Hermanas que siempre fueron opuestas crean una chispa que puede causar una explosión, así son mi mamá y mi tía. Lo que al comienzo fueron risas se volvieron diferencias y molestias. Yo solo salía de esas cuatro paredes que se tornaban un ring de pelea en minutos.

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Llendo con los mismos amigos del barrio, cosas pasaron. Supe que dejaron de ser los amigos cercanos que ellos dejaban ver. ¿Por qué tan de repente?

¿Le hice daño? Solo se que me dolió más a mi. Tal vez no le importo yo, pero si su amigo. Me alejo un poco con miedo de hacerle enojar. No quiero que me odie.

Siento que soy una bala perdida buscando entrar en el corazón de alguien más. Ser querida como el lo hace con ellas.

¿Por qué no he vuelto a verle? Dicen que sale con otra chica y parece que está lo tiene entretenido. ¿Habrá encontrado a alguien de verdad? No puedo hacer nada, no soy alguien para él.

¿Y si le digo que todavía me gusta? Quizás él pudiera confirmar lo que siento o romperme más. No importa nada más que no quiero que me odie por lo que hice.

Con el corazón roto, lloro y lloro, en el balcón de mi casa escuchando música con mis audífonos intentando olvidar lo inolvidable.

Si tuviera una máquina del tiempo me diría: No te compares, sé tú misma y no busques el amor de un chico, eso no es importante ahora.

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¿Qué aconsejas a nuestra prota?

Si fueras la mejor amiga de esta chica, y supongamos que conoces a este chico. ¿Hablas con ellas, o con él?