Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

24. Un trato y una confesión.

El tiempo transcurría despacio, el frío otoñal amenazaba con aparecer pronto y dentro de poco el cumpleaños de Jungkook se presentaría.

Desde el día que MiYeon se había quedado en casa de Tae las cosas habían cambiado un poco, Young Mi y Kim salían a menudo con la menor a distintos lugares, uniéndose poco a poco, más y más.

A diferencia de otros días, Tae y Yumi estaban solos. Kim había optado por llevarla a un campo de Bisandong a las afueras del lugar, ahí nadie los molestaría.

Habían preparado aperitivos y llevaban al pequeño Taennie para que corriera por el lugar, mientras ellos estaban en el suelo descansando.

Yumi miraba hacia el cielo, mientras Taehyung la observaba a ella, cada que pasaban tiempo juntos un sentimiento crecía exponencialmente, su día se resumía en ir a trabajar y pensar en la castaña, volver a casa para verla, hacerla sonreír cuando estaban cerca y dormir soñando con ella.

Hoseok había acertado al decirle que caería ante los encantos de la castaña, pero no le importaba en lo absoluto, él solo quería estar cerca y ayudarla a reparar su corazón roto. Estaba seguro que quizá Young Mi aún sentía algo por Hoseok, pero estaba dispuesto a hacer que sus sentimientos giraran en torno a él.

- ¿Qué tanto me miras Tae? - rió levemente esperando una respuesta.

- Young Mi, ¿qué tipo de hombre te gusta? - su pregunta la tomó por sorpresa que se giró en su dirección, mirándose el uno al otro, una leve corriente eléctrica se formó dentro de sus anatomías colocándolos alerta, ambos deseaban casi lo mismo, pero no se atrevían a decirlo, uno por pena y la otra por miedo.

- No tengo un tipo ideal - confesó de forma risueña.

- Me alegra saberlo - sonrió y sin poder evitarlo ella le correspondió.

- ¿Por qué lo preguntas? - Era ahora o nunca, el momento que Tae deseaba que llegará, quería decirle cómo se sentía.

- Me gustas, Young Mi... Haces que me pregunte cada día qué tipo de hombre te gusta y de solo pensarlo me dan celos y llegan a mi unas ganas desesperadas por ser un mejor hombre... para ti - suspiro nervioso, aunque por fuera parecía muy confiado. - Eres tan increíble que me haces sentir eso, me haces desear verte todo el tiempo y cuando nos vemos por las noches una emoción me invade, a tal punto que deseo abalanzarme sobre ti, abrazarte y besarte...ayudarte a olvidar el día que hayas tenido en tu trabajo -. Los orbes de Yumi comenzaban a picarle, pidiéndole llorar - cuando lloras así, pierdo la razón - acarició su mejilla suavemente - me haces perder la razón y solo quiero quitarte cualquier sufrimiento que tengas, porque me gustas Young Mi.

- Yo no puedo gustarte Taehyung... yo soy una prostituta - lloró a lágrima viva, deseando no haber escuchado eso.

- Por ti soy distinto Young Mi, en este tiempo juntos descubrí que no debes juzgar a nadie por su pasado o por la vida que lleva y yo quiero estar contigo. No me importa si eres modelo o una prostituta, si limpias casas o eres la más rica del mundo, solo me importa tu interior.

Y sin poder reprimir más, la castaña tomó las mejillas del chico y lo besó. Sus labios se unieron en un vaivén lento, pero que dejaba a relucir que ambos se correspondían. Kim tomó la cintura de la castaña y la acercó a su cuerpo, ella no se opuso, al contrario disfruto la cercanía entre ambos.

Se separaron por la ausencia de oxígeno debido al beso, pero unieron sus frentes, sus ojos estaban cerrados y solo se escuchaban sus respiraciones y fue ahí donde Young Mi se atrevió a hablar.

- Tu también me gustas, Kim Taehyung.

Jeongyeon y Yoongi habían resuelto poco a poco sus diferencias, aunque más que hacerlo por ambos trataban de que Jungkook no se sintiera incómodo.

La supuesta ida de Jungkook a casa de sus primos había sido la mentira que habían utilizado los Min, para que Dolly no se acercara a su hijo, rompiendo la única promesa que le importaba más que a nada en el mundo a la castaña.

- ¡Mamá! - sonrió el pequeño acercándose, la pelinegra se agacho a su altura y lo observó.

- ¿Qué sucede cariño? - sonrió ampliamente.

- Mañana es mi cumpleaños y ya se que quiero de regalo - sonrió.

- Pide lo que quieras cielo, te lo daremos - aseguró con una sonrisa.

- ¿Segura? - levantó su meñique y ella los entrelazo.

- Es una promesa .

- Quiero pasar mi cumpleaños junto a Yumi - sonrió de forma alegre e inocente.

Yoongi escuchaba todo desde el comedor, sabía que si no lo hacía, Jungkook haría cosas drásticas como la última vez .

- No Jungkook, no se puede.

-¡Lo prometiste!

Min intervino, estaba seguro que Jeongyeon se molestaría, pero no podía negarle nada al pequeño Kook.

- Lo prometiste, Jeongyeon - señaló el de hebras oscuras y ella lo miró mal - no te preocupes Kook, pasarás el día con Yumi.

- Gracias papá - lo abrazó aunque su cuerpo no alcanzará su cuello.

- Anda, ve a empacar tus cosas - el niño corrió emocionado a su cuarto y guardó sus pertenencias en una mochila.

