Me ignora, con sus ocho meses de embarazo a la luz toda nuestra buena relación parece desgastarse cada vez que alzo la voz. Tan distintos el uno del otro, me aterra la idea de alejarlo de mi por mi comportamiento.

Se recuesta en la cama, me da la espalda en silencio mientras yo hago lo mismo. Nos mantenemos así por lo que parece ser una eternidad y a pesar de que muero de ganas de que se gire a abrazarme, no lo hace.

Se siente frío.

Maldición.

Me estoy comportando como un bebé.

Muevo mis piernas, acercándome. él y girandome por completo para poder abrazarlo por la espalda. La camisa de su pijama está algo abierta debido a la panza. Mis rasposos dedos se deslizan por ahí, sintiendo su pausada respiración y ligeros movimientos que da nuestra hija.

— Perdóname pequeño.

Dejo pequeños besos en su hombro, se mueve ligeramente pero no me mira, en ningún momento lo hace.

— Cariño...

Su cuerpo esta caliente, tanto que puedo incluso sentir como comienza a sudar.

Es... alarmante.

— Estas en tu derecho de estar enojado... —susurra, su voz es tan inaudible que inmediatamente me incorporo. —No lo entendía pero es cierto, es algo que no puedes superar así de...

Empujo su hombro en mi dirección, sus ojos están cerrados, su rostro está completamente bañado en sudor.

— Jeongin.

— Fue muy grosero de su parte venir a invitarte a su boda. —dice luego de que pongo mi mano sobre su frente.

— Puta madre Jeongin, estas hirviendo.

— Te-tengo frío Jin.

Pasa una de sus manitos por mi mejilla, sus ojos parecen tan cansados. Entonces se desvanece sobre mis brazos y todo el pánico se instala en mi cuerpo.

Lo muevo un poco intentando despertarlo pero nada ocurre.

— Jeongin.

Su cuerpo parece volverse más caliente a cada minuto que pasa. Entonces en cuanto vuelvo a recostarlo lo noto y toda la sangre de mi cuerpo se congela. Un nudo se instala en mi garganta y el pánico me invade.

No sé qué hacer, tampoco soy capaz de moverme.

Ha manchado las sábanas, esta sangrando.

Me muevo rápido, tropezando y tomando el móvil sobre la mesa de luz, en todo momento no aparto la vista de él viendo como su pecho sube y baja con tranquilidad, sin embargo el mio no.

— ¿Has visto la hora que es?. —dice su voz adormilada, probablemente estará muy enfadado conmigo ahora.

— Necesito ayuda.

— Voy en camino.

En cuanto Changbin cuelga tomo algunas cosas de Jeongin, incluyendolo para caminar hacia la puerta principal. Unos minutos después se abre violentamente y me encamino con Jeongin en brazos hacia el auto de Changbin.

— ¡¿Qué pasó?!.

— N-no sé, él levantó fiebre y luego comenzó el sangrado...

Changbin conduce a alta velocidad pero se forma cuidadosa. He llamado a Felix en el camino pero no ha respondido. Mi pánico vuelve cuando sacan a Jeongin de mis brazos y se lo llevan a algún lugar donde no puedo acceder.

Mis piernas tiemblan y mis manos están repletas de sangre.

Y-yo...

— Tengo miedo. —Mi voz tiembla, observo el largo pasillo blanco del hospital, parece volverse más largo con cada minuto que pasa. —Tengo miedo Changbin.

Él suelta un suspiro antes de caminar hacia mi y rodearme con sus brazos. Pero no lloro, porque la preocupación no me lo permite.

— Todo saldrá bien.

Entonces recuerdo la pequeña vocesita en mi cabeza, es la voz de Jeongin hace unos meses atrás.

¿Y si no?. pregunta.

¿Y si todo sale mal?.

— No quiero perderlo...

— No vas a perderlo. —susurra. —a ninguno.

Las blancas luces de mi alrededor me alarman, no puedo distinguir en donde estoy hasta que mi vista se acostumbra al lugar.

Esto parece...

Hay un leve dolor en la zona baja de mi vientre, mi corazón se acelera casi al instante, estoy por incorporarme pero unas grandes manos me detienen por los hombros.

Es Hyunjin, esta sentado junto a mi, con su pijama puesto, los ojos completamente rojos e hinchados de tanto llorar.

— Hyunjin. —susurro y deslizo una de mis manos por su mejilla, limpiando el camino de lágrimas que ha dejado ahí. —¿Qué ocurre? ¿por qué lloras?

— No te levantes. —se pone de pie para cubrir mi cuerpo con las mantas. —Todo esta bien.

— ¿To-todo?. —Mi voz tiembla en panico. —¿La bebé...?

— Tranquilo. —Deja un beso en mi frente. —Ella está bien, empezaste con pérdida en la madrugada, pero todo está bien.

Pérdida pérdida pérdida pérdida

— No, no llores. —Me toma por el rostro pegandolo al suyo, de cierta forma su cercanía me calma un poco, pero mi corazón va tan rápido que creo que moriré. —Ella está bien, ¿oíste?, ella está bien y tú igual. No debes moverte, no debes... no debes hacer mucho esfuerzo.

Veo a Changbin recargado sobre la puerta, con sus brazos rodeando la cintura de mi mejor amigo. Felix parece cómodo en su pecho, tiene los ojos cerrados y parece que también ha llorado, yo diría que esta descansando los ojos sobre el pecho del entrenador de boxeo.

— Él también está bien. —dice Changbin con indiferencia, como si el simple hecho de abrazarlo le irritara pero igual lo hace.

— Quiero irme a casa. —suplico viendo los castaños ojos de mi novio.

— Nos iremos en la tarde. —dice. —Nos iremos a casa en la tarde y tu podrás recostarte y estar tranquilo, ¿si?

Estoy a punto de asentir con mi cabeza pero él prosigue.

— Lamento haber levantado la voz, por enojarme tan fácil, por... por haberte tratado como un objeto cuando no lo eres. Eres lo más hermoso que me ha pasado en la vida y sin ti creo que yo no... no podría seguir Jeongin.

— Jinnie...

— Por favor, por favor, perdóname.

— Yo debería pedir perdón. —Apoyo mi cabeza sobre su pecho. —Insistí en un tema que no me incumbe y no tuve en cuenta tu dolor. Lamento mi comportamiento, yo debí dejar mi boca cerrada, tu estas en todo tu derecho de estar enojados con ellos y no tener...

Me detengo.

Porque ahora no somos los únicos cuatro en la habitación. Seungmin y Chris están en la puerta, con miles de bolsas. Algunas son comida y otras cosas de bebé. Seungmin me sonríe de forma cálida pero puedo notar la pena en sus ojos.

— Lamento interrumpir, nosotros... —Chris se aclara la garganta. —hm, queríamos verlos.

Hyunjin los observa unos segundos, no hay expresión en su rostro pero finalmente vuelve a verme.

— ¿Estas cómodo con esto?. —Pregunta.

— No es algo que me moleste. —susurro. —Pero si a ti no te gusta tú...

— Pasen por favor. —se apresura a decir y aquello me toma por sorpresa, pues Jin sonríe, sonríe como si verlos les alegrará la vida pero sé que no es así.

Él...

... ¿esta haciendo eso por mi?.

— Traje comida para todos. —Dice Seungmin y se acerca con la enorme bolsa. —Espero sea de su agrado.

— Y yo traje, hm, regalos. —Chris se rasca la nuca. —Nosotros nos pusimos en su lugar y...

Ellos perdieron un bebé.

— Nos alegra que todo este bien. —finaliza Seungmin con una sonrisa. Su vientre apenas se nota pero se lo ve tan feliz.

Hyunjin se mantiene alejado de ambos, con sus brazos cruzados sin dejar de verlos. Luego voltea hacia mi y me sonríe como solo él sabe hacerlo, de costado.

— Gracias por tomarse el tiempo de venir. —susurro y la pareja sonríe.

Chan posa su mano sobre los hombros de su prometido y este le sonríe encantado ante su toque. Veo a Hyunjin fruncir el ceño y apartar la mirada tan rápido como le es posible.

No quiero sentirme angustiado pero aquella reacción tampoco me gusta, debe ser difícil para él verlos así de juntos luego de lo que pasó. Sin embargo, la inseguridad vuelve a mi.

¿Hyunjin reacciona así por algo en concreto?.

¿Yo debería preocuparme?.

— Mira, oí que te gustaban las gomitas y te traje varias bolsas porque no sé cuales son tus favoritas. —Dice nervioso el menor. —Oh, también compré yogurt, creo haber oído a Jin decir que te gusta.

Él habló de mi con Seungmin.

— Gracias, es muy lindo de su parte.

— Minnie es mejor que lo dejemos descansar, aun hay un montón de pruebas que hacer. —Chris lo toma de la mano y Seungmin la entrelaza al instante poniéndose de pie. —Nos vemos más tarde pecoso, descansa.

Felix ha abierto sus ojos, me mira con confusión.

— ¿Qué fue toda esa mierda?.

— Yo me pregunto lo mismo. —Changbin muerde su mejilla interna y desvía su mirada al chico de mejillas grandes que aún sigue en sus brazos. Ninguno de los dos parece querer soltarse aunque sus expresiones demuestran lo contrario. —¿Vas a quedarte ahí más tiempo?.

— ¿Puedo?.

Changbin desvía su mirada puedo ver un poco de color en sus mejillas.

— Has lo que quieras, siempre lo has hecho. —responde de mala gana.

Uh, cuanta tensión.

— Eso fue raro. —dice Jin y se sienta sobre la cama. —pero fue agradable verlos aquí, parecían...

— Preocupados.

— Sí.

— Ellos perdieron un bebé, Jin. —Mi voz tiembla. —Y nadie estuvo con ellos cuando eso pasó.

Hyunjin desvía su mirada.

— Que estén aquí cuando tú ni siquiera puedes verlos es un lindo gesto...

— Si... —murmura. —Tal vez hable con ellos luego.

— No lo hagas si eso no te hace sentir cómodo.

— Te hicieron sentir cómodo a ti. —Dice. —Y con eso es suficiente.

— Jinnie...

— Deberías descansar cariño.

Besa mi frente y veo a Felix y Changbin salir del cuarto sin decir nada.

— ¿Y que más?. —pregunto, entonces su paso se detiene.

— ¿Y qué más qué?.

— ¿Y qué más?.

— ¿Qué debería decir?.

Se está haciendo el tonto, unos segundos después otra vez vuelve a sonreír y se aproxima a mi tan rápido como puede.

— Me diste un susto de muerte. —Dice sobre mis labios. —Debías sentir como latía mi corazón, casi me pierdes.

Pongo mi mano sobre su pecho, sintiendo como su pulso se acelera.

— Creí que algo malo pasaría. —susurra. —y tengo miedo Jeongin, tengo miedo de que algo pueda pasar.

— Dijiste que todo estaba bien...

— Y lo está. —pega su frente a la mía. —Todo está bien, la niña está bien y tu también, no hay riesgo de nada pero tú no deberías hacer esfuerzo.

Me quedo en silencio, él se inclina para dejar un sonoro beso en mis labios y vuelve a alejarse para retomar su camino.

— ¿Y qué más? —insisto

— Te amo. —responde. —Te amo con todo lo que soy y todo lo que eres.

Hola hola

Si estos chuchesumares no pueden estar ni un día peleados NDKQNDKQNS

La verdad hoy no tengo mucho q contar.

Fui a comer con mi mamá para empezar a celebrar mi cumpleaños.

Y he seguido hablando con el chikillo, ojalá aparezca en mi cumpleaños con mi regalo, pq el otro día cuando se entero que faltaba poco me pregunto q me gustaba y después me dijo "pal regalo digo yo" así q espero que llegue con mis gomitas ácidas BDKSNWKNW.

Nah con que solo me salude ese día soy feliz.

Nos vemos, besos!!