POV JEONGYEON

-¡Jeongyeon-ah! ¡Jeongyeon-ah!- alguien me está despertando, así que lo ignoré y continué durmiendo sin mirar quién era. Pero a pesar de ignorarla, sacudió mi cuerpo, decidida a despertarme -¡Jeongyeon-ah!- me gritó suavemente al oído.

-¿Mwo? ¿Jugullae? (¿Qué? ¿Quieres morir?)- dije con calma que aún tenía los ojos cerrados. Pero ella siguió sacudiendo mi cuerpo -¡Aish! ¡Jinjja!- dije y abrí los ojos y la miré. Es Jihyo -¿Qué te pasa Jihyo? Estoy durmiendo- la regañé que la hizo golpear mi cabeza.

-¡Pabo! Es el primer día de trabajo de tu marido. ¿No lo sabías?- ella me dijo lo que hizo que mi boca tuviera la forma de un cero perfecto.

-¿Trabajo? ¿Jinjja? ¿Qué trabajo?- le pregunté y ella se dio una palmada en la cara. ¿Por qué no supe de esto?.

-Tu halmeoni hizo que Jimin oppa se hiciera cargo de ti, ya que tienes que quedarte aquí para cuidar a tu bebé. Él será el CEO temporal por ahora- me informó Jihyo que me dejó en shock. ¿En serio?

Corrí rápidamente al baño para arreglarme. Rápidamente me lavé los dientes y me lavé la cara.

-No olvides la corbata de oppa, deberías ser tú quien se la ponga- gritó Jihyo y supongo que ya se fue.

En serio, ¿en qué está pensando halmeoni?.

POV JIMIN

En serio, ¿qué pasa con la vieja bruja?¿Por qué me pidió que asumiera el puesto de Jeongyeon en la empresa? Ella es consciente de que yo no tengo ninguna experiencia trabajando en la empresa. Solo tengo conocimientos sobre cómo dirigir un bar y cantar en el bar. Si no fuera por Jeongyeon, no lo haría.

Mientras esperaba a Jihyo, la vi sonreír de oreja a oreja sin la corbata en sus manos.

-Oh, ¿dónde está la corbata? ¡Pabo! Llegaré tarde- le pregunté y me dio una palmada en el brazo. Entonces llegó la vieja bruja con una sonrisa también de oreja a oreja.

-No tienes intención de contarle esto a Jeongyeon, ¿no? ¡Tch! ¡Aigoo! Eres muy reservado. Por cierto, se lo conté a Jeongyeon- dijo y no me sorprendió por cierto. Con su boca, no se revelará ningún secreto. ¡Aish!.

-No me sorprende con eso. Eres muy habladora- le dije y luego otra vez, me dio una palmada en el brazo. A ella le gusta mucho mi brazo.

-¡Aigoo! Mi nieto es muy guapo- me felicitó Halmeoni mientras arreglaba mi abrigo. Ella es la más emocionada por esto que entre nosotros.

-Jiminie, realmente te ves respetuoso con ese atuendo. Te queda bien- la vieja bruja elogió y sonrió ampliamente -¡Aigoo! Jeongyeon es muy afortunada de tenerte como su marido. Eres muy guapo- me felicitó de nuevo y me dio algo. Es un reloj.

-¿Qué es esto? No lo necesito- le dije y estaba a punto de devolvérselo cuando ella se negó.

-Piensa en ello como mi regalo para tu primer día de trabajo. Es para una buena suerte- dijo la vieja bruja que no me deja más remedio que aceptarlo. Me lo puse y ella sonrió cuando se lo mostré -Realmente te queda bien- dijo y me dio un abrazo. No tengo tiempo para protestar, así que le devolví el abrazo -¡Aigoo! Realmente se siente tan bien tener un nieto- dijo y frotó mi espalda. Bueno, me siento mal por ella. Ella solo tiene a Jeongyeon y Nayeon y Lia como sus nietas, no le dieron la oportunidad de tener un nieto.

-Tío Jimin, te ves guapo con ese atuendo- me felicitó Lia, que es como una música para mis oídos. Es la primera vez que la escucho decirme cosas buenas.

-¿Jeongmal?- le pregunté y ella asintió feliz -¡Aigoo! Gomawo Lia- dije y choqué los cinco con ella.

Cuando rompimos el abrazo de la vieja bruja y yo, estaba a punto de despedirme de ellos cuando vi a Jeongyeon corriendo hacia nosotros. Ella todavía está en pijama y su cabello es un desastre.

-¡Kidaryeo! (¡Espera!)- gritó mientras sostenía una corbata. Cuando llegó hasta nosotros, está recuperando el aliento.

-¡Omma! ¡Todavía estás en pijama!- Lia le dijo que solo se encogió de hombros. Le sonrió a Lia y la besó en la frente.

-¿Vas a ir a la escuela sin despedirte de omma?- dijo y puso mala cara. Entonces Lia tiró de ella y la besó en las mejillas. Son tan lindas.

-Mianhae omma. El tío Jimin insistió en llevarme a la escuela para que no te despertara- respondió Lia que hizo que Jeongyeon se pellizcara la nariz. Entonces Jeongyeon me miró.

-¡Ya! ¿Por qué no me dijiste sobre esto?- me regañó y me miró. Sonreí y reí entre dientes.

-Mianhaeyo Jeongyeon, no quería que te preocuparas. Solo confía en mí, tu compañía está en buenas manos- alardeé y ella negó con la cabeza, en desacuerdo conmigo.

-Sé que será un desastre en tus manos. Te dejaré con mi secretaria. Ya hablé con ella. Ella te guiará- dijo y luego se acercó a mí -Te pondré la corbata. No te muevas- ordenó ella a lo que yo seguí.

Mientras me ponía la corbata, su cara estaba cerca de la mía y podía sentir su respiración. Aparté la mirada de ella porque se sentía un poco incómodo.

-Todavía estamos aquí, no te olvides de nosotros- dijo Jihyo refiriéndose a ella misma, Yoongi, halmeoni, la vieja bruja y Lia. Solo negué con la cabeza y sonreí. Sentí que Jeongyeon también sonrió.

Cuando terminó de ponerme la corbata, arregló mi polo. Miré su dedo y todavía está usando nuestro anillo de bodas. Desde la boda, siempre veo nuestro anillo de bodas en su dedo y nunca lo veo vacío. Ella realmente le da importancia con eso.

Miré mi dedo anular y también estoy usando nuestro anillo. Ni siquiera me lo quité. ¡Woah! Eso es realmente sorprendente para mí.

-Gomawo Jeongyeon- le agradecí y ella sonrió. Ella movió su rostro lejos del mío.

-No hay problema Jimin. Buena suerte tu primer día- me animó y levantó el puño -¡Fighting!.

-Tío Jimin, vámonos. Llegaré tarde- me interrumpió Lia y me empujó. Esta niña.

-Ahm... Jeongyeon, uhm...- dije y rasqué mi mejilla para darle una pista. Ella simplemente puso los ojos en blanco y sonrió. Yoongi golpeó mi brazo.

-Realmente te gusta pedirlo- dijo Yoongi y todos nos reímos. Entonces Jeongyeon rápidamente me dio un beso en la mejilla y después de hacerlo, se cubrió la cara. Sonreí y también le di un beso.

Ella se sorprendió por mi acto repentino y rápidamente arrastré a Lia para escapar de ahí.

POV JEONGYEON

Todavía estoy sorprendida por las repentinas y dulces acciones de Jimin hacia mí. Todavía no estoy acostumbrada a eso. ¿Qué pasa con él por cierto? ¿Y por qué estoy lidiando con él?.

-Están muy bien el uno para el otro. Estoy muy feliz de que haya llegado a ser mi nieto- me dijo Halmeoni y sonrió ampliamente. Obviamente ella está feliz.

Luego halmeoni, Jihyo, Yoongi y la halmeoni de Jimin entraron dejándome todavía preguntándome qué pasaba con Jimin.

¿Es esto solo una actuación? O---

Me di una bofetada antes de pensar en la otra posibilidad.

-Yoo Jeongyeon, esto es solo un acto. No hay otro significado detrás de eso. Sabes que él ya tiene a alguien en su corazón y ese no eres tú. ¡Despierta! Si te enamoras, pierdes- me recuerdo a mí misma y lanzo una respiración profunda y pesada.

Estaba a punto de entrar en la casa cuando alguien conocido me llamó la atención. Nuestras miradas se encontraron y él me señaló.

-¡Oh! ¡Madame Yoo!- dijo, reconociendo quién soy.

-Sr. Kim- lo llamé y él corrió hacia mí.

-Oh, entonces esta es tu casa. Ah, me refiero a mansión. Eres realmente rica eh. No lo sabía- dijo mientras miraba nuestra casa. Negué con la cabeza.

-Ani, ani. Esta es solo una casa sencilla. Por cierto, ¿entonces vives en esta subdivisión?- le pregunté a lo que él respondió rápidamente con un asentimiento. Luego señaló la tienda cerrada no muy lejos de aquí.

-Me acabo de mudar ayer. Estoy a punto de abrir una cafetería- me informó y sonrió.

-¿Jinjja? ¡Wooh! Soy una fanática del café. Seguramente seré una de tus clientes más frecuentes cuando abras tu cafetería. Me avisaras ¿no?- le pregunté y rápidamente asintió felizmente.

-Por supuesto. Yo también me alegraría. Por cierto, pasado mañana, estaré diseñando mi café. ¿Puedes ayudarme? Ya que eres la única que conozco en este vecindario- me preguntó mientras usaba sus encantos. Me reí.

-No necesitas usar tus encantos. Me encantaría ayudarte. Solo para informarte, tengo un gusto muy fuerte cuando se trata de diseño de interiores. Te lo aseguro, sería de gran ayuda- dije sonriendo y él me sonrió.

-Gomawo Madame Yoo- me agradeció formalmente lo que me hizo sentir incómoda.

-Abandone la formalidad Sr. Kim. Puede llamarme Jeongyeon- dije y le di la mano para un apretón de manos. Lo aceptó alegremente con una sonrisa. Realmente le encanta sonreír, ¿eh?.

-Lo mismo para ti Jeongyeon. Llámame Namjoon- dijo y ambos nos reímos entre dientes.

-Está bien Namjoon. Tengo que irme. Halmeoni debe estar buscándome- me despedí y él asintió.

-¡Arasseo! ¡Adiós Jeongyeon, mi nueva chingu!- dijo que me hizo reír. El es raro.

POV JIMIN

-Encantado de conocerlo Sr. Park. Envíe mis saludos a la señora CEO Yoo.

-¡Trabaje duro, Sr. Park! Puedo sentir que dirigirá esta empresa muy bien ya que la señora presidenta le confió esto a usted en lugar de a madame Nayeon.

Cuando finalmente todos salieron de la sala de conferencias, suspiré y me relajé apoyando la cabeza en la cabecera. En serio, siendo el CEO, tienes que lidiar con personas falsas. Me sorprende que Jeongyeon pueda manejar este tipo de trabajo.

-Sr. Park, todavía tiene tres reuniones programadas con empresas asociadas- me informó la secretaria de Jeongyeon que me dejó en shock.

-¿Jinjja? ¿Tres reuniones? Pero por reunión, toma dos horas terminar. ¿Entonces tengo que asistir por seis horas? ¡Jinjja!- solté de tanta incredulidad. Ahora entiendo por qué Jeongyeon no podía dedicar tiempo a Lia. Y Jeongyeon tiene mi respeto ahora por lidiar con esto todos los días. Debe ser muy difícil ganar dinero aunque seas el jefe.

-Y como madame CEO no está aquí, usted será quien firmará todos los papeles que dejó- dijo y luego me mostró montones de papeles -Hay que leer estos papeles antes de firmar. Una señal del CEO es realmente importante y valiosa- me informó que me hizo suspirar.

¡Jinjja! ¡Odio ser CEO!.

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Terminé todos mis trabajos de hoy. Revisé mi reloj de pulsera y dice 11:30 pm. Que demonios. Llevo 15 horas en la empresa por el amor de Dios. ¿Cómo se las arregla Jeongyeon para hacer sus cosas en casa después de estar en la empresa durante 15 horas? Ella es una sobrehumana.

Entré en mi coche y apoyé la cabeza en la cabecera. Este fue un día agotador. Me suelto la corbata y tengo los ojos adormilados. Estaba a punto de dormitar un minuto cuando sonó mi teléfono. El identificador de llamadas reveló el nombre de Jeongyeon.

-¿Hola? ¿Jimin? ¿Cómo estuvo tu primer día?- preguntó mientras atendía su llamada. Suspiré.

-Es muy agotador y mi alma quiere estar separada de mi cuerpo. En serio, ¿cómo te las arreglas para hacer esto todos los días?- le pregunté y ella se rió entre dientes.

-Estoy acostumbrada a eso- respondió.

-¡Aish! Ya no me gusta ser el jefe- expresé lo que la hizo reír de nuevo.

-Por cierto, ¿dónde estás? ¿De camino a casa? ¿Estás conduciendo?- preguntó con tono preocupado.

-No te preocupes, todavía estoy en el estacionamiento. Acabo de entrar en mi auto. Por cierto, necesito colgar. Estaré allí por un par de minutos. Deberías dormir ahora es muy tarde. Pabo!- la regañé y la escuché gemir.

-Ani. Te espero. Quiero escuchar tu historia- dijo con un tono somnoliento.

-¡Eres realmente una pabo! Está bien. Espérame. Estaré allí de inmediato- le contesté.

-Arasseo. Adiós, cuídate y conduce con cuidado- dijo luego colgó la llamada.

Rápidamente encendí el motor del auto y salí del lugar de inmediato.

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Cuando llegué a casa, todo el lugar estaba a oscuras, pero la gran pantalla de la lámpara en la esquina estaba abierta y me hizo ver a Jeongyeon durmiendo en el sofá de la sala. En resumen, en mi cama.

Rápidamente me acerqué a ella y me senté a su lado.

-¡Pabo! Dije que deberías dormir- le murmuré y le metí el pelo que tenía en la cara en la oreja. Miré su pacífica cara dormida -Ahora te respeto por trabajar tan duro como directora ejecutiva de la empresa más activa, no solo en Corea sino también en Filipinas. Eres una súper mujer- pronuncié y luego sonreí.

Me puse de pie y luego la cargué como una novia yendo a su dormitorio. Ella es muy ligera. Ella también se ve tan delgada. ¿Está comiendo bien? Son ricos pero ella es así. ¡Jinjja!.

La acosté con cuidado en su cama. Una vez más miré su rostro dormido antes de ponerme de pie.

-Realmente mereces descansar bien. Que tengas buenas noches y que duermas bien, mi querida esposa- susurré y luego besé su frente.

Luego apagué la pantalla de la lámpara de su mesa auxiliar, salí de su dormitorio y cerré la puerta.