Su hermano había tomado la decisión mas tonta de la historia. Pasar desapercibido de la forma mas ridícula que ella habría imaginado ¿Usar lentes que casi no necesitaba? ¿Aplanarse el pelo a la cabeza como si lo hubiera lamido una vaca? Tonto, tonto y mil veces tonto ¡Es que ni Hanna Montana se atrevió a tanto! 

Pero sin duda algo había ocurrido en la vida de ese chico. Ante los ojos de Juliette estaba irreconocible, se veía tremendamente bien, esas fachas le sentaban de maravilla y por un momento Juliette no pudo evitar esbozar una sonrisa, su corazón se alegraba por él, éste si que era el Henri que había conocido hace tantos años, el que cuidaba de ella en el kínder, que otras tantas rompía sus muñecas cuando se enojaba y que tocaba el piano para su madre todas las tardes. Después mucho tiempo, mucho antes de la última vez que se vieron, ella podía reconocer a ese revoltoso genio. 

_¿Que estás haciendo aquí? - Preguntó incrédulo Henri mientras se acercaba a ella.

_¿No lo sabes? - Preguntó Juliette sorprendida. 

_¿Saber que? - Henri no podía estar mas perdido. 

_Bueno, ¿Cómo decirlo? Yo... - La puerta de la dirección se abrió. 

_¡Oh! Así que se han encontrado ya... - Antoine sonrió sereno. 

_Papá... ¿Qué ocurre aquí? - Henri comenzaba a molestarse, ninguna de sus preguntas estaban siendo respondidas. 

_¡¿Pero que es todo esto?! - Exclamó divertido Antoine - No se ven en tres años y ni siquiera se saludan. 

Forzadamente, Henri y Juliette se vieron obligados a darse un corto y casto abrazo ¿Es necesario volver a repetirlo? Momento incomodo. 

_Muy bien papá y ahora... - El celular de su padre sonó. 

_Espera... - Antoine leyó el mensaje para sí y sus ojos se abrieron desmesuradamente, como si hubiera olvidado algo muy importante - ¡Lo siento! Me tengo que ir. Henri lleva a Juli a casa - Dijo mientras se encaminaba a la salida con prisa.

_¡Pero!... ¡¿Y Lyla?! - Alcanzó a decir pero su padre no lo escuchó. 

_Yo... Emm...  - Juliette no sabia que decir, la situación era demasiado embarazosa. 

_Henri... Yo vuelvo a casa en autobús, no te preocupes - La chica que, a su entender, era Lyla habló. La joven le dedicó una mirada extraña a Juliette que en ese momento no supo interpretar. 

_Yo... Lo siento mucho... - Henri se limitó a decir. 

Lyla y sus amigos se alejaron mientras murmuraban un "hasta pronto" y no podían evitar voltear hacia ellos mientras lo hacían. 
 

"¿Quien era ella?" se preguntaba Lyla una y otra vez, y dentro que esa breve pregunta la respuesta esperada tendría que contener el porqué estaba con Antoine, porqué en la escuela y mas importante ¿Por qué Henri estaba tan sorprendido de verla? Por esto y por un millón de otras razones mas ¿Quién era ella? 

_Dijo que se llamaba Juliette ¿Cierto? - Clement preguntó y las chicas asintieron - ¿Te habló alguna vez de ella, Lyla?

_No. Jamás mencionó a ninguna Juliette - Contestó Lyla, inmersa en sus pensamientos. 

_No será una ex novia ¿Verdad? ¡AY! - Al terminar su pregunta, Clement recibió un fuerte apretón en el brazo de parte de Jasmine. 

_Claro que no - Respondió Jasmine sin argumento alguno, solo con el objetivo de no alterar a su mejor amiga.

"¿Su ex?" Esa podía ser una posibilidad. Luego de haber visto a Melanie, Lyla sabía que los gustos de Henri no eran para nada malos. Juliette sin duda era mas bonita que Melanie ¿A quien engañaba? Era mas bonita que todas las ex que Henri pudo haber tenido juntas. Juliette tenía un rostro angelical, unos hermosos ojos color miel bajo la sombra de unas largas y oscuras pestañas, un cabello castaño largo y brillante  y un cuerpo delineado por unas delicadas curvas. Esa chica parecía una muñeca que su mamá había cuidado como una princesa toda su vida. 

_¿Lyla? ¿Lyla nos escuchas? - Jasmine sacudió su mano por delante del rostro de su amiga. 

_¿Eh? ¡¿Y si es su ex?! ¿O un amor del pasado? ¿O... O... - Arremetió Lyla al salir de su trance.

_¡Mira lo que hiciste, Clement! - Jasmine se giró enfadada hacia su novio. 

_¡Hey! Hola chicos - Nathan se acercó rápido hacia ellos. 

_Hola Nathan - Respondieron los tres al unísono, unos mas animados que otros.

_Lyla, ¿Quién era la chica que se subió al auto con Henri? ¡Que belleza! - Interrogó despreocupado a lo que Clement y Jasmine se dieron un sonoro golpe en la frente.  

_¿Que haces aquí? - Henri preguntó por tercera vez en el día. 

_ Creí que lo sabías... Estoy aquí por trabajo... - Respondió Juliette sin ganas mientras miraba por la ventana en el asiento del acompañante.

_Me enteré de lo de Trent... ¿Con quien vienes a trabajar aquí? - Preguntó calmado mientras se concentraba en el trafico. 

_Contigo -Sentenció su hermana.

_¡¿Como?! - Exclamó él mientras la miraba. 

_¡Vista al frente! - Gritó alarmada Juliette y el joven obedeció - Tu guitarrista no podrá tocar por un tiempo así que... Fue todo idea de Antoine... - Dijo esto último en su defensa  - Además, mamá hoy viajaba por trabajo a Londres, se quedará todo el año allí, prácticamente... Así que todo esto iba a ser inevitable de todas maneras. 

Henri suspiró fuerte.

_Debieron haberme avisado...  

_Yo creí que lo sabías... - Finalmente Juliette se digno a mirar su rostro. 

"¿Lo llamo? ¿No lo llamo?" Lyla se debatía en su habitación y daba vueltas por ésta como si fuera un león en una jaula.

"Es mi novio, tengo derecho a saber si todo va bien" se justificó. "Pero y si... ¿Y si le parezco muy controladora? ¿Y si llamo en un mal momento?"

Pese a todas sus escusas, el mayor temor de Lyla era que sus sospechas fueran correctas pero tampoco podía irse a la cama sabiendo que esa chica misteriosa estaba en la casa de su novio. 

_Hola... Toqué pero no me respondiste - Anunció Alex antes de que su hermana replicara algo - Wow, vaya cara que tienes, esa chica promete ser todo lo que he escuchado - Tras oír las palabras de su hermano, Lyla se acercó apresuradamente hacia él.

_¿Como sabes de ella? - Preguntó. 

_¿De quien? ¿De la chica con la que se fue Henri? - Preguntó provocador - Todo el mundo habla de ella, todo el equipo de básquet los vio salir de la escuela. Dicen que es muy bonita, que es mas sexy que... 

_Si si, ya cállate -Lo cortó en seco Lyla.

_Yo venía acá buscando respuestas, creí que sabrías algo ¿De verdad el idiota de tu novio no te dijo nada? - Preguntó Alex enfadado. 

_¡Basta! - Le gritó Lyla - Opinas... ¿Opinas que debería llamarlo? Digo... Para asegurarme de que todo esté bien... - Le preguntó sonrojada a su hermano mayor. 

_¡Por supuesto! - Respondió Alex.

Lyla, convencida con la respuesta y con mas seguridad en su pulso que antes, macró el número de su novio y esperó una respuesta del otro lado de la línea, Alex se sentó a su lado en la cama para poder oír la futura conversación. 

_Emm... ¿Te importa? - Lyla lo miró interrogante. 

_AH... Si... - El chico se levantó y se dispuso a mirar las cosas sobre la estantería de la habitación para disimular.

_¡Debiste habérmelo dicho! - Le reprochó Henri a su padre. 

Manteniéndose al margen de todo esto, Juliette permanecía sentada en el sofá, observando la discusión. 

_No hemos tenido tiempo de hablar ésta semana, tenias los ensayos para el viernes,  la escuela...  Yo estaba en la organización y buscando un guitarrista nuevo. No se dio el momento - Se excusó Antoine. 

_Solo bastaba con un mensaje... "¡Hola hijo! He encontrado un guitarrista nuevo, es tu hermana... Ah, y vivirá este año con nosotros" - El tono sarcástico era evidente en el joven.

_¿Que es lo que te molesta mas Henri? ¿El hecho de que forme parte de tu equipo o que vaya a vivir aquí? - Juliette tomó la palabra mientras se paraba de su lugar. 

_Yo... - Y en ese momento el celular de Henri comenzó a vibrar en su pantalón. 

_Es todo. Me voy a bañar - La joven subió enfadada. 

_¿Si? Lyla... Hola... - Henri contestó. 

_¿Henri? ¡Hola! ¿Cómo estás? ... Yo... Quería saber si todo estaba en orden...¿Sabes?... Como te fuiste así hoy... - Lyla se oía incomoda. 

_Lyla... Yo... Es complicado... Hay algo que no te he contado y... - Henri no sabía como empezar ¿Cómo contarle a su novia que tenía una hermana de la que nunca había hablado y que de la nada apareció en la escuela para inscribirse y que viviría con él a partir de ahora y que sería la guitarrista de Jay? -  Se que esto es muy repentino pero ¿Crees que puedas venir a mi casa ahora? - Henri soltó un fuerte suspiro. Él, que había prometido no volver a ocultarle nada a Lyla, lo había vuelto a hacer, y esta vez de forma totalmente inconsciente. Había estado tan distanciado de su hermana que hasta había olvidado que tenía una.    

_¿EH? Si... Eso creo... Espera... - Lyla apartó el celular de su oreja y se dirigió a su hermano - Alex ¿Crees que puedas llevarme a la casa de Henri? - Le preguntó. 

_¿Ahora? Cenaremos en una hora - Respondió y al ver la mirada suplicante de su hermana cambió de parecer - Esta bien, si  - Se cruzó de brazos disconforme. 

_¿Henri? Si, Alex me llevará - Respondió casi de inmediato. 

_Bien, dile que yo te llevaré de regreso - Le informó Henri. 

_Esta bien, hasta ahora - Lyla colgó - Vamos Alex. 

_¿Lyla vendrá? - Antoine le preguntó a su hijo. 

_Si... Le prometí que no le volvería a mentir y eso es justo lo que haré - Sentenció.

Henri se dirigió a su habitación, practicaba una y otra vez en su cabeza cual sería la mejor manera de abordar el tema, por donde empezar, que decir exactamente. Contar todo en detalle sería muy largo de explicar. 

Oyó que la puerta del baño se abrió, supuso que Juliette se había terminado de bañar y Henri tomó una muda de ropa limpia para hacer lo mismo antes de que llegara Lyla. Al cruzar la puerta de su habitación, Henri se topó con algo inesperado. 

_Ay... Yo... ¡Es la costumbre ¿Si?! - Exclamó su hermana mientras se aseguraba de que la toalla la cubriera bien. 

_Acostúmbrate a que no vives con mamá ahora... - El joven se golpeó la frente en gesto desaprobatorio. 

En ese momento el timbre de la casa sonó, se oyó a Antoine saludar a Lyla e indicarle que Henri estaba arriba y que podía subir. Oyeron los pasos de Lyla subir la escalera cuando los hermanos se alarmaron. 

_¡Rápido! ¡Ve a tu habitación! - Henri le susurró a Juliette. 

_¡Si! - Juliette se apresuró en correr a hacía la puerta de su cuarto y Henri para el baño pero ninguno de los dos pudo esquivar al otro, provocando que se chocaran. Henri tomó a su hermana por los hombros para correrla hacia un costado para así pasar cuando de repente un fuerte sonido los asustó. 

_Oh, oh... - Alcanzó a decir Henri cuando vio a su novia con la boca abierta  de par en par y su bolso yacía en el suelo - Lyla, yo... - Intentó explicarse pero ella se apresuró a agarrar su bolso y bajar a toda prisa. 

Unos minutos antes... 

Alex dejó a Lyla en la casa de su novio, luego de una breve discusión en la que él insistía en esperarla y ella en que se vaya. Por supuesto, ganó ella. 

La joven tocó el timbre y en seguida Antoine le abrió la puerta. 

_¡Lyla! Te estábamos esperando - El hombre la saludó alegre. 

_¡Hola Antoine! ¿Cómo estas? - La chica correspondió el gesto. 

_¡Muy bien! Henri está en su habitación, puedes subir si quieres. 

_¡Muchas gracias! - Y así Lyla se dispuso a subir escalón por escalón rápidamente. Jamás se imaginó ver lo que vio en el pasillo al llegar arriba. 

Era Henri, tomado a la chica de antes por los hombros ¡Y ella estaba envuelta solo con una toalla! ¿Qué era todo esto? De la impresión, Lyla dejó escapar su bolso, el ruido que este provocó sobresaltó a Henri y a la chica.

_ Oh oh... - "¿Eso es todo lo que puede decir?" pensó Lyla de Henri e indignada se apresuró a tomar su bolso para luego bajar los escalones que acababa de subir, detrás de ella se oían pasos apresurados que la seguían de cerca. 

_¡Lyla, te lo puedo explicar! - Exclamó su novio. 

_¡No quiero saber nada! - Le gritó Lyla mientras se precipitaba a la puerta. 

_¡Es mi hermana! - Confesó Henri a todo pulmón. 

Lyla se detuvo en seco. 

_¿QUE?