Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

C A P I T Ú L O 23

CAPITULO 23

Mi cumpleaños había pasado como otro día normal y las vacaciones de verano estaban por terminar, estaba ansiosa por comenzar mi último año en el instituto, a diferencia de Sam y Noah que pareciera que estaban por vivir el peor de los tormentos

—¿Esta vez pasaras el año? —pregunto Sam

—Claro, al fin quiero terminar y aplicar para Stanford

—¿Y tú?

—La grandiosa Sam aplicará para la Universidad de Valencia en España—ese había sido su sueño desde que vivía con su abuela, incluso practicaba el idioma más que su acento que solía tener en ocasiones

—Estarás muy lejos—dijo Noah en medio de pucheros

—¿Y tú Zanahoria?

—Princeton

Mi padre me había conseguido un auto, y en pocos días aprendí a conducir, Noah me ayudaba con algunas reparaciones y Sam con la pintura, todo el verano había sido increíble al lado de ellos dos, nos divertimos tanto que no queríamos regresar a la escuela, a excepción de mí, quería terminarla cuanto antes e irme a la universidad. Para mí era como un comienzo totalmente nuevo, quería que fuera un nuevo comienzo para mi vida.

Cuando me detuve a cargar algo de gasolina, alguien estaba de frente viéndome. —¿Christian?

—Tanto tiempo Elisse

—Pensé que ya estarías en California

—Volví solo por unos días, mañana volveré

Hacía mucho que no veía a Chris y esta vez se veía diferente, no sabía que exactamente había cambiado en él, pero notaba algo.

—¿Un helado? —sugirió

—Claro

—Así que iras a Princeton

—Supongo que por fin lo decidí

—Las Universidades deberían elegirte a ti, no al contrario

Pasadas más de dos horas pude recordar a Christian, aquel chico noble y lleno de alegría del que me había enamorado alguna vez, pensé en que nuca le había pedido una disculpa sincera por haber roto su corazón en primer lugar

—Lo siento

—Lo siento

—Yo enserio lo siento Eli, no quiero justificarme diciendo que no sabía lo que hacía, simplemente era que actúe como un imbécil y arruine todo

—Yo también lo siento, en un principio me porte muy egoísta...

—Créeme, eres todo menos eso, recuérdalo

Había olvidado aquella sensación de tranquilidad, al estar junto a él, sentía que después de todo lo que habíamos pasado, cada uno encontraría su verdadero camino y aunque por ahora no fuéramos más que solo dos conocidos, pronto seriamos amigos de nuevo.

Al conducir a casa y con la música de fondo, vino a mi mente el recuerdo de Nik cantándome delante de toda la escuela, es tan profundo y tan desgarrarte ese recuerdo que mis lagrimas cayeron sobre mis piernas. Me detuve un momento y. Comencé a llorar.

Tenía miedo, mucho miedo de que este dolor que sentía durará para siempre, que no dejara de amarlo y que mis sentimientos no de esfumaran, sino que se intensificaran. Todos mis recuerdos con él, desde el día que lo conocí eran implacables en mi mente, como anclas atoradas en el fondo del mar de lágrimas que lloraba cada noche, anhelando que todo lo malo se fuera y solo quedara ese brillo que Nik le había traído a mi vida. Al incorporarme de nuevo conduje a casa y reparé todo para la semana siguiente, la cual esperaba ansiosa, estaba por pasar mi último año por fin para después irme a la universidad

—¿Crees que necesites tantos libros?

—Claro papá, necesito estudiar lo suficiente

—Pero la escuela no solo se trata de eso, debes convivir, crecer y vivir

—Ya habrá tiempo para eso, aquello y lo otro papá—el semblante de mi padre tras la puerta de mi habitación, me recordaba aquellas platicas cuando tenía 13

—¿Puedo entrar?

—Adelante—se sentó en la orilla de la cama y yo hice lo mismo

—Se que ya no eres una niña y debes cuidarte sola, pero, aun así, siempre serás mi niña pequeña. Lo que quiero decir es: No importa que suceda, tú debes construir tu propio camino, te he visto crecer y no sabes lo orgulloso que estoy de ti, pero además de estudiar y vivir, debes enamorarte

—Papá

—Ya lo sé, sé que te incomoda hablar de esto, pero, estoy seguro de que aquel chico que este contigo tendrá demasiada suerte de conocerte. Sea quien sea. Los problemas de los adultos déjaselo a los adultos, tu preocúpate por crecer, por vivir y enamórate

—Eres increíble papá

—Ya lo sé, ahora dame un beso y ve a dormir, ya es tarde—cuando papá salió de la habitación, acomode mi cama y entre a la ducha. Mientras el agua recorría mi cuerpo, con mis dedos recorrí hasta el tatuaje que tenía con Nik y del cual nadie sabia

Cuando por fin habían terminado las vacaciones, todo parecía extraño, no estaba Tommy, Christian, Nik. Nik no estaba más, otros chicos ocupaban su lugar favorito del estacionamiento, otro chico usaba una sudadera parecida a la de él. Nik no estaba más

Aquel chico que en un principio parecía irritante y molesto, ahora lo extrañaba, no solo porque no estaba en la escuela, sino porque no estaba más en mi vida, no escuchaba el rugido de su motocicleta, no lo escuchaba más por los pasillos haciendo negocios, no lo escuchaba por la noches al teléfono.

—Estas algo distraída últimamente

—Sam, creo que echo de menos a Nik

—No es para menos, lo que vivieron no se olvida de un día para otro. Francamente no sé cómo ayudarte, pero, si quieres llorar hazlo

Al fin de la primera semana, por fin pude encontrarme con Noah, quien estaba terminando su tratamiento final. Los fines de semana se la había pasado entrenando, ahora lucia muy diferente, más musculoso, más alto y mucho mejor que antes

—Zanahoria

—Noah ¿Cómo estás?

—Mucho mejor que ayer, química es una verdadera tortura

—¿Quieres que te ayude a estudiar?

—Pero claro que si

Sam me visito el fin de semana y trataba de alegrarme, pero logre cambiar la conversación y convencerla a decirle a la pelirroja que la amaba. Sam era muy tonta a la hora de enamorarse, siempre dejaba que las chicas jugaran con ella y constantemente la mayoría eran de las apps de citas, pero en esta ocasión era diferente y pensaba en que, si seguía así, pronto tendríamos una boda

—El baile de graduación está más cerca que una boda El

—Solo decía

No solo los días pasaban demasiado rápido, también los meses, cuando menos lo imaginé ya era Halloween, después Navidad, Año nuevo y seguía sin saber nada de Nik. lo único que sabia quera que Noah había viajado para visitarlo, pero Nik no había regresado. Confieso que todo el tiempo estaba ansiosa, creía que en menos de un segundo Nik aparecería frente a mí, lo cual se fue esfumando con los meses. Después fue san Valentín, primavera y de un segundo a otro, me estaba preparando para aplicar a la Universidad. A demás de que Sam y Noah estaban locos por el baile

—¿Esta vez harás algo por tu cumpleaños? —pregunto Noah recostado en el suelo de mi habitación. De aluna manera nos habíamos vuelto unidos, supongo que la ausencia de Nik era la razón que nos hacía tan cercanos

—Es cierto, debe ser algo grande, el año pasado te la pasaste sufriendo por Nik—dijo Sam envuelta en mis cobijas

—¡Cierra la boca!

—Debes celebrar la vida Zanahoria

—Mientras lo piensas, vámonos ya—Sam salió a toda prisa de la cama para dirigirse frente a Noah

—Es cierto, alguien tiene que usar un traje—mi mirada apuntaba a aquel rubio tumbado en el suelo que comía galletas horneadas

—Están dementes, ¿Yo usando traje?

Noah se graduaría junto con nosotras, era algo sorprendente, como un milagro que por fin lo hiciera, aunque él quería aparenta otra cosa, a lo lejos se le notaba la emoción que lo rodeaba. Sam, su novia y yo habíamos planeado una fiesta sorpresa para él, para celebrar que por fin iba a graduarse, pero antes lo llevaríamos a conseguir un traje para el baile.

—Si hago esta tontería, quiero algo a cambio—grito desde el vestidor

—¿Qué es lo que quieres? —pregunte

—Una fiesta de cumpleaños...y un pastel...con velas y muchos globos.

Sam y yo nos miramos atónitas.

—¿Los niños ricos no siempre tiene enormes fiestas? —pregunto Sam

—Nunca tuve una donde estuvieran personas que apreciara de verdad, o que al menos yo les importara, siempre celebraba con la servidumbre o con amigos de papá que solo estaban ahí por negocios y las amigas huecas de mamá hablando del profesor de yoga

—Tendrás una fiesta Noah—aseguré

—¿De verdad? —dijo saliendo a toda prisa con un traje a su medida exacta

—Caray Tío, sí que te ves guapísimo

—Sam, no te enamores de mí, tú ya tienes a tu enamorada

—Te queda perfecto—le dije.

Al salir de la tienda, fuimos a la casa de Sam, donde la fiesta sorpresa estaba ya lista. Habíamos preparado un pastel de chocolate, con relleno de chocolate y betún de chocolate, si favorito, además de muchas y muchas galletas orneadas

—¿Todo esto es por mí?

—Te lo mereces Noah

Era como ver a un niño pequeño, incluso estaba más emocionado que Vanesa en su cumpleaños del año pasado, se había comido casi todo el pastel y las galletas, dejando poco espacio para la cena que papá le había preparado. Él disfrutaba tanto ese momento con sus demás amigos y Sam con su novia besuqueándose en la sala, aproveché que uno de sus amigos había hecho desastre en la cocina por querer algo de leche de la nevera que me escabullí de la fiesta para salir al patio trasero.

Pensaba en lo que había pasado en tan poco tiempo, en cómo me había enamorado de aquel chico despreocupado, a quien seguía amando y extrañando sabiendo que no volvería. No después de todo lo que paso y lo destrozo que termino todo, no quería buscarlo, ni llamarle, sentía que cada uno ahora se encontraba en caminos diferentes.

—¿Qué haces aquí Zanahoria?

—Despejando la mente Noah

—¿Tú? Vamos, tú siempre tienes ideas raras en esa cabecita roja

—¿Te gusto tu fiesta?

—Si, pero espero aun mi cumpleaños junto a ti—sonreí al verlo tan emocionando—¿Qué es lo que te tiene en otro mundo?

—No sé de qué hablas

—Zanahoria

—Nik. No dejo de pensar en la mala persona que fui

—Si todas las personas que prefieren su estabilidad emocional y felicidad por sobre todas las cosas, no quedaría nadie bueno en el mundo

—¿Qué?

—Solo digo que no eres mala persona por pensar un en ti

—No deberías estar tan seguro de eso, también le rompí el corazón a Chris

—Pues yo tenía esa impresión de ti al principio, pero, ya no

—¿De qué hablas? —pregunte riendo, pues desde que Nik se fue, Noah se unió a nosotros de inmediato.

—Antes de que Nik se fuera, me pidió que estuviera cerca de ti, decía que eras buena persona y que tu simple presencia me haría bien y bueno, heme aquí, teniendo buenas notas, dejando las drogas por fin, y listo para aplicar a una universidad

—¿Nik dijo eso?

—Créeme, el hecho de estar separados por la razón que sea, no los hace malas personas, ni quiere decir que dejen de amarse.

Cuando por fin estaba en casa, lo que había dicho Noah estaba clavado en mi mente. ¿Nik de verdad había dicho eso? ¿Después de todo? Siempre lo supe, fuera como fuera Nik jamás tendría una idea equivocada de mi 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro