Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3. Tras el golpe, el orgullo herido

Hola de nuevo, espero que esta historia les vaya gustando mucho.

Los invito a comentar siendo respetuosos.

YYY

Capítulo 3. Tras el golpe, el orgullo herido

Las odiosas risas a su alrededor estaban por sacar lo peor de él.

Para Bakugo Katsuki, cuyo ego era altísimo, su tolerancia era casi nula y no disfrutaba lo que para él era "una ofensa a su dignidad"; lógico era notar porque tenía un aura obscura que lo rodeaba mientras avanzaba de nuevo con su bien amada moto, a donde estaba el camión estacionado. Estaba sangrando, lleno de arena, le dolía la cabeza y tenía el orgullo herido.

Igualmente estaba furioso al grado de que lo primero que hizo en cuanto quedaron algo alejados Kirishima y él, fue que Katsuki aventó su casco con fuerza contra un costado del camión.

─ Ese maldito mocoso hijo de puta me las va a pagar todas y cada una de las mierdas que me hizo hoy...

El pelirrojo que llego detrás de él solo tocio los ojos.

─ Vamos Katsubro no creo que sea para tanto...

El más alto se le abalanzo para jalarlo de la solapa de su camisa y acercarlo a su rostro.

─ Voy a destruirlo pelo de mierda, voy a convertir su vida en un infierno, más te vale no estorbar.

El pelirrojo se alejó ejerciendo suficiente fuerza en el agarre ejercido en su ropa para poder liberarse, mirando serio a su estrella.

─ Estas muy loco. Solo afronta la realidad: el chico es terriblemente mejor que tú.

En eso, Kacchan le dio una bofetada a Eijirou quien dejo su aire despreocupado para enojarse.

─ ¡¿Qué mierda te pasa?!

─ No te atrevas a repetir eso nunca más. Ese puto manquito de mierda no es mejor que yo en nada ¡No es mejor que yo, por la mierda! ¡¿Te quedo putamente claro?!

Eso además de demostrar la frustración de Bakugo, igualmente lo patético que se sentía en ese preciso instante. Llevaba muchos años sin sentirse inferior a alguien. Sabía que era una persona con una personalidad de mierda; sin embargo era bien parecido, ganaba bien y era el mejor en motociclismo. No podía simplemente aparecer un muchachito sin un brazo a joder todo lo que llevaba años trabajando y puliendo. Su don nato para el motociclismo era de las pocas cosas que sencillamente no podían ponerle en duda.

/Ese niñato se siente la gran mierda solo porque me gano hoy, pero luego de que me recupere y practique algo, seré imparable/

─ Realmente tienes el ego tan alto como para creer que podrás derrotar a Izuku-kun así porque si

Tan ensimismado estaba en su mundo de venganza que no se dio cuenta cuando alguien se les acercó, cuando ambos giraron se encontraron con el rubio que estaba al lado del hermoso muchacho que usaba una prótesis. Ahora llevaba un maletín negro de esos que usan los médicos y una bata blanca sobre su ropa.

─ ¿Qué es lo que este hijo de puta hace aquí?

Gruñó el bronceado chico porque en el momento en que le dieran rienda suelta, se desquitaría con quien sea de ese nudo en el estómago que tenía desde su encuentro con el bajito chico bonito.

─ Esta zona está protegida por seguridad no pueden pasar así porque si ¿Qué hace aquí?

Pregunto educadamente pero igualmente de forma inquisidora el de dientes afilados, ante el que era obviamente un amigo cercano al pequeño motociclista talentoso que tenia de tan mal humor a su bro. El rubio sonrió, abrió su maletín negro y se puso un estetoscopio en el cuello mientras saco un gafete de un bolsillo de su bata, el cual le extendió a la mano pálida que lo recibió en la palma.

─ Soy Mirio Togata, médico y como casi siempre vengo a apoyar a Izuku-kun, me han dado un pase como doctor oficial para cuando los motociclistas se lastiman. Alguno de sus trabajadores fue a avisarme que necesitaban atención médica, por eso estoy aquí.

Kirishima dejó sus ojos abiertos cual platos pero eso solo hizo al rubio enfurecerse aún más.

─ Me niego de dejar que este tipo me ponga un solo dedo encima.

El doctor sonrío con alegría.

─ De eso ya se encargó mi amigo.

Bakugo gruñó al grado de enseñar los dientes y avanzo con claras intenciones de más pelea pero la fuerte mano de su manager lo detuvo.

─ Las heridas que tienes tienen que curarlas o podrían infectarse por todo el polvo de este lugar. Tienes que dejarte curar Katsuki, y si no colaboras juro que te esconderé la llave del almacén donde guardan tus motocicletas, por una semana sin poder subirte. Lo prometo.

Bakugo les miró horrible a ambos y no aflojó el ceño, pero se dejó hacer de Togata quien se puso unos guantes, limpio su equipo y comienzo a curarle las heridas. Con mucho cuidado lo curo pese a que Bakugo parecía furioso de haber accedido a algo así. Mirio por lo menos era profesional y no estaba haciendo comentarios incomodos o burlándose. Kirishima no se alejó por si ocurría otro altercado entre ellos.

─ Esto va a arder, no vayas a moverte.

Dijo con esa voz linda que tenía el doctor, quien se le acerco con mucho cuidado, cuando el algodón hizo contacto, eso le había ardido a Bakugo quien se alejó.

─ Te dije que no te muevas.

─ Me duele.

Se quejó, haciendo a Mirio abrir mucho sus ojos.

─ Para ser un motociclista que ha de estar acostumbrado a heridas peores, te quejas como todo un bebé.

Ante ese comentario, la sangre del chico pálido ardió pero no lo suficiente como para que perdiese el control.

─ ¿Tú qué sabes de esa clase de dolor? Que sea un motociclista no quita que no deje de doler. Estoy vivo es natural que me duela ¿o qué? ¿Tu puto pequeño novio manquito aparte de todo, es inmune al dolor?

Eso hizo enojar a Mirio quien ejerció presión con el algodón con alcohol en la parte herida con más fuerza de la necesaria, sacándole un gruñido a Kacchan.

─ ¿O te dolió? Lo siento

Dijo usando un tono de falsa inocencia y con una sonrisa divertida que dejo en claro que no lamento ni por un segundo aquello.

─ ¡Eres un...!

Antes de que el pleito siguiese, ambos recibieron un golpe en la cabeza con un periódico hecho tubo.

─ Ya los dos compórtense, no esto no es masculino para nada.

Regaño con tono autoritario Kirishima quien los ignoraba leyendo el periódico que termino usando de arma.

─ De verdad deberías de dejar en paz a Izuku-kun porque él es alguien muy querido en este lugar y prometo que si no lo dejas de molestar, no solo seré únicamente yo quien te patee el trasero.

Sentencio el doctor una vez que terminó de curar al hombre explosivo y ya con sus cosas guardadas, se fue de ahí.

─ No sé porque me ha dicho eso, pero sí sé que ahora tengo mucha más curiosidad por saber más de mí querido amiguito sin un brazo.

Comentó el rubio con una sonrisa maliciosa en el rostro, que dejó en claro a su manager, que las cosas se complicaran.

YYY

¿Qué tal si Bakugo comienza a maquinar cosas contra Midoriya? Lo sabremos en el próximo capítulo 4. La idea

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro