Capítulo 13. Soy su agente
Hola de nuevo, espero que estén bien. Estoy tan cansada.
Los invito a comentar siendo respetuosos.
YYY
Capítulo 13. Soy su agente
Kirishima Eijirou estaba algo aburrido, en el medio de la habitación de la casa que adecuó como su estudio personal, sentado en su silla giratoria delante de su escritorio removiendo algunos contratos y demás papeles. Ese día fue ocupado, como todos sus días en sí, pero sin Death ahí metido dándole molestias las cosas se sentían extrañas y un poco monótonas. Era un verdadero idiota porque hasta él se había acostumbrado a la compañía de su cliente.
Ser el agente de Bakugo Katsuki era todo un reto. Cuando se conocieron hace ya tantos años atrás, ninguno pensó que la relación que se forjaría entre ellos llegaría a ser tan profunda. Al principio, Death siendo indomable como siempre había sido, no quería tener un agente mandón. La mayoría eran una bola de lame huevos desesperantes aunque con su nula presencia a Katsuki no le costaría nada imponerse; jamás se imaginó que un agente muy joven tanto como hábil e inteligente le respondería sin problemas porque no se dejó intimidar, logrando hacer reír al rubio. Ese chico tenía personalidad y era genial para su trabajo. Por lo que pese a no ser para nada lo que Bakugo buscaba, lo contrató. De eso, sin duda ninguno de los dos se arrepentía porque con el paso del tiempo su química los ayudó a formar una asociación de trabajo única en su tipo. El lazo de cariño y amistad fue inevitable, pese a la forma de ambos de relacionarse.
Kirishima estiró sus brazos cuan largos son. Ya estaba entumido de estar ahí tantas horas. Vio el reloj de pared y su roomie no se dignaba a regresar, era algo tarde ya y no daba señales de vida (para variar lo volvía a dejar preocupado). Eijirou iba a esperar al rubio para comer, pero su estómago le rugía bastante, así que con eso en mente, se preparó para salir.
/Yo no lo voy a esperar toda la vida, saldré a comer/
Antes de salir, vio a uno de los hombres que contrató para tener la casa en funciones, y se acercó con una sonrisa de esas con dientes afilados que le daban un aire amistoso. El chico le sonrió de vuelta.
─ ¿Se le ofrece algo?
En respuesta el pelirrojo asintió y sin desaparecer su sonrisa, continúo hablando.
─ Bueno, quiero ir por algo de comer y quisiera saber si hay un buen lugar por aquí.
El empleado pareció sopesarlo unos segundos hasta que a su mente llegó una respuesta tan obvia que hasta sonrió como quien descubre la respuesta a un gran secreto.
─ Debería ir a "Pink Beer"
─ ¿"Pink Beer"?
El chico delante del agente asintió con una enorme sonrisa.
─ La comida y al cerveza de ese lugar son fabulosas, se lo aseguro.
─ De acuerdo, entonces ¿me podrías dar un mapa para indicarme como llegar hasta allá?
YYY
Kaminari Denki estaba en su amado local, limpiando la barra. Hoy como siempre, el sitio estaba bastante lleno pero la zona de la barra casi nadie la usaba tan temprano. Por la puerta, estaba mirando constantemente, esperando a ver si Izuku volvería a pasar por ahí. Se quedó preocupado por él, en una de esas vio algo entrar por la puerta que lo dejó anonadado. Ahí, en su local estaba un hombre fornido, alto con ojos rojos, y pelirrojo. El atractivo sujeto se acercó a sentarse en la barra.
Cuando el hombre dio con la mirada de Kaminari sobre su persona le sonrió, mostrando una sonrisa llena de dientes afilados que le hizo sonrojar y latir el pulso en niveles insospechados.
─ Hola.
Saludó con una voz madura y amable. Solo bastó esa sonrisa para desubicarlo por completo.
─ Bi-bienvenido.
/No tartamudees Denki, contrólate/
Antes de continuar avergonzándose a él mismo, el dueño del local le pasó un menú. Que el más alto aceptó sin quitar esa sonrisa amistosa. Kaminari quería relajarse un momento pero el más alto estuvo listo para hacer su pedido de inmediato.
─ Quiero un sándwich especial de la casa y una tarra de la famosa cerveza rosa. Por favor.
─ Claro, en seguida.
El de ojos amarillos se puso a cocinarle sus cosas mientras Eijirou admiraba todo a sus alrededores. Cosa que no pasó desapercibida para el dueño. Quien cuando por fin tuvo listo el pedido, se acercó a dárselo, ya más tranquilo.
─ Supongo que es su primera vez por estos lares.
─ ¿Tan obvio soy?
─ Un poco si, mira a todos lados muy sorprendido. Sin mencionar que vio las cervezas de los demás con una muy obvia mueca de estupefacción.
Eso hizo reír al pelirrojo.
─ Creo que eres muy observador.
─ Podríamos atribuirlo a eso, o que cuando tú restaurante-bar es medianamente reconocido y de los únicos por los alrededores, te ayuda a conocer a la mayoría de gente de por aquí y aprender a ver los nuevos.
─ ¿Es el dueño del bar?
─ Lo soy. Mi nombre es Kaminari Denki.
─ Pues entonces, es un placer. Soy Kirishima Eijirou.
Entonces Kiri comenzó a comer y tomar de su cerveza con una sonrisa sorprendida en el rostro.
─ ¡Esto es delicioso!
─ Gracias y dime ¿Qué te trae por aquí?
─ Oh bueno, el trabajo.
─ ¿En serio? No creí que hubiera mejores oportunidades aquí que en las ciudades más grandes...
─Veras lo que ocurre es soy agente de un motociclista famoso y vine para que practique un poco por aquí...
Eso paralizó al de atrás de la barra quien desapareció su sonrisa amable y cambió su expresión a una consternada. Lo que igual alteró a Eijirou.
─ ¡¿Trabajas para ese simio horrible que se hace llamar Death?!
Ante el comentario, Kirishima hizo una expresión amarga.
─ Su nombre es Bakugo Katsuki, no es ningún simio horrible y soy su agente.
YYY
¿Qué tal pasara entre estos dos? Lo sabremos en el próximo capítulo 14. Aléjalo de Izuku
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