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Anexo :" El arte de perdonar"

Miguel guardaba lo ultimo que necesitaba, con determinación y dolor, pues el hecho de tener que abandonar Santa Cecilia, a su familia, no era una cosa fácil de llevar a cabo, se detuvo un momento, reconsiderando si estaba haciendo lo correcto, pero entonces su mente viajo hasta Hiro, ese dulce e inteligente chico, que con su personalidad y encanto se colo en su corazón, sonrio ladinamente y termino de empacar. Tomo su fiel guitarra y salio de aquella habitación, sabia que no iba a volver a ser aceptado, sabia que corria el mismo destino de Papá Héctor, ser olvidado por todos los Rivera, y que talvez ni siquiera pronuncien su nombre de nuevo, el terror le invadio de nuevo, pero no!, no iba a retroceder, no iba a perder al amor de su vida, no podia perder a Hiro.

Luisa: Mijo!,por favor piensa bien esto - hablo desesperada la mujer tomando el brazo de su hijo-

Enrique: Miguel!,obedece a tu madre!

Miguel: tengo 19 años!, ya no soy un escuincle! - dijo safandose del agarre de su progenitora y caminando hacia la salida-

Rosa: ¿Es enserio primo?!, ¿te vas?!,¿solo por ese chico le daras la espalda a tu familia?!

Elena: ¡Miguel! - dijo acercandose al chico en el lumbral de la puerta- escucha con mucha atención, chamaco malcriado - dijo severa y apuntando con su dedo indice a Miguel- Si cruzas esta puerta, ya no eres más un Rivera

Miguel: - le vio con dolor y claro enojo, ¿enserio?,¿le harian eso?- entonces, creó que no soy un Rivera - dijo para asi salir por completo de la casa, vio su reloj, aun habia tiempo de alcanzar a Hiro-

Coco: ¡Ni'to!

El grito de su hermanita le hizo voltear, la pequeña coco se lanzo a los brazos de su hermano mayor con lágrimas en sus ojos

Coco: Por favor!, no te vayas!, no me dejes!

Miguel: - llorando- lo siento tanto, Coco, pero debo hacerlo

Coco: ¿es por el chinito?

Miguel: ...si, es por él, pero no lo culpes de esto, yo soy quien esta decidiendo irse

Coco: claro que no, se que lo que estas haciendo es por amor, como el de mami y papi, y quiero que sepas - se separo un poco del moreno que estaba incado y le tomo de las mejillas- que seas como seas, y ames a quien ames... Tú, siempre siempre vas a ser mi hermanote, te quiero Migue

Miguel: - aquellas palabras dichas por la pequeña coco le partieron el alma al moreno, abrazo euforico a su hermanita llorando amargamente- Te amo Coco!, nunca me olvides!

Coco: jamás!, cuidate mucho, ahora... Ve por él! - dijo la chiquilla de apenas 9 años-

Miguel: te voy a extrañar tanto coco

Coco: - la pequeña le extendio a Miguel una foto que habia tomado de la sala, en donde salian todos los Rivera y Miguel- por favor  llevala, no te enojes con ellos

Miguel: no lo hare - toma la foto- Hasta pronto, coquito - sonrie-

Coco: hasta pronto hermanito - sonrie mostrando los dos dientes falte en el frente-

Luisa se acerco rapidamente a donde estaban los dos hermanos

Luisa: cuidate, mijo

Miguel:... Lo hare, hasta pronto ma'

El moreno alfin se dio la vuelta, y camino primero a paso rápido, pero volvio a ver la hora y empezo a correr, dejando a atrás la que una vez fue su casa....

...

Miguel desperto de aquel sueño, cayendo en cuenta de donde se encontraba, se sentó en la cama que compartia con el americasiatico, y puso sus manos en su rostro, aun le dolia haber dejado atrás su pais, y sobretodo a su familia, pero entonces volteo a ver al nipón, (habian pasado dos años desde su llegada a San franstokio)al verle dormir parecia contemplar un angel, su rostro era sereno y calido, llevo su mano hacia ese lindo rostro que tanto amaba, en una caricia como si de lo más delicado de todo el universo mismo se tratase, el nipón dibujo una sonrisa al sentir aquel tacto, aun sin abrir los ojos, frente a èl, Miguel tambien sonrio ladinamente, ahi, estaba ese ser por el cual daria todo y hasta más, si para estar a su lado debia dar la vida, que asi sea. No se arrepentia haber "escapado" junto con él, era una recompensa en su opinión, lo amaba, lo amaba más que a nada. Era lo unico que podia describir lo que sentia.

Hiro: umm... - abre un ojo- ¿Miguel?, ¿que ocurre? - abrio ambos ojos y se incorporo en la cama, llevando una mano hacia la morena mejilla de su novio- ¿Todo bien?

Miguel: - pone su mano sobre la que el nipón tenia en su mejilla, sonriendo- si, no te preocupes cielo, estoy bien

Hiro: ¿seguro? - pregunto no muy convencido-

Miguel asintio

Hiro: Miguel...- se acerco más a su novio y le rodeo con sus brazos, un abrazo calido y tierno- se que aun piensas en tu familia... Perdoname, todo esto es culpa mia

Miguel:- el moreno se sobresalto ante eso- ¿De que hablas?

Hiro: por mí es que dejaste Santa Cecilia, y por mi ya nunca más veras a tu familia, yo... - fue cayado por un beso del moreno-

Miguel se separo del beso y volvio a abrazarlo, poniendo a su amado contra su pecho, dejando al nipón escuchar los latidos de su corazón

Miguel: No digas babosadas Hiro, ni tú, ni yo hicimos nada malo, solo exprese lo que siento y ellos no lo aceptaron, deben entender que te amo, y no voy adejarte y asi todo el mundo me vea con desprecio o mal, me vale gorro

Hiro abrazo más a su novio, enserio, lo dice y recalca, no siente que ni él ni nadie merezca a Miguel

Hiro: La verdad, no se... Que tanto bien habre hecho en mi otra vida o en esta para que me recompensaran con alguien como tú

Miguel: Eso mismo digo yo,¿que habre hecho?

Hiro inicio otro beso, uno menos inocente que el antetior, con sus manos delineo el pecho del más alto y este le tomo de la cintura, ambos cayeron en la cama y antes de poder seguir...

Miguel: e-espera Hiro

El nipón se separo del moreno y le vio con duda, a lo que Miguel le vio con una ceja alzada y una sonrisa

Hiro: -se separa por completo y se sienta de brazos cruzados- ya se ya se, "Debemos esperar hasta la noche de bodas", jum - dijo en un puchero-

Miguel: jeje, tranquilo bebe, además, nos casaremos dentro de pocos dias ¿lo olvidas? - dijo señalando el anillob de oro que el nipón llevaba en el dedo anular-

Hiro: y creeme que no puedo esperar a pasar el resto de mi vida a tu lado. Te amo, Miguel

Miguel: - le da un beso en la narisita a Hiro- yo tambien, chinito acosador

Sip, desde que se entero de que lo espiaba cuando dormia lo molestaba con eso, Hiro hizo un mohin en respuesta...

(...) Dos semanas y media más tarde...

El gran dia habia llegado, todo estaba listo, el salón, el buffete, los arreglos (en los cuales ayudaron Honey lemon y Cass emocionadas), los trajes... En fin, fred seria el testigo de Miguel junto a wasabi y Honey junto a Gogo de Hiro. Miguel envio las invitaciones a la familia Rivera, aun asi ellos no fueran (que era lo más probable), no perdia nada, pero que no más daria por que lo acompañaran en el gran paso que daria.

Miguel ajustaba lo ultimo de su traje, uno negro y con una delicada flor de cempazuchilt en el bolsillo superior derecho, se veia al espejo, realmente estaba nervioso, pero feliz, tratando de no hiperventilar, hacia ejercicios de respiración

En eso entro Gogo

Gogo: Oye Migue, ya es la hora - anuncio feliz-

Miguel: si, ya voy

Miguel fue hacia el jardín privado que habia alquilado para la boda, todos los amigos y conocidos más cercanos de Hiro y èl estaban ahi, dio una mirada de soslayo al lugar vacio donde deberia estar su familia, siguiendo su camino con la frente en alto, no podia estar triste ni decaido, debia estar feliz, por èl y por Hiro, era el dia más importante de sus vidas y es cuando más feliz debia estar... Llegó hasta el altar adornado con exquisitas flores, donde en juez le veia con una sonrisa, entrelazo sus manos detras de su espalda y espero la llegada de su novio...

Mientras que en otra habitación, a Hiro le estaba dando un ataque de panico, ¿Que tal si lo arruinaba?,¿Y si no recordaba sus votos?, ¿y si fallaba el sistema de sonido?,¿y si de los nervios se desmayaba y debian posponer?_¿y si Miguel se arrepentia?... Y si y si... Era lo unico en lo que podia pensar, amaba a Miguel, y por eso todo debia ser perfecto, pero estaba nervioso, demasiado, por fortuna ¡Cass y Honey fueron al rescate!, le ayudaron a tranquilizarse y hacerle saber que todo marcharia perfectamente, Hiro sonrio y más decidido que antes salio en busca de su amor, más que preparado...

...

Miguel empezaba a sentirse preocupado, no habia esperado tanto en realidad,pero el no ver a Hiro le hacia sentir inquieto

Fred: -susurrando- pss, tranquilo amigo, todo saldra bien

Wasabi: concuerdo con Fred, y creeme, jamás digo esa frase

Miguel sonrio ante la confesión de Wasabi y volteo de nuevo al frente, y entonces lo vio...

Hiro venia hacia él, tomado del brazo de su Tia, el nipón vestia un traje blanco con una flor roja carmín en el bolsillo superior izquierdo, con una timida sonrisa en su rostro, Miguel sonrio ampliamente, al llegar alfin al altar la Tia del pelinegro le entrego a Hiro, sonriendo tierna

Luego el juez comenzo con la palabreria esa (perdonen es que las bodas me dan sueño y casi ni atención pongo asi que ya ni se que dicen), ya casi al terminar de hablar el juez, se escucho como alguien más entraba a la boda, bueno "Alguienes"...

Miguel abrio los ojos cual platos de la impresión, al mismo tiempo que derramaba lágrimas

Su familia estaba ahi, todos y cada uno, vestidos formalmente, con sonrisas avergonzadas en sus caras, coquito le guiño un ojito, dandole a entender que le restara importancia y siguiera, Miguel asintio y procedieron

Luego de los votos y eso...

Juez: Ok, los declaro legalmente casados, Miguel, puedes besar al novio

Ambos se abrazaron y se dieron un beso pasional y lindo, todos los presentes vitorearon a la pareja animados, aunque los dos parecian estar sumidos el uno del otro.

Luego de un rato, la familia de Miguel se acerco algo temerosa al moreno quien, al lado de su ahora esposo les veia algo confundido

Coco: ¡¡Hermanito!! - corrio a abrazar a su hermano mayor- felicidades!,

Miguel lloro de pura felicidad, jamás creyo que en realidad vendrian, su abuelita tomo la palabra, con lágrimas en sus ojos ya remarcados por las arrugas, aunque aun conservaba esa calidez en su severa mirada

Elena: mijo, por favor... - fue a su lado y tomo las manos entre las propias- Perdonanos, no sabes como lamento haberte dicho tantas cosas y haberte hecho tanto daño

Miguel abrazo a su abuela, con tanta ternura que hasta la mujer de edad comenzaba a derramar lágrimas

Miguel: No tengo nada que perdonarles, no estoy molesto con ustedes, se que solo querian que fuera feliz, aunque no lo hicieron en las formas correctas, los amo, y asi sera siempre

Todos los Riveras abrazaron euforicos a Miguel, quien correspondia a cada uno, su madre le dio un cariñoso beso en la mejilla y le abrazo reconfortando el dolor de haberle dado la espalda años atrás

Entonces todos voltearon a ver a Hiro, y el padre de Miguel tomo la palabra

Enrique: Tú tambien perdonanos, Jiro, nunca debimos decirte todo aquello

Hiro: - asintio- Esta bien, no guardo rencor hacia ninguno

La boda no pudo culminar mejor, definitivamente...

¿O si?...


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