_Juliette, mira fijó hacía aquí... Muy bien... Sonríe... ¡Perfecta! - Un flash se disparó, fulminando el set - ¡Listo! Creo que con ésta son suficientes - El fotógrafo anunció conforme. 

La castaña suspiró exhausta y se masajeó los pómulos, tantos gestos habían acabado por acalambrarla. 

_Juliette, estoy sorprendido contigo - El fotógrafo se acercó a la joven con una radiante sonrisa - Que no te extrañe si luego de la publicación de estas fotos, te llaman para ser la nueva figura de una marca de modas... 

_Emm... ¿Usted cree? No estoy segura de querer entrar en esa industria... - El semblante incomodo de la chica lo decía todo.

_Ninguna chica en su sano juicio rechazaría una oferta así, tengo entendido que este trabajo con Jay no será eterno para ti - El hombre le guiñó un ojo y ella frunció el ceño - En todo caso, es una buena manera de ganar fama propia para despegar tu carrera musical - Comentó antes de alejarse.

_No le hagas caso, por ahora tu rol en el equipo Jay sigue siendo primordial - Antoine le susurró mientras ponía una mano sobre el hombro de su hija.

_Como sea... Me quiero sacar esta espesa capa de maquillaje, es insoportable - Comentó ella, a la par que se dirigía a su camerino seguida por su padre - Y dime por favor que esta es la última sesión de fotos, ya estoy harta de esto - Agregó mientras se sentaba frente al espejo con una toallita desmaquillante. 

_Si, es la última. Gracias por el esfuerzo, se que todo lo relacionado con el video musical te está fastidiando - Dijo su padre con semblante preocupado. 

_Trabajo es trabajo y tengo que admitir que esta revista paga bien por tener contacto exclusivo con la banda de Jay... - Comentó ya mas calmada, al ver que su rostro nuevamente parecía el suyo. 

_Como sí no ganaras bien de por sí... - Sonrió Antoine burlón - Pero si, no está nada mal para ser una sesión fotográfica y una corta entrevista. Parece que la exclusiva será lanzada unos días después del lanzamiento del video. 

_Y mañana se lanza el nuevo álbum - Suspiró con pesadez - No han sido fáciles estas últimas semanas... Y eso que serán mis últimos momentos en el anonimato. 

_Sabías que esto pasaría tarde o temprano, ya sea por Jay o por ti misma - Le recordó su padre.

_Lo sé es solo que... - La imagen de Alex atravesó su mente. El tiempo se le acababa, debía decírselo, no podía arriesgarse a que se enterara por boca de terceros o peor, que un día se levantara y se topara con que su novia aparecía en un video de Jay y en la portada de una revista, sin previo aviso y desconcertado de la situación. 

Juliette no le tenía miedo a la opinión de los demás, sin embargo la de Alex le aterraba. Temía perder su confianza, no podía olvidar el hecho de que él se había declarado en Navidad y su respuesta aún estaba pendiente aunque ella intentara evadir el tema. 

Debía comenzar ya a maquinar un plan para decírselo todo, no podía aplazarse mas. Era primordial. 

_¿Juli? - La voz de Antoine la sacó de sus pensamientos. 

_¿Eh? Si, perdón - La joven sacudió la cabeza velozmente mientras parpadeaba repetidamente. 

_Últimamente estás algo extraña ¿Pasa algo? - Juliette dudó antes de contestar pero luego pensó que por algo había que comenzar. 

_Si. De hecho, hay algo que me preocupa... - Contestó si titubear. 

_¿Y que es? - El hombre se sentó junto a su hija con curiosidad. 

_Salgo con un chico y vamos enserio - Confesó y Antoine abrió los ojos desmesuradamente. 

_¡¿Que?! - Exclamó mientras se levantaba dramáticamente de su asiento. 

_¡No te lo cuento para que te escandalices, siéntate! - Le gritó autoritaria, a lo que su padre le obedeció. 

_P-ero... ¿Desde cuando? ¿Como? ¿Quién es? - Antoine la miró angustiado. 

_No te apresures, tengo planeado que lo conozcas pronto - Le sonrió enternecida - Mi problema es otro...

_Imagino que no sabe de todo esto - Le hombre señaló con ambas manos a su hija de pie a cabeza.

_Si y no... Sabe que soy guitarrista de profesión y que trabajo para un artista importante pero... 

_No tiene idea de quien es - Completó él.

_Exacto. Y me hago tantas preguntas al respecto ¿Qué opinará de mi vinculo con Jay? ¿Y si el secreto de Henri se ve perjudicado? ¿Y si no soporta el estilo de vida que comenzaré a llevar cuando salga el video musical? - Juliette miró a Antoine directo a los ojos - Papá, no quiero perderlo. 

_Yo... Vaya - El hombre soltó una leve risa incómoda - Casi estoy celoso de que mi niña se preocupe tanto por la opinión de un chico - Sonrió levente sonrojado. 

_¡Tómatelo enserio! - Frunció el ceño.

_Lo digo porque me lo estoy tomando enserio - Se defendió él - Puedo ver en  tus ojos lo enamorada que estás de él, eres tan parecida a tu madre en ese sentido, el mismo semblante que solía mostrar ella cuando éramos novios - Sonrió nostálgico y el rostro enfadado de Juliette se disipó - Y porque se que tus sentimientos son auténticos, déjame aconsejarte. Dile, dile todo. Se que, aunque no lo admitas en voz alta, te has desvivido por mantener en secreto la identidad de Jay pero la realidad es que Henri eligió como vivir su vida y eso no debería alterar la tuya, él lo sabe perfectamente y lo respeta. Ya has pensado lo suficiente en todo el mundo pero ahora es momento de que todos nosotros velemos por tu felicidad. Y no estoy diciendo nada extraño, opiné lo mismo cuando tu hermano se hacía las mismas preguntas con respecto a Lyla, solo espero que tu sigas mi consejo antes de que sea muy tarde - Bromeó a lo último.

_No es tan fácil, él detesta a Jay - Confesó.

_Entonces tienen algo evidente en común - Contestó Antoine entre risas - Escucha, si es tu novio debe ser porque no es ningún imbécil, por lo tanto debe estar preparado para afrontar todo lo que se avecina, sabe que llegará el día en el que las cosas no serán tan sencillas y si es el indicado para ti esta es su oportunidad de demostrarlo y si no... Tu hermano y yo le haremos saber lo que es bueno - Comentó tronándose los dedos, a lo que la joven soltó una leve carcajada. 

_Supongo que tienes razón. Debo depositar mi confianza en él - Sonrió convencida.

_Bueno. Dicho esto, me voy para que puedas cambiarte - Antoine se dirigió hacia la puerta pero antes de abrirla, se volteó para mirar a su hija desafiante - Así que todo ese desparramo de nieve que había en el patio debajo de tu ventana cuando llegó Henri en la mañana de navidad no fue el perro de la vecina, como habíamos supuesto ¿No?

_¿C-como? - Preguntó Juliette desconcertada a la par que sonrojada. 

_¡Oh, por favor! Como si yo no me hubiera aventado del un segundo piso, huyendo del padre una novia, en mi juventud - Se carajeó - Eso si, dile a ese chico que no lo vuelva a hacer, porque juro que lo encontraré y le enseñaré a respetar mi casa - Advirtió antes de cerrar la puerta. 

_¡Achu! - Estornudó sonoramente Alex. 

_¿Te has resfriado? - Lyla que estaba a su lado en el sofá, le preguntó curiosa. 

_No, no lo creo... - Respondió confundido. 

_Tal vez alguien esté hablado de ti en este momento y yo se quien es - Comentó Lyla con intención.

_Cállate - Alex rodó los ojos fastidiado pero no podía evitar esbozar una sonrisa.