sᴜ ɪɴᴄᴀᴘᴀᴄɪᴅᴀᴅ ᴇs ᴀᴛʀᴀᴄᴛɪᴠᴀ.

[◆◈◇]

K. Young Soo

     Estacioné el auto justo en el puesto de discapacitados, cargaba una camioneta que fue ajustada para que Nam Joon pudiera subirse y bajarse de ella sin ningún tipo de complicación, así haríamos su vida aún más fácil.

     —En tiempo récord, hermana —Colin se quitó el cinturón de seguridad y comenzó a aplaudir—. Tampoco mataste a una anciana que cruzaba la calle, vas mejorando —alegó mi hermano menor, recibiendo una mirada de odio por mi parte.

     —No te burles, por lo menos ella no se pone la camisa al revés —reí por las palabras de Nam, había olvidado comentarle ese pequeñito detalle al menor de los tres.

     —¡¿Y por qué me lo dicen hasta ahora?!

     Choqué puños con el mayor de mis hermanos, siempre estaba ahí para defenderme, aunque yo lo hacía muy bien sola.

     —Pensé que era parte de tu terrible atuendo —intenté contener las carcajadas que solté, era imposible no hacerlo.

     —¡Son los peores hermanos! —se quitó la camisa y se la volvió a colocar, rompiendo récord.

     —Agradece que te dije antes de que bajaras del auto, enano.

     Colin bajó molesto del auto, cerró la puerta con tanta fuerza que la camioneta se movió por unos instantes.

     —Ignorando eso, ¿Quieres que te ayude a llegar a tu clase? —le miré por el retrovisor, quitándome el cinturón de seguridad.

     —Soo, tú no eres culpable de mi accidente, estoy agradecido de que tú estés bien y el único afectado fuese yo, si hubiese sido al reves, no sabría que hubiera hecho —aunque habían pasado ya siete años desde ese accidente, sabía que aún le dolía el haberse "obstruído" su vida.

     —Pero no pude detenerte —dije con los ojos cristalizados, aún me acordaba de aquel día y dolía.

     Nam Joon había peleado con mis padres, porque él quería ir de fiesta a casa de su mejor amigo, pero ellos no se lo permitieron por sus bajas calificaciones. Él no era un chico desobediente y menos rebelde, pero supuse que para ese entonces la popularidad lo era todo.

     Mis padres se acostaron a dormir tranquilos, pensando que su hijo mayor había acatado lo que le habían dicho, pero se equivocaron. Escuché la puerta de su habitación abrirse y cerrarse con cuidado, por suerte tenía el sueño liviano, lo ví bajando las escaleras y lo seguí, tomó las llaves del auto y solo se marchó, preocupada por él me senté en el sofá a esperarlo.

     Horas después llegó muy borracho, era torpe y ruidoso, me despertó de golpe y lo único que podía hacer era insistir en que se quedara, pero no me escuchó, solo me apartó de golpe de su camino, dejándome una linda herida debajo de mi pecho, había impactado contra la mesa de vidrio cuadrada, tomó su billetera y salió desesperado de casa, como si lo estuvieran esperando en otro lugar. Desesperada fui a buscar a Colin, no sabía que hacer, solo pensaba en mi dolor punzante y la sangre que comenzaba a salir de mí.

     Tenía trece años y Colin once ¿Qué podrían hacer unos niños en ese tipo de situaciones?, Llamar a sus padres asustados con lágrimas en sus ojos.

     Y esa llamada llegó, ya no era por mi herida por la que estaban asustados, era por la llamada de un número desconocido temiendo por la vida de mi hermano. La policía narró todos los hechos a mi padre y que además, mi hermano había tenido un grave accidente, cayendo por un barranco junto a una chica cuyo nombre aún desconocemos. La chica salió ilesa, pero Nam Joon sufrió todas las consecuencias.

     También nos dijeron que él solo se había salvado porque llevaba el cinturón puesto, si no hubiese sido el caso, Nam no estaría con nosotros ahora mismo, hablandonos.

     Había esperanza de que volviera a caminar, pero él dejó de ir a sus terapias, según su persona era una pérdida de tiempo.

     Solo se dió por vencido.

     —¡Estaba borracho, Soo! —tocó su rostro con frustración— ¡Te golpeé y por mi culpa tienes esa cicatriz en tu cuerpo! ¿Y si te hubiese matado? ¡No me lo perdonaría! —gritó abriendo la puerta de la camioneta, saliendo de ella, dejándome sola adentro con muchos sentimientos juntos.

     —Si tan sólo hubiese sido yo y no tú —susurré tranquilizandome.

[◆◈◇]

     —Soora —la profesora de unos treinta y pico de años con ropa muy ajustada, resaltando sus atributos y además de notables erecciones a los estudiantes, me estaba hablando.

     —Es Soo, profesora Nye —sonreí falsamente.

     Odiaba que confundiera mi nombre con el de una alumna que ha pasado por las camas de casi todos los estudiantes de la universidad, menos por las mis amigos del alma, la de mis hermanos y la de... Jung Kook.

     —¿No fue eso lo que dije? —negué—. Por favor, ve con el lindo de Jeon a buscar unos libros que necesito de la biblioteca, se llaman Anatomía parte 1 y anatomía parte 2.

     Quería chillar de la emoción.

     Jeon Jung Kook era un chico extraño, pero lindo a la vez, era tierno y no tenía intenciones de lastimar a alguien, se mantenía distante y ni siquiera hablaba por lenguaje de señas con los demás alumnos, simplemente era muy extraño. Le gustaba estar solo y muy alejado de todos, gran parte del día, en el salón de clases se sienta en los últimos asientos y a veces pienso que no debe de ver bien el gran pizarrón desde allá atrás.

     Le encantaba estar aislado.

     Luego con el tiempo descubrí que sufre de un tipo de fobia social, como si no fuera suficiente de que fuese mudo.

     Antropofobia.

     —¿Hay algún problema de que vayas con él? —la profesora Nye me sacó abruptamente de mis pensamientos.

     —No, claro que no —sonreí emocionada y al mismo tiempo me puse de pie.

     —No se tarden o terminaré la clase sin ustedes.

     Asentí, esperando que Jung Kook se pusiera de pie, pero él esperaba a que yo saliera para estar a cinco metros de distancia de mí.

     Frustrada, solo salí y lo esperé a fuera, él llegó segundos después y se mantuvo muy distante, como siempre. Llegamos a la biblioteca en donde debíamos buscar los libros de anatomía parte 1 y parte 2, pero no los encontraba por ningún lado, me giré frustrada dándome de bruses con tal escena, Jung Kook estaba a un metro de mí con los dos libros entre sus manos, ¿Por qué no me dijo nada?, Oh, cierto, era mudo, pero ¿Por qué no tocó mi hombro para que me diera cuenta que él los tenía?, Sufre de una fobia social.

     Debí verme extremadamente ridícula buscando esos libros en el lugar equivocado.

     Cuando me ponía a pensar en él más de lo que debería, me pregunto porque no estaba en un lugar especial para ese tipo de incapacidad, pero no encontraba respuesta a mi pregunta, capaz sus padres insistieron para que lo dejaran entrar o pagaron una gran suma para ello.

     El dinero mueve el mundo y lo controla también.

     —Gracias.

     Él me ofrecía ambos libros y los tomé gustosa. Me dedicó una hermosa sonrisa, borrandola segundos después.

     Era simplemente guapo y con una hermosa sonrisa blanca de conejo, también se le formaban unas pequeñas arrugas a un costado de sus ojos, haciéndolo ver aún más tierno.

     No tenía intenciones de ignorarlo o si quiera maltratarlo verbalmente como todos los estudiantes de la universidad lo hacían, realmente lo admiraba cómo lo hacía con mi hermano, siempre salen adelante sin importar las adversidades. En cierto modo, Jung Kook me recordaba a Nam Joon, la única diferencia era que mi hermano provocó su parálisis y Jung Kook nació siendo mudo.

     También pienso que debe ser muy frustrante querer defenderte o gritarle a tus agresores cuando realmente no puedes hacerlo y lamento decir que Park Jimin era uno de sus agresores, no solo verbales, sino, también físicos.

     Seguí mi camino sumergida en mis pensamientos, tanto fue que tropecé con alguien cayendo de boca al suelo. Ese "alguien", no se detuvo y siguió su camino ignorando que me había echo caer por el pasillo. Cerré ls ojos y al abrirlos con fuerza ví a Jeon frente a mí con las manos estiradas junto a una cara de preocupación, tomé sus manos con cierta desconfianza y me ayudó a levantarme del suelo, sacudiendo mis rodillas y muslos por encima de la tela del pantalón, ¿Qué estaba pasando?, ¿Realmente se había preocupado por mí?

     Esperando una respuesta de mi parte, él sacó su teléfono a la velocidad de la luz y escribió algo en el, estaba impaciente por saber que era.

“¿Estás bien, noona?, ¿Ese idiota te ha hecho daño?”

     ¡Jeon Jung Kook me estaba hablando! Quería gritar a los cuatro vientos lo emocionada que estaba, pero lo iba a espantar, esperen ¿Me ha dicho noona?, Eso quiere decir que... es menor que yo, ¡Estaba teóricamente acosando a un menor con la mirada!

     —S-Sí, estoy bien, solo me duele un poco la rodilla —le dediqué una sonrisa y él otra, poniéndome los pelos de punta.

      Miró hacia el suelo y tomó los libros que tenía antes entre mis manos. Segundos después un perfume muy peculiar inundó mis fosas nasales.

     —Vaya, vaya, el mudo ahora coquetea con mi novia.

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GRACIAS POR LEER🤧❤️

Corregido: 02/06/2024