Jimin jamás pensó que tendría que despedirse de quienes más amaba por un error que cometió estando ebrio.

Jamás pensó dejar lo único que le mantenía vivo... Su familia y amigos, su pareja... dejar atrás una vida de amor para ir a encerrarse a una de dolor.

Aún recordaba el día en que se tuvo que despedir de su Tae, de su Kookie... aún recuerda las lágrimas, el llanto... su lobo aparecer tan solo para aullar de dolor y volver a esconderse hasta sabrá Dios cuando.

Había pasado dos meses desde aquel día en que se había despedido de sus seres amados, sus padres estaban decepcionados de él así que no le hablaban desde el día del incidente.

JungKook se comunicaba muy rara vez con él, era incómodo puesto que les habían comentado lo que había sucedido aquel día.

- ¿Ya comiste, Jimin? -la ronca voz del alfa se hizo presente- Llevas casi dos horas mirando el maldito plato- silencio- ¡Come maldita sea!

El alfa golpeó la mesa asustando a Jimin quien derramó parte de la sopa aún caliente en su regazo quemándose pero sin quejarse por la quemadura.

-No quiero comer, ya te dije- la voz de Jimin sonaba monótona- ¿Me puedo levantar?

-No, sabes que me vale mierda si te mueres o no, si comes o no, no me importas, pero tus padres me hicieron prometer que te mantendría vivo.

- ¡Qué les importa si vivo o no! ¡Me tratas como si fuera basura! ¡Ya no te aguanto, Min, ya no te aguanto!

Las lágrimas empezaron a bajar nuevamente por las mejillas del menor.

-No me importa, Jimin, te lo he dicho infinidad de veces- YoonGi se puso al costado del menor y volteó la silla para que estuvieran frente a frente- Vas a comer lo que queda en ese maldito plato, vas a limpiar y luego te largas a dormir ¿Me entendiste?

La mirada del mayor se mostraba enfurecida, estaba harto de aguantar los berrinches del omega.

-E-Está bien- Jimin asintió y YoonGi levantó su ceja dando a entender que algo faltaba- L-Lo siento, señor, no debí faltarle el respeto así.

-Muy bien, ahora sí, te limpias esas lágrimas y haces lo que te dije.

Sin dar chance a réplicas, el mayor salió del comedor dejando a Jimin solo siendo acompañado por el sonido de sus sollozos y sus lágrimas bajando por sus pálidas y delgadas mejillas.

Aquel mes que llevaban viviendo ahí fueron un infierno para Jimin.

El recuerdo de las lágrimas en las mejillas de su amado, la seca despedida de su mejor amigo, las falsas promesas de sus padres... todo aquello le atormentaba.

Desde que llegó al lugar donde actualmente vivía, casi no comía, y lo que ingería lo vomitaba, a parte la comida era horrible puesto que él no tenía ganas ni fuerzas para cocinar y hacía lo que podía.

El alfa se había rendido luego de dejarlo inconsciente tres días así que mejor comía en la calle porque no quería seguir gastando sus energías en corregir al omega sin tener resultados.

Su lobo no daba señales de querer aparecer, se sentía débil puesto que al no tener su lado lobuno él era un humano común y corriente que no se recuperaba rápidamente.

Estaba hecho un completo desastre.

Cuando terminó de comer, llevó el plato y los cubiertos al lavador y se dispuso a limpiarlos juntamente con el desastre que estaba hecha la cocina.

Cuando terminó, se dirigió al baño en y se lavó los dientes y de paso se lavaba el rostro para quitar todo rastro de lágrimas.

A paso lento y arrastrando los pies, se dirigió a su habitación para poder descansar, a pesar de haberlo hecho todo el día puesto que no tuvo clases, se sentía cansado, agotado, como si hubieran drenado todas sus energías.

Cuando llegó, vio a YoonGi sentado en el borde de la cama dándole la espada, se encontraba mirando hacia la ventana.

- ¿Qué haces aquí, YoonGi? -Jimin prefirió dejar la puerta abierta por precaución.

-Quería hablar contigo- YoonGi se puso de pie y se dirigió hacia el omega- ¿Qué te dijo el médico sobre tu lobo?

Jimin sintió sus ojos llenarse de lágrimas.

-N-Nada ¿Por qué quieres saber? No es como si te interesase.

-Porque padre me está preguntando demasiado, necesito informarles lo que sucede contigo.

-No les importa- el tono de voz de Jimin se volvió brusco- Necesito que te retires, por favor.

YoonGi, al ver cómo el omega bajaba la cabeza para ocultar sus lágrimas y su postura decaía, salió de aquel lugar puesto que no estaba interesado en consolarlo.

Y entonces ahí, solo, Jimin permitió mostrar su verdadera cara.

La triste.

La de sonrisa amarga y ojos rojos por el llanto.

La que solo dejaba ver lágrimas en lugar de risas.

Ahí en la soledad de su habitación se permitió derrumbar sus muros que ocultaban sus verdaderas emociones.

Aquel mes su pierna había mejorado pero aún tenía que usar yeso y muletas y aquello le impedía absolutamente todo.

Iba a clases tan solo a hacer presencia para no perder algunos consejos o clases teóricas que se impartían, pero estaba fuera de su alcance el hacer lo que amaba, bailar.

Se dejó caer al suelo, ahí en medio de la habitación con la luna como su única testigo de aquel llanto desgarrador, como testigo de la soledad que rodeaba a aquel ser.

Como testigo del dolor de un joven maltratado, abusado, aquel joven que día a día sufría violación de alguien que lo odiaba y lo demostraba en tan repugnantes acciones.

Aquel joven que mostraba risas hipócritas para evitar preguntas que quería evitar responder.

Jimin ya no daba más, la tristeza era demasiado grande como para poder seguir aguantándola, pero tenía que hacerlo, no solo por él... sino también por su bebé.

Por aquel pequeño que a pesar de no haber sido engendrado de la mejor manera, amaba con cada pedacito de su miserable ser.

[***]

-P-Pero... ¿Por qué te vas? Jimin... ¡No puedes irte! Joder- TaeHyung daba vueltas por toda la habitación mientras jalaba de sus cabellos- ¿Qué ganan con hacerte esto? Con alejarte de todos.

-No lo sé, sinceramente ya no quiero saber nada, solo...

-No Jimin- TaeHyung se acercó rápidamente al contrario agarrando el delicado rostro entre sus manos- No te vas a morir, no quiero que te mueras porque te amo ¿Me entendiste?

-TaeHyung... debemos terminar.

El rostro del alfa se puso pálido al escuchar aquella frase salir de los labios de su amado. ¿Terminar?

- ¿T-Terminar? Pero... Nosotros estábamos perfectamente bien, necesito que me des una buena razón.

- ¿De verdad seguirás creyendo que soy un tonto? Está bien que Kookie no recuerde nada pero su amigo sí lo hace ¿Qué hacías en ese bar aquel día?

- ¿Bar? ¿Aquel día? ¿Amigo de Kookie? No sé de qu...-el alfa se dio cuenta de lo que Jimin hablaba- Ese día... F-Fui por cosas de la universidad.

Una estruendosa y falsa carcajada se escuchó, Jimin realmente no se la creía.

-Ajá, y yo estudio en la FIA, idiota- Jimin, con ayuda de sus muletas, se puso de pie- No quiero verte más, TaeHyung, se exactamente para qué tú vas a esos bares ¿Crees que recién me entero? No es la primera vez que lo haces.

TaeHyung quedó en blanco, no sabía qué responder.

-Y-Yo... Lo siento.

- ¡Tres malditos meses desaparecido en los cuales yo estuve sufriendo mientras tú ibas y te cogías a otros! ¡Tres meses, Kim TaeHyung! ¡Tres!

A este punto ambos tenían lágrimas bajando por sus pálidas mejillas.

-Jamás perdonaré el que me hayas abandonado de esta forma.

-Minnie, lo importante es que ya estás bien, eso es lo único que...-

- ¿Lo único que importa? ¿Y tú realmente crees que estoy bien? - soltó una corta risa sarcástica- pobre idiota iluso.

Jimin se encaminó a la salida de la habitación del alfa y le dio una última mirada y le dirigió las últimas palabras.

-No sé si agradecer porque mis hijos no nacieron en un mundo donde tendrían como padre a un incompetente como tú o llorar porque los perdí a causa de un alfa al que nunca le importé.

TaeHyung, confundido analizó sus palabras.

Hasta que lo comprendió.

Jimin esperaba cachorritos de él, pero por su descuido los había perdido.

Si tan solo...

No, los "tan solo" no existen.

Jimin secó sus lágrimas, aún recordaba cómo al alfa no le importó todo lo que él sufrió, cómo ni siquiera le preguntó qué era lo que le había sucedido.

Se levantó de la cama con cuidado y, con ayuda de sus muletas, se dirigió al baño lo más rápido que pudo, las náuseas eran cada vez peor.

Aquel hijo que tenía en su vientre era de YoonGi y esa era una de las razones por la cual su lobo no aparecía era porque estaba protegiendo a su cachorro.

Si el lobo salía entonces el cambio en el olor sería muy notorio y el alfa probablemente reaccionaría mal y no quería arriesgarse a sufrir otra pérdida puesto que era muy probable que no sobrevivan.

La otra era porque aún seguía en un profundo luto por la pérdida de sus dos pequeños, los dos primeros que tendría la oportunidad de tener entre sus brazos y amarlos con su vida pero que se le fueron arrebatados mucho antes de terminar de formarse.

Cuando llegó al baño, ya sin importarle el dolor en su cuerpo o el yeso en su pierna, se lanzó al suelo frente al váter y arrojó lo poco que había comido.

Cuando su estómago estuvo vacío las náuseas cesaron y sus energías se drenaron.

Ahí, tirado en el suelo, con un sabor amargo en la boca, las lágrimas causadas por las arcadas corriendo por sus mejillas, su rostro pálido, sus labios resecos y su aspecto demacrado, se dio cuenta de que la vida lo odiaba.

Intentó infinidad de veces quitarse la vida antes de enterarse del pequeño ser que crecía dentro suyo, pero en todas fracasó obteniendo como resultado maltrato por parte del alfa.

El sonido de la puerta lo alertó, pensó que quien entraría sería YoonGi, pero se sorprendió al ver a un joven con cabello teñido de rojo, ingresar a la habitación.

- ¿Q-Quién eres? - su voz salió ronca debido al esfuerzo anterior- ¿Qué h-haces aq-quí? - Jimin con cuidado se sentó bien en el suelo.

- ¡Dios mío! ¡Le dije a ese imbécil que deje de tratarte mal! - el recién llegado se acercó a Jimin y se arrodilló frente a él- No te preocupes que yo cuidaré de ti ¿Está bien?

Jimin retrocedió ligeramente al sentir a su lobo salir y empezar a removerse inquieto, como si algo le incomodase.

- ¿Quién eres y por qué mi lobo reacciona así de mal ante ti? - el joven omega se sintió aún más confundido ante la sonrisa del contrario- ¿Por qué me sonríes? No estoy entendiendo nada.

-Mucho gusto, soy Jung HoSeok, pareja de Min YoonGi.

¿Qué hacía ahí?

¡Buenas, buenas! ^^

Espero les gusten estos capítulos, disculpen la demora, ayer los iba a subir pero me quedé dormida xd ¡Lo sientooooo! >.< 

En fin, muchas gracias por apoyar la historia y espero la estén disfrutando, ya saben que cualquier cosa me pueden escribir en un comentario o escribirme al privado ^^

¡Hasta el próximo capítulo! ¡Lxs amoooo! 🥰🥰