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Kim Taehyung, probablemente, había perdido la cuenta, de las veces que había besado a Hoseok. Y es que, después de haber pasado un mes de fingir ser la pareja perfecta, frente a su madre y sus amigos; simplemente, los besos y los cariños falsos, parecían ser algo totalmente natural. Algunos incluso, eran involuntarios y no se daba cuenta de sus acciones. Se preguntaba si Hoseok lo hacia.
—¿Qué es verdad y qué es mentira?
No era del todo natural, que Hoseok tuviera su cabeza entre las piernas de Kim, mientras ambos veían la televisión, o Taehyung aparentaba ver televisión, porque no podía concentrarse en las imágenes que se reproducían en la pantalla. Tampoco era natural que, el menor estuviera acariciando el cabello de su mejor amigo con delicadeza. Nunca lo habían hecho antes, y no tenían le necesidad de hacerlo en eso momento porque nadie estaba observándolos. No les servía de nada que fueran cariñosos cuando nadie estaba viendo. El objetivo principal seguía siendo engañar a su madre, Yuri por su parte, no quitaba el dedo del reglón, y empezaba a ser mucho más molesta.
—¿Qué pasará por la cabeza de Hyung?, esta nervioso, preocupado. ¿Acaso no le importa?
Eran demasiado cercanos, pero no a esos niveles, sus movimientos parecían más íntimos que antes, Incluso más que los besos falsos. Lo peor de todo, es que Hoseok tenía apoyada su cabeza cerca de una zona peligrosa.
—Mierda, ¿acaso no se da cuenta?
No es que Kim fuera un chico precoz, ni mucho menos que sólo pensara en sexo; aún así, no había forma de que no lo malinterpretara.
—Danger
Y ni siquiera quería recordar la razón, del porque era una situación peligrosa. Aceptaba que se había metido demasiado en el papel de novio y había tenido sueños donde sobrepasaban la línea. De todos modos, quería creer que, soñarse en situaciones más comprometedoras con su hyung, no deberían significar nada malo, ni tenía que exagerar sobre el hecho.
—¿Por qué mi corazón late con tanta fuerza?, me estoy volviendo loco. Esto no me puede pasar a mi.
En fin, todos los jóvenes normales de su edad, tenían uno que otro sueño húmedo y eso estaba bien, perfectamente natural. No era, realmente importante, no tenia que hacer un drama sobre eso.
Calma, Kim sabía que tenía que dejar de pensar en eso, que no era el momento, ni el lugar. Hoseok podía darse cuenta, asustarse y correr. Hoseok era bueno en eso: escapando de su sentimientos y de las situaciones difíciles.
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