Recuerdo muy bien tu llegada, en verdad me lastimaste.
Te llevaste a la persona que tanto amaba y no tuve el coraje de decirle si no hasta que era demasiado tarde.
Todo me recuerda a ti, Dirk.
Cuando amanece, el tono naranja que pasa a través de mi ventana me recuerda a ti. Cambié las cortinas a un tono oscuro para no ver el comienzo del día.
El tono naranja de las calabazas junto con varias que estaban marcadas desde bebés con tus iniciales, las he desechado. Me hacen recordar los días en que reíamos en el huerto y nos escondiamos de la abuela Jade.
El jugo de naranja ahora lo odio.
Deseche tu Dirkbot de regalo, lo desactive y lo guardé en una habitación donde solo hay recuerdos nuestros.
Ya no he visto a Jane ni a Roxy. Han intentado contactarme pero al solo verlas tienen un recuerdo de ti y no quiero volver a llorar frente a ellas como en tu funeral.
Año 2016, has sido el primer año que me ha hecho mucho daño.
Faltaban unas horas para el comienzo del 2017, en mi hogar se podía ver una gran vista donde el cielo se llenaba de luces y fuegos artificiales celebrando así la nueva etapa.
Cerré las cortinas y las ventanas. No tenía intención de volverlas a ver, era recordatorio de mi único beso contigo.
Me metí a la cama y quedé profundamente dormido.
Mi sueño era oscuro, como el de todo este tiempo pero, algo había cambiado, había una luz a lo lejos de la profunda oscuridad.
No dudé en ir, por varios meses deseaba ver esa luz para volver a estar con Dirk pero jamás llegó, a tal punto que perdí las esperanzas incluso de morir. Estaba muerto en vida.
Me fui acercando más y más a la luz, tanto que al estar a unos metros se podía ver que no era una simple luz, era una puerta resplandeciente y debía abrirla.
Me tembló la mano, este era mi fin, sí abría la puerta tal vez significaba que ya no despertaria de mi sueño, significaría que estaría muerto.
Dudé en abrirla pero realmente quería esto, quería verte de nuevo.

Lentamente fui abriendo la puerta volviendo al cuarto de hospital donde te había visto por última vez con vida y sentado en la cama estaba tu silueta. Rompí en llanto.
—...Dirk...
Volteaste a verme con una medía sonrisa.
—Bienvenido, Jake
Sonreí y me metí a la habitación, mis piernas comenzaron a correr y al estar tan cerca de ti no pude resistir y te abracé con todas mis fuerzas.
—Tranquilo, me vas a romper la columna.
—Te extrañé mucho...
—Y yo a ti, English. He visto que has hecho muchos cambios en tu vida.
—Si, eso creo.
—¿Cómo están las chicas?
—No las he visto
—Lo sé. ¿Dirkbot, funciona?
—Lo desactive
—Eso también lo sé ¿Las calabazas, siguen vivas como te las encargó tu abuela?
—Las deseche
—Si, lo vi
—¿Si lo has visto, por qué me preguntas?— Mi tono de voz era de frustración y de ira.
—¿Jake, en este año fuiste feliz?

Esa pregunta me hizo sentir un nudo en el estomago.
—Yo sé que no— la voz de Dirk había sido de decepción. Me sentó a su lado en la cama y solo fijó su vista a la ventana, no me había dado cuenta que el cielo nocturno estaba adornado con fuegos artificiales como en el momento de su muerte. Su mano estaba sobre la mía y era suavemente rozada por sus fríos dedos que siempre habían sido así— Jake, mi último año fue maravilloso y pude pasar mi último momento contigo, la persona a quién amo. ¿Si las horas antes de estar aquí fuera lo que permanecerá en tu mente en tu muerte, estarías satisfecho?

—....—recordé todo lo que había hecho en el año, todo lo que había cambiado, las personas que aleje, lo que olvidé de mi mismo. Me había perdido y me adentre a un pozo de depresión sin fondo.
—¿Estas satisfecho, Jake?
—No...—Volvía a llorar más, mi momento de morir había llegado y no hice nada bien, había abandonado todo.
—Me alegro que lo entiendas...—Tomó mi mejilla para limpiar mis lagrimas mientras suavemente me besaba, sus fríos labios poco a poco se volvían tibios como los había recordado— Puedo esperar un poco más.
—¿...De qué hablas?
—Aún no es tu momento, English.
—No... No quiero irme.
—Jake, tienes muchas cosas por hacer, hoy pude volver a verte y hacerte reaccionar. Quiero ver al chico que amo y no a esta mierda de depresión que te estas volviendo.
—Dirk, no quiero estar en un mundo sin ti
—Jake, siempre he estado contigo, desde el suave amanecer hasta la calabaza de mierda de tu huerto. Jamás podría dejarte sólo.
—¿Eras tú, cada que pensaba en ti?
—Siempre fui yo, observandote

No pude soportar más y lo abracé con fuerza, lo amaba y no quería perderlo de nuevo. Él sólo posó sus manos en mi espalda y la acarició suavemente mientras intentaba relajarme. Tomó mi mentón haciéndome mirar hacía él y nos unimos en otro beso que esperaba que fuese eterno.
—Ya es tiempo de que te marches...
—¿Tan pronto? Por favor, un tiempo más
—Debes de ver el año nuevo, Jake. Por nosotros. Y cuando volvamos a vernos, espero grandes historias de tus aventuras.
Que esos ojos esten lleno de brillo y esté orgulloso de la persona que te convertiste.
Te estaré esperando, te amo...

Después de unos segundos desperté, estaba nuevamente en mi cuarto, faltaba un minuto para el inicio del 2017. 
Abrí las cortinas y cuando lo hice el cielo estaba inundado de luces de todos los colores.
Mi corazón parecía latir por ambos, estaba lleno de euforia como si quisiese salir de mi cuerpo.
El llanto no paraba pero ahora no eran lágrimas de tristeza, estaban siendo desbordadas por una nueva esperanza.
—Yo también te amo, Dirk...

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Gracias por acompañarme un año más, espero que todos sus deseos y metas se cumplan en este nuevo año.

Dedicado a mi mejor amigo. Sé que estas ahí viéndome desde el cielo, gracias por todo tu amor y espero que estes orgulloso de ahora en adelante de mi, ya no volveré a tropezar.

Gracias por leer.