Como hacer que alguien que se enamore, puff fácil, como hacer que el chico más tímido del mundo y la chica más... difícil del mundo se junten mhm no tan fácil pero tampoco era alcanzar el uno setenta y aquí estoy con tres centímetros más burlándome de la estadística y del doctor.

—Ya levántate —me despertó Pa.

—No —gruñi— a mi hermano lo dejaron quedarse en cama por meses.

—Pretenderé que no comparaste la depresión de tu hermano con tu flojera —señaló negando.

—Tu lo llamas flojera, yo lo llamo descanso mental —arregle.

—No llevas ni una semana —regañó— Jake a la escuela.

—Que injusto eres, no fuera tu niño favorito verdad —gruñi metiéndome a bañar.

—No lo lograrás —negó, sabía bien mis juegos.

—¡Tenía que intentarlo! —grité desde adentro.

La relación con mis padres era así, yo era un cabron y ellos ya lo sabían, en lo que era respecto a sentimientos se decidieron dividirse cada quien a sus hijos, claro a Pa le tocó la parte difícil, yo era un libro abierto.

Durante el desayuno comía todo lo que se ponía en mi plato y lo que no.

—Ah extraño la porción de Jens —me quejé.

Papá negó divertido sirviéndome más.

—Iremos al cine hoy, vienes —dijo Pa.

—Para que tu te quedes dormido y mi papá hable toda la película no gracias —afirmé— mejor les dejo la casa libre y tienen sexo por toda ella, excepto en mi cuarto.

—Jake... —me iba a regañar papá.

—No déjalo suena bien —guiño Pa.

—Hecho —sonreí— yo tomaré mi auto y...

—Yo te llevaré —se levantó papá dejando los platos— tres meses más.

Bufé, salvé a mi hermano, esa gallina se lo iba a comer... no tenía contemplado que iba a seguirme chocando con la puerta de las vacas liberándolas.

Camino a la escuela nos perdimos pues según papá recordaba el camino, lo hacía el de mi primaria.

—Estaba seguro que era aquí —gruñó papá.

—Hey que mida lo mismo no significa que sea el mismo lugar —bromee.

Papá negó riendo para dar marcha, mi atención llegó a la morena, ese rostro conocido acompañando a un chico en silla de ruedas, el color moreno de su piel me lo decían todo, eran hermanos y esa acción al besar su mejilla arropándolo bien solo me recordaba al mío.

Papá me dejó en la escuela, mi chico no había llegado aún así que aproveché para dar paso a mi plan.

Primer paso hacerme amigo de la chica, desde adentro plantarle la idea y el encanto y carisma de Dean lo haría ver la gran persona que es.

Fui por los cafés para llegar al salón, no tardo en llegar la chica, con una mochila tres veces su tamaño como siempre.

—Planeas matar a alguien con la mochila que llevas —me burlé.

—En estos momentos si, a alguien que seguramente no alcanza la segunda perilla de la puerta —señaló .

—Claro que la alcanzó —bufé.

—Pruébalo —sonrió.

Me levanté para acercarme  a la perilla de seguridad y oh sorpresa no la alcanzaba, ni siquiera de puntitas.

En ese momento entró Preston, con una sonrisa en rostro.

—Hola Jake —saludo animado.

—Levántame guapo —sonríe triunfante.

El chico me levantó para que la alcanzara.

—Gracias —dije besando sus labios para bajarme— te doy tu recompensa al rato.

Una sonrisa y me fui a mi lugar dichoso.

—Diría en tu cara pero no me gusta presumir —mencioné.

—Te ayudaron —dijo frustrada.

—Todos necesitamos ayuda —asentí— hay que saber pedirla.

—Eres insufrible —señaló.

—Con el tiempo te acostumbras —confirme— ayuda si pasas tiempo con nosotros, ¿Entonces que? viernes te veo en la fiesta.

—Tu no entiendes el significado del no —señaló.

—Lo entiendo pero no lo pongo en práctica —sonreí.

—Tengo trabajo —se negó.

—De que trabajas —me interese.

—Niñera —contestó.

—Cuidar de tu precioso moreno no es trabajo —deje en claro— puedes llevarlo a la fiesta.

—Es un niño y me estás acosando acaso —atacó.

—Te vi cuando venía para acá —sonreí— entonces...

—Me sofocas entiendes —gruño— no estoy interesada en salir con tu amigo.

—Porque no lo conoces —señalé, no me estaba llendo tan bien.

—Espera que no es tu novio —mencionó.

—Dos hombres no pueden ser mejores amigos sin que se piensen que son novios —me indigné.

—Te vi besarlo el otro día —agregó arqueando la ceja.

—Un besó no significa nada —aclaré.

—Ah no —señaló, siempre tenía que tener la razón.

Me lancé a ella para besar sus labios, un beso simple que no duro mas que unos segundos.

—¿Sentiste algo? —demostré mi punto.

—No —suspiró.

Yo siempre ganaba... no tanto.

—Ay mierda —susurré.

Ahí estaba con su carita de perrito traicionado, salió para irse, sin decir más fui tras él.

—Jake —dijo Harry molesto.

—Oh es un beso no me van a reclamar por eso hoy —lo puse en su lugar.

Salí tras mi amigo.

—Dee Dee —le grité.

—Déjame solo —ordenó.

—¡Nunca! —le grité saltando para subirme a su espalda.

—¡Bájate! —gritó molesto.

—No hasta que me escuches —lo regañe— fue una tontería y no dejarás nuestra amistad por eso.

—La besaste —chillo— sabes lo que siento y lo hiciste.

—Fue un beso para aclarar que no somos pareja tú y yo —besé su mejilla y luego la otro— porque nadie entiende que un beso no es nada.

Mi tío Lu me lo había enseñado, los besos son besos.

—Si lo son Jake, no puedes ir por la vida besando a todos —se quejó.

—Como que no —me quejé dándole un beso apenas llegando a tocar sus labios— que porque te besé ahora estas enamorado de mi.

—Para ya —pidió— para por favor.

Suspiré tal vez me había propasado para bajar de su espalda y abrazarlo.

—Me frustra no poderte ayudar —confesé.

—¿Y besarla en que iba ayudar? —mencionó cansado— Jake ella no andaría con chicos como yo, pero si con chicos como tú.

—Dean nadie quiere a chicos como yo en su vida —aseguré.

—Yo si te quiero en mi vida —me dijo revolviendo mi cabello.

—Gracias pero me refiero... como decírtelo sin que suene a que soy un prostituto —bufé— soy ese chico si, el que quieren para besarse, un acoston quizás pero es todo.

—Así que eso soy para ti, un acoston —exclamó Harry.

—Era una conversación privada —gruñi.

El chico se fue molesto, hoy no era mi día.

—Ve con el —añadió Dean.

—Ni creas que te dejaré —lo abrace más— terminando mi punto, yo sólo soy el chico al que quieres por un momento pero tú —dije golpeando mi dedo en su pecho— eres lo que todos merecen, una persona que los ame incondicionalmente.

—Yo te amo...

—No lo vuelvas más raro de lo que ya es —lo detuve— con razón piensa que somos pareja.

Dee Dee sonrió divertido para abrazarme, sin duda podría andar con el chico frente a mi, lo amaba y protegería hasta el final de mis días... por esa misma razón nunca seríamos más que mejores amigos, me negaba a lastimarlo de esa manera.

—Estamos bien —sonreí

—Siempre —suspiró— pero ahora lo llevaremos a mi manera de acuerdo.

—Pero...

—Nada, mi manera —ordenó.

—Ah morirás virgen entonces —me queje recibiendo el golpe.

—Ve arreglar las cosas con tu chico —sonrió— yo iré a desayunar algo.

—Tenemos clase —señalé confundido.

—Hoy no —negó, en diez minutos regresaría al salón.

Fui a buscar al chico que estaba con sus amigos.

—Scavo —lo llamé.

—Ahora no, estoy ocupado —trató de ignorarme.

—Ah pero para reclamar si estas bueno no —me cruce de brazos.

—Uhh ahora te va a dominar el enano —se burlaron.

—Oh ahora te enseño lo que el enano...

El chico me detuvo del hombro.

—Oye suéltame no se saldrá con la suya llamándome enano...

El chico me cargo en el hombro alejándome de ellos riendo.

—Me quitas credibilidad cargándome así —me queje.

—Son treinta centímetros más altos que tú, te aplastarían sin pensarlo —señaló.

—Yo he sido Chaparro toda mi vida me sé librar de esos —señalé molesto— ahora bájame.

—Pensé que te gustaba —dijo confundido.

—Si pero en otras posiciones—guiñe.

—No empieces sigo molesto —bufo.

—Por un beso —me quejé.

—Si, porque pensé que teníamos algo —aclaró su molestia.

—Lo tenemos —lo calme.

—Un acoston como dijiste tu —se cruzó de brazos.

—Ahh que quieres de mi, pensé que te gustaba —gruñi.

—Quiero más que un acoston —confesó.

—Una re... re..

—Relación, si —estableció— hablas con tu amigo de eso pero sin duda no sabes nada.

—¡Como te atreves! —lo empuje— no necesito estar en una relación para saber que es el amor.

—Claro que si —exclamó— no hablas de que tan Bueno es un pastel sin probarlo.

—Oh genial ahora ya me dio hambre —bufé recargandome en los casilleros.

—Escucha —dijo bajándose a mi altura.

—No hagas eso, es humillante —le miré.

—Lo siento —murmuró— mira Jake se que apenas llevamos una semana pero es mi último año, lo que ahora quiero es algo serio no una aventura.

—Son más divertidas, sin compromiso, buen sexo —guiñe.

—No, ahora te daré hasta la fiesta de hoy para que decidas si quieres seguir con esto o escuché que le llamaste la atención a Luke el de soccer —dejó en claro.

—¿Y es tan lindo como tú? —sonreí.

—Te veo al rato —señaló— y nadie es tan lindo como yo.

—Solo yo —guiñe.

El chico era lindo claro, ojos azules preciosos y una gran sonrisa, un perfecto superman.

Ahora estaba mi niño tratando de entrar al salón.

—Venga vamos —suspire jalándolo.

—Creí que podía solo —se quejó.

—Lo sé, lo sé —asentí dándole palmaditas.

Nos sentamos en la mesa con los cafés que ya debían estar fríos.

—Lamento su pelea —mencionó ella.

—Peleas en el matrimonio, todo normal —suspiró él.

Sonreí para verlo, ese era mi chico.

Terminamos la clase para ir almorzar los dos solos como el quería.

—Uh pastel —mencionó— tan temprano, no me digas terminaste con Harry.

—Peor aún quiere algo serio —bufé comiendo más.

—Oh mi bebé ya es grande —se burló— te hará bien.

—Para relaciones te tengo a ti —me queje.

—Oh venga ya Jake —soltó una pequeña risita.

—Me dijo que o lo intentábamos o que un tal Luke se le hacía lindo —gruñí.

—Ya veo —señaló al pelirrojo de adelante que me veía.

—Que dilema —bufé— Entonces tu y yo en la fiesta esta noche —sonreí— mis papás quieren la casa sola.

—Debo cuidar de Cam —se excusó m.

—Hay por favor va a estar bien con Jeff —asentí— es el último año que somos padres no, hay que divertirnos —pedi tomando su cabezota en mis manos.

—Esta bien —suspiró.

Besé sus labios feliz, para seguir con mi pastel.

—De verdad, deja de hacer eso —se quejó.

—Ahora ya no sé qué creer, debo considerar todo lo que me enseño el tío Lu —bufé— en fin me recibes en tu casa.

—Claro —sonrió.

La chica pasó a nuestro lado.

—Te veremos esta noche —soltó mi chico.

Ella le miró juiciosa para verle bien.

—Tal vez —murmuró para irse.

Miré a mi chico de la misma manera como ella.

—Que le hiciste a mi Dee Dee —gruñi.

—Am soy yo fingiendo ser tu pero menos idiota —señaló— lo estoy haciendo mal... yo....

—Me encanta —sonreí— vámonos.

Tenía mi reloj contado, atascarme en una relación o ser un alma libre... antes era fácil, ahora... rayos en que mierda me metí.

Lu y sus influencias 😂