Harry disfruta el tiempo de soledad para encender su tablet y leer de nuevo todo sobre los tipos de amor en internet, sin importar el tiempo que eso le tomará.

Lo había descubierto hace poco tiempo, había asumido que eso que sentía por Louis después del beso era amor romántico. Estaba seguro, aunque no del todo. Lo que no sabe es lo que siente por Louis ahora después de volver a verlo.

¿Cuál es este sentimiento que lo hace sentir tan miserable y deprimido?

No puede ser amor. En todas las lecturas que ha encontrado a lo largo de su vida, dice que el amor te hace sentir todo lo contrario. Se supone que el amor te hace feliz y próspero, pero no es lo que sucede con él. A pesar de haber sentido felicidad al ver a Louis después de tantos años, ahora siente mucha amargura, tanta que no puede controlarla, no puede manejar toda la molestia y la decepción que se arremolinan en su corazón después de ver a Louis de la mano con esa chica a la que llama su novia.

¿Se le había cruzado por la mente alguna vez? Por supuesto que no, porque confió en Louis y en su promesa a pesar de la separación. Jamás pensó que habría esa posibilidad, ni en sus peores pesadillas.

Y eso es precisamente lo que tiene su cabeza llena de pensamientos e información que le vienen demasiado grandes. La noticia de su noviazgo lo ha tomado completamente desprevenido.

Ignora cómo reaccionar a todo lo que está sucediendo, no logra pensar con claridad. No logra dejar de pensar en Louis con esa chica, haciendo lo mismo que ellos hacían estando juntos.

×××

Louis le sonríe a su novia después de tomar asiento en una mesa del KFC donde la ha llevado a comer. Mel es amante del pollo, y también adora visitar ese restaurante de comida rápida. Es su favorito.

Ella pasa un mechón de cabello por detrás de su oreja y suspira, mirándolo fijamente, preparada para escuchar cualquier cosa.

De verdad intenta decir algo, pero se le ha formado un nudo en la garganta que le impide articular palabra.

—¿Lou? ¿Te encuentras bien? —Pregunta ella con preocupación al ver su cara pálida y el movimiento constante de su mano sobre la mesa, un claro signo de ansiedad y nervios.

Él inmediatamente deja de mover su mano y la mira con ojos muy abiertos.

—Sí, estoy bien. Claro que lo estoy, no sé porqué me has preguntado eso tantas veces, ya te dije que estoy bien. —Explica de forma calmada, sonriendo de manera forzada para desviar su atención—. ¿Pediremos lo mismo de siempre?

—Sí. —Dice con simpleza, tratando de no prestarle mucha atención a los detalles.

Louis se encarga de hacer el pedido directamente en la caja, antes de volver a la mesa y tomar la mano de su novia que descansa frente a él.

—Te dije que no dirían nada importante en esa charla de bienvenida. —Intenta cambiar el tema de conversación, pero eso sólo alerta más a la chica que lo acompaña.

—¿No querías ir a esa charla porque estaría ese chico? —Louis la mira con una expresión indescifrable, pero rápidamente sacude la cabeza en negación.

—¿Qué? No, claro que no. Harry no... —Traga saliva y frunce el ceño tratando de encontrar las palabras correctas—. No tengo nada que ocultar, y Harry es un buen chico. Sí me sorprendió mucho verlo en el campus, pero no por nada malo. Él es genial, tiene problemas para socializar y también es muy sensible al ruido, pero es inofensivo. Yo solía calmarlo siempre que presentaba crisis de pánico, por eso fue tan fácil para mí hacer que dejara de gritar. Lo conozco muy bien.

—Dijiste que lo habías olvidado. —Louis maldice internamente porque sabe que se contradice a medida que habla, y está complicando todo con sus mentiras.

—Sé lo que dije. Realmente pensé que no tendría importancia para ti. Harry es sólo un amigo de la infancia, no hay mucho que contar. Tenía muchos años sin verlo, no sé si lo conozco tanto ahora, no sé si ha cambiado algo en su actitud, ni siquiera sé si tenemos muchas cosas en común ahora. Ya no somos amigos.

—¿Eso te hace sentir mal? ¿Estás triste porque ya no son amigos como antes? —Pregunta con interés, notando la expresión nostálgica de su novio. Louis no puede seguir mintiendo después de haber dicho parte de la verdad. El nudo en su garganta se hace más grande a medida que avanza la conversación.

—Sí. —Asiente con la cabeza, con la mirada perdida en algún punto de la mesa—. Lo estoy. Estoy muy triste porque no volvimos a vernos y lo extrañé durante todo el tiempo que no estuvimos juntos. Y tal vez me perdí muchas cosas importantes de su proceso, en el que prometí estar siempre.

—¿Por qué nunca me lo dijiste? —Louis se encoge de hombros, todavía con la mirada perdida.

—Traté de no pensar en eso, intentaba dejar atrás cualquier recuerdo doloroso. No quise mencionarlo después de haberlo superado.

¿Lo hizo? ¿Acaso lo superó?

—Entiendo. No debes sentirte así, sé que sientes que le has fallado a tu amigo, y que te has perdido grandes avances, pero ahora puedes hablar con él y recuperar su amistad. No tiene porqué ser difícil. —Louis sacude la cabeza, inseguro de eso.

—Siente que le he mentido, incluso me rechazó en el auditorio. No creo que quiera hablar conmigo nunca más.

Mel no lo entiende. Pudo ver la sonrisa amplia de Harry en la plaza al ver a Louis, también lo escuchó decir lo feliz que estaba de verlo. ¿Por qué Louis diría eso?

—Él estaba feliz de verte... —Es interrumpida antes de terminar esa frase tan dolorosa para Louis.

—Lo estaba. Yo arruiné todo. Es mi culpa todo lo que pasó en el auditorio, es mi culpa que él se sienta así. Yo no debí... Nunca debí venir a esta universidad. —Mel toma su mano por encima de la mesa, y le sonríe con cariño para darle ánimos.

—No digas eso, aún puedes aclarar todo. Lo conoces, sabrás hacerle entender. —Louis acepta las caricias que le ofrece su novia, sintiéndose mucho más tranquilo después de haberse desahogado con ella. No fue tan malo después de todo.

Mel es muy comprensiva, es lo que más le llamó la atención cuando la conoció y tuvo el placer de tener la primera conversación con la chica. Su amabilidad y sencillez, tan dulce y cariñosa que borró cualquier rastro de tristeza de su corazón. Ella estuvo ahí para sacarlo de la oscuridad en la que estaba sumergido, aún sin saber que lo estaba.

—Gracias. —Dice después de unos minutos en silencio—. Te amo.

—También te amo, Lou. —Muestra su hermosa sonrisa, y Louis se inclina en la mesa para besarla, escuchándola reír en medio del beso.

×××

Niall regresa a la habitación que comparten después de haber pasado toda la tarde con Zayn. Tiene una gran sonrisa, y Harry fácilmente puede asumir que está feliz sólo por ver esa sonrisa en su rostro.

—¿Dónde estabas? —Pregunta con desdén, volviendo su atención a la tablet. Niall suelta un suspiro demasiado ruidoso que Harry no puede pasar por alto.

—Estuve con Zayn. Debo decir que él es maravilloso, su rostro es tan perfecto. Su sonrisa es la más hermosa que he visto en mi vida, y sus ojos wow, esos ojos pueden hacer lo que quieran conmigo.

Se deja caer de espalda sobre su cama, volviendo a suspirar como un adolescente enamorado. Harry lo mira con el ceño fruncido y aleja su tablet, dejándola a un lado para prestar atención al rubio.

—¿Qué hicieron? —El chico frente a él se levanta sobre sus codos para verlo mientras sonríe como una colegiala.

—Zayn me llevó a comer papas fritas. Le había mencionado una vez por Tinder lo mucho que amo las papas fritas, y me sorprendió mucho que lo recordara, eso demuestra lo atento que es. —Harry asiente.

—La atención es primordial en una relación, fortalece el vínculo entre dos personas. —Niall lo mira con diversión, y luego sonríe restándole importancia a su lenguaje técnico.

—Sí, la ha fortalecido mucho. Lo único malo que tiene es que es muy pegajoso, no sé si entiendes esa expresión pero hace referencia a una persona melosa, que todo el tiempo quiere tener contacto carnal. Siempre quiere tener sus manos sobre mí, y eso me hace sentir muy incómodo. Necesito mi espacio, ¿entiendes? —Parpadea varias veces, repitiendo las palabras en su mente y estudiando el significado de ellas.

—Creo que estás usando mal la expresión de contacto carnal, a menos que trates de decir que Zayn quiere concretar el acto sexual. —El rubia suelta una carcajada fuerte, y mueve su mano como señal de negación.

—No, no me refería a eso. Lo que quise decir es que no deja de tocarme. Quiere sostener mi cintura todo el tiempo, y varias veces puso su mano en mi espalda baja mientras caminamos, otras veces me tomó de la mano para caminar sin dejar de acariciar mi piel. Ese tipo de contacto carnal. Es muy incómodo.

—Entiendo. Entonces deberías hablar con él sobre lo que te incomoda. —Niall lo mira boquiabierto.

—No, claro que no. No quiero que piense que no me gusta. Sí me gusta, él es todo lo que está bien en el mundo, pero me gustaría que se guarde las manos para sí mismo. —Harry sonríe, encontrando graciosa esa reflexión.

—Pienso que deberías aclararlo con él. La honestidad también es parte importante para fortalecer la relación. —El rubio frunce el ceño.

—¿Te estás escuchando? La honestidad es importante, lo entiendo. Pero no quiero alejar a Zayn, si le digo lo mucho que me incomoda su cercanía querrá tomar mucha distancia, y no quiero eso.

Harry no comprende el dilema de su amigo, para él la honestidad es primordial.

—En fin, ¿tomaste tus medicinas? —El rizado asiente con rapidez—. Bien, porque tengo algo importante que decirte y no quiero causarte ansiedad.

No quiere reaccionar antes de tiempo, pero cada vez que Niall dice algo así significa que ha hecho algo muy...

—Inscribí a nuestra banda para presentarnos en el primer concierto de bienvenida. —Brinca en la cama con alegría después de dar la noticia.

Por su parte, Harry se encuentra muy conmocionado. No esperaba escuchar algo así, no es una noticia del todo mala porque le encanta presentarse con su banda, pero eso sólo significa que hay una pequeña posibilidad de que Louis los escuche cantar, lo cual aumenta su nivel de ansiedad.

—¿Por qué no estás emocionado? —El rubio deja de saltar sobre su cama, observando a su amigo con atención.

—¿Van a estar todos los estudiantes? —Niall sacude la cabeza.

—Me dijo la rectora que sólo es una bienvenida para los nuevos estudiantes que se están integrando este semestre. —De acuerdo, esa aclaratoria no ayuda en nada a su situación—. Deberías estar sonriendo, pero no lo estás. ¿Qué pasa? Tendremos la oportunidad de presentarnos y demostrar nuestro talento frente a los profesores, y también habrán profesionales invitados. Es un sueño.

—Sí, lo es. —Harry se pone de pie enseguida para buscar su guitarra. Niall lo mira con diversión viendo cómo el rizado toma la guitarra en sus brazos y toma asiento en la cama, comenzando a afinar las cuerdas.

—Todavía tenemos una semana completa para practicar las canciones.

—No podemos perder tiempo, tenemos que escoger las canciones correctas y poner todo nuestro esfuerzo. —Niall ríe sin tomarlo muy en serio.

—Relájate, todo saldrá bien.

Y Niall se arrepiente de no haberle soltado la noticia en la mañana, ya que Harry se pasa toda la noche practicando diferentes canciones con su guitarra, negándole la posibilidad de dormir en paz. A veces olvida lo meticuloso que puede ser su compañero.

Lo que no entiende es que para Harry no se trata de una simple presentación, para él es la oportunidad perfecta para expresar todos sus sentimientos y abrir su corazón para liberarse de toda la amargura y el resentimiento que pueda tener dentro.

Podrá cantarle a Louis. Podrá decirle todo lo que siente a través de las canciones, porque esa es la manera más fácil que conoce para expresarse. Fue la manera en la que la terapia musical le ayudó a liberar todas sus emociones y desprenderse de su dolor. La música siempre ha sido su escape y también su refugio.

—Okay, son las 3:00 am. Ya es jodidamente tarde y necesitamos estar en clases a las 7:00 am. Deja de tocar ahora, o arrojaré tu guitarra por la ventana. —La voz cansada de Niall lo saca de sus pensamientos.

—Perdón.

—Estás perdonado, ahora sólo déjame dormir. —Se cubre hasta la cabeza con la manta, dándole la espalda. Harry se muerde el labio inferior, sintiendo culpa por haber provocado el mal humor de su amigo.

—No fue mi intención. —Niall apenas hace un ruido con su garganta, y Harry se levanta para guardar nuevamente su guitarra y tender su cama para dormir a pesar de no tener nada de sueño.

Es su segunda noche fuera de casa, y todavía no está acostumbrado a irse a dormir sin recibir el beso de buenas noches de su madre. Era rutina, y no le gusta salir de algunas rutinas que lo hacen feliz y le ayudan a ser mejor persona. Tal vez eso también le ha causado amargura. Louis no es el culpable de todo lo que siente, también está el hecho de estar enfrentándose a muchos cambios y romper muchas rutinas de su vida.

Por la mañana se despierta muy cansado y con los ojos levemente hinchados por el hecho de haber permanecido despierto la mayor parte de la noche. Niall lo mira mientras sale del baño, frunciendo el ceño.

—Tienes la peor apariencia que alguna vez has tenido. —Harry se sorprende al escuchar eso, y baja la cabeza sintiéndose bastante ofendido—. Lo siento, deberías verte en el espejo.

Arrastra sus pies hasta llegar al baño, alzando la mirada para ver su reflejo en el espejo que está pegado en la pared justo arriba del lavamanos. Harry observa sus ojeras marcadas y las bolsas bajo sus ojos, y se toca con sus dedos intentando desaparecerlas sin éxito.

Se lava la cara con agua fría y decide tomar un baño para mejorar su apariencia.

Después de vestirse con su típico pantalón negro y una camisa del mismo color, ambos salen de la habitación dispuestos a encontrarse con Cora para asistir a la primera clase de la semana.

Cora les sonríe al verlos caminar hacia ella. Fer se ha ido a su clase ya que toman diferentes carreras, por lo que no la verán muy seguido al no compartir las mismas clases.

Louis camina por los pasillos de la universidad, de la mano con su novia, quien ha expresado lo feliz que está al comenzar las clases. Ella y Zayn están en la misma carrera de arte, por lo que Louis asistirá a sus clases sin compañía.

—Te veré más tarde, amor. —Dice con entusiasmo antes de dejar un beso en los labios de su novio. Él le sonríe y la ve alejarse hacia el edificio de su facultad.

Tendrá mucho tiempo a solas para pensar en las palabras correctas para disculparse con Harry y aclarar toda la situación que le ha estado causando dolores de cabeza y mucho remordimiento de consciencia.

Sólo espera que Harry pueda entenderlo y continuar con su vida aceptando su amistad.

Al finalizar sus tres clases del día, vuelven a reunirse con Fer, quien casualmente acaba de conocer a Mel ya que ambas descubrieron que están cursando la misma carrera de arte. Harry traga saliva y comienza a jugar con sus manos de forma nerviosa al verla caminar en su dirección, sin Louis esta vez.

Cuando está frente a él, Mel le sonríe con cariño, y Cora la mira con el ceño fruncido sintiendo mucha desconfianza al saber lo que ella representa para Harry, quien ahora está muy incómodo.

—Chicos, ella es Melissa, pero pueden llamarla Mel. —Fer rompe el silencio presentando a su nueva compañera. Cora se cruza de brazos, demostrando el poco interés que tiene en conocer a la chica rubia—. Estudia arte como yo.

—Es un placer. —Niall es el primero en estrechar la mano de Mel, sonriendo de forma amable.

Harry hace contacto visual con la chica, y su corazón parece detenerse por una fracción de segundos.

—Hola Harry. —Su mirada se enfoca en sus labios rojos mientras ella habla. Ahora su corazón está muy agitado, y no sabe porqué.

Harry no puede juzgarla por estar con Louis. Cualquier persona inteligente estaría interesada en él, no sólo por su belleza física, sino también por la grandeza de su corazón y por su particular forma de ser, con su gran sentido del humor y su generosidad. Ella simplemente vió lo mismo que él vió, y tuvo suerte de poder estar a su lado, cosa que él no tuvo.

—Me voy. —Dice tratando el nudo en su garganta antes de alejarse del grupo.

Siempre prefiere estar solo para pensar, de esa manera nadie interrumpe sus pensamientos.

Sólo puede pensar en esa chica y en lo bonita que es. En su cabellera rubia y rizada, en sus bonitos ojos y sus largas pestañas. En su sonrisa que siempre está adornando sus facciones, haciéndola ver incluso más bonita. Ella es prácticamente perfecta, y Harry siente mucha envidia porque ella tiene el amor de Louis.

—Harry. —Parpadea y se gira en dirección a esa voz que causa estragos en su estómago.

Es Louis.

El mayor sonríe cuando sus miradas se encuentran, pero Harry esquiva su mirada e intenta huir, por lo que Louis sostiene su brazo para evitar que se vaya.

—Por favor escúchame. Lo que tengo que decirte es importante. —El rizado alza la mirada nuevamente para encontrarse con sus perfectos ojos azules que le transmiten tanta paz—. No me rechaces más. Tu rechazo me duele más que nada en el mundo.

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Uffff me quedé pegada a mitad de capítulo, pido perdón. Me puse muy sensible escribiendo esto 😭

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