Harry toma asiento frente a la psicóloga y espera que ella sea capaz de responder todas sus dudas como siempre lo ha hecho.

—Dime Harry, ¿cómo ha sido esta última semana? —Él piensa un poco antes de responder, dispuesto a confesar todo.

—Ha sido terrible.

—¿Por qué? —Harry evita su mirada, y esta vez ni siquiera intenta mirar la punta de su nariz o sus labios, simplemente no la mira porque se siente muy triste y es incapaz de manifestarle eso a través de su mirada.

—Louis tiene amigos nuevos y siempre está jugando baloncesto en el recreo. Debo admitir que no he logrado hacer ningún amigo, lo he intentado muchas veces, pero ha sido imposible. Louis dice que los niños son tontos. —Ella lo escucha con atención mientras anota todo en su libreta.

—¿Te has distanciado de Louis últimamente? —Asiente levemente.

—No es una sensación agradable. No me gusta ese cambio. Odio ese cambio, necesito que le diga a mi madre que soy muy independiente para que me permita visitar a Louis de nuevo. No quiere estar solo en su casa porque sus padres han discutido mucho. —La doctora puede notar que desde que llegó ha estado muy inquieto en la silla. Usualmente se sienta y se mantiene quieto durante toda la consulta, pero hoy está diferente.

Es totalmente normal. Es el mismo comportamiento que podría esperarse de una persona que está en rehabilitación, aquellas que intentan dejar los vicios a un lado. Harry se comporta muy inquieto y ansioso cuando no tiene la presencia de Louis, eso le provoca cierta incomodidad. Ella entiende que es difícil para él, pero mientras más joven sea más fácil será acostumbrarse al cambio y al distanciamiento.

—Entiendo que te sientes abandonado de cierta forma, es completamente normal, sin embargo, sabes que Louis es tu amigo y podrás verlo muchas veces.

—Pero quiero verlo siempre. —Ella hace una mueca antes de volver a anotar.

—Dime Harry. ¿Qué quieres hacer en el futuro?

Harry se queda en silencio durante unos minutos, pensando en una posible respuesta. Nunca miente, su doctora sabe más de su vida que él mismo, ella tiene todo anotado desde que Harry era muy pequeño, le tiene mucha confianza y es abierto con ella.

—Quiero estar con Louis. —Ella finalmente deja de mirar su libreta para mirarlo directamente, sorprendida por su respuesta.

—Todos tenemos planes, Harry. ¿Tienes en mente alguna carrera que te gustaría estudiar en la universidad? —Intenta distraerlo un poco, pero no ignorará lo que acaba de decir, sólo quiere saber exactamente qué es lo que quiere hacer en un futuro y ayudarlo a trazar una meta.

—No lo he pensado. Falta mucho para llegar a la universidad, estoy en el segundo año de secundaria. —Responde con astucia, porque eso debería ser obvio para ella. Piensa que fue una pregunta tonta y que no deberían hablar de algo que está muy lejano del presente.

—Perfecto. Está bien, pero deberías tenerlo en cuenta. Tal vez puedes investigar cuáles son las universidades disponibles y descubrir cuál es tu universidad soñada. —Harry se cruza de brazos y ella lo toma como una evidente señal de que no está cómodo con el tema.

Se mantiene inquieto en la silla, entonces ella piensa en una gran manera de calmarlo.

—¿Louis tiene planes para su futuro?

Harry levanta la cabeza y la mira directo a los ojos, antes de negar.

—Louis dice que falta mucho para eso.

—Entiendo. ¿Por qué dices que quieres estar con Louis en el futuro? —El chico vuelve a esquivar su mirada, y puede que no lo demuestre, pero evitar el contacto visual con preguntas específicas sólo es una señal de su vergüenza. Ellos también sienten vergüenza, y se ponen nerviosos en algunas circunstancias. Ahora Harry lo está.

—Sólo estoy seguro de que quiero estar siempre con él. —No tiene dudas sobre eso, está completamente seguro de que quiere pasar toda su vida con Louis, pero ella no comprende la razón. Todavía no conoce el motivo de su obsesión con su amigo.

—¿No quieres casarte y tener una familia algún día?

—No.

—¿Harry, qué es lo que más te gusta de Louis? —Vuelve a mirarla, y ella se sorprende al ver un atisbo de sonrisa en sus labios.

—Sus ojos. Son azules como el cielo, son hermosos. —La doctora asiente con la cabeza, pero quiere llegar al fondo de todo.

—¿Qué otra cosa te gusta de él?

—Es atento, es muy paciente conmigo, se preocupa por mis medicinas, me pregunta sobre mis investigaciones, me defiende de los niños malos, me aprieta la mano cuando estoy nervioso, me da masajes para liberar mi estrés, me regaló una pulsera para que siempre lo recuerde, me enseña matemáticas para que pueda entender las clases, me hace reír, me dice cosas buenas todo el tiempo... Y toca mucho mi cabello.

Harry está tan concentrado hablando sobre las cosas positivas de Louis, y ella no se atreve a interrumpirlo. Se le hace muy lindo, pero también despierta su curiosidad.

—¿Lo quieres? —Harry asiente con la cabeza con mucha energía. —¿Sientes amor por él?

—¿Amor?

—Sí. ¿Lo amas? —Comienza a jugar con sus manos, y muerde su labio inferior evitando la pregunta, demasiado incómodo con el interrogatorio. —¿Sabes lo que es amor?

Sacude la cabeza con rapidez. Ha escuchado la palabra pocas veces, pero no tiene idea de lo que significa.

—Es un sentimiento. Un sentimiento muy bonito y profundo, pero bastante complejo. Hay muchos tipos de amor. Está el amor fraternal, amor maternal, amor romántico, entre otros.

Harry se mece de un lado a otro en la silla, sumamente incómodo. Ella lo observa atentamente tratando de leer su comportamiento.

—¿Sientes algo de eso por Louis? —No responde, se limita a levantarse de la silla y caminar fuera del consultorio sin decir otra palabra.

Espera afuera mientras su madre tiene una conversación con la doctora, como es costumbre en cada consulta. La verdad es que Harry no deja de pensar en esa pregunta. ¿Qué cosa es el amor? ¿Por qué es importante de todos modos? No comprende, y eso le está causando mucha frustración.

Al llegar a casa lo primero que hace es buscar en su computadora el significado del amor, y por más resultados que haya leído sigue sin entender cómo se da todo eso. ¿Cómo las personas saben cuando sienten amor? ¿Por qué comienzan a sentir amor? ¿Qué causa eso? ¿Para qué sirve? ¿Cuál es la importancia que tiene? Y la pregunta más importante, ¿Louis sentirá amor por él?

×××

Al día siguiente en el colegio, Louis nota que Harry está más distraído de lo normal, y no duda en preguntarle.

—¿Qué te tiene tan distraído? —El menor lo observa con rapidez, antes de esquivar su mirada nuevamente, mirando sus zapatos mientras camina.

—El amor. —Responde con simpleza. Louis comienza a toser de repente, y Harry lo mira con preocupación—. ¿Estás bien?

Louis vuelve a retomar su postura y le sonríe con nerviosismo. Harry no comprende del todo, tal vez se ahogó.

—¿Por qué piensas en el amor? —Pregunta mientras caminan el largo pasillo. Louis tiene que alzar la voz para que Harry pueda escucharlo a través de sus audífonos.

—La doctora dijo que debía investigar. —Louis frunce el ceño.

—¿Por qué?

—Quiere saber si siento amor por ti. —Louis se detiene a mitad del pasillo, y Harry lo imita.

—Oh. —Se rasca la nuca mientras ríe un poco—. Claro que sientes amor por mí, ¿verdad?

Harry lo mira detalladamente antes de sacudir la cabeza. Louis se aclara la garganta sintiéndose indignado.

—Claro que sí. ¿Por qué dices que no? ¿No me quieres? —Se siente un poco decepcionado y no puede ocultarlo, pero intenta no lucir tan afectado porque entiende que Harry no sabe muchas cosas sobre eso.

—No sé lo que significa. Todo en Internet es complicado. No es tan fácil como la historia o la música, esto es extremadamente complejo. Llevo todo el día pensando en eso, no logro entenderlo.

—No te preocupes, te ayudaré a entenderlo. Como siempre. —Louis le sonríe ampliamente, y Harry suspira de alivio porque eso es todo lo que necesitaba escuchar.

Cuando entran en el salón, Harry se sorprende al ver a una profesora nueva sentada en el escritorio. Se supone que es la hora de la clase de historia, no entiende por qué hay otra persona en el lugar que ocupaba su profesora.

—Oh, hay nueva profesora. —Comenta Louis al ver la dirección de su mirada—. No te preocupes, seguro es una suplente.

—¿Qué le pasó a la otra profesora? —Pregunta Harry acercándose al escritorio. La mujer lo mira con sorpresa.

—Bueno, ella renunció lamentablemente. Yo daré la clase ahora. —Anuncia la mujer con una gran sonrisa. Louis maldice internamente porque esto definitivamente no traerá nada bueno.

—¡No! Quiero a la profesora de vuelta. —Harry se estresa y comienza a caminar de un lado a otro mientras que Louis intenta calmarlo. Él sigue gritando y negándose a tener una profesora diferente. Los niños presentes en el salón comienzan a reír, y Louis quiere golpearlos a todos porque sólo están empeorando la situación.

—Todo está bien, Harry. Vamos a sentarnos.

—No. Quiero irme. No quiero una nueva profesora. No me gusta. —Los niños siguen riendo y Louis tiene que ignorarlos porque necesita que Harry se tranquilice primero.

—Mírame. —Louis toma sus manos y las aprieta con fuerza para que Harry pueda sentirlo—. Todo está bien, respira.

El menor levanta la mirada para enfocarse en sus ojos, viendo el perfecto azul que le provoca tanta paz.

—Eso es, sigue respirando. —Harry inhala y exhala muchas veces, sin dejar de mirarlo—. Sí, ya lo tienes. No tienes de qué preocuparte, hay que darle una oportunidad a esta nueva profesora. Seguro es una buena persona, seamos respetuosos.

Cuando Harry se ha calmado, toman asiento y Louis envía una mirada cargada de odio a todos los que se burlaron de él. Harry ha controlado la mayoría de sus rabietas, ya no son tan seguidas y tampoco son tan prolongadas como lo eran antes. Pero igualmente Louis se preocupa mucho cuando Harry se siente así de molesto y frustrado, verlo así le causa mucha tristeza, y que los niños se rían de eso lo hace todo más difícil de soportar. Ellos no comprenden tan bien como él, y le causa mucha impotencia.

—Debería callarse y no hacer escándalos para llamar la atención. Está demente. —Susurra uno de los niños a su lado.

—¡Tú eres el único que debe callarse, Jonah! —Responde Louis mirando al niño con molestia.

—Es un retrasado, debería mantener la boca cerrada por el bien de todos. —Louis se pone de pie, dispuesto a comenzar una pelea, pero la profesora interviene con rapidez.

—Basta. Por favor no discutan en mi clase.

—Harry no tiene que callarse para complacer a nadie. Él es libre de hablar cuando quiera. —Responde con los puños cerrados a sus costados.

—Por favor tomen asiento.

No vuelve a hablar durante toda la clase, pero ha recibido varios mensajes en bolas de papel. Los niños a su lado se han encargado de tirarle bolas de papel mientras la nueva profesora da la clase, y Louis tiene que reunir mucha paciencia para no lanzarles una silla directo en sus caras.

Cuando llega la hora del recreo todos los niños salen corriendo por miedo a que Louis los persiga, pero él tiene prioridades, y justo en este momento Harry lo necesita.

—No leas esas cosas. —Dice al ver cómo el menor se remueve en su silla mientras lee todas las notas que le lanzaron.

—¿Por qué quieren que me tire por la ventana? —Pregunta con inocencia. Louis recoge todos los papeles antes de comenzar a romperlos uno por uno.

—No hagas caso a nada de lo que dicen. Son ridículos.

—Quieren que muera. —Louis deja de romper papeles para mirarlo con nostalgia, con el corazón roto de sólo escucharlo decir eso.

—Ellos deberían morir, tú vales mucho más que ellos. —Harry sacude la cabeza, demasiado mortificado.

—¿Por qué alguien debe morir?

—No hagas caso, estoy muy enojado. No quiero que mueran en verdad, sólo quiero que dejen de molestarte. —Confiesa. Harry asiente, volviendo a relajarse.

—Yo también quiero eso. Y quiero ser normal. —Louis traga saliva con dificultad, y sus ojos se llenan de lágrimas debido a su molestia. Espera hasta que no quedan niños en el salón para hablarle con calma.

—Eres normal, y eres perfecto así. Nunca vuelvas a decir eso en mi presencia. Yo te amo tal como eres.

Harry levanta la mirada en su dirección, y Louis se limpia las lágrimas que caen por su mejilla.

—¿Me amas? —Pregunta con asombro porque es la primera vez que Louis dice eso. Siempre le ha dicho que lo quiere, pero esto es diferente. Son palabras diferentes.

—Claro que te amo. Eres mi mejor amigo. —Responde inmediatamente—. Me duele todo lo que te pasa. Eres muy especial para mí y siempre serás importante en mi vida. De eso se trata el amor, Harry.

Repite sus palabras en su mente muchas veces, tratando de conectar lo que dijo con lo que leyó en internet. Intenta comprender ese sentimiento juntando toda la información recolectada, pero lo que no sabe es que los sentimientos no se comprenden, simplemente hay que sentirlos, por lo tanto Louis cree que explicarle será más difícil de lo que pensó.

Harry piensa en Jonah, el niño que lo mandó a callar, y frunce el entrecejo, olvidando el tema del amor.

—Jonah es irrespetuoso. En primer grado la profesora nos enseñó modales, ¿por qué me pide que cierre la boca siempre que digo algo? Eso es de mala educación, ¿no le enseñaron? —Louis hace una mueca.

—No todas las personas tienen modales, Harry. Todos vieron esa clase alguna vez, pero muy pocas personas lo ponen en práctica. Hay personas groseras con malas intenciones que te harán creer que no eres lo suficientemente bueno para dar tu opinión, las vas a reconocer porque te dirán cosas malas como Jonah. Tu opinión siempre será importante, debes saberlo. —Harry asiente con la cabeza, grabándose las palabras de Louis.

—Louis, ya es hora. —Stanley se asoma en la puerta del salón, y Louis le hace señas antes de dirigirse a Harry de nuevo.

—Nos vemos pronto. —Se despide y sale corriendo del salón para ir a jugar baloncesto.

—¿Por qué siempre te juntas con él? —Pregunta Stanley una vez que están en el pasillo.

—Porque es mi mejor amigo.

—Pero es raro, siempre dice cosas imprudentes, y otras veces es grosero.

—No es grosero, sólo es muy honesto pero es algo que no puede controlar. No le digas raro, Harry no tiene malas intenciones, es muy inocente.

—Bueno. —Stanley se encoge de hombros y Louis agradece que no siga hablando de Harry porque no quiere caer en discusiones otra vez.

En la noche Gemma entra en su habitación para asegurarse de que se encuentre bien. Ella sonríe cuando lo ve abrazando su peluche de dinosaurio como suele hacer desde que era un bebé.

—¿Cómo estás?

—Bien. Estoy pensando. —Gemma cierra la puerta con cuidado antes de caminar hacia su cama.

—¿Puedo sentarme? —Harry asiente con la cabeza, viendo cómo su hermana toma asiento a su lado.

—Oye, sé lo que están haciendo contigo y Louis. Quiero que sepas que puedes contar conmigo, te quiero mucho y no dudaré en protegerte. Era yo antes de que llegara Louis, ¿recuerdas? Puedo seguir siéndolo. Puedes refugiarte en mí como antes.

La mira fijamente antes de sacudir la cabeza.

—Louis no se irá a ninguna parte. No te preocupes. —Ella suspira profundo, dándose por vencida.

Extraña a su hermano corriendo en su dirección cuando algo salía mal. Extraña ser su primera opción para refugiarse cada vez que no quería enfrentar solo una situación. Desde que llegó Louis ya ese lugar no le pertenece, Harry sólo quiere estar con él y correr hacia él para refugiarse cuando algo no sale bien.

—Ya sé que no se irá a ninguna parte, pero ustedes no estarán juntos como antes y puedes reemplazarlo conmigo cuando no esté cerca. —Harry se pone de rodillas y la empuja fuera de su cama con fuerza hasta que la chica de diecisiete años se resigna y se pone de pie para no incomodarlo.

—Louis no tiene reemplazo, Gemma. Nunca tendrá un reemplazo. —Dice con amargura. Su hermana suspira profundo antes de responder de forma calmada.

—Fue una expresión solamente. Sé que no tiene reemplazo, pero puedes darme el mismo valor que le das a él. Soy tu hermana. —Harry niega muchas veces.

—¡No eres Louis! —Exclama con fastidio antes de ponerse de pie y empujarla hasta la puerta de su habitación.

—Muy bien, ya me voy. Buenas noches, pequeño.

Harry vuelve a su cama y observa cómo su hermana cierra la puerta al salir. Se siente muy enojado porque todo lo que le repiten es que debe alejarse de Louis, y Louis es la única persona que lo hace feliz. Es su persona favorita y no renunciará a él tan fácil. No lo permitirá.

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¿Tienen comida favorita? ¿Cuál? 😏

Ya comienzan las preguntas random, lol. Díganme su parte favorita del capítulo y no se olviden de votar ⭐

Capítulo dedicado a:
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