- ¿Por qué lo hiciste? - le recrimino su mujer, la inseguridad que tenía sobre el cariño de su hijo hacia la castaña seguía latente.

- Sabes que ese día es de ley y tu le prometiste a Kook cumplir su deseo.

- Pero...- este la interrumpió para marcharse.

- Llamaré a Young Mi - mintió.

La castaña iba de camino a casa con Tae, a pesar de que estaba feliz, la ausencia de Jungkook la hacía decaer en la tristeza.

Kim se percató de ello, por lo que poso una de sus manos en el muslo de la chica hasta llegar a sus manos, acarició el dorso de una de ellas y le sonrió.

- ¿Quieres contarme qué pasa? - ella asintió y soltó un suspiro profundo.

- Mañana es cumpleaños de Kook y no podré verlo - Tae entrelazo sus dedos mientras veía hacia el frente.

- No pienses eso, quizás mañana puedas hacerlo- aseguró.

- Sus padres no me dejan verlo, dicen que está con sus primos, pero algo me dice que mienten.

- Hey, te prometo que Jungkook y tú estarán juntos mañana - sonrió tratando de tranquilizarla.

Al llegar a casa Yumi se fue a dar una ducha, mientras Tae preparaba café y aprovechó para llamar a Yoongi, luego del segundo tono respondió.

- ¿Taehyung? - respondió confundido.

- Necesito pasar mañana por Jungkook, Dolly desea verlo - anuncio.

- Mañana es...

- Cumpleaños de tu hijo, lo sé. Pero Yumi necesita verlo, no sé porque razón no se lo permiten, pero mañana a primera hora estaré recogiéndolo y espero esté listo.

- No, él no...

- Él si, ambos sabemos que ese niño también desea verla.

- De acuerdo - anunció sin más remedio.

Colgaron y Kim se giró en dirección a la puerta que se abría, de esta salió Young Mi secándose el cabello.

Se acercó a ella para ayudarla y no objeto; las hebras doradas de Dolly caían poco a poco sobre sus hombros y espalda; los primeros estaban descubiertos, cosa que le causó un revoltijo en el estómago.

- ¿Pasa algo? - cuestionó intentando girarse en su dirección pero él no se lo permitió.

- Me gusta tu cabello - soltó sin pensar.

- Supongo que gracias... aunque a decir verdad tu cabello es más bonito que el mío.

- Yumi... ¿Has pensado en la posibilidad de que seamos algo? - tragó saliva lleno de nervios y notó cómo el cuerpo de la chica se tensó - digo... solo es una pregunta hipotética, no estoy diciendo que ya ahora seamos algo.

- Siendo franca, jamás he tenido una relación real. Lo que en su momento tuve con Hoseok fue una simple aventura pero...solo eso - inhaló y exhaló profundamente, estaba realmente nerviosa. Ese era el efecto que Tae ponía en ella - ¿Estarías dispuesto a estar en una relación conmigo? Sabes que no puedo dejar mi trabajo aunque lo desee.

Kim giró a Yumi de los hombros y le hizo verle - Por ti estaría dispuesto a enfrentar a Namjoon, por ti sería capaz de pagar por ti cada noche para que no tengas que trabajar... por ti estoy dispuesto a ser una mejor persona - el corazón de Dolly parecía desbordarse de su pecho, por lo que sin esperar más tomó sus mejillas y junto sus labios en un largo y profundo beso. Tae tomó su espalda baja y la halo a su cuerpo; con su mano libre la tomó del cuello deseando que no se separará, mientras ella colocaba sus brazos detrás del cuello de Tae.

La temperatura de sus cuerpos comenzaba a subir, pero ellos sabían controlar sus impulsos, reprimiendo todo en un simple pero delicioso beso, uno que Taehyung deseaba desde hace tiempo.

La novia falsa de Taehyung contestaba una llamada inesperada, jamás había imaginado que él llamaría, sabía lo mucho que la detestaba.

- Vaya, vaya Jung. ¿A qué debo el honor? - soltó una risa socarrona - creí que dijiste que yo solo soy una mocosa insoportable, insufrible con la que jamás tendrías algún tipo de contacto.

- La gente cambia SunHee - aseguró.

- Tu no eres de los chicos que cambian, naciste siendo imbécil y morirás siendo uno.

- Así como tú, debutaste siendo la sombra de alguien y morirás de la misma forma - la chica soltó un bufido molesta.

- Si me hablaste solo para esto, adiós... - antes de colgar Jung la interrumpió.

- Ya, ya, no seas taaaan dramática. Dime algo... ¿conoces o has escuchado de Dolly, Yumi o Young Mi?

- ¿Cómo sabes eso? ¿la conoces?

- Mejor de lo que te imaginas.

- ¿Y quién es?

- Es la razón por la que Taehyung no puede mirarte ni a ti, ni a otra mujer - sonrió detrás de la línea - lo entiendo, es imposible no fijarse en ella, pero tu... tu tienes más clase que esa prostituta.

- ¿Es una prostituta?

- Si, pero si tu lo deseas, te ayudo a deshacerte de ella. ¿Aceptas?

- Acepto.

SunHee por su parte no molestaba a Taehyung, por lo cual debido a su distancia la casa de acosadores más grande de Corea había entrado en acción. Los sentimientos de la chica no habían cambiado en lo absoluto, solo que a diferencia de antes ya no estaba sola... Un aliado se había aparecido frente a ella dándole inicio a un trato, uno que solo le convenía a ella y a su compañero.

3/4.
Holaa
Ojalá les guste y puedan contarme su opinión, les quiero.♥

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro