Capítulo 79
La mañana del día lunes Labs Wolf fue allanado. Aprovecharon el factor sorpresa para evitar que los empleados eliminarán cualquier información que incriminara a Wilks y a sus ayudantes.
Glenda Osmond, astutamente, accedió a esperar para publicar la noticia de la muerte de Wilks en el Sun Escarlata, claro que con la promesa del jefe de ser la dueña de la primicia. Obviamente, el susto que pasó, no alteró su ambición periodística.
Al final del día tenían muchas pruebas que acreditaban los horribles experimentos que se producían en los laboratorios de Wilks, en una zona del edificio que estaba vetada para la mayoría de los empleados.
Héctor tendría la oportunidad de atestiguar y pedir una compensación económica por todo el daño sufrido, Jimin se encargaría personalmente de ello. Muchos de los empleados al saber del deceso de su jefe accedieron a cooperar entregando información sobre otras personas que financiaban dichos experimentos. Lo que más los sorprendió es que el mismo gobernador había recibido una cuantiosa suma de dinero de Wilks para financiar su campaña electoral. Caerían muchas personas prominentes de la ciudad y eso significaba una montaña de trabajo y meses de investigación.
Jimin estaba agotado. Tenía una pila de carpetas y no sabía por donde empezar. Tomó una para verla cuando unos golpecitos en la puerta lo hicieron mirar hacia ella.
__Pase.
Apareció Glenda Osmond. Justo lo que necesitaba para coronar el día.
__Tome asiento __le ofreció con poco entusiasmo.
__Detective Park __Glenda tomó asiento y se arregló las gafas para mirarlo.
__¿Qué necesita? __le señaló las carpetas __estoy un poco ocupado como puede ver.
__Baja la guardia, detective. Vengo en son de paz.
Jimin enarcó una ceja escéptico.
__¿Es tu hijo? __Glenda le señaló una foto de Marcus qué recién esa mañana había puesto en su escritorio.
__Estoy haciendo los trámites para que lo sea.
__Mmm. Estoy en deuda con ese niño . Es tan maduro para su edad __sonrió sinceramente cosa que Jimin jamás había visto que hiciera __. Me tranquilizó cuando estaba a punto de ponerme histérica. Me alegra que le des un hogar. Pero bueno, estoy aquí por otra cosa... Quería darte las gracias. Sé, que nuestra relación, no es de las mejores, pero agradezco lo que hiciste por mi allí. Tengo una duda ¿Quién era ése joven que pidió que me liberarán?
__Era el sobrino de Jeon Wilks, lo tuvo secuestrado para probar sus experimentos con él __Jimin no le mintió, pero tampoco le daría más información, no olvidaba lo arpía que era__Él prefiere que no se de a conocer su relación con Wilks, no quiere una cacería de brujas por parte de la prensa, espero que respetes su decisión.
Glenda arrugó el ceño y luego sonrió.
__Porsupuesto. Recuerda que mis recuerdos son vagos __la sonrisa que le dedicó decía lo contrario __Dile que no diré nada de su existencia. Digamos que es mi manera de agradecerle.
Jimin no daba crédito a lo que esta mujer decía. ¿Glenda Osmond siendo honorable? El shock de casi morir debió afectarla en serio.
__Gracias __le dijo Jimin y por primera vez desde que la conocía le sonrió sinceramente.
__Eso no quiere decir voy a dejar de meter mi nariz en tus investigaciones, eso no ha cambiado __le sonrió con sorna __digamos que estamos a mano ahora.
Jimin meneó la cabeza.
__Lo mismo digo, tampoco se lo haré fácil señora .
Glenda sonrió levantándose de la silla.
__Hasta pronto, detective.
__Hasta nunca, Glenda.
La mujer largó una carcajada, pero antes de salir volteó y volvió a acercarse.
__Dale mis saludos al niño, y entrégale esto de mi parte __abrió su cartera y sacó un paquetito que le pasó a Jimin __es una medallita que me dio mi madre para que me protegiera, creo que ya cumplió su cometido conmigo, y como no tengo hijos, deseo que tu hijo la tenga.
Había cierta emoción en sus palabras y voz, pero rápidamente se controló ocultándola.
__Se la daré. Tal vez, más adelante, podrías visitarlo de vez en cuando.
Glenda sonrió.
__Tal vez__fue hacia la puerta y se fue.
Jimin tenía la sensación de que Glenda no era tan fría y ambiciosa como aparentaba, vislumbró una mujer sola sin otra cosa que su profesión, le recordó a él mismo antes de Jungkook. Tal vez, en un futuro, podrían estar juntos sin querer matarse.
Lo importante era que Jungkook no tenía que preocuparse más. Y, por suerte, Glenda no sabía que el mismo hombre que la salvó era el mismo asesino qué la había intimidado para que cerrará la boca.
Tomó la carpeta nuevamente, y nuevamente fue interrumpido. Su jefe y Nam-joon entraron sin pedir permiso.
Jimin meneó la cabeza mientras los miraba.
__Ausgust se suicidó __soltó Nam-joon.
Jimin suspiró. Ya no le interesaba nada respecto a ése hombre.
__Dejó una carta a tú nombre.
__No me interesa. Pueden echarla a la basura.
__No. Puede tener información importante. Léela o si no lo haré yo mismo __le ordenó su jefe.
Jimin muy molesto abrió la misiva. Leyó sin dar crédito a lo que decía. Volvió a dejarla en la mesa.
__¿Y? __preguntó el jefe.
__Es personal. No dice
ni nombra a nadie vinculado con Wilks.
__Bueno, hay suficiente material para investigar__el jefe miró el reloj __Es hora de retirarnos. Nos vemos mañana.
Nam-joon vio que Jimin se veía raro después de leer la carta.
__¿Pasa algo?
__Ausgust me dejó todas sus empresas, no tenía herederos.
Nam-joon silbó impresionado.
__Eres un hombre millonario ahora.
__No quiero nada de él.
__Piénsalo, ahora tienes un hijo, no hagas nada apresurado.
__No voy a cambiar de opinión, pensaré que hacer con ellas.
Jimin se levantó y dejó la carpeta que nunca pudo revisar, antes se habría llevado el trabajo para la casa, ahora no. Tenía que dedicarle tiempo a su familia. Nam-joon se encaminó a la puerta.
__Nos vemos mañana.
Jimin salió cerrando su oficina, quería llegar pronto a casa. No tenía que ir por Marcus porque Jungkook lo hizo. Sonrió mientras conducía. Tener un hogar era la mejor parte del día.
* Así me imagino a Glenda Osmond. 😊
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro