Jeon Jungkook.

No podía pensar en otra cosa que no fueron los carnosos labios de Park Jimin.

Era toda una personalidad en el instituto, es de esos omegas asediados por todos pero igualmente respetado, es amable, educado, atractivo y su aura denota la inocencia que parece poseer.

Qué diablos, hasta yo lo respetaba, a pesar de que verdaderamente yo era un hijo de puta, me gustaba guardar mis límites con ese omega, sin mencionar que media escuela se me iria encima si tan solo le tocaba un cabello.

—Buenos días Joven Jeon.

—Buenos días Park.

Nadie entendía el porque me saludaba, siendo que soy el lobo rebelde de la escuela, podría ser una mancha en su perfecto historial, siempre que me saludaba por las mañanas se escuchaban los murmullos.

"Jeon Jungkook no merece tu saludo"

"Es un vago"

"No tiene futuro"

Como me agradan la bola de hipócritas que le susurran a Park que no debe de hablarme cuando más de uno me ha comido la polla, incluido el propio Park Jimin.

Quien pensaría que el que termino instándose fue él, quien se ofreció a hacerlo fue ese perfecto omega que todos admiran, yo no tenía problemas, pero la verdad me tomo desprevenido. Me encontraba en saliendo de la enfermería, mi celo se había adelantado y esperaba a mis padres para que vinieran por mi, sin causar muchos estragos en el proceso, en verdad me sentía terrible, mi lobo estaba muy insoportable.

Cuando Jimin entro en la enfermería, me dio un terrible susto.

—Sal de aquí Park, no es seguro para ti.

—¿Seguro? —se acercó soltando esas deliciosas feromonas, que aun de pensarlas se me hace agua la boca — ¿Qué tan peligroso puedes ser?

Se acerco a la cama donde me encontraba, yo estaba estático, como bajo una especie de hechizo, sus pequeñas manos se pasearon por mi abdomen hasta subir mi camisa. Una sonrisa de lado se poso sobre sus gruesos labios, lo vi hincarse.

—¿Qué haces Park?

—Solo alivio un poco tu incomodidad en lo que llegan por ti —bajo el zipper de mi pantalón, para después meter la mano y sacar mi miembro —tenia tantas ganas de ver si los rumores eran verdaderos, y en tu celo no podrias negarte, a lo que quiero Jeon, mi entrada se lubrica de solo ver el tamaño.

Lo metio a su boca sin mas, iniciando una mamada de nivel dios, su lengua se paseaba en sincronía con el movimientos de su mano, me miraba de vez en cuando haciéndome gruñir por la imagen.

Park Jimin se veía precioso con esos labios gruesos chupando mi polla.

—¡Mierda Park!

Tomo mis manos y las puso en su cabeza, mis caderas empezaron a moverse con mayor rapidez mientras me sostenía en esa posición, le estaba follando la boca, el apretaba y succionaba, haciendo sonidos de ahogo, sus ojos se llenaron de lágrimas y la saliva corría por sus labios, note que sus manos se fueron hacia abajo, saco su miembro y empezó a masturbarse, una imagen más divina no pudo ocurrir. Sin mucho autocontrol, explote en su boca, el abarco todo lo que pudo y empezó a tragar sin problemas.

Se separó de mí, y mire el suelo lleno de su semen también.

—Es una pena, con un poco más de tiempo, seguro que esa polla gorda se sentiría delicioso en mí.

Se levantó acomodo su ropa y me dio un pequeño beso en los labios.

—Eres mi placer culposo Jeon, no lo olvides.

Camino hacia la salida dejándome las ganas de probarlo de nuevo.

Hacia un mes de eso y yo no había hablado del tema, no lo busque, jamás espere algo más, lo tome como algo efímero y me lo guarde para futuras pajas, pero Park es un caso peculiar, el "Buenos días Jeon" salio de él, y era como una rutina que habíamos tomado. Por eso últimamente miraba sus labios cuando me saludaba, recordaba lo suaves que son, y lo bien que se sienten.

Este dia me había quedado para entrenar un poco, estaba en el club de taekwondo de la escuela, y pronto habría torneo. Después de ducharme, sali hacia mi auto, en la cajuela estaba sentado el hermoso omega con las mejillas ruborizadas.

—¿A que se debe esta preciosa sorpresa Park?

—Vengo a cobrar mi favor.

—¿Favor?

Se bajó de la cajuela y se me acerco, se paro de puntitas para hablarme en los labios.

—Yo te ayude en tu celo, tu debes ayudarme en el mío.

Tenerlo tan cerca me hizo oler su aroma terriblemente intenso, por instinto gruñí y lo tome de la cintura apretándolo contra mi, el se rio de manera escandalosa.

—Sabia que no te negarías.

—¿No estas tentando mucho a tu suerte Park?

—Pero si yo no he hecho nada Jeon —me rodeo con sus brazos —Mi entrada esta muy húmeda, solo para ti, ¿Quieres follarme aquí? ¿O me llevaras a algún lugar especial?

Lo tome de la muñeca, abrí la puerta de atrás de mi auto y lo arroje adentro, me meti rápidamente al volante y conduje hasta llegar a un motel. Casi le arrojo mi tarjeta de crédito a la chica encargada, Jimin venia sin pantalones en la parte de atrás con sus dedos entrando y saliendo de sus entrada, gimiendo solo haciendo que mi erección doliera de una manera terrible.

Apenas entramos a la habitación, lo lleve a la habitación arrojándolo a la cama, el seguía tocándose el cuerpo mientras se desnudaba, yo hacía lo propio con mi ropa.

—¿Te crees muy listo omega? —arroje mi cinturón mientras tocaba el interior de mi mejilla con mi lengua —si todos supieran la clase de guarro que eres.

—No tienes idea —jadeaba —vengo planeando esto de hace tiempo —se sentó ya desnudo en la cama, con sus piernas abiertas y algo dobladas —vengo deseándote desde que te olí la primera vez Jungkook — uso sus dedos para abrir sus blancas nalgas y mostrarme su entrada rosada que brillaba por la lubricación —quiero sentirte tan adentro que me partas en dos.

La imagen de su rostro ruborizado, su piel tersa a mi disposición, y la manera tan morbosa en que se me entregaba, me hizo literalmente gruñirle de manera algo agresiva, mi lobo tomo control total de mi. Me lance hacia el, besándolo con pasión y algo de brusquedad, no espere nada para penetrarlo, no tenía la cordura ni la paciencia para esperarme.

—¡Por la diosa luna! —se aferró a mi espalda en cada embestida —se siente mucho más grande de lo que se sentía en mi boca.

Alce su pierna para poder acomodarme mejor, resbalaba tan delicioso en su interior, tomo mi mano para meter mi dedo pulgar en su boca y lo chupo con descaro sin dejar de mirarme a los ojos.

—Estas muy jodido Park Jimin —me agache hasta la altura de su oído —no podras seguir ocultando tu fascinación por mi —empuje hasta el fondo, haciendo que soltara mi dedo con un agudo gemido —te follare tanto y tan duro, que cada parte de tu cuerpo me recordara siempre, ya eres mio.

Me jalo de la nuca hacia él lamiendo mis labios.

—¿Seguro Jeon? —se movió para abrirse un poco más apretándome en su interior —márcame entonces.

Me le quede viendo con incredulidad, el rodo los ojos me empujo para quedar encima de mi y acomodarse de nuevo mi miembro en su interior, empezando a moverse de manera lenta mientras se aferraba de mi abdomen y gemía.

—No estoy jugando Jeon —ladeo su cabeza dejándome ver su cuello tierno —mi omega ya te reclamo, mi primer celo compartido es contigo —márcame y solo hazme gemir tu nombre.

Mi alfa ya me dominaba, así que me pare tomando sus caderas siguiendo el movimiento con mi mano y con la otra lo tome por el cuello para poder clavar mis colmillos de manera profunda sin titubear, sus uñas rasgaron mi piel, pero su interior me apretó tanto hasta generar el nudo y hacerme terminar, su orgasmo baño mi abdomen.

Después de lamer su herida, nos besamos hasta que el nudo bajo.

—Ya quiero ver la cara de todos cuando vean que te pertenezco —lo tome del rostro y le bese la nariz.

—En verdad estás loco, esto no era el favor que me pediste

Acaricio mi abdomen con sus pequeños dedos y me hizo un puchero.

—¿Te quejaras? —se movió, yo aún no me salía de su interior —solo dime que te arrepientes.

—No eran mis planes de tener un omega de esta manera, menos a uno tan lindo —apreté su lindo trasero —mueve tu culo, que aún no tengo suficiente de ti...

Mi pequeño regalo de navidad para todas las kookminas de aqui, las adoro mucho y mil gracias por leerme y seguirme,  besitos en la cola y pasen muy linda navidad!!!