Al día siguiente Arley, se levantó con los ánimos muy bajo, miro hacia su derecha y vio a Gino dormido, se enterneció debido a que su amigo se había quedado a cuidarle, se levantó con cuidado, fue a la cocina y empezó a preparar papas fritas con tocino y batido de zarzamoras, mientras tanto el chico sintió el olor y se despertó.

- Huele delicioso - se levanta de la silla y baja a la cocina, al ver a la chica sonríe - buen día principessa -

- B-Buenos días, Gino - se sonroja -dentro de unos minutos, estará el desayuno listo, siéntate - se concentra para terminar

- Claro linda - se sienta con tranquilidad y espera

- Termine - sirve el desayuno de ambos, le pone el plato junto con el vaso - buen provecho - se sienta al frente del italiano

- Igualmente - sonríe y degusta del desayuno - esta delicioso - comenta con una sonrisa

- Que bueno, me alegro que te guste - sigue comiendo hasta terminar

- Ven yo recogeré todo - empieza a tomar los platos y los vasos de los dos

-Yo los lavare, deberías bañarte, para luego salir por ahí - dice de manera tranquila y se acerca al lavaplatos

- Está bien, por suerte pediste que me trajeran ropa - le mira y deja los platos donde debe - tú lo lavas y yo los acomodo - ve que la chica asiente

- Gracias de verdad, Gino por quedarte conmigo, después de lo de ayer - dice mientras lava los trastes

- Arley, no tienes que agradecer, siempre estaré para apoyarte en todo - toma los platos ya lavados, los seca y los pone en su lugar

Luego de que la chica y el portero terminaran todo, ambos se fueron a dar una ducha, en sus respectivos baños, luego en sus cuartos se visten y se encuentran en la sala de la casa y salen juntos.

- Me alegro que te animaras a caminar, eso te hace bien, Arley - le sonríe de manera especial

- G-gracias a ti, por soportar mis pataletas - se sonroja levemente y ve hacia un lado, se encuentra a Rika muy sonriente - esa maldita marginal - susurra enojada

- Genial lo que nos faltaba - dice con sarcasmo el portero y viendo como la chica se acercaba

- Vaya Gino Hernández, que gusto verte - sonríe muy coqueta y mira Arley con frialdad - No sabía que salías con bebés -

- Pues yo debo decir que para mí, no es un gusto verte - responde el chico con repulsión - Además ella no...-

- A ver, niña descerebrada, no soy una bebé, apuesto mi cabeza que soy más mujer que tú - intervine con lo que él italiano vaya a decir y replica molesta

- Como te atreves, yo no soy eso, además por algo Schneider, me beso - replica de manera victoriosa

- Pues tú y él me la pelan, que sean felices juntos - sonríe y camina

- Yo no soy Karl, Rika así que olvídate de que existo y si intentas hacerle algo, te las veras conmigo - va tras Arley

Rika se quedó sola y haciendo rabietas por lo ocurrido, no podía creer que el italiano prefiriera a Arley, antes que a ella, eso no le agradaba para nada. Por otro lado el Káiser, estaba mal por lo ocurrido y buscaba la manera de hablar con la mujer que amaba.

- Debo verte, hablarte y decirte todo Arley - se susurra a si mismo el el rubio mientras camina por la cuidad

- A ver Gino a donde me llevaras - pregunta la chica con una sonrisa

- Vamos a jugar fútbol por su puesto, quiero que te olvides de todo, además será contra Aoi Shingo - sonríe

- A ese papanatas me la pela, le ganaré eso tenlo por seguro - mira hacia al frente hasta chocar con la mirada azul

- Arley... - la mira sorprendido - Debemos hablar por favor - ignora olímpicamente al italiano

- No tenemos nada que hablar, vete a besar a esa cualquiera - recrimina molesta - además estoy muy bien acompañada - señalando a Gino

- Él no puede ser más importante que yo - se enoja un poco - quiero explicarte que fue lo que paso con esa tonta -

- No quiero saber, además parece que lo disfrutaste mucho- le contesta de manera ácida

- Te estaba llamando y ni siquiera me tomaste la llamada - responde en su defensa

- Pues te dije que no quiero hablar contigo, rubio de quinta avenida - se aleja enfadada

- Ya oíste Káiser, déjala tranquila o no respondo la próxima vez - va tras la chica

Schneider se queda mirando como ambos se van, siente que la esta perdiendo y debe idear un plan pronto para recuperar a la chica que ama, mientras tanto Arley, se aguanta las ganas de llorar y Gino le da un abrazo para no verla llorar y le dice algunas cosas para que se alegre de inmediato.

~Grett y Genzo~

Ambos hermanos estaban en sus respectivas habitaciones, cada uno sumergido en sus pensamientos, Grett pensado en lo bien que lo había pasado con Stephan y también lo ocurrido con Jun que no había sido tan agradable. Mientras tanto Genzo, no paraba de pensar en Verónica, se levanta y va con su hermana.

- ¿Qué haré? No puedo dejar de pensar en Stephan - escucha que golpean su puerta - adelante hermano - sonríe al verle entrar

- Hola hermanita, puedo hablar contigo - al verle sonríe y se sienta en la cama

- Claro hermanito, a ver dime ¿qué te ocurre? - espera la respuesta del chico

- Le conté todo a Vero-chan, de lo ocurrido con Gabriella - suspira y ve la mirada perpleja de su hermana

- ¿En serio lo hiciste? ¿Por qué? - aun no sale de la impresión al enterarse - ¿Todo? ¿También le dijiste que le fuiste infiel?

-Porque Angelito, no entendía que Gaby-chan, no estuviera en la selección y pues le conté todo, se enojó conmigo y se fue - observa el piso y recuerda lo ocurrido - claro que no le dije! me odiara de por vida-

- Es lo normal, Vero-chan, piensa que es su culpa - suspira - te apuesto que fue hablar con Gaby-chan, para saber si la odiaba o algo parecido - acomoda su ropa -eres un cobarde Genzo, eres mi hermano pero eres un cobarte, tarde o temprano todo se sabrá- 

- Claro que Gaby-chan, no la odia, más bien me odia a mí - sigue mirando el piso - y tienes razón soy un cobarde-

- Sabes no creo que te odie hermano, más bien creo que... ella no te perdona por no decirle la verdad y hasta donde se no te has disculpado como es debido - le mira con sutileza y espera la respuesta - y su sumamos la infidelidad lo que la tiene así contigo es su orgullo de mujer- 

- Tienes razón hermana, no le pedí disculpas, creo que debo hacerlo en algún momento - la mira también -y si ella es muy orgullosa -

- Hazlo cuando te nazca, no porque te lo digo yo - le sonríe y le mira comprensivamente

Luego de esa conversación el mayor de los Wakabayashi, sale de la habitación, mientras Grett, se viste y sale de casa a caminar un rato, se distrae un poco y choca con alguien.

- Lo siento mucho no era mi intención - alza la mirada y ve al sueco frente a ella

- No lo sientas, más bien me agrada a ver chocado contigo - le sonríe feliz

- Stephan, un gusto verte... ¿Qué haces aquí? - sorprendida y muy feliz

- Quería ver si te encontraba y mira tuve suerte de encontrarte - satisfecho por el encuentro - ¿Qué tal si vamos a pasear y jugar futbol? - le propone

- Vaya que no sabía que deseabas verme - se sonroja un poco y desvía la mirada - M-Me encanta la idea vamos - sonríe con alegría y sigue al chico

- Pues ya vez que si - le sonríe - ¿Qué me puedes contar de ti? -

- Soy... La hermana de Genzo Wakabayashi, mis mejores amigas son Arley, Vero, Sakura y Gabriella - sonríe

- Así que la hermana del SGGK, interesante aunque ya lo sabía - le mira - amiga de ~beso de ángel~, ~angelito~, Sakura... y ~la niña de los ojos verdes~, vaya eso si no me lo esperaba -

- La verdad somos unidas, a pesar de que hay dos que cuando se ven pelean de la nada - suspira

- Y eso porque, si se supone que son amigas - sigue mirándole

- Pues... Arley y Gaby siempre tiene ese roce, la verdad es un poco penoso, al final ojitos verdes, se termina alejando -

- Vaya eso es raro y han tratado de decírselo - la ve negar - debería hacerlo o cuando se den cuenta, alguna se va alejar definitivamente de ustedes -

- Tienes razón, pero ambas tienen un carácter fuerte, la verdad no sé que pasara ahí - llegan a una cafetería y entran

- Pues en algún momento eso estallará y no será tan bonito, sé que Arley tiene su carácter y es muy abrumador a veces dan ganas de alejarse, pero es buena persona - le saca la silla a la chica y la ve sentarse

- Lo es, eso te lo aseguro, pero así como es la queremos - sonríe y ve al chico que se sienta a su lado

- A Gaby, pues la conozco poco, pero por lo que he visto, es muy buena persona, pero es de cuidado cuando se enoja, no debe ser fácil - pensativo y mira que pedir

- Yo la he visto enojada, créeme no es divertido, es de terror y puede ser de temer - suspira a recordar

- Yo pediré un té frío de frutos rojos y un pedazo de dulce de chocolate - observa a la chica - entiendo, debe ser por lo de Genzo -

- Yo quiero lo mismo por favor - sonríe y mira al rubio - si precisamente por eso lo digo -

Ambos se quedan en silencio un momento por lo que escuchan uno del otro, luego al ver sus órdenes comen con calma y cambian de tema radicalmente, mientras el portero aun permanecía en casa, de la nada decide salir, con el balón empieza a correr hasta que choca con alguien.

- Lo siento mucho, señorita - le ayuda a levantarse y le mira sorprendido - Gabri...ella -

- No se preocupe, pero tenga más cuidado - se deja ayudar, se levanta y mira al chico - Wakabayashi... -

- De verdad lo siento mucho, podemos hablar - suelta de la nada y mentalmente se cuestiona

- Y según tú, ¿Qué tenemos de hablar? - le mira fijamente esperando la respuesta

- De lo que paso... en verdad necesito que hablemos - un poco desesperado por la respuesta de la chica

- Esta bien, Wakabayashi, vamos a una cafetería - suspira y va por delante del chico

- "Ahora solo soy Wakabayashi" - piensa un poco dolido el portero mientras le sigue el paso

~Llega a la cafetería~

- Por favor quiero un jugo de uva y galletas de macadamia - pide con tranquilidad

- Yo deseo un expresso con dos cucharaditas de azúcar y también quiero galletas macadamia - ve que la camarera se retira y mira a la chica

- ¿Entonces que es lo que me quieres decir? - le mira con mucha seriedad y espera la respuesta

- Primero quiero saber si odias a Vero-chan - suspira y mientras traquea los dedos

- Claro que no, ella es mi amiga, no es su culpa que tú estés enamorado - le mira con mucha tranquilidad

- Entiendo eso es muy bueno - se relaja con mucha tranquilidad 

- ¿Por qué no me fuiste sincero? ¿Por qué me fuiste infiel, con esa mujer? - ve como el portero se tensa

- Yo...bueno tenía miedo de tu reacción, no sabía cómo dec... - ve que la chica alza la mano

- No me vengas con eso y responde como un hombre, Wakabayashi ya no eres un niño mimado - dice con cierta dureza y ve como le ponen lo que pidieron

- Bueno pensé que la había olvidado, pero un día la vi y me di cuenta que aun la amaba, pero si acepto que fue un error no decirte de inmediato, pero tenía miedo además no quería lastimarte, pero al no decirte lo hice - bebe un poco de su expresso -  por lo de Rika estaba ebrio y pues se fue a lo que no debia, pero no se que me paso en ese momento pero... yo no sabía-

- Wakabayashi, por amor a Kami, acaso tenías lastima de mi - le mira enfadada y decepcionada

- Yo lo siento - contesta muy apenado

- Eres un idiota, lo que menos necesito es eso, me han pasado cosas peores, pero me enfada mucho- toma jugo y no le mira para nada

- De verdad perdón, Gabriella, perdón no quería lastimarte y mucho menos sentir lastima hacia a ti, tienes razón soy un idiota en todo el sentido de la palabra, pero hay algo que no mentí jamás, fue de verdad te quise mucho. Pero no fui sincero y ese fue mi error, no creas que no me dolía, me costaba expresarme y lastimarte porque sabía que te perdería incluso como amiga- se sincera y  le observa

- Sinceramente Wakabayashi- suspira y toma aire -no se, pero algo me dice que esas palabras tuyas son sinceras, además yo no quiero llenarme de odios, ni rencores, por cuyas razones... yo te perdono, la amistad tal vez algún día la podamos recobrar al igual que la confianza por ahora, solo te pido que no lastimes a Veronica y pienses bien en las cosas que haces- se levanta para pagar la cuenta de ambos, le dedica una sonrisa sincera y se va

El portero queda sorprendido y estupefacto ante lo ocurrido, las palabras de su ex-novia resonaban en su mente, lo había perdonado eso le quitaba un gran peso de encima, en la mesa siguiente Grett y Stephan quedan también sorprendido y luego sonríen por lo ocurrido.

~Verónica~

La rubia se levanta de su cama, se acerca a la ventana y ve como ha amanecido el día, bosteza con mucha calma, pero a la vez analiza de todo lo que se ha enterado, baja a desayunar con calma, luego se baña, se viste y sale a caminar.

- El día esta hermoso, muy hermoso - camina con calma y se distrae por el paisaje, siente que le dan con un balón - auch - cae al piso

- Demonios Santana, te dije que no patearas tan duro - se queja Naturezza y Leo al mismo tiempo

- Ya, ya, yo buscare el balón - va a buscarlo y ve a la chica y al balón - Etto... Acaso te golpee con el - señala de manera evidente

- Así que fuiste tú - recrimina molesta - Sí, tú me golpeaste con... el balón - alza la mirada y se encuentra con los ojos grises

- De verdad lo lamento, no fue mi intensión - extiende su mano para ayudarla

- G-gracias - toma la mano y se reincorpora - solo debes tener más cuidado a donde tira - dice de manera amable y con un tenue sonrojo

- Lo haré, lo prometo - le mira a los ojos - ¿Qué haces por aquí Angelito? -

- Hola Carlos, estoy paseando - hace una leve inclinada

- Vaya que bueno, debe ser por algo verdad- sonríe a la chica

- Sí, la verdad y ... ¿con quién estas? - le mira con tranquilidad

- Con Naturezza y Leo, ¿Quieres jugar con nosotros? - espera la respuesta de la chica

- Me encantaría, muchas gracias por la pregunta, vamos - sonríe feliz e internamente estaba nerviosa por la compañía

- Sí, vamos - le guía al campo de juego donde están los chicos - Hey ya vine, miren ella es Verónica - presenta a la chica

- Un gusto Veronica, mi nombre es Naturezza - sonríe gentilmente a la rubia

- Hola Veronica, que bueno verte - sonríe la rubia

- Hola Leo, igualmente y has visto a Gaby?  - sonríe

- La verdad no, pero me encantaria la verdad es que ella - iba a terminar pero le interrumpe

- Ella te gusta y mucho - revelan Carlos y Naturezza al mismo tiempo

- ¿P-pero que dicen? - se sonroja - e-eso no es verdad- trata de negarlo

- Si aja como no, a otro perro con ese hueso - vuelven a decir los otros dos brasileños

- Así que te gusta mi amiga - sonríe y mira la escena - pues entonces deberías hablarle e invitarla a salir -

- Antes de que haga eso, primero se desmayaría - comenta Pepe llegando de la nada con ellos

- Pepe! No necesito tu colaboración - le señala el castaño con el dedo y escucha la risa de la chica

- Bueno, bueno calma, vamos a jugar futbol mejor - toma el balón

Los equipos se dividen en dos Carlos y Verónica vs Leo y Naturezza, Pepe queda siendo el árbitro del encuentro, el de ojos grises empieza a la jugada, Leo de inmediato se interpone en su camino y empiezan a pelear por el balón, ganando el Cyber, ve como su otro amigo intenta frenarle, le hace una finta y manda la bola hacia a Angelito, que lo toma de inmediato hace una jugada rápida y anota un gol.

- Gooooooooooooooool! De Verónica - dice Pepe emocionado por lo ocurrido

- Por amor a Dios, Pepe no vuelvas hacer eso, pareces una marrana pidiendo auxilio - comenta el Cyber del futbol

- Estoy de acuerdo con Santana, parece que te estuvieran matando o algo por el estilo - comenta el castaño tapándose los oídos

- Hasta espantaste a las pobres aves - dice decaído el chico de las trenzas

- Pero eso no es cierto! - se queja el amigo de Tsubasa con un puchero

-Jajajaja si lo es - le contestan todos a la vez riéndose del chico

- ¿Qué tal si tomamos algo? - propone la chica y ven que los muchachos asienten - vamos entonces - empieza a caminar

- ¿A dónde nos llevas? - pregunta el castaño curioso mirando todo

- A una cafetería, tienen un buen menú - sonríe mientras camina a lado de Santana

- Eso es interesante, Verónica - le mira de vez cuando - además quiero conocer más este país -

El chico de vez en cuando mira a la rubia, sus compañeros se dan cuenta y sonríen cómplices, al parecer el Cyber, si tenía un corazón y al parecer tendría una dueña. Por parte del castaño solo tenía en mente a la de ojos verdes, no la había visto y se preocupaba por su estado de ánimo. La rubia camina un poco cohibida a lado de los ojos grises, su mirada la había cautivado, se sonroja mientras camina.

~Gabriella~

Después de aquel encuentro, llego a su apartamento y se acostó en su cama pensando en todo, en parte se sentía mucho mas tranquila por haberle perdonado, sonríe y decide  levantarse de su cama, se cambia de ropa y sale de la casa, junto con su balón, va con el hasta que un hombre le quita el balón con una zancadilla.

- Deberías prestar atención, señorita Gaby - comenta un rubio en italiano mirando a la chica

- Gentile...Salvatore - le mira y pone mala cara - excelente reflejos, pero deberías tener mas cuidado, podrías a verme lastimado - le recrimina furiosa

- Lo siento, no quería que te enojaras, oye ocurre algo, tienes una mirada muy triste - se preocupa de inmediato por ella, sin conocerla mucho

- Nada - desvía la mirada y siente el chico le toma el rostro

- No me mientas, sé nota que no estas bien - le mira a los ojos fijamente

- Eso es algo que es mi problema y el de nadie mas - le mira igual y se muerde un poco la lengua para no hablar de mas

- Oe, eres muy agresiva como han dicho algunos - queda impresionado, por la actitud de la chica 

- Sí, lo soy, aunque algunos creen que soy tonta - le replica de manera rápida 

- Vaya ustedes hacen muy buena pareja... Pero él es mi mejor amigo, Gaby - comenta de la nada  la peli-roja quien se aparece con una sonrisa y mira a Gabriella

- Mejor no pruebes mi paciencia dama que pretende muchos hombres, porque creeme que te puedo dañar - sisea molesta la de ojos verdes mientras el italiano observaba

- ¿Qué me estas tratando decir? - espera la respuesta de la peli-negra 

- Oye Gabriella Ozora, no voy a permitir que humilles a mi amiga Rika, de esa forma como le llamaste- 

- Oh vaya, así que eres amigo de ella, sabe señor Salvatore, deberías estar saliendo con ella - agarra y da media vuelta para irse

- Ella es muy mala Gentile, no te acerques a ella otra vez - se sonroja ante el abrazo

- No te preocupes amiga, no le creo y lo sabes - aunque el sospechaba de Rika, siempre la protegía

- Gracias Gentile - le abraza y sonríe malevolamente por lo ocurrido

Gabriella pierde de vista aquellos individuos y siente una ganas tremendas de llorar pero las reprimió de una manera madura, pero sabía que tarde o temprano de lo que ella pagaría mas o menos, la mantenía pero siempre la verdad siempre sale a flote.

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Perdonen la tardanza, es que estoy muy atada a la universidad