— ¡Querido amigo mío! — Bang se encontraba extrañamente de buen humor.

— ¿Estas bien? — pregunta Changbin con una mueca.

— ¡De maravilla! — dice el mayor con una sonrisa de oreja a oreja.

— Anda, cuéntale — dice Hyunjin sonriendo de igual manera.

— ¿Recuerdas la canción de hace unos días? — pregunta Chan, Seo asiente — mande mi audición y fui aceptado como productor — dice con una gran sonrisa.

— Te envidio — murmura Changbin.

— No falta mucho tiempo para que vengas conmigo — aseguro el mayor — en cuanto tengas tu tatuaje te recomendare y trabajaremos juntos, como siempre.

— Dejando eso de lado — dijo Hwang — hoy iremos a comer para festejar.

A Seo se le seco la boca de tan solo escucharlo, ¿Ahora que excusa pondría? 

— Tengo que ir al supermercado — dijo.

— Podemos acompañarte — sugirió el alto — podríamos comprar vino y quesos, ya saben cosas de gente con dinero — colocó su brazo sobre los hombros de Chan.

— Nosotros  no tenemos dinero — dije.

— Chris tendrá, y mucho — responde Hwang mientras sonríe, mirando a la nada.

— Tú lo dijiste, YO — Chan aparta el brazo del alto.

Hyunjin chasqueo la lengua — hace unos días cuando fui a tu casa dijiste "Lo mío es tuyo, amigo" — Chris lo negó rotundamente — pero se intentó — Hyunjin se encogió de hombros.

El timbre sonó anunciando el inicio de clases.

— ¡Nos ponemos de acuerdo a la salida! — grita Chris mientras corría rápidamente a su aula.

Changbin no supo que fue lo que hizo, pero logró evitar a sus amigos al salir de clase, Hyunjin le había visto pero justo sonó la campana y todos los alumnos del lugar comenzaron a salir, Hyun perdiendo de vista al menor entre la multitud.

— Al fin ser bajito sirve de algo — murmura Seo mientras se coloca el delantal de su trabajo.

— ¡Changbin-ah!  — grita Minho pateando la puerta de la cocina.

— ¿¡Qué!? — responde el mayor algo frustado.

— Yo solo andaba saludando... — murmura algo cohibido.

— Perdón niño — dice el más bajo tomando su libreta.

— ¿Tienes en cuenta que eres mayor que yo solo por dos mes? — pregunta Lee sentándose detras de la caja.

— Eso es lo que menos preocupado me tiene ahora, niño — Changbin sonríe al escuchar el suspiro de el menor.

— ¿Tendré que escuchar tu historia cuál niño cuando su abuelo le cuenta sobre su juventud? —

— Así es, pequeño — responde intentando imirar la voz de alguien mayor.

— Será una tarde larga... —

— ¿Me dejas expresarme con total libertad sobre el tema? — preguntó levantando la mano.

— Adelante — responde Seo.

— Eres un grandísimo idiota — responde Lee.

Ese día no habían tenido muchos clientes así que Changbin había aprovechado el tiempo libre para contarle a Minho lo que le mantenía frustado.

— ¡Yah! — exclamó el mayor.

— Hyung — comenzó a decir el pelinaranja — Si estos chicos... ¿Chris y Hyunjin? Son tus amigos no tendrian que burlarse o dejarte de lado sólo por tu tatuaje — se cruzó de brazos — pero eres un idiota si piensas que eso sucederá, y si sucede; ellos serían los idiotas.

— Dices mucho la palabra idiota — dijo Seo.

— ¿De todo lo que dije te fijaste en eso? — pregunta el alto, Bin asiente.

— No puedo creer que un niño sea más sabio que yo — respondió cuando el mayor cuando procesó todo.

— Las clases de literatura alfin dan frutos — responde Lee con una sonrisa.

— ¿Todos los niños estudian literatura? — susurró para si mismo el mayor, recordando a su hermana.

Minho iba a responder algo cuando la puerta del lugar fue abierta, anunciando la llegada de nuevos clientes.

— ¡Bienvenidos a Sugar Kids! — exclama Bin con una sonrisa mientras se giraba para recibir a los clientes  — ¿Chicos? — pregunta con el ceño fruncido.

— ¿Changbin? — preguntan Bang y Hyunjin al mismo tiempo.

Minho, mi personaje favorito en la historia, pq? M recuerda a mí cuando agarro confianza idhijs