Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

¿ Qué es lo que quieres?

POV Harvey:

Estaba harto de la fiesta, de la gente, de que me preguntaran si estaba bien cuando nunca lo había estado, de Yasmine mareándome mientras me habla, de Verónica al no salir de mi cabeza.

Estaba harto de todo, y de todos.

Necesito estar solo, encerrarme, sacar todo el alcohol que tengo junto a la rabia que siento como me hace polvo por dentro, por eso estaba subiendo con pesadez las escaleras hacia mi habitación. Intentando poder estar tranquilo, durante unos instantes, antes de que la noche volviera a atormentarme, como cada día.

Parecía que yo no le caía bien a la tranquilidad, que yo no podía dejar ir mi tormento durante un rato.

Cuando llegué a mi habitación y escuché de lejos a Verónica hablar me resultó raro, pero puesto que nuestras habitaciones están enfrente no le di mucha importancia.

Puse mi mano en el pomo, la giré, abrí la puerta, encontrándome para mi sorpresa a Verónica maldiciendo en bajo con ese chico, ese tal Daniel.

No supe como reaccionar, me quede paralizado durante unos instantes intentando no pensar en aquello que era inevitable. No podía ser, ¿ cuando no se tenía ilusión por nada aún te podían matar alguna ilusión que hasta tú mismo desconocías ?, esa de la que no eras consciente pero al final dolía igual.

Tragué fuerte, olvidando el nudo en la garganta que antes tenía y recuperando la máscara que durante unos segundos me había quitado.

 -    ¿Verónica, ahora vas a utilizar mi habitación para "tus conquistas"?, podrías haberme avisado y me hubiera unido en algún otro momento, me siento desplazado- ironice ante la atenta mirada de Verónica.

 -    Creo que es mejor que me vaya yendo, espero verte pronto Verónica.- la dice Daniel dándola un beso en la mejilla, y ella inmediatamente le sonríe genuinamente, eso dolía.

 -   Si, yo también lo creo.- murmuró apartándome y apoyándome en el marco de la puerta para que saliera.

 -    Mira lo siento me equivoque de habitación, no estaba prestando atención, no hemos hecho nada, de hecho nos íbamos antes de que aparecieras.- se excusó Verónica.

 -    ¿ Y si no habéis hecho nada que habéis hecho? ¿ Jugar al Monopoly? ¿ Mirar mi habitación mientras pensáis en los secretos del universo?

 -    Harvey entiendo que te moleste, ya te he pedido perdón, pero no es para que te pongas así.

 -    ¿ Qué me ponga cómo? Estabas enrollándote con ese tío en mi habitación, la estabas profanando, - fue inevitable que la ironía no se escapara de mi boca.- y ni lo niegues, tienes los labios hinchados y el pelo revuelto.

 -    Me he besado con él, demasiadas veces como para contarlas pero nada más, no te preocupes que a tu cama no le ha pasado nada. Y ese tiene un nombre, se llama Daniel.

 -    Lo he oído, pero su nombre me da un poco igual.

 -    ¿ Qué grado de infantilismo tienes? Madre mía pareces un niño pequeño molesto y enfurruñado negandote a decir su nombre.

 -   Es que ni me va ni me viene, no afecta a mi vida pero, ¿ ahora me dirás que él es súper maduro?

 -   Más que tú de hecho.

 -   ¿ Y cuándo has descubierto que Don perfecto es tan sumamente maduro, cuando te estaba metiendo la lengua hasta la campanilla? ¿ O se ha controlado? ¿ Planeáis esperar al matrimonio? ¿ Podré asistir a la boda? Es algo que me interesa saber.

 -   ¿Pero por qué mierdas actúas así? Ni que tuvieras derecho a preguntarme y a interesarte por eso, te da igual, ni te va ni te viene, ni que fuéramos algo.

 -   Eso ha dolido.- hice un gesto dramático junto a una mueca como si me hubiera dolido físicamente, pero en verdad si que me había hecho daño.

 -   Mejor sufrir antes que hacerlo después, como tu bien has dicho querías torturarme, pues yo también debería poder torturarte a ti. Pero no pienses que he usado a Daniel para ello, nunca usaría a alguien, y no quiero que crees que lo he hecho.

 -   ¿Eso es lo que quieres?, ¿torturarme de vuelta?

 -   Lo que quiero es saber. ¿ A qué intentas jugar Harvey?, de verdad te resulta tan gratificante provocarme como lo haces. No lo entiendo, ¿sientes algo por mi?, ¿solo soy un entretenimiento? ¿ Ha habido algo de verdad, o he sido la única que lo he sentido así?- me pregunto con un hilo de voz, no me gustaba provocar eso en Verónica.

 -   Primero no juego a nada, no eres un juego para no aburrirme y último tampoco tengo ninguna clase de sentimiento fuerte. Pero todo ha sido real.- no podía decir que sentía pero todo había sido real, daba igual que pasará después, pero todo lo que había pasado había sido de verdad.

 -    ¿ Y entonces qué? Aclárate por favor, no puedes decir que no ha habido ningún sentimiento fuerte y luego que todo ha sido real, no tiene sentido. ¿ Qué narices quieres Harvey?

 -    No lo sé.- ¿ a ti? quise decir claramente.- No se que hacer, no quiero hacerte daño pero tampoco quiero hacérmelo a mí, quiero disfrutar de esto pero se como acabaré, bueno acabaremos, y no quiero que ese sea el final, por eso intento cambiarlo. Poner de mi parte y hacer lo correcto, pero luego pasa esto y digo a la mierda todo y solo quiero besarte y estar contigo, pero si lo hago se que no habrá vuelta a atrás y no quiero arriesgarme a ello. No se que hacer ni cómo hacerlo Verónica.

 -   Yo tampoco,- se rió de una manera seca.- porque no te entiendo, ahora es la primera vez que me dices algo a lo que atenerme, estaba yendo a ciegas, pensaba que iba a bien y de repente te alejaste sin motivo aparente. ¿Cómo crees que se sintió eso Harvey? Si me quisieras a tu lado de verdad, o si quisieras intentar algo dejando el miedo de lado no actuarias como lo haces.

 -   Nunca me ha pasado esto con nadie Verónica, yo también voy a ciegas porque ni yo mismo me entiendo. Pero se que si me dejo llevar en el momento en el que estoy ahora solo conseguiré hacerte daño. ¿ Cómo debería actuar? Enséñame.

 -    Harvey estás borracho, deja de jugar conmigo, no es justo y no me lo merezco. Se que estas diciendo la verdad, porque se te nota en el tono y en la mirada, pero si solo piensas en un final no creo que merezca la pena ni empezar, ya nos estas condenando.

 -    No estoy jugando, tómame en serio por una vez. Para mi esto no es fácil,- digo entrando por la puerta y apoyándome en ella.- Intentar entenderme ya me resulta demasiado abrumador.

 -   No puedo tomarte en serio Harvey si cada vez actúas de una manera distinta, porque ahora me estás diciendo esto, ¿ pero y mañana? Harás como que lo has olvidado y volverás a no hablarme, porque tiene pinta que harás eso.

 -   No se que haré mañana, como verás no soy adivino. Pero no quiero pasar de ti, aunque debería, ya que sería lo mejor para los dos.

 -   No des por hecho lo que es mejor o peor para mi, eso es decisión mía y no tuya, me gustaría por ayudarte, hacerte entender que es mejor afrontar las cosas aunque salgan mal que no intentarlas pero no puedo y menos si no me dejas.

 -   ¿ Te crees que para mi es fácil vivir con el peso que llevo cargando años continuamente? ¿Crees qué me gusta o que soy feliz?

 -    Se que no es fácil, y que posiblemente te torture, pero intenta cambiarlo; compártelo con alguien, confía en la gente, no te cierres a todo. No se que ese peso que llevas contigo siempre pero que te pasará aquello no significa que te pueda volver a pasar.

 -   No puedo confiar en alguien así como así, y menos si no lo he superado.- ya estaba, ya no tenía máscara, solo era yo, lamentándome, al no tener ni idea de que hacer.- Y se como podría superarlo, mejor dicho, con quien podría superarlo pero esa persona no está y yo no puedo hacer nada contra ello.

 -    Harvey si puedes, no quieres hacerlo que es diferente, tienes miedo y lo entiendo pero no debes dejar que el miedo y el dolor sean los hilos que controlen tu vida.- Verónica se acercó a mí y la mire a los ojos, derrotado, no quería que me viera así, ojala mañana no lo recordara.

 -    ¿ Y qué hago con el miedo? No puedo deshacerme de él tan fácilmente, soy un desastre Verónica.

 -   Harvey no lo eres, solo lo crees, porque nunca te has parado a ver lo bueno que hay en ti.

 -    Si que lo soy, maldita sea, eso lo dices porque no me conoces bien todavía. Soy inestable, cabezota y vivo dolido mientras odio al mundo. Nunca he podido querer a alguien porque en parte no me lo he permitido. Solo he recibido de la vida dolor y gente que me ha dejado, nada más. Y soy así por eso, y no lo puedo cambiar y me alejo de ti por eso mismo. Porque no quiero que te estanques conmigo y tu vienes y me dices que todo tiene solución que puedo encontrarla. ¡ No puedo joder!

 -    Harvey deja de condenarte, porque lo haces tú solo, nadie te obliga a ello. Puedes cambiar, puedes superar lo que sea que te pasa pero te repito si no quieres eres un caso perdido, y parece que estás muy cómodo con eso.

 -    ¿Puedo cambiar? ¿Cómo? ¿ Me vas a ayudar a hacerlo?

 -    Si decides cambiar estaré contigo mientras lo hagas, pero yo no puedo hacerte cambiar. Te puedo apoyar y ayudar pero lo demás recae en ti y en otras personas.

 -    No pueden ayudarme, no pueden, solo hay alguien que puede, con quien debo tener una conversación que está pendiente desde hace mucho, pero no puedo hacerlo.

 -    Pues nada Harvey no puedo hacer más por ti, si te niegas pues ahí te dejo. Me voy es imposible ayudarte, no quieres y no voy a ser yo la que te obligue, porque como has dicho acabaría mal, así que soy yo la que decido que esto no va a empezar porque si tu no quieres yo no tengo nada que hacer.

 -    No pensé que te darías por vencida tan rápido.- en cuanto lo dije Verónica se acercó a mí y me encaró.

 -    Ni se te ocurre echarme tu mierda a mi, yo no me doy por vencida, pero tú, como dices, eres una causa perdida y no voy a luchar por alguien que de sí mismo dice que no tiene solución. No intentes hacerme sentir culpable por ello.

 -    Quiero hacerte sentir de todo menos culpable.- la dije, y era verdad, la cogí la cara con ambas manos para besarla pero Verónica se apartó, era un impulso al verla así y tan cerca mía, y pocas veces mi impulsividad no gana a mi sensatez.

 -    No Harvey, tú no eres el único que decide cuándo y cómo hacer las cosas, también decido yo. Y no voy a estar siempre a expensas de lo que quieras, porque me hace sentir como si solo me quisieras a ratos, y no me merezco eso.

 -    Verónica, claro que no te lo mereces, porque tu no te mereces que alguien te trate como lo haré yo, pero aún sabiéndolo no puedo evitar querer esto, aunque solo provoque hacernos más daño.

 -    Ahora no te hagas el malo, ninguno de los dos lo somos, pero eso parece que no lo entendemos. Así que cuando dejes de jugar inconscientemente con mis sentimientos me dices, porque no se tu pero yo si que tengo, y duele cuando juegan con ellos.

Y con esas Verónica se fue de mi habitación, cerrando la puerta de un portazo mientras yo caí rendido contra la pared, consciente que aunque intentara hacer lo correcto nunca salía bien y que daba igual hiciera lo que hiciera que parecía que solo conseguía hacer daño a Verónica.

Por eso huía de los sentimientos, del amor en general, porque lo complicaba todo, aunque a veces pudiera resultar maravilloso. Esta vez yo no quería huir de Verónica, y aunque quisiera no podría. Pero que yo no quiera hacerlo no significaba que ella quisiera volver a mi.

Y tenía que arreglarlo porque lo que quería evitar era hacerle daño y era lo único que estaba consiguiendo.

POV Verónica:

Dolía, lo que había pasado con Harvey dolía pero había hecho lo correcto, no iba a dejarme enloquecer por sus deseos, aunque muchos de ellos fueran los mismos a los míos.

Y contra todo pronóstico, en vez de terminar la noche de fiesta disfrutando la acababa sentada en el suelo mirando al frente intentando comprender todo lo que pasaba en mi vida, que ya en este punto estaba marcada por Harvey.

[...]

Y sin darse cuenta los dos están de la misma forma por culpa del otro, tirados en el suelo preguntándose porque todo les sale mal, porque no pueden dejar de pensar en el otro, porque por más que se eviten vuelven a encontrarse.

[...]

Sábado 7 de septiembre:

Después de morirme de la vergüenza con Ryan en la comida no le dimos más vueltas al tema sabiendo que no pasaría algo más allá de eso, por lo que ambos acabamos riendo por el recuerdo intentando disipar la tensión entre ambos.

No había hecho nada en toda la tarde por lo que nada más ver como entraba una pequeña nota por debajo de la puerta me levanté y fui hacia ella.

¿ Podemos hablar? decía, abrí la puerta con el papel todavía en la mano para encontrarme de frente con Harvey.

 -    Tienes razón, en todo lo que dijiste ayer tienes razón. Me recriminabas que no conocías nada de mi, que ni me entendías ni me conocías, y quiero compensártelo, déjame llevarte mañana a donde te dije el martes por la noche. Quiero intentar que no sientas que no conoces nada de mi, no prometo ser la persona más transparente del mundo porque no puedo hacerte ahora esa promesa, pero trabajaré en ello. Solo pido que por lo menos podamos ser amigos sin tirarnos los cuchillos, no estamos en condiciones de hablar tan rápido de algo más pero si puedo y surge intentaré no negarme a ello. ¿ Te parece bien?

 -   Estoy de acuerdo, podemos intentar ser amigos, ¿no? Sin lanzarnos los cuchillos.- reí

 -    ¿ Eso es un sí para lo de mañana? ¿ Pasarás toda la tarde conmigo?

 -    Eso es un si Harvey, espero no arrepentirme de ello.

 -    Yo también espero no hacer nada por lo que te arrepientas. Te dejo con lo que estabas, un placer hablar contigo Verónica.- se despidió de broma Harvey con una sonrisa en la boca desapareciendo por el pasillo.

Por lo que amigos, solo eso, no se yo si podríamos conseguirlo así de fácil. 

*** 

Jajajaaj amigos dice, que alguien la diga por favor. A ver que pasa en la vida de Harvey y Verónica siendo amigos.

Nos vemos en el próximo capítulo, que es de mis favortos, os quiere oldspirit9.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro