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Epílogo.

[+18 ]

Follaron.

Fin

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OK no.

En Konoha habían cambiado muchas cosas, y de eso se dio cuenta al caminar por las calles de la aldeamcon el objetivo de regresar a casa, seguramente lo estarían esperando, era de noche.

Se llevó las manos a los bolsillos, y de sus labios salió humo púrpura debido al tabaco que fumaba. Suspiró, las cosas habían mejorado, y se sentía feliz de cómo había estado evolucionado tras tantas peleas y llanto.

Aquello había sido el fruto de sus ganas de continuar con su vida.

En un principio, él solo quería acabar con su vida, terminarla, y poner fin a su sufrimiento interno, pero, alguien llegó y le demostró que había algo mucho más allá de eso, y que era capaz de cambiar para bien. Fue la primera que creyó en él, y de eso estaba infinitamente agradecido.

Llegó a casa, y apagó el cigarrillo, porque sabía que lo más probable es que lo regañaran. No pudo deshacerse del olor, pero sabía que igualmente no se sentiría, ya que fumó tan solo un rato.

Abrió la puerta de la casa, y se retiró los zapatos.

一¡Estoy en casa!

一¡Papá!

Shikamaru dirigió su mirada hacia un niño ojiverde de al menos seis años de edad, quien venía corriendo hacia él. El pequeño lo abrazó, y él lo tomó en brazos al ver que el niño alzó sus pequeñas manos. La mirada verdosa de su hijo era idéntica a la de su madre, eso le hizo sentir nostálgico, y sonrió.

一Regresé a casa, Shikadai.

Caminó con su hijo en brazos hacia donde debía de estar la cocina. Allí poniendo la mesa, estaba su esposa, y no pudo evitar sonreír al ver que ella tenía una sonrisa de oreja a oreja, como en esos tiempos.

一Shikamaru, ¡qué sorpresa!一 dijo ella retirándose el delantal.一 Hoy has llegado temprano, prepararé comida para ti también.

一Déjame ayudar, Temari.

El Nara bajó a Shikadai, se acercó y olió la comida, olía excelente, y encima, la cena se veía deliciosa. Shikadai observó con cautela lo que cenaría esa noche, tenía miedo de tener que hacer un numerito para no comer y que su mamá lo castigara de nuevo.

Por suerte papá estaba ahí para protegerlo.

一¿Brocoli?一 dijo Shikadai mientras miraba a su mamá. Shikamaru sólo comenzó a sudar frío, sabía que su hijo tenía el carácter de su madre, ambas miradas verdosas se desafiaban cada vez que podían, y eso era problemático.一 No quiero...

Palabras suficientes para hacer explotar a la madre de su hijo.

一¿Cómo que no quieres, eh?一 dijo Temari con una sonrisa torcida. Shikamaru volvió a tomar a Shikadai en brazos al notar que Temari comenzaba a emanar un aura oscura.一 ¡¿Me rompo el lomo para que comas y tú no quieres comer?!¡¿Acaso yo cocino por las puras?!

一Shikadai comerá.一 dijo Shikamaru con algo de nervios.

一¡PUES QUIERO VERLO!

Shikadai miró con ojos de cachorro abandonado a su padre, y Shikamaru no hizo más que suspirar.

一Shikadai, no puedo protegerte de mamá.一 dijo con simpleza.一 Es un fastidio, pero ella termina protegiéndome a mí. Esta vez no puedo hacer nada, campeón, así que hoy comes, quieras o no.

一Hum.一 Shikadai se cruzó de brazos, era muy testarudo.一 Pero papá es fuerte, ¿no?

一¡Claro que es fuerte!一 dijo Temari.

一Solo que mamá da miedo a veces.一 continuó Shikamaru con una gota de sudor en la sien.一 Así que hoy comerás sin excusas, ¿de acuerdo?

Shikadai meneó la cabeza con algo de duda, pero al final terminó cediendo y asintió. Su papá lo bajó, y se fue a jugar con los rompecabezas de mil piezas que el tío Gaara y el tío Kankuro le habían traído de Sunagakure, así esperaba a que la comida estuviera lista.

Eso alivió al Nara, ya que cuando sucedía eso, Temari lo dejaba sin comer, y como Shikadai heredó el orgullo de su madre, no pedía nada a menos que llegara su papá del trabajo para hacerse la víctima.

Shikamaru y Temari se quedaron solos.

一¿Segura que no quieres que te ayude?一 preguntó Shikamaru cruzándose de brazos.一 Debes estar cansada de todas las misiones que has tenido está semana. Mamá nos hace un favor al cuidar de Shikadai. Después de cenar, descansa, yo haré dormir al pequeño fastidio.

一¿Dices pequeño fastidio porque yo soy el fastidio principal?一 preguntó ella soltando una pequeña risa.

一Eres mi fastidio favorito, mujer.

Temari sonrió, y comenzó a servir los platos. Shikamaru le ayudó a llevar los cubiertos, y comenzaron a charlar un rato más antes de llamar a su pequeño retoño.

一¿Quién lo diría?一 dijo Temari divertida.一 El asesino de las sombras es un pequeño miedoso que le teme a su esposa y con un hijo igual de perezoso que él.

一Quién lo diría, tienes razón.一 suspiró.一 pero no creas que el simple hecho de estar casado signifique que el placer por el asesinato desaparezca. Shikadai es pequeño, por eso no lo hago notar, él no lo entendería.

一Es un niño muy listo.

一Sí que lo es.

Temari acarició las mejilla de Shikamaru y él esbozó una sonrisa calmada. Esa mujer, su esposa, le daba la tranquilidad necesaria para seguir, ella era su pilar, su fuerte, era gracias a ella que llegó incluso a formar una familia, y encima, le dio la oportunidad de ser padre.

一Gracias, por todo.一 soltó sorprendiendo a la rubia.一 No sé qué haría sin tí, problemática.

Ella acarició su cabello, y se secó las manos con el secador de cocina que estaba cerca del lavadero.

一No te preocupes.一 le contestó.一 Jamás te hubiera abandonado sabiendo que podrías tener un futuro como este, pero no imaginé que sería un futuro a mi lado.

一Me basta y sobra.

Shikamaru se acercó a ella, y la tomó de la cintura,  la obligó a mirarlo, y la tomó del mentón, cosa que hizo sonrojar a la rubia mientras cerraba los ojos esperando ese beso.

一Mamá, papá, ¿qué hacen?一 Ambos se separaron al oír la voz de su pequeño hijo. Shikadai hundió las cejas y se cruzó de brazos. Shikamaru le sorprendía que se pareciera mucho a ella.一 Wakala, ¿se iban a besar?

一Eso no te incumbe, mocoso.一 dijo Temari ocasionando que Shikadai tragara saliva y rascara su nuca. La rubia no pudo evitar sonreír al ver cómo su hijo había heredado algunas acciones y gestos de su padre.

一Ya está la almuerzo, ¿por qué no traes los cubiertos?一 dijo Shikamaru evitando una confrontación de madre e hijo.

一Está bien.一 el ojiverde caminó con las manos en los bolsillos hacia donde se encontraban los cubiertos, se puso de puntitas y comenzó a sacar lo que necesitaba.

Temari y Shikamaru siguieron arreglando la mesa, y cenaron los tres juntos, como familia. Shikamaru bostezó un poco al terminar, y Temari negó con la cabeza, pero Shikadai se adelantó.

一Bostezar es de mala educación.一 Shikamaru observó los orbes verdosos de su hijo, emanaba un aura semejante a la de Temari.一 Mamá siempre te lo dice.

一Seguramente es porque trabaó muy duro hoy para acompañarnos.一 dijo Temari acariciando la cabeza de su hijo.一 Es bueno que tú no te estés quejando de comer brocoli.

一Estoy llorando por dentro, mamá, es un fastidio.

Temari y Shikamaru rieron, en cuanto a Shikadai, a él no le causaba ninguna gracia.

Cuando terminaron de cenar. Shikamaru ayudó a Temari a lavar los servicios, y Shikadai disfrutaba sus últimos minutos de juego antes de irse a dormir.

一Ve a descansar.一 Shikamaru miró a quien ahora es su esposa.一 Te esfuerzas mucho, ¿no crees?一 Temari negó.一 Eso dices tú, pero se te ve en la mirada.

一Estoy bien cariño.一 dijo la rubia sonriendo.一 Te tendré una sorpresa lista cuando Shikadai se duerma, ¿de acuerdo?一 Shikamaru suspiró y asintió.

一Es curioso.

一¿Qué es lo curioso?一 preguntó ella mirando los ojos café de su marido.一 ¿Sucedió alguna cosa mala en el trabajo?

一No.一 sonrió.一 A veces se me cruza por la cabeza todos esos momentos en los cuales actué como una persona sin emociones, y cada vez que pienso en mi presente me da miedo que todo en realidas sea un sueño, o un producto de mi imaginación.

Temari bajó la mirada, y esbozó una sonrisa nostálgica.

一Antes eras un dolor de cabeza.一 confesó.一 Éramos asesinos, o bueno, seguimos siéndolo.一 cerró el caño y se secó las manos.一 Pero ahora, debemos seguir adelante, por nuestro hijo.一 dejó el secador a un lado, y tomó a Shikamaru del mentón.一 No te preocupes, yo estaré aquí para volver a ponerte en tus casillas si vuelves a desorientarte.

El Nara se enterneció.

一De verdad no me lo creo aún.

一¿Qué no te crees?¿Qué soy tu esposa, que cogimos y que tuvimos un hijo? Por favor, Nara, no seas tonto, llevamos casados siete años.一 rió.

一Me alegra mucho.

[• • •]

一Papá, ¿no estás cansado?一 preguntó su hijo mirándolo con algo de pena.一 Siempre llegas tarde del trabajo, y apenas duermes. Puedo dormir solo.

一La última vez que te dejamos sólo, echaste un grito que nos despertó a mamá y a mí, nos asustaste, y pensamos que te iban a secuestrar, y resulta que viste la montaña de juguetes que no guardaste ese día, y pensaste que era un monstruo.

Shikadai hundió las cejas y se cruzó de brazos, Shikamaru sabía que él era totalmente terco y orgulloso, y que lo negaría hasta el final , así que no dijo nada más, y se acostó al lado de su hijo.

Se quedaron un rato en silencio, hasta que Shikadai miró a su padre, lo examinó un poco, y luego sea le cruzó por las cabeza una pregunta.

一¿Por qué te casaste con mi mamá?

Esta pregunta desconcertó al patriarca del clan Nara, pero luego esbozó una sonrisa y cerró los ojos al sentir cómo su corazón empezó a latir cada vez más rápido.

一Tú mamá me ha salvado muchas veces.一 se llevó la mano al mentón y pensó un poco.一 Demasiadas veces ahora que lo pienso.

一¿Eras muy débil?一 Shikamaru negó.一 ¿Entonces?

一Era considerado el ANBU de Raíz más fuerte e inteligente, era temido, y respetado, pero me temían.一 Shikadai arqueó una ceja, él conocía esa organización a pesar de su temprana edad.一 Tú madre era la única que no me tenía miedo, y supongo que por eso comenzó a gustarme.

一¿No te gustaba estar solo?

一Sí me gustaba, y ella era un dolor de cabeza, cuando llegó, mi tranquilidad se dio por muerta.一 rió.一 Yo estaba perdido, todos me tenían miedo, pero yo me la andaba queriendo terminar con mi vida.一 Shikadai se asustó y lo abrazó con fuerza. Shikamaru le acarició la cabeza.一 Pero tu mamá, en ese momento crítico, me dio a entender una cosa.

一¿Qué cosa?

一Qué incluso alguien como yo, también tenía algo bueno para dar.一 suspiró.一 No te lo conté, pero antes de ser jounin, yo era un asesino,  ¿sabes qué significa eso?

Shikadai asintió.

一Matar personas.

一Eso mismo.一 miró el techo.一 Yo Es se sola eso, mataba a personas, y obedecía lo que me decían, y no sentía nada tras cometer un homicidio.

Le sorprendía que Shikadai no se perturbara,  más bien, lo escuchaba con atencion.

一Pero tu mamá...一 sonrió.一 Fue la razón por la cual dejé esa vida, me dio amor, me regaló su sonrisa, y compartió su felicidad conmigo. Hasta la más vil y fuerte de las mujeres, no teme ser amable con el hombre que ama y respeta.

Shikamaru recordó a su padre,  ahora que lo pensaba debía de ir al cementerio a cambiarle las flores, seguro se estarían marchitando.

一Eso es problemático.

一Y qué le digas.一 rió.一 Amo a tu mamá, ahora y siempre.

[• • •]

Apagó la luz de la habitación, y cerró la puerta. Shikadai se había quedado dormido, y Temari lo estaría esperando en la cama para descansar. Se llevó las manos a los bolsillos, y ahora que recordaba, ella le tenía una sorpresa.

Apresuró el paso.

Cuando llegó, se apoyó en el marco de la puerta, y esbozó una sonrisa maliciosa al ver a su esposa con tan solo las bragas y un polo que el usaba para estar en casa, además, traía el cabello suelto.

Cerró la puerta detrás de sí, y le echó llave.

一Menuda sorpresa.一 dijo Shikamaru acercándose y retirándose el abrigo que traía, retiró los guantes, y vió como ella se acomodaba boca arriba.

一Hace tiempo que no lo hacíamos, y ya no puedo más.一 dijo la rubia con una voz totalmente seductora.一 Ven aquí, chiquito.

La voz de su esposa de verdad que lo hipnotizaba en momentos así, ya que siempre, SIEMPRE le obedecía, si ella le decía, desnúdate, entonces él se desnudaba, si ella le decía bésame, entonces él la besaba.

Era simple, y esa era su debilidad, y Temari se aprovechaba de eso fácilmente. Él era tímido, y ella totalmente agresiva, y eso a ella le encantaba.

Shikamaru se acercó a ella, y se subió encima de su cuerpo bien formado a pesar de haber pasado por la maternidad. A continuación, sintió como ella deslizaba la yemas de sus dedos por sus mejillas, y comenzaba a artero hacia ella, juntando así sus labios.

A pesar de estar casados, él todavía no sabía cómo seguirle el ritmo cuando ella introducía su lengua y jugaba con la suya. Él se sonrojaba así un nivel espectacular, mientras ella disfrutaba el verlo tan vulnerable.

一Quítatelo, ¿te ayudo?一 Temari comenzó a deslizar sus manos por debajo del polo, y Shikamaru alzó los brazos para que fuera más fácil para ella el retirarlo. Una vez se lo retiró, lo lanzó lejos de la cama y se subió encima de él,  quedando esta vez él boca arriba.

Shikamaru se estremeció al sentir cómo ella bajaba la mano hasta su intimidad y comenzaba a masajearlo por encima de los pantalones. Dios, Temari amaba verlo con esa expresión.

一Te-Temari... Ah...一 Shikamaru se mordía la lengua para no soltar otro gemido, comenzó a sudar y comenzó a arquear la espalda al no saber cómo contener toda esa excitación. Soltó el aire contenido en los pulmones, y sintió como ella comenzaba a besarlo nuevamente.

Aquello provocó que soltara gemidos en medio del beso, soltaba suspiros, y decía el nombre de su esposa, como a ella le gustaba.

Después, comenzó a besarlo en el cuello, dejó lamidas y mordidas mientras Shikamaru mordía su labio inferior, conteniendo otro gemido.

一Sácate los pantalones.一 dijo ella desabrochándoselo.一 Y dame algo de amor.

Shikamaru se los retiró inmediatamente, ahora que lo pensaba, él tampoco aguantaba más, también había estado esperando ese momento.

Temari había olvidado el gran tamaño de la Shikaconda, y se prendió al instante a ver el bulto que había debajo de ese bóxer, él ya estaba listo, y ella también.

Shikamaru se retiró el bóxer, y Temari apreció el gran monumento de su esposo en todo su esplendor. Cambiaron de posición nuevamente, ella abajo, y él arriba.

En el proceso, le dio un pellizcón en las nalgas, provocando así que Shikamaru las apretara, eso le dio risa, y este, en señal de rebeldía, la tomó de las muñecas y con sus sombras, la ató a la cama, esto le sorprendió mucho, y más importante, la tomó desprevenida.

一Siempre te diviertes viéndome la cara de sumiso.一 dijo esbozando una sonrisa ladina, una maliciosa.一 Me parece que esta vez, la sorpresa te la llevaras tú, princesa.

Y sí, toda la vida ella se la pasaba jugando con el cuerpo de su esposo, él le daba caricias, pero jamás había llegado al punto al cual ella había llegado.

Pronto sintió como el roce del miembro de Shikamaru contra su intimidad comenzaba a humedecerla, el Nara pudo notarlo al ver mojadas las bragas que ella traía puesta, seguida de gemidos que finalmente provocó en ella.

Le acarició los muslos, y pudo corroborar que efectivamente ella era más sensual que una foca.

Le retiró el polo que traía puesto, ya que él era el único que andaba desnudo, y eso no era justo.

一Seguro sientes mucho calor.一 dijo también deslizando sus manos por debajo de las bragas, y comenzó a masajearle, justo en el clítoris.

Temari al instante soltó un gemido y arqueó la espalda sin poder contener tanta exitación, ¿cómo es que el condenado sabía donde se encontraba el clítoris?

Kakashi y sus libros calientes: Yo no fui

Sí, claro.

Continuemos.

Una vez sintió que ella ya estaba lo suficientemente mojada, le bajó las bragas, y se las retiró delicadamente. Temari no podía hacer nada, pero, joder, tremendo calor y ganas que sentía tenerlo dentro de ella.

No era la primera vez que follaban, pero, maldición, de verdad amaba cuando encendían la llama de la pasión, y verdaderamente le gustaba cuando Shikamaru cedía ante ella, pero ahora, era diferente, y también le gustaba ese lado del Nara.

Por un momento juró ver esa sonrisa torcida que llevaba cuando él todavía se encontraba dentro de ANBU.

Shikamaru comenzó a masajearle los pechos, a besarlo, y a besarle el torso, dejando uno que otro chupetón para que supieran que ella era su mujer, y de nadie más.

Deslizó su mano sobre las piernas de su esposa, hasta llegar a hacia la cintura, la tomó con fuerzo, ya la miró impaciente.

一¿Lista?

一Contigo, siempre.

Ella abrió las piernas, y él comenzó a introducirse en ella con delicadeza, con cuidado, con amor, y cariño.

一¿Así está bien?

一Creo que te has oxidado, eh.

一Tú lo pediste, rubia.

Ok, no era suficiente, así que comenzó a dar embestidas, vió que finalmente ella parecía estar totalmente prendida, y comenzó a dar más.

Se besaron, se dieron caricias, sin pensar que estaban haciendo mucho ruido.

一Shikamaru, ah...

Oh, joder, eso era música para sus oídos.

Comenzaron a besarse, ella aún atada por las sombras, pero no le importaba, amaba esa faceta de Shikamaru, su lado frívolo y siniestro.

La coleta de Shikamaru comenzó a desatarse, terminando con el cabello suelto tras tantas embestidas.

Ni siquiera en una batalla se le desarmaba la coleta, así que estaba fuerte el asunto.

Ella amaba verlo con el cabello suelto, y amaba que él le revolviera los cabellos en el proceso.

Rodeó la cintura del Nara con sus piernas, y se aferró a su espalda mientras él se encargaba de darle el placer necesario. Le daba un par de arañazos, pero esto a Shikamaru no le importaba.

Él la amaba.

Y se lo diría ahora mientras comenzaba a retirarse de ella.

Jamás se lohabía dicho, le habría dicho un: "Te quiero", pero al enceder la llama del amor, nunca se lo había dicho, y creía que era el momento, porque se sentía sensible, se sentía demasiado atontado tras verla decir su nombre tantas veces con una sonrisa.

Él de verdad que la amaba, pero jamás supo como decírselo o demostrárselo. Simplemente la tomó de las mejillas, y la miró fijamente dejando que sus sombras la soltaran, y la dejaran libre finalmente.

Los ojos verdes de Temari lo miraron con dulzura, y sonrió.

一Te amo, mujer problemática.

Ella se sorprendió, y no pudo evitar soltar una pequeña lágrima. Él pasó su mano por la mejilla, y la secó, secó la lagrima y se acercó  más a ella, y se lo volvió a decir.

一De verdad, te amo.

Ella lo tomó del mentón.

一Te amo, bebé llorón.

Se besaron con timidez a comparación de la salvajería que habían hecho hace unos segundos, pero en fin, la hipotenusa.

Se abarazaron en la cama, y continuaron dándose caricias, dándose amor, recordando las cosas por las que habían pasado, y besándose de nuevo.

Shikamaru finalmente era feliz.

Mientras tanto, Shikadai estaba preguntándose qué hacían aplaudiendo sus padres a esas horas de la madrugada.

FIN.

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