La O es de Ostentoso.

El reciente noviazgo entre Manami y Karma, fue algo de lo que se hablo durante un tiempo, después de todo se sabía que esos dos podrían traerse algo, solo que no esperaban que realmente fuera algo amoroso.

Jamás pensaron que su antiguo profesor Koro-sensei tuviera tanta razón. Realmente hubiera llorado de la emoción si aun estuviera y los viera.

Durante sus esposas universitarias es que se consolido su noviazgo, luego de una larga temporada de citas, en donde ambos buscaban conocerse mejor y descubrir si realmente podrían funcionar juntos, cosa que sorprendentemente fue muy sencilla, aunque la consolidación de su noviazgo fue algo tardía debido a que ninguno sabia nada sobre relaciones, Okuda con toda su timidez e inseguridades y Karma con su frustración y algo de miedo al no saber como tratar a su gafas de veneno, con la incertidumbre de su estaba haciendo todo bien o si quizás la estaba presionando de más, mientras que con la chica su inseguridad de no sentirse suficiente como para estar a lado de alguien tan talentoso como lo era el pelirrojo. Por fortuna ambos se tenían la suficiente confianza como para conversar sobre sus dudas y lo que los acomplejaba uno del otros, causando que su relación a pesar de ir lenta, fuera muy solidad y que aun después de graduarse y tener trabajos completamente diferentes, es que se vio realmente afectada.

Ni siquiera los meses en los que Okuda tuvo que irse al extranjero debido a su trabajo, Karma con todo el amor del mundo la dejo ir y se quedo esperando por ella, confiando en que volvería pronto, algo que le sorprendió a más de uno, siempre había creado que sería Manami quien esperaría a Akabane y no al revés, incluso muchos temieron que el pelirrojo no soportara y solo dejare de esperarla. Cosa que no ocurrió, la chica de gafas hizo de todo para que su pelirrojo no se sentirá tan solo por que ella no estaba, como mandarle muchos mensajes llenos de palabras de amor, procurar llamarla a una hora que los dos calcularon cronológicamente de forma muy cuidadose, procurando que no les afectara tanto en su día o sus respectivas horas de sueño, es mas incluso la chica de gafas mandaba ostentosos regalos a su novio.

Karma recibía cada uno con una preciosa sonrisa, sabia que su gafas de veneno estaba haciendo lo mejor de ella para que esa relación a distancia funcionara, así como el también, incluso más, debido a que estaba mas que dispuesto a dar un gran paso en su relación cuando ella regresara, solo tenia que prepararse y quizás pedir un poco de ayuda.

Normalmente Manami no recibía muchos regalos de su novio, debido a que ella prefería que se los guardara para cuando ella regresara, aunque ella si le mandara regalos, miro con una sonrisa el paquete que llego en la mañana, aunque no tenia mucho tiempo, debido a que saldría con unas colegas, pero al ver de quien era decidido hacerlas esperar y sentarse en el sillón para abrirlo, estaba algo curiosa después de todo normalmente los regalos de Karma llegaban durante el mes en que hubiera una fecha especial, que serían cuando cumplía años, en año nuevo, el día de san Valentín, el día blanco, navidad y comúnmente eran flores, chocolates entre otras cosas. Aun no sabía cómo lo hacía, pero bien podría sospechar que tenía un buen contacto muy cerca de ella.

Con curiosidad es que abrió el paquete encontrando unas cajas mas pequeñas de tercio pelo, algo extrañada abrió la mas grande encontrando una gargantilla con un rubí en el centro, rio un poco al verla, sintiendo sus mejillas algo ruborizas por el gesto y mas al leer la nota que tenia en su interior, la dejo en la mesa para tomar la otra y encontró un reloj, su corazón se lleno de cariño ya que no tenia mucho que le había comentado que su reloj favorito se había arruinado y tendría que esperar hasta que volviera para comprar otro igual o de perdido otro de la misma marca, rápidamente se lo coloco sabía que le quedaría bien, después de todo su novia conocía muy bien sus medidas, miro con amor sus regalos aunque se le hicieron algo ostentosos, después de todo Karma no le mandaba ese tipo de regalos, al menos no de esa forma, cada que el pelirrojo le daba un regalo a si de ostentoso o caro era en persona, como hace meses que llego de sorpresa en su cumpleaños y le había regalo una colección de libros que ella había buscado y no pudo encontrar. Observo la ultima caja que era mucho más pequeña que las demás, sus mejillas se ruborizaron al pensar que podría haber en esa caja, con cuidado la tomo y la abrió con nervio...

Encontrando una pequeña nota bien doblada, algo extraña y quizás un poco decepcionada es que la abrió, para después de leerla echarse a reír sin que el rubor de sus mejillas abandonara su rostro.

-En verdad que eres único Karma... -murmuro ella con cariño -Prometo volver pronto cariño... Yo también Te Amo.

"Si esperabas un anillo, déjame te digo que no...

No te lo daré, primero tengo que tener frente a mí y entre mis brazos...

Así que apúrate en volver... Te Amo

A.K.