Yang Jeongin

ʚĭɞ 22 años
ʚĭɞ Castaño oscuro

Kim Seungmin

ʚĭɞ 24 años
ʚĭɞ Azulado

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Agrexofilia: Excitación producida por el hecho de que la actividad sexual sea oída por otras personas.

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Al fin en casa.

Pensó Jeongin entrando después de los 7 chicos al departamento.

Las promociones del nuevo álbum iban muy bien, pero eso no quitaba que fuera algo estresante.

La tensión de Yang no solo era por las entrevistas, de hecho, ya estaba acostumbrado a las cámaras y periodistas, el problema era que no podía estar correctamente con su novio.

Seungmin y Jeongin habían formalizado su relación hace poco. Después de años se habían declarado, decirle a los chicos no fue tan complicado como pensaron.

Todos sabían que pasaba entre ambos menores, solo faltaba que ellos lo asumieron.

Llevaban 3 meses de relación y como cualquier pareja reciente solo querían estar juntos todo el tiempo, pero no podían ser cariñosos en entrevistas por políticas de la empresa, aunque a veces les daba igual y se daban mimos sin importar el lugar porque eso los hacía felices.

Aún no habían pasado a ligas mayores en lo físico, hace algunas semanas se habían puesto de acuerdo con los demás chicos para que durmieran en la misma habitación. Por lo que compartían la misma cama entre suaves caricias y uno que otro beso subido de tono, pero no más allá.

Yang se fue a su cuarto para encerrarse en el baño y tomar una ducha relajante.

-Seung- el peli azul se dio vuelta para mirar al chico que preguntó.-¿Sabes que le pasa?

-No Lixie- negó algo frustrado, In llevaba semanas así y no sabía que hacer para ayudarlo.-Hablaré con él- se fue al cuarto con los demás chicos con la vista fija en él.

El castaño sentía las gotas sobre su piel tratando de distender sus músculos.

¿Por qué me siento así?

Kim había estado aún más cariñosos de lo normal estos días, al dormir juntos restregaba su trasero contra la entrepierna de Yang, besaba su cuello, las cosquilla terminaban en besos pasionales y ambas polla erectas.

Pero Jeong no podía, había cosas que el peli azul aún no sabía sobre el menor y tenía miedo de decirle. éste

Va a pensar que estoy loco.

El oscuro secreto del castaño era que se calentaba con la idea de que los escucharan. Incluso antes de que estuvieran juntos tenía sueños donde el mayor gritaba y gemía gracias a él, sin importar que los escucharan.

Soy un maldito enfermo.

Apenas recordó las lujuriosas imágenes su miembro se puso duro, le excitaba de sobremanera la idea de ser oídos mientras llegaban a sus orgasmos.

Llevó una de sus manos a la erección mientras retenía esos pensamientos, cortó el agua de la ducha para no malgastarla, con el pulgar rozada la hendidura en su glande sintiendo el pre-semen salir, para después tomar por completo el falo y comenzar con movimientos duros, pero lentos.

Imaginaba a Seung sollozando bajo él, pidiéndole más, gimiendo su nombre una y otra vez. Movió sus caderas hacia delante dejando su mano quieta para fingir penetraciones, quería correrse rápido y quitar toda la tensión de su cuerpo.

Tiraba su cabeza hacia atrás disfrutando de su auto-satisfacción, su cuerpo blanquecino se veía perlado gracias a las gotas de agua en la superficie de su cuerpo, mordía su labio evitando que los gruñidos salieran.

Lo que él no sabía es que Kim estaba en la habitación esperando que saliera para hablar sobre que le pasa.

-¿Qué le toma tanto tiempo? susurró para sí mismo, dejó de escuchar la ducha por lo que pensó que el menor ya saldría pero no fue así.

Pasaron 20 minutos, 30 minutos, 40 minutos y nada.

Seungmin se cansó, así que se levantó dirigiéndose al baño, abrió la puerta y la imagen que encontró fue algo que no esperaba para nada.

Jeongin apoyaba su espalda en la pared, su polla se encontraba en la mano tatuada con parte de su semen en ella, su respiración estaba acelerada, los ojos cerrados y su labio inferior entre los dientes tratando de absorber la sensación del orgasmo recién tenido.

-Inn-Innie- salió como un jadeo el llamado a su novio.

Yang abrió los ojos rápidamente mirando hacia el peli azul, olvidando totalmente que aún estaba desnudo y con semen en su mano.

-Yo-yo puedo explicarlo- se puso derecho saliendo de la ducha para ponerse frente al mayor.

Seung llevó su mano al rostro del castaño acortando la poca distancia entre ambos, sus entrepiernas chocaron y la del menor se puso dura de nuevo.

-¿Puedo ayudarte?- el peli azul bajó la mano a la erección contraria.

Jeongin notó que estaba desnudo con la mano de su novio en su polla.

-Seu-Seung- jadeo sintiendo como la mano del mayor comenzaba a moverse.-Te-tengo que decirte algo- tomó al piel canela por los hombros tratando de alejarlo delicadamente.

Kim le dio una mirada triste con un puchero en sus labios pero no dijo nada. El menor tomó su mano llevándolo al cuarto, aún sin nada cubriendo su cuerpo.

Dejó al mayor en la cama y fue a cerrar la puerta con seguro para no tener interrupciones. en su seria conversación. Se fue a la cama con una actitud segura sin prenda alguna sobre su piel, su espalda quedó en la cómoda posicionando al peli azul sobre su regazo quedando frente a frente, su erección rozaba el trasero pomposo de su chico por encima del pantalón.

-¿Qué pasa cariño?- preguntó melosamente Seungmin acariciando el cabello del castaño.

-Yo...- estaba pensando como sacar sus pensamientos sin que sonara demasiado raro, el contrario lo miraba animándolo.-Yo tengo una filia– susurró rápidamente bajando la mirada.

-No entendí amor- el de piel canela se movió sobe la polla de Yang.-No tengas miedo— tomó el mentón del menor para pegar sus frentes.

-Me-me gusta...- estaba a punto de decirlo pero su voz temblaba, Kim asintió para que siguiera.-Tengo agrexofilia- ahora habló lentamente sin quitar los ojos de su novio.

-Explícame- el mayor sabía sobre ciertas filias y fetiches pero jamás había escuchador sobre esta.

-Básicamente...me pone que nos escuchen haciéndolo— Yang ya se había dejado la vergüenza de lado, ahora tenía una sonrisa socarrona observando al peli azul totalmente sonrojado, pero con una curiosa mirada.-¿Tienes alguna pregunta bebé?

-Entonces... ¿Por qué no quieres hacerlo?- ahora le tocó al mayor bajar la mirada.

-Quería decirte antes de hacerlo- el castaño levantó el rostro del mayor.-¿Quieres hacerlo Minnie?- le dio un pequeño beso.

-Hazme gritar Yang- susurró en el oído del menor.

No bastó más que eso para que Jeong dejara a Seumg sobre la cama sacando la camisa rápidamente, besándolo sin cuidado alguno, abrió sus piernas para quedar entre ellas.

-Eres tan hermoso- susurró en el cuello acanelado para después succionar la piel.

Su mano izquierda se encontraba en la cama al lado del rostro de su novio, mientras la derecha acariciaba uno de los pezones contrarios, seguía con sus labios en el cuello y pecho, dejó el pedazo de piel en paz para rozar con sus falanges los sutilmente marcados músculos del peli azul.

Bajó hasta el chándal de su novio, por suerte la prenda solo se mantenía en su lugar por un elástico en la cintura, los sacó bruscamente seguidos de la ropa interior. Finalmente Seungmin estaba desnudo frente a él.

Un sueño hecho realidad

Se puso sobre Kim quedando nuevamente entre sus piernas, besó los belfos contrarios sin contenerse, los mordió logrando que el mayor dejara escapar un gemido.

-Te quedarás sin garganta bebé- susurró entre besos tomando la erección de Seung.

-¡In!- sollozó al sentir los movimientos frenéticos de la mano de su novio.

Yang mordía la piel canela del cuello y pecho haciendo el ritmo de sus dedos sobre la polla contraria más rápida. Él quería que Kim se corriera, le excitaba la idea de tener al mayor en sus manos.

-¿Te gusta bebé?-

-Si-si sigue por favor- le gustaba escucharlo suplicar.

Bajó por el cuerpo de su amante con besos húmedos y sonoros, llegando hasta la erección del peli azul. Lamió la punta brillante debido al pre-semen para después succionarla.

-¡Aah Yang!- gimió lo suficientemente fuerte como para que los demás habitantes de la casa escucharan.

Metió toda la polla contrario en su boca, de vez en cuando sus dientes rozaban con cuidado el falo, llegaba al inicio de su garganta, tuvo arcadas por la longitud.

-¡Me voy a...- no terminó la oración cuando Jeong sacó la erección de su boca para que se corriera en la mano tatuada.

Volvió a ponerse sobre el mayor llevando sus falanges con el líquido blanquecino a la boca de Kim.

-Chupalos cariño-Seung sin dudado lamió su semen metiendo a su boca los falanges.

El mayor los ensalivo lubricandolos porque sabía que iba a pasar y no podía estar más excitado. El castaño quitó sus dedos de la húmeda cavidad para llevarlo a la pequeña entrada de su amante.

Los labios de Yang besaron el delicado rostro acanelado distrayendolo de la incomodad cuando introdujo un dedo en su interior.

-Mgh...- jadeó al sentir la segunda falange en su interior.

Se movían rápidamente en su interior, In tratando de ser suave sin lograrlo por la lujuria al escuchar al mayor.

-¿Te gusta bebé?- susurró endureciendo los movimientos.

-Me-me encanta- veía la cabeza de Min hundirse en la cama con los ojos cerrados, la piel brillante por el sudor y su cabello totalmente despeinado.

-Ponte en cuatro cariño- habló sacando los dedos de la apretada cavidad del peli azul, éste haciendo caso.-Grita todo lo que quieras- susurró en el oído del mayor con su pecho pegado a la espalda contraria y su polla hinchada alineada en la entrada.

-¡JEONGIN!- gritó cuando el menor introdujo sus 24 centímetros por completo en su estrechez.

-Mierda...m-me tomas tan bien- no se movió esperando que Kim se acostumbrará a él.

-Mu-muévete- dijo entrecortado el mayor.

El castaño no estaba muy seguro, pero quien era para llevare la contraria a Min, así comenzó con los movimientos lentos pero bruscos encontrando casi de inmediato la próstata de su amado.

-¡Más más por favor!- si ya estaba jodidamente caliente, escuchar a su novio gimiendo sin miedo a ser escuchados casi lo lleva al cielo.

Le dio una nalgada al pomposo trasero mientras daba estocadas y golpeaba el punto dulce del mayor.

Éste escondía su rostro en las suaves sabanas recibiendo al menor entre sollozos y gritos de puro placer.

-¡Mierda si!- gimio Kim fuerte y claro cuando el menor tomó su erección y lo masturbó y al mismo ritmo de las penetraciones.

-¡Mierda si!- gimio Kim fuerte y claro cuando el menor tomó su erección y lo masturbó al mismo ritmo de las penetraciones.

-Grita mi nombre bebé- tomó las hebras azules para que la cabeza quedara en su hombro desnudo.

-¡Aaah Jeong!- las lágrimas salían a borbotones debido a la sobre-estimulación y el orgasmo anterior que había tenido.

El castaño mordía el cuello canela haciendo las penetraciones frenéticas al igual que el ritmo de su mano.

-¡Aah no puedo!- el mayor se sentía desfallecer por momentos, sentía que estaba entre el cielo en el infierno.

Los dedos de Yang parecían ejercer una corriente sobre su polla mientras era totalmente tomado por el mismo chico.

-¿Qué no puedes?- susurró en el oído del peli azul para morder el lóbulo después.

-¡Es mucho Innie!- sollozaba incontrolablemnte.

Si los chicos no han escuchado es porque están sordos.

Pensó Yang con una sonrisa maliciosa aún con su mano en las suaves hebras contrarias y la otra en el pomposo trasero.

-¡Me vengo!- gritó por última vez el mayor dejándose ir en las falanges de su amado.

El castaño dio un par de estocadas más fluyendo en el interior de Seung tomando la cintura de este para que no cayera en la cama.

-¿Estás bien amor?- preguntó cariñosamente aún en su interior.

-Me-mejor que nun-ca Innie— los sonidos eran más bien quejidos de parte de Kim.

El menor salió con cuidado de su novio para meterse en la cama con éste en su pecho.

-Te...- iba a hablar el mayor cuando un sonido los distrajo.

¡¿El cerrojo de está moviendo?!

-¡Par de mocosos!- gritó Chan en el marco de la puerta con la llave del cuarto en sus manos avanzando hacia la cama.

Joder

Ambos menores vieron su vida pasar ante sus ojos.

-Vistanse y bajen- ordenó Minho ocultando una risa cuando Chan lo miró.

Otros 3 pares de ojos se asomaban divertidos por el marco de la puerta.

-¡Estos chicos me van a matar uno de estos días!- se quejaba el mayor de todos saliendo de la habitación.

El 2do mayor también salió del cuarto cerrando la puerta nuevamente para que se pudieran poner las prendas.

-Creo que debemos buscar un lugar más privado para la próxima vez- susurró un ya no tan somnoliento Seung.

-Nada de eso cariño- se acercó In a su lindo novio.-Me excita que otros nos escuchen bebé- mordió una de las marcas hechas anteriormente.

-Pero Innie...—el menor lo calló con un beso.

-Me encantan tus gritos Minnie— el mayor se sonrojó y bajo la mirada.-Vamos cariño- le extendió la mano al pelo azul el cual la aceptó.-Debemos vestirnos antes de que vuelvan- le dio era adorable sonrisa de conejito.

Seung asintió devolviendo el gesto con una de sus clásicas sonrisas rectangulares.

-Te amo bebé- el castaño juntó ambas frentes.

-Te amo Innie- el de hebras azules movió su nariz sobre la del menor logrando un tierno contacto.

Desde ese día tácticamente acordaron que no importaban los innumerables retos de sus mayores, lo único relevante era su amor y placer mutuo. A Yang le encantaba que los escucharán y Kim amaba complacer a su menor.

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