_¿Lyla? - Preguntó atónita. 

_Si, lo siento, se que estás con Amelie - Se disculpó apenada y Juliette miró a Alex con incomodidad. 

_No, está bien... - Amelie la iba a matar si se enteraba de todo esto, siempre era el primer nombre en su lista para excusas. 

_ Quería saber... ¿Estás libre en la tarde? 

_Emm... Si, supongo - Respondió extrañada. 

_¡Genial! Tengo que hacer un par de compras por el centro y elegir un vestido para el recital de tu hermano, supongo que tu también - Comentó Lyla.

_Yo no sabía que era una obligación ir - respondió entre risas.

_¡Vamos! Clement y Jasmine también vendrán - Suplicó al otro lado de la línea - Además, he de confesar que me muero de ganas por pasar una tarde de chicas con mi cuñada...

"Doblemente cuñadas" enfatizó para si a la par que miraba a su novio con una sonrisa. 

Lo poco que conocía de Lyla le agradaba. Era divertida y vivaz, es decir, todo lo que Henri no era. Desde que se enteró que era la novia de su hermano, la pregunta del qué le había visto a él pasó por su mente. Lyla era muy bonita y extrovertida, se sabía de sobra que era muy popular en el instituto, entonces ¿Por qué Henri? Que era reservado, antipático con los desconocidos y si a eso le sumamos que su apariencia cuando lo conoció no era la mejor, los hacían dos polos opuestos.

A decir verdad, Juliette también quería conocer mas a fondo a Lyla, no solo era la novia de su hermano, sino que también la hermana de su novio. 

_Está bien, supongo que también voy a necesitar comprar un vestido... - Cedió. 

_¡Si! Nos vemos en el parque del centro a las... ¿Cuatro? ¿Te parece bien? - Preguntó la joven entusiasmada. 

_De acuerdo, nos vemos - Se despidió. 

_¡Hasta esta tarde! - Se despidió antes de colgar. 

Alex y Juliette se miraron confundidos. 

_¿Que acaba de pasar? - Preguntó él y ella sacudió la cabeza. 

_No lo sé, quiere que vayamos a comprar ropa para el recital de Henri - Explicó - Y además, dijo que le gustaría que pasáramos algo de tiempo juntas, ya sabes, "La novia de mi hermano" y todo eso... 

Alex se comenzó a reír. 

_Si ella supiera hasta que punto son cercanas... - Comentó risueño. 

_¡Cállate! - Exclamó con humor - ¿Crees que sospeche algo? 

_¿Quien sabe? De todas formas, si te llamó es porque realmente quiere salir contigo - La miró dulce a la par que tomaba su mano que estaba arriba de la mesa. 

_Le confesé que me gustabas... - Soltó ella de repente y Alex abrió los ojos de par en par. 

_¿Como? - Preguntó con una amplia sonrisa y Juliette se sonrojó. 

_Estaba muy enfadada contigo en la fiesta, Lyla y Jasmine se acercaron a mi y lo solté todo por la frustración... 

_Ese día si que saqué lo peor de ti - Comentó ahogando una carcajada - Me sorprende que no haya arremetido contra mi al día siguiente...O sea, si que lo hizo, pero con la información que manejaba debió haber dicho mucho mas... 

_Me juró que no te diría nada... También dijo que eras un idiota que no se enteraba de nada... - Se carcajeó al decir esto último. 

_¡Se que te mueres por este idiota! - Sentenció con la frente en alto y ella rodó los ojos mientras reía. 

_El punto es... ¿Sospechará? 

_Es posible que sepa que hay algo, Lyla es demasiado curiosa y tiene un buen ojo. Da por hecho que te soltará alguna que otra indirecta... 

_Odio ocultar cosas, se lo contaría pero no puedo adjudicarle la carga de tener que guardarle secretos a Henri... 

_Respira, estoy de tu lado para lo que sea que decidas decirle - Alex besó el dorso de la mano que sostenía - Y además, siempre es de ayuda esquivar el tema - Bromeó. 

_¡Lo haces sonar tan sencillo! - Le sonrió. 

_No tiene porque ser todo tan difícil - Se encogió de hombros y ella acercó su silla a la de él para tenerlo mas cerca. 

Acarició el rostro del joven y se tomó el tiempo de mirar sus verdes orbes. Se acercó lento para posar un suave beso en la comisura de sus labios, era casi un roce. Y volvió a mirar sus ojos, que se habían recién abierto, sintió una de sus manos en su cintura y sonrió. 

_ Creo que al final tienes razón, me muero por este idiota - Le aseguró y él se rio a la par que juntaba su frente a la de ella. 

Alex le resultaba atractivo, adictivo, su personalidad despreocupada le sumaba aún mas a su físico. ¿Cómo explicarlo? Era como si se volviera tres veces mas guapo cuando expresaba su filosofía de vida en breves palabras, cuando le hacía ver que las cosas no tenían porque enredarse tanto y que todo salía mejor sí era espontáneo, sí cada quien decía lo que sentía en el momento. Era algo que ella también creía pero que últimamente tendía a olvidar cuando el caso Henri/Jay se presentaba y ahí era cuando se daba cuenta de que Alex era su cable a tierra, el único capaz de regresarla a sus raíces, a quien ella era en realidad. Esos momentos eran en los que sin querer le hacía ver su realidad, que era un hombre de veinte años que se había forjado a su manera. Y Juliette se preguntaba ¿Cuántas personas en realidad lo conocen? Decir que Alex era inmaduro, era una media verdad ya que también tenia una madurez oculta. Sabía bromear pero también escuchar, podía hacer un millón de locuras pero dar un billón de consejos, simplemente con el hecho de exponer su punto de vista. Era el tipo de chico con el que te escapas en medio de la noche solo para admirar el firmamento y tener largas conversaciones a las tres de la madrugada porque personas como ellos no van, se dejan guiar por la inercia. Y por si quedaba dudas de hasta que punto era cierto esa frase de "Me muero por este idiota", Juliette incluso se preguntaba también el como había hecho para vivir todo este tiempo sin él. 

Lyla llegó al punto de encuentro y encontró a Juliette rápidamente. 

_¡Aquí estás! - Exclamó la de ojos verdes - ¡Hola! Muchas gracias por aceptar. 

_¿Como negarme? - Sonrió Juliette - Será divertido, desde que llegué a esta ciudad no he tenido tiempo de salir de compras, me alegra que me hayas invitado. 

_¡Entonces mejor! ¿Vamos? 

Las chicas se pasearon por todas la tiendas que habían por las inmediaciones. 

_Creo que nos excedimos - Comentó Juliette entre risas, cada una aproximadamente llevaba unas tres bolsas. 

_¡Y lo peor es que no hemos elegido vestido! - Se carcajeó Lyla.

_Tenemos que ponernos serias en relación a eso, para empezar... ¿Qué estilo estamos buscando? - Cuestionó la de ojos avellana. 

_Tiene que ser corto - Sentenció Lyla.

_¡Exacto! Con el cuello descubierto pero no tan escotado. 

_¡Si! Sexy pero sofisticado - Completó. 

_¡Eso es una buena base! Vamos a buscar. 

Las chicas dieron vueltas por unas cuantas boutiques antes de tomar una decisión. 

Juliette optó por un vestido corto de corte princesa, cuello de bote y manga corta, el escote se curvaba un poco en el centro. Era vaporoso en el área de la falda y de color negro, que contrastaba a la perfección con su piel. 

El vestido que Lyla escogió era strapless con escote de corazón y corte imperio, también era vaporoso pero este era de color rosa pálido. 

Luego de la sesión intensiva de compras, las chicas se sentaron en uno de los bancos del parque. 

_¡Ha sido divertido! - Exclamó Lyla. 

_Tengo que reconocerlo, ha estado bien - Sonrió Juliette.

_Y estaremos geniales el martes por la noche - Comentó. 

_Incluso me han dado ganas de asistir... 

_¡Tengo una idea! - Los ojos verdes de la chica se iluminaron - ¿Qué te parece si nos arreglamos en mi casa? 

_¿C-Como? - Preguntó atónita la castaña y sobre todo, nerviosa. 

_¡Si! Jasmine y Clement llegarán al recital sobre la hora porque tienen un compromiso unas horas antes así que tenia planeado que Alex me llevara - Explicó - ¡Pero sería divertido si nos preparáramos juntas! 

_Yo... No lo sé - A Juliette solo le venía una cosa a la cabeza. Alex iba a estar ahí, lo cual no era un problema en sí pero iba a ser algo incomodo para ambos ya que deberían disimular su relación. 

_Es por Alex ¿Cierto? - Lyla le sonrió comprensiva - Se que estas enamorada de mi hermano pero ante todo son amigos y saben como tratarse...

¿Cómo explicarle a la chica que hacia ya un tiempo que Alex y ella no se trataban como amigos? Debía evitar a toda costa decirle la realidad de su incomodidad pero nada le prohibía expresarle su sentir. 

_Claro que es por Alex... Es su casa - Las mejillas de la chica se tiñeron de carmesí. Era tan complicado no poder confesar su relación, tanto que incluso era triste. 

_ Pero Juli... ¿Él ya lo sabe? - Interrogó preocupada Lyla. 

¿Qué responder? Decir que si sería estar diciendo prácticamente la verdad pero al mismo tiempo desencadenaría mas preguntas. Por otro lado, decir que no era mentir, negar el vinculo y ella había jurado no hacerlo. 

_¿Lyla? - La voz de una chica sonó a espaldas de Juliette y desvió toda la atención de su cuñada.

La de ojos castaños suspiró aliviada. Y se volteó de inmediato para ver a quien le había salvado el pellejo. No esperaba para nada ver a quien se encontró. 

_¿Melanie? - Su cuñada le confirmó sus sospechas - ¡Hola! Ha pasado un buen tiempo - Sonrió la joven a la par que la de cabello azabache se aproximaba a ambas. 

Juliette miró a Lyla anonada ¿A caso ella sabía quien era ésta mujer? y peor aún ¿Se llevaban bien? 

Melanie se paró en frente de ellas y sus ojos de abrieron desmesuradamente al verla. 

_No lo puedo creer... - Confesó sin quitarle la vista de encima - Tu eres Juliette ¿No es cierto?

La de castaños ojos se sorprendió, nunca había conocido a Melanie en persona, solo por fotos que Henri le pasaba a su madre. Sin embargo nunca creyó que con ella hubieran hecho lo mismo, considerando que no fue el caso de Lyla. 

_¿Sabes quien es? - Lyla le preguntó confundida, probablemente por las mismas razones que Juliette. 

_¡Si! Aunque esta es la primera vez que la veo en persona - Sonrió emocionada - Juliette, tu sabes quien soy ¿Verdad? Lo deduzco a juzgar por la cara que pusiste al verme... - Melanie le sonrió empática.

"Con todo el daño que ha causado ¿Cómo se atreve esta zorra a dirigirme la palabra?" Pensó Juliette iracunda. Eran pocas las veces en las que la joven le guardaba rencor a alguien pero Melanie se había llevado el premio gordo. Esta mujer era la causa principal por la cual Henri había perdido el norte por completo. 

Un año después de la pelea y distanciamiento con ella, Henri comenzó a salir con Melanie y eso  Juliette lo sintió como una luz en la oscuridad, como la esperanza para que Henri abandonara esa máscara que había creado para protegerse. Pero todo lo que esa chica había logrado era el efecto adverso. Melanie eligió a Jay por encima de Henri, rompiéndole así el corazón y dándole mas fuerza a la teoría de que debía imponerle una barrera al mundo para proteger su identidad y mas que nada, sus sentimientos. 

Juliette detestaba profundamente a la joven que tenía en frente. Ella había agravado una situación emocional que ya de por sí era grave y sobre todo había provocado que Henri se alejara todavía mas de ella.
Melanie la había decepcionado. 

_Claro que se quien eres - Le respondió intentando ocultar su desprecio - Mi hermano no habla de mi ¿Cómo sabes quien soy? 

_Fue por accidente, tu hermano lleva siempre una foto en su libreta, una en la que sales con él - Explicó la joven de ojos azules - Un día se despegó de la última hoja donde estaba y ante mis preguntas, tuvo que hablarme sobre ti... 

Un silencio incómodo se instauró en el ambiente. 

_Juliette... Se que me odias - Le sonrió comprensiva la chica. 

_Te quedas corta - Le sonrió cínica - No se que hayas hecho para ganarte la simpatía de Lyla pero yo soy otra historia. 

_Lo sé... - Melanie por fin deshizo su sonrisa - Siempre quise pedirte disculpas, eres la última persona con la cual me queda hacerlo. 

_¿Conmigo? - La miró incrédula - A mi no me hiciste ningún daño, mis sentimientos hacia ti son por lo que le hiciste a Henri...

_Sabes que eso no es del todo cierto - La mirada de Melanie estaba cargada de pena - Yo sé perfectamente cuál es tu disgusto hacia Henri y lo comprendo, pero por desgracia lo entendí cuando mi daño ya estaba hecho - Juliette palideció.