Valerian guiñando un ojo.
—¡Demos un brindis por nosotros! Especialmente por Lionel, nuestro campeón, pero también por Valerian y Zigo, el verdadero protagonista del evento de hoy—dijo Roy con una copa.
Zigo miró con malicia a Roy y por debajo de la mesa chasqueó los dedos.
La instante, Roy comenzó a transformarse en un dragón enorme que escupía fuego.
Hubo un momento de pánico colectivo, en el que algunos invitados gritaban y otros tenian caras de asombro.
Valerian le dio un codazo a Zigo, el cual estaba riendo por lo bajo, e hizo unos gestos.
«Zigo, ya basta, compórtate»
Zigo volvió a chasquear los dedos y Roy regresó a su apariencia normal, y con rostro de confusión.
Zigo se aguantó la risa.
—De acuerdo, prometo portarme bien... Pero solo hasta el próximo evento—dijo mientras cruzaba los dedos tras su espalda.
🛡️🍵
__________
Valerian: Zigo, ponte elegante.
Zigo: *con una sudadera enorme y una corbata más puesta* voy perrísimo
__________
•••
__________
Berto: ¿Bailamos?
Valerian: Pero no se :c
Berto: eso no será un problema ;)
__________
•••
__________
Zigo: *hace el espectáculo de su vida*
Valerian: 🕴️
__________
🛡️🍵
Llevo toda la mañana trabajando en esto. Se me han quedado unas 2400 palabras más o menos.
Por el dios bidoof, esto fue capítulo ultra largo.
Dígame que quieren ver, no se corten pidiendo para esta historia ;)
Pues nada, ya se la saben, voten comenten y bla bla bla.
⭐¡Astro la vista!⭐
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro