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YYY

Capítulo 17. Entrenamiento riguroso.

Bakugo Katsuki se levantó temprano esa mañana, se fue a bañar y se vistió de ropa cómoda. Estaba emocionado y desayunó todo lo que Kirishima le puso delante. Eijirou era conocedor de lo que aquello significaba en la vida de Katsuki, por eso este se comportaba tan energético esa mañana. Sabía que estaría así en cuanto fuera el momento favorito de Death: usar su motocicleta.

─  Se que estas emocionado y conseguí el lugar para que puedas entrenar. Solo no olvides que debes comportarte. Si jodes algo, podrían no prestarte nada de nuevo.

El motociclista lo ignoraba totalmente, se notaba que el rubio estaba intentando fingir que aquella conversación le molestaba. De hecho solo llegó a gruñir un par de veces cuando el pelirrojo preguntaba “¿Me estas escuchando?”.

─Pareces un perro, no me gruñas.

─ ¡¿eh? ¿Qué dijiste bastardo?!
   
Kirishima solamente le golpeó con un periódico en la cabeza, ligeramente.

─Ya tranquilo, Fido. Sé un buen chico hoy.

Molesto, Death solo le mostró el dedo de en medio. A lo que su amigo, solo se rio. Ya una vez que terminaron, dejaron los platos y salieron de ahí.

YYY

Katsuki ya estaba con su traje y su casco puesto. En medio de la pista, Kirishima estaba en las gradas, que estaban desérticas. Death sentía el calor pesado que se le colaba, pero en cuanto estuvo en su nena, fue totalmente feliz. Poco le importaba, cuando el fiel ronroneo poderoso debajo de él, se hizo presente se sintió en su elemento.
Por eso, en cuanto se subió aceleró lo suficiente para dejar una estela de arena detrás de él, mientras la adrenalina se apoderaba de él. En sus puños cerrados firmemente, se sintió en control. En eso los obstáculos y curvas los sentía totalmente en su momento. Era el mejor, lo sabía. Se quedaba sin aliento mientras brincaba, se movía. Sentía que se volvía uno con su poderosa motocicleta, a la que podría hacerle un altar.
Era su mejor momento de toda la jodida semana.
Hacia piruetas, se sentía tan completo. Como para unos era su mejor momento el leer o ver televisión, para Death lo era estar en esa motocicleta. Lo era todo para él. Su centro.
Lo que no sabía era que cierto motociclista peli verde lo veía practicar junto a su rebelde amiga: Nejire Hado. Estaban escondidos un tanto lejos de las gradas para evitar ser notados por Kirishima.

─ ¿De verdad estaremos aquí sin poder ir hablar con el gran Death?

─Yo te dije que si querías que te acompañara a verlo entrenar, no quería estar cerca de él.

─ustedes son raros…

─ ¿Por qué lo dices?

─Dicen que se odian pero se comportan como si se gustaran.

Izuku dejó de observar a Death para mirar con odio a la odiosa blasfema que se atrevió a decir aquella cosa horrible. La mirada de rencor que le envió le dio a igual a Nejire.

─ ¿Cómo llegaste a esa estúpida conclusión?

─Todos lo hicimos, Mirio está preocupado. Dice que prefiere que salgas con ese doctor cejón a que te termine gustando Death.

─Ustedes están locos si creen remotamente que podría llegar a gustarme ese engreído…

─aja y niégame que no crees que es terriblemente guapo.

─Bueno… no puedo negar que es…a-atractivo…pero…

─Tampoco negaras que crees que es talentoso como el infierno.

─Que sepa hacer bien su trabajo no lo hace menos tarado.

─Claro y que lo lleves observando media hora con cara de idiota no tiene nada que ver.

─Cállate, mejor vámonos. Mi padre tiene mucho trabajo y quede de ayudarlo temprano.

Hado hizo un puchero. Ella siempre era así de infantil con todos. 

─No podemos pasar tiempo libre ni en tus vacaciones. No vas a la escuela pero de todos modos no te veo. O estas en el hospital, en el taller de tu papá o en algún lugar, vagando o entrenando en tu motocicleta.

─Exacto pasamos poco tiempo juntos y tú lo desperdicias trayéndome a ver a este tarado.

─Claro bien que querías verlo, te gusta como conduce. Cuando veíamos juntos sus competiciones, repetías miles de veces sus hazañas. Eres tan fanático de su trabajo como yo. Solo que tú lo eres de closet.

Para cuando dijo eso, el pecoso ya estaba lejos de ella.  Lo alcanzó y lo vio montado en su motocicleta. Poniéndose el casco; cuando Hado se acercó, Izuku sonrió y le extendió otro casco. Lo que obvio  aceptó y se comenzó a poner.

─Vamos Hado, te llevare al taller de papá. Me ayudaras un poco y lo convenceré de que nos invite a almorzar con Kaminari-kun.

La chica se terminó de poner el casco para sentarse detrás de su amigo y abrazarlo por la cintura.
─De acuerdo, pero tú pagas el helado.

─Trato hecho.

Con esto, se arrancó iniciando su camino. El ruido no pasó desapercibido para Kirishima, quien se asomó de donde provenía el sonido y vio la moto de cierto chico que últimamente, era la obsesión de Death. Al parecer, tampoco el mismo muchacho se podía mantener alejado de Katsuki. Torció los ojos.

/Ese par se atraen uno al otro como imanes, solo espero que no salga nada malo de todo esto/

YYY

¿Qué tal si accidentalmente tienen un momento agradable? Lo sabremos en el próximo capítulo 18. Paseo en moto