Tae se encontraba ebrio en su apartamento, por más que JiMin o NaYeon intentarán hablar con él era imposible estaba encerrado en su recámara bebiendo sin control y Yumi no daba señales de vida.

Tae lanzó la botella vacía contra la pared maldiciendo a su madre y a sí mismo por el trato a Yumi.

Se sentía solo, vacío. De nuevo no tenía nada o así lo percibía; mientras caminaba de vuelta a su recámara tocaron la puerta fue a ella esperanzado de que fuera su chica, pero ni siquiera logró percatarse que quien yacía frente a él era su novia falsa.

— Tae...supe que estas mal — soltó con un poco de preocupación y este la dejo pasar creyendo que estaba frente a él la mujer más hermosa que sus ojos habían visto.

— Yum...— hipeo y atrajo el cuerpo de la más baja hacia el suyo — mi mamá — sollozó y la chica lo abrazo.

— Aquí estoy para ti TaeTae — susurro dulcemente embriagando el cerebro de Tae sin necesidad de más alcohol. Kim la beso creyendo que Yumi la mujer que le gustaba se situaba frente suyo.

SunHee aprovechó la situación y le siguió el beso, dejando que sus instintos primitivos la sucumbieran y la superaran aun cuando sabía que estaba actuando mal.

Tae subió el vestido de la chica dejando su abdomen y piernas al descubierto, la pelinegra llevo sus manos a la camisa de este hasta desabotonarla por completo y retirarla, acariciando en el proceso cada centímetro de la piel del moreno.

Kim le hizo enrollar sus piernas alrededor de su torso y caminó torpemente hacia la habitación que se suponía era de Yumi. Recostó a SunHee y beso su cuello y abdomen, para luego destrozar el sostén de la chica de golpe.

Una parte de él quiso detenerse, pero no podía y cuando lo intento SunHee tomó el control, sentándose sobre él y terminando de desvestirlo.

— Mírame Tae — susurro la chica mordiendo el lóbulo de su oreja mientras el chico obedecía. Mientras la miraba dos segundos bastaron para perder la razón y terminar por contundirse, el rostro de SunHee y Dolly estaba fusionado y se veía algo borroso por ratos.

— Yo...

— Déjate llevar — sonrió la mujer sentándose a horcajadas sobre él, iniciando una fricción desesperada entre sus sexos.

Sus movimientos se tornaron lentos mientras dejaba que Tae la besará como si la deseara — Dolly — susurro el castaño mientras sus manos viajaban por la espalda de la mujer; SunHee paró en seco al escuchar que el chico por el que se desvivía la llamaba por el apodo de la prostituta.

De un momento a otro Kim la acercó a su anatomía mucho más y sonrió alcoholizado — tienes mucha suerte de no haber conocido a la bruja que me dio la vida — escondió su rostro en el cuello de la mujer y se aferró a ella comenzando a llorar y a contarle sus agonías y secretos. — mi mamá regresó y... MiYeon es mi hermana — sollozo con mucho dolor — dejé que mi hermana se prostituyera por no saber quién era — los ojos de SunHee se abrieron como platos y permaneció en silencio — cuando la vi recordé cuando me golpeaba y me encerraba en el sótano o en el armario — soltó una risa junto a unas lágrimas y afianzó su agarre a la chica que se sentía peor que nunca por escuchar la vida de Tae de esa manera.

—Tae debo irme... — intentó zafarse de su agarre y este se negó.

— Te amo Yumi, perdóname por todo — habló mientras lloraba tomando ahora el rostro de la chica frente a él, para después darle un largo beso lleno de amor — perdóname por ser un imbécil, regresaré a terapia para que podamos estar juntos sin que los fantasmas de mi pasado nos lastimen — prometió una vez que se separó, partiendo el corazón de SunHee en el proceso.

— Tae...

—Terminaré con mi relación falsa, viviremos junto a MiYeon y Kook nos visitará cada vez que quieras — sollozó besando la frente de la chica — pagaré por ti cada noche con tal de que no tengas que regresar con NamJoon y...te prometo que estaremos juntos, porque te amo Young Mi, te amo con cada célula de mi cuerpo, te amo con inmensidad, como creí que jamás podría hacerlo y creo que jamás podré amar a alguien como te amo a ti.

Tae se quedó en silencio reposando su cabeza en el hombro desnudo de la chica, que lloraba en silencio.

A la mañana siguiente mientras Tae despertaba se miró a sí mismo y palideció, puesto que no recordaba absolutamente nada. SunHee cocinaba algo para el chico con una de sus playeras puestas.

Jimin tocaba la puerta junto a Young Mi y Nayeon, puesto que los amigos de Tae había llevado a la castaña explicando la situación y el proceso por el que había pasado Tae para reducir su desprecio al género femenino.

SunHee se encaminó y abrió la puerta aún con la camisa de Tae puesta, topándose a primera vista con los orbes azules y muy confundidos de Young Mi, Tae corrió a la sala encontrándose a su novia falsa y a la chica que le robaba el sueño en el mismo sitio. Se percató de cómo estaba vestida Park y luego observó a Dolly a quien se le aguaban los ojos.

— Yumi — esta simplemente se dio media vuelta y se marchó a su casa, de donde pensó jamás debió salir.

Mientras volvía en el camión a Bisan-dong de nuevo no pudo retener sus lágrimas, se sentía estúpida por seguir creyendo que su vida podría cambiar y ser mucho mejor a la mierda que era.

En el departamento de Tae el mismo maltrataba a SunHee tanto que Jimin tuvo que intervenir para que no lastimara a la de baja estatura — ¿¡Qué hicimos!? ¡Dime! — gritó tratando de volver a llegar a ella, pero de nuevo Jimin se lo impidió.

—Nada — aseguro llorando — no llegamos a nada.

—No me quieras mentir — reclamo Kim e Im intervino.

—SunHee será mejor que te vayas y dejemos que Tae se tranquilice — sugirió Nayeon y la chica caminó hacía la recamara en búsqueda de sus cosas.

— Ella abusó de mí, Nayeon — aseguró Tae y Nayeon alzó sus manos tratando de tranquilizarlo — no me vas a convencer, esa mujer abusó de mi estado, yo estaba ebrio y se aprovechó para meterse a mi cama y...

— No te hice nada porque me llamaste Yumi — anunció la más bajita detrás de él al borde del llanto. — Comenzaste a llorar mientras pedías perdón y hablaste de tu madre y tu hermana, dijiste que amabas a Yumi, por eso no pude dejarme llevar...estuve a punto de hacerlo, pero cuando te oí decir que la amabas tanto que volverías a terapia por ella mi alma se rompió y por más que quise irme no me lo permitiste.

—Tu no debiste escuchar eso.

— En eso tienes razón, no debí hacerlo — salió del departamento mientras su amigo y representante lo veían sin saber qué decir.

— Necesito ver a Young Mi

— En este momento eres a la última persona a la que quiere ver — confesó Nayeon y la mirada de Kim se quedó fija en ella — se llevaron a su hijo, apareció su padre y resulta que MiYeon es su hermana, tiene problemas más grandes que lidiar con un idiota como tú.

—¿Su hijo? — cuestiono confundido.

— Creímos que lo sabías, Hoseok está pidiendo préstamos en la empresa, pero le fueron negados. JungKook es hijo de Dolly y Hobi — agrego Jimin dejando sin palabras a Taehyung.

Sana llamaba a Tae para que este ayudara a MiYeon debido a que su madre la estaba jaloneando fuera del establecimiento de NamJoon, la salida de MiYeon del burdel de Kim se debió a la verdad sobre el parentesco con Tae y Yumi y también por la intervención de SeokJin.

La mujer estaba a punto de golpear a MiYeon cuando Dolly intervino, deteniendo su mano en el proceso, se colocó frente a la menor dejando relucir su diferencia en la altura, la mirada azul de Yumi retaba a la mujer con la mirada, está la miró de arriba a abajo, topándose con su corto vestido, largas piernas y zapatillas de aguja que la mujer clasificó como "vestuario de prostituta".

—Si le toca un pelo, juró que no respondo — amenazó y Tae que iba llegando se quedó estático mirando la escena — ella no está sola.

— Una prostituta como tú no debería dirigirme la palabra, mucho menos relacionarse con mi hija. Eres una mala influencia, una puta — soltó tratando de herirla, pero Im no mostró ningún tipo de tristeza.

Aquellas palabras no le habían hecho ni cosquillas, había escuchado cosas peores de personas que le importaban aún más.

—No me ofende, porque esas palabras las he escuchado desde que crecí debido a que mi padre me abandono por usted, no tiene la calidad moral de llamarme zorra, prostituta, ni puta, porque usted se atrevió a entrometerse en un matrimonio, abandonó a su hijo y es una mala madre. Así que no trate de desquitar su coraje conmigo, porque no lo va a conseguir — la mujer intentó arremeter con fuerza en contra de la peli castaña, pero esta volvió a detener a la mayor — no dejaré que me ponga ni una mano encima y mucho menos dejaré que toque a MiYeon.

— Tú no sabes lo que significa ser madre — anunció y Yumi soltó una risa sarcástica y la miró mal.

— Usted no sabe nada de mi vida. Tengo un hijo hermoso y me lo arrebataron, estoy haciendo hasta lo imposible por recuperarlo, porque no deseo ver como mi hijo crece con un odio hacía mi como el que Tae le tiene a usted.

— No te atrevas a mencionar a mi hijo. Una sucia boca como la tuya no merece hablar sobre él.

— Yumi — trató de intervenir la menor, pero fue ignorada.

— Déjeme informarle algo SEÑORA — recalco y sonrió con suficiencia — su hijo y yo éramos pareja.

— Una prostituta como tu jamás podría ser algo de mi Tae.

— Me sorprende su cinismo, no estuvo presente en la vida de TaeHyung y se llena la boca de orgullo al decir MI HIJO, no sea hipócrita y evite tratar de engañar a todos con su buena voluntad y deseo de redimirse porque no le queda. ¿Por qué esperó hasta ahora que tiene dinero para volver a buscarlo? ¿Por qué permitió que su pequeña hija saliera de su casa? Usted no es ni mejor, ni peor que yo, es igual a mi, aunque eso no le guste — la mujer apretó su mandíbula con tanta fuerza que podría terminar por romper sus dientes — que tenga buen día se-ño-ra — se giró a MiYeon y acomodo su cabello — debo irme, pero cualquier cosa sabes dónde encontrarme — beso su frente y se marchó para subirse al auto de un hombre que acababa de pagar por ella.

La mujer quiso tomar a su hija con brusquedad, pero la castaña se apuntó con un picahielos en la garganta, amenazando con quitarse la vida — MiYeon — habló preocupada su madre.

—¿Qué más quieres de mí? ¿qué más quieres arruinar en mi vida? — gritó al borde de la desesperación mientras amenazaba con cortar su yugular. Tae corrió en su dirección posándose frente a ella.

— Suelta eso hija — pidió preocupada la mujer.

—¿Por qué me ocurren tantas cosas malas? — lloró desconsolada mientras comenzaba a clavar el metal en su piel, pero su hermano intervino arrebatándole el objeto y abrazándola, permitiéndole que se desplomara en llanto en sus brazos — me quiero morir Tae, odio a mis papás, odio mi vida — confesó intentando quitarle el objeto.

— Todo estará bien MiYeon, siempre estaré contigo — aseguro mientras acariciaba su cabello.

— Todas las personas que amo, siempre se alejan de mi lado. Ella me quiere alejar de ti, de Yumi — sollozó afligida.

— Nunca voy a irme Miyi, siempre estaré contigo — besó su sien mientras miraba mal a su madre.

— Tae, tú y Yumi son lo único que tengo.

— No te preocupes, al menos yo estaré a tu lado hasta el final.

Y con una nueva promesa hecha, Kim Taehyung e Im MiYeon creaban un lazo que ni la peor tormenta podría romper, eran hermanos, se tenían el uno al otro y nadie podría volver separarlos. 

Maratón 4/4.

Esta historia también está cerca de su final, solo 10 capítulos más, ojalá sea de su agrado la historia y ouedan contarme su opinión. Les quiero!✨